Licenciado aprovechado 7

Carlos: mire eso no va a pasar y mejor ya déjate de hacer la mártir, que aquella cogida te encantó, si te parti el culo y aún se nota que te duele pero pues mira que nalgotas tienes ni modo que me fuera despacio…
Mientras sobre su ropa acariciaba sus nalgotas y se las habría, mmm, soltó la muy puta… Como diciendo estoy celosa cabron…
Carlos: no te enceles puta, tú fuiste la primeraen darme el culo, jamás te olvidaré y claro que voy a volver a mamarte esas uvitas que tienes por pechos y te voy a clavar todo la verga en tus agujeros, ay! Respondo muestras le apretaba sus senos.
Karla: si papito estoy celosa, por favor con tanta panocha que vas a tener aquí y que de seguro diario van a coger contigo, por favor no te extraño olvides de darme mantenimiento contigo me sentí viva, aunque me hayas roto el culo cabron, Carlos: tranquila mañana si gustas voy por ti cerca de tu trabajo y pasamos perforar esos agujeros que tanto placer me dieron
Karla: mañana no puedo pero el fin de semana que estén mis familiares trabajando vengo a verlas y te visito aquí en tu casa…
Carlos: eres putamente astuta, señora puta, eso eres mamita.
Al fin llegó don Arturoy Karlita de comprar, cenamos, se despidieron y pues ahora sí nos quedamos solos, en la mesa nos sentamos a conocernos, les dije si les preguntan son mis familiares, tu Clara eres mi tía y ustedes mis primas.
Ellas comenzaron a platicar que lo que les estaba brindando era más de lo que tuvieron anres, las niñas como clara les decía se fueron a dormir, después de clases que les di sobre cómo atender y la señora que ayudaba les enseñaría en una semana todo para atender los negocios… Clara estaba preocupada y nerviosa le dije ve acuéstate ya mañana será un buen día… Fue y se apagaron las luces me fui a mi habitación… Cuando de repente tocaron y era clara, en ropa interior, llevaba el bra y una tanga… Cuando la ví saltaron mis ojos, una señora más a mi lista, está señora tenía unas piernas gruesas, chaparra, güera y unos melones grandes. Cabello largo hasta la cintura.
Clara: puedo pasar licenciado?
Carlos: no es necesario esto Clara, yo les estoy ayudando pero no quiero que te sientas comprometida.
Clara: no es por compromiso, de verdad tengo ganas de un macho que me dé hasta dejarme sin aliento.
Carlos: tus hijas podrían escuchar, yo no quiero espantarlas y que se vayan de aquí por qué me vean como un aprovechado.
Clara: no se van a espantar las 4 mayores son tan calientes o más que yo, las más pequeñas aún no despiertan a estas cosas y están reprimidas… Por ahora!.
Carlos: estás buena, muy buena de hecho pero, si despiertan tus hijas?.
Clara: haber licenciado, yo necesito macho, uno que me quite las ganas de follar, sino puedes tú de todos modos buscaré otro cabron.
Ese momento fue difícil para mí, no quería que sus hijas pensaran mal de mi, pero la calentura es la calentura, así que me decidí y la tome de los cabellos, bese sus carnosos labios y me sumergí en lo profundo de su boca, quite su brasier y la tanga que le dividía esas grandes nalgas, introduce mi dedo índice en la abertura que hay entre sus piernas y ello metió su mano dentro de mi pijama hasta encontrar mi garrote bien duro, el cual saco y le hecho unos piropos.
Clara: Mira que delicioso se ve, hace un tiempo que no disfruto de un buen garrote, y este parece ser muy exquisito.
Carlos: voy a enterrarlo en todos tus agujeros pinche cabrona, quieres macho y te voy a reventar.