Día normal de trabajo

Hay días en que odio mi trabajo, aguantargente idiota todo el día no es lo mío, no es que sea mejor que ellossimplemente no aguanto las estupideces de las personas, pero va son cosas quepasan, además el pago no es malo y a veces sale osas buenas como la que a continuacióncontare, para empezar trabajo como técnico en sistemas, que además quiere decirmil usos, en una empresa de grande pero está dividida en pequeñas oficinas portoda la ciudad, pero para mí solo tenía que visitar 3 de estas, mi central, Zaragozay Morelos, todas relativamente cerca y ninguna más grande que una casa de 2plantas, por lo tanto tenía mucho tiempo libre, ya que además eran las másnuevas, llevaba mi vida tranquila cuando llego la época otoñal, la más lenta yla mejor ya que tenía mis vacaciones asignadas, así empecé a soñar con misvacaciones y con todo el tiempo que tendría para mis juegos, un día, una semanaantes de mis vacaciones me llamaron de la oficina Morelos, donde solo trabajan4 personas diciéndome que habían fallado algunas máquinas, les respondí queiría por la tarde, me contestaron que dejarían a la señorita Delia una chicamuy divertida con la cual me llevaba muy bien, llamaba mi atención que a pesarde haber ido a varias reuniones donde ella asistía, nunca la vi acompañada por nadie, pero solo pensaba que era algointrovertida o solitaria, me fui después de comer a su oficina llamo mi atenciónque desde la puerta no había nadie, pero parte de las virtudes de ser un milusos es tener llaves de todo, asumí que delia estaría comiendo así que entre ensilencio, tengo esa costumbre por haberme criado con mis abuelos y no con mispadres, peor esa es otra historia, fui directo al site ya que no vi a delia porningún lado, todo parecía estar bien así que decidí revisar cada nodo porseparado y ver cuál era el problema, vi que una de las oficinas que deberíaestar sola, ya que es donde se guardan los suministros estaba abierta y comoahí tienen una caja de paso de cables entre en silencio y vi a delia con lafalda arremangada en la cintura, su calzón a un lado y un dilo clavado en suvagina, además de sus tetas de fuera y su cara totalmente roja, dándome aentender que estaba totalmente excitada, para esto se las describiré fácilmente,la típica chaparra tetona con algo de trasero y que nunca se maquilla ni porerror, pero que de alguna manera se ve bonita a la vista. No me vio ya que suexcitación era demasiada, no sabía que hacer ya que esta situación me eratotalmente desconocida, digo que hacer cuando tu compañera de trabajo semasturba enfrente de ti?, te sacas la verga, le retiras el dilo y se la metes ala fuerza? Pues eso hice, estaba en automático, no sabía lo que hacía, no penséen si me golpearía, me empujaría, gritaría o algo, no sé, solo lo hice, lesexplico, entre a la pequeña oficina cerré la puerta y me baje el pantalón, ellano me vio hasta que tome su mano y retire el dilo de un solo movimiento, solome vio con cara de sorpresa, pero la cara que puso cuando vio mi verga fuera demi pantalón y después enfilarse directamente a si vagina expuesta y justocuando la punta de mi verga, que sin presumir es gruesa y algo larga, toco suslabios vaginales y rompió la poca resistencia que la humedad de estos opusieronella gimió y se vino a chorros, como si tuviera mucho tiempo esperando eso precisamenteyo por mi parte no dude y deje ir todo lo que faltaba de mi verga y me empecé amover, pensé que ella se resistiría, aun lo pensaba, pero ella sola comenzó conun vaivén muy acelerado, seguimos haciéndolo hasta que ella se vino y yo hicelo propio, me deje caer pensando que caería en el suelo pero resulto que caí enuna pequeña silla rota que apenas me pudo sostener, ella se quedó en la mismaposición con su vagina escurriendo nuestros jugos combinados, ninguno hablo,ella solo se quedó ahí un rato, me levante y quise acomodar mi pantalón, irme alavar y a tranquilizar antes de pensar en que iba a decir, ella podía decir quela viole, gritar o algo, pero antes de poder decir o hacer lago me tumbo alpiso y me comenzó a masturbar, cuando estuve duro de nuevo ella me hizopenetrarla una segunda ves durante un buen rato hasta que se volvió a venir yyo también, en su interior, se levantó ya que era casi la hora de salir,arreglo sus cosas y se fue, sin decir una sola palabra. Pensé que no pasaría deahí, que solo habría silencios incomodos y que todo se olvidaría, me pase esasemana normal, luego mis vacaciones y apenas había pasado una semana desde que volvícuando al revisar mis mensajes en el celular vi uno de delia que solo decía¨maquinas descompuestas, ¿tú casa o la mía?¨. 

1 comentario - Día normal de trabajo

Gatitofeo1200
Que buen final! Me animo bastantr a contar mas historias