Primera parte - el descubrimiento

El descubrimiento….
Después del episodio de la calza que le regale a mi novia, ella buscó un lugar para empezar con sus clases de zumba y se anotó.
Su idea era empezar de a poco, así que se anotó solamente dos veces por semana. Rápidamente la vi entusiasmarse con su nueva actividad, si bien llegaba cansada, volvía contenta de las clases, y a la noche teníamos algo de acción, cosa que pasaba de vez en cuando, pero que empezó a ser más frecuente.
El lugar no quedaba muy lejos de casa, pero tampoco muy cerca, aunque bastaba con un viaje de unos diez o quince minutos en colectivo para llegar.
Los efectos de la actividad física se empezaron a ver bastante rápido. Notaba que algunas remeras ya no le quedaban tan apretadas, algunos jeans le empezaron a quedar flojos de cintura y en la cara se le notaba la pérdida de peso. Además, tenía mucho más resto físico a la hora de tener sexo. Yo no daba más y ella quería seguir y seguir. Utilizamos otras posiciones para darle más duración a las relaciones y que ella pueda explotar su nuevo “aguante”. Yo estaba contento, por ambas cosas, su mejora en su apariencia y su mejora en su actitud.
Empecé a sospechar algo raro cuando me dijo que iba a ir tres veces a la semana en vez de dos. Dije “tanto le gusta? O hay algo más?” como los cambios físicos estaban, mucho que no me preocupé, pero el bichito ya me había picado.
Busqué por facebook el gimnasio al que iba, para ver que onda con esas clases. Efectivamente los horarios que ella me decía que tenia clases, eran los que aparecían en la pagina del club. Eso me tranquilizó un poco.
Un día salí temprano del trabajo y fui rápido para casa, para llegar antes que ella se vaya, ya que la clase era a las seis. Llegué justo cuando se estaba por ir y me ofrecí a alcanzarla con el auto. Ella contenta aceptó enseguida. La dejé en la puerta y miré como entraba al gym. Eso también me dejó tranquilo, peeeeero….. no conforme con eso, di un par de vueltas a la manzana y estacioné a la vuelta del club. Dudé un par de minutos en bajar o no. Pucha! Estoy desconfiando de mi novia! Como puedo desconfiar si no esta haciendo nada raro….. se anotó en una actividad, en la pagina los horarios coinciden y para mas seguridad la acabo de dejar en el club y vi como entraba….
Me fui.
A la noche en casa, lo mismo del último tiempo…. Ella llegó, hicimos las compras, cocinamos, comimos, y después de comer hubo guerra….. debo reconocer que las calzas le estaban quedando mejor, y entre que las calzas me calientan de por si, y su cola estaba mas armadita…. Yo también estaba como loco…. Quería coger todo el tiempo
Como todo lugar al que uno ingresa, después de un tiempo empieza a hacer relaciones humanas con la gente, y ella me empezó a hablar de sus compañeras de baile y de su profe, que para mi tranquilidad eran todas mujeres, incluida la profesora. Me contaba un poco de la vida de todas, si eran casadas, que edad tenían, a que se dedicaban etc etc.
Habrán pasado un par de meses desde que empezó cuando me dijo que iba a hacer el doble horario, es decir, iba a ir a las 18 y a las 20, lunes, miércoles y viernes.
Si bien me gustaba la idea de que haga algo y con tanto entusiasmo, había algo que me hacia ruido nuevamente.
Elle iba a ir a las clases de las 18 y de las 20, pero, si cada clase dura una hora, había una hora en el medio, de 19 a 20, que iba a estar libre, sin embargo, no volvía a casa…..
Cuando le pregunté, me dijo que se quedaría en el club haciendo tiempo. Mucho no me gustaba esto, además de las clases de zumba, el club tiene gimnasio y algunos otros deportes como futbol y demás, donde pueden aparecer muchos “buitres”….. le plantee mi inquietud con este tema, pero trato de tranquilizarme diciéndome que ella solo tenia ojos para un hombre, y que era yo, y acto seguido me regaló un polvo de novela, con final felíz y todo…..
De todas formas no me quede muy tranquilo…. A los pocos días le pedí el auto prestado a un amigo, y me estacione enfrente del club, desde donde pudiera ver el barcito que tiene y que da a la calle, donde supuestamente ella se iba a sentar a tomar algo y leer alguno de sus libros. Lo del auto es para que ella no me descubra en mi auto espiándola…. Tipo 19 y algo, la veo sentarse sola en el bar, y como ella me dijo, se puso a leer mientras se tomaba un café. Hasta que pagó y se fue a la clase de las 20, no se le acercó nadie ni nada por el estilo. Eso si que me dejó más tranquilo.
Pasaron un par de días y me empezó a hablar de su profe, contarme de la vida de la mina, Marcela, de unos 35 años, apenas mayor que nosotros, que hace un mes se separó y que usa las clases para despejarse, además de tener algún dinero de que vivir…. Se ve que estaban haciendo una linda relación de amistad, ya que siempre venía y me contaba cosas que hablaban, y hasta se mandaban mensajitos durante el día y demás. Cuando la profe empezó a subir fotos de las clases a facebook, me empezó a mostrar fotos de ella y de sus compañeras. La profe no estaba nada mal, como dije, una mina de unos 35 años, flaca, morocha, tetas normales, la cola en las fotos no se podía ver bien, pero la pancita plana, que se le marcaban un poquito los abdominales, me llamó la atención. Le hice un escaneo rápido a las fotos…. Le hice algún comentario medio en joda medio en serio sobre lo buena que estaba la profe, me dijo que si, que tenía buen cuerpo, se rió y ahí quedo el tema.
Un día me manda un mensajito cuando salió de la primera clase, diciéndome que como sabía que yo estaba con algunas cosas que me hacían ruido, para que no me preocupe, ella me avisaba que entre clase y clase se iba a ir ese día a la casa de su profesora y nueva amiga, a tomar algo, y a charlar de la vida, y que me quede tranquilo que vivía a la vuelta del club.
La verdad que no me preocupé. Me parecía perfecto que haya hecho alguna amiga nueva, y si eso también le permitía no estar en el club al alcance de los “buitres”… para mi, mejor….
Esto se hizo frecuente, al punto de que todos los días que ella iba, entre una clase y otra se iba a la casa de la profesora.
Un día me volvió a picar el bichito de la desconfianza, y decidí comprobar si era cierto lo que me decía. Fui hasta el club, y sin que me vea, cuando salieron de la clase las empecé a seguir. Evidentemente no me estaba mintiendo, la vi salir con la profe, caminaron hacia la esquina, doblaron a la derecha, cruzaron la calle y se metieron en una puerta al costado de una casa, como si fuera de un pasillo. Unos minutos después veo que se levanta la persiana de una ventana del primer piso y veo a la profe. Se ve que esa era su casa.
Me quedé más que tranquilo, y me fui a casa.
Unas semanas más tarde, le mandé un mensajito en el horario que sabia que me podía responder, preguntándole que quería comer a la noche. Tardó bastante en contestar…. Y me contestó medio seco, como si estuviera apurada u ocupada. Un poco me llamó la atención, así que a la clase siguiente hice lo mismo, y de nuevo tardó en contestar.
Así hice un par de veces, y siempre lo mismo. Como esto ya me estaba inquietando bastante, volví a seguirlas, desde lejos, tratando que no me vieran. Ya había pasado bastante tiempo desde la primera vez que la seguí y un par de semanas de sus mensajes raros y demoras en la respuesta….
La verdad que al seguirlas no vi nada raro, se volvieron a meter en la misma puerta, y volví a ver que se levantaba la persiana y abrían la ventana.
Lo que vi cuando terminó la profe de levantar la persiana, eso sí que me descolocó….. quedé boquiabierto, el corazón me latía a mil por hora, veía como todo se caía como un castillo de naipes delante de mis ojos, y no podía hacer nada para evitarlo….. es más, caí en cuentas que era algo que evidentemente pasaba hace rato, y me empezaron a cerrar todas las cosas que me daban desconfianza….. una vez más, mi intuición no se equivocó….
Desde lejos, más precisamente desde la vereda de enfrente de ese departamento de primer piso a la calle, escondiéndome detrás de un árbol como jugando a la escondida, vi como mi novia se le acercó por detrás a su profesora de zumba, la rodeó con sus brazos, la hizo dar vuelta, y se besaron tierna y apasionadamente a la luz del poco sol que entraba por la ventana…..
Me refregué los ojos como queriendo que eso sea un espejismo, una ilusión, una mal pasada de mi inconsciente, pero no, ellas se seguían besando y acariciando. Esto pude apreciarlo solo por unos instantes, porque en menos de 30 segundos, desaparecieron de mi vista, ya no podía verlas por la venta desde enfrente, intuyo que habrían ido a otro lado a seguir con su asunto…..

2 comentarios - Primera parte - el descubrimiento

mrblow +1
COJELAS A LAS PERRAS ,+10 Y SIGO
profezonasur +1
Es verdad cuando a uno le pica la desconfianza...