Amanda la puta, Samanta la dormida

Que tal PORINGUEROS, luego de 3 años ausente vengo con muchas historias nuevas, poco a poco las iré relatando en nuestra comunidad.
Éste relato se trata de una aventura que tuve allá por el 2010, en un congreso de la universidad, el cual se llevaba a cabo en un hotel de mi ciudad, yo conocí a muchas personas muy buena onda, me hice muy amigo de una tal Amanda, que era mucho mayor, 1,60, cabello negro, piel blanca, tetas medianas y un buen culo, pasamos todo el primer día charlando y hablando de huevadas, ya en la noche, en la fiesta, nos pusimos a beber y me di cuenta que era mas lanzada de lo que parecía. Mientras bailabamos, la acercaba hacia mi para rosar nuestros cuerpos, no se si ella no se daba cuenta o si y le gustaba, pero miraba a todos lados menos a mi. Quise robarle un pico, pero la muy pendeja se safó y solo pude besar un lado de su rostro, bien pues, decidí ir en busca de una mujer que si aflojaría. La noche pasó, lamentablemente no pude conseguir otra mujer para mis bajos deseos, entonces un amigo me presentó a Samanta, una chica de otra ciudad, flaca, de medianas lolas, pero nada de culo 😞 la cual ya estaba un poco pasada de copas, mi amigo entendió bien lo que estaba buscando y me regalo un preservativo antes de irse con otra chica por ahí. Entonces la llevo a bailar y a tomar un trago más, fue en ese instante que me dice:
- Vamos a mi cuarto, tengo mas alcohol.
LA TENGO HECHA! dije, feliz nos dirigimos a su cuarto, el 9B, entramos y ahí la vi, a la que no me quiso dar bola minutos antes, Amanda, con otro tipo, besándose en el sofá. La miré, con cara de... "EN SERIO...?" y ella nos miró un poco avergonzada, ya que tenia la blusa bien desacomodada.
- Por qué no tocan!?
dijo Amanda, con tono algo enojado.
- Este también es mi cuarto.
respondió Samanta.
Momento incómodo, entonces Amanda salió con el otro tipo, Samanta y yo nos quedamos, sacó una botella de tequila José Cuervo, bebimos unos cuantos shots sentados en el sofá, sin dudarlo me acerqué mas y la besé, Samanta me correspondió y así empezamos a besarnos muy duro, cuando me doy cuenta... mis manos ya habían recorrido todo su cuerpo y se estacionaron en esa zona prohibida, la sentía tan caliente, tan húmeda. Ella no se quedaba atrás, tocándome todo y lanzando gemidos suaves cada vez que le tocaba una teta o ahí abajo.
Entonces le dije:
- Vamos a tu cama
ella responde:
- No se, Amanda puede entrar en cualquier momento, además no soy de esas.
No sabía que decir exactamente, pero seguimos comiendonos en el sofá. Rato después, seguíamos tomando tequila en el sofá de la pequeña sala de la habitación 9B, cuando de pronto entró Amanda, notablemente más ebria que hace rato, se fue directo al cuarto, entonces le dije a Samanta:
- Amanda se durmió, vamos a tu cama.
ella responde:
- Ok, pero sin hacer ruido.
AHORA SI! dije, fui al baño a arreglarme la pinta, pero al volver, vi a Samanta echada en su cama... durmiendo... MIERDA! dije dentro de mi, parecía que esa noche me salía todo mal, entonces decidí regresar a mi cuarto y por lo menos hacerme una paja recordando lo vivido hace minutos, cuando de repente escuché una voz que me llamaba... era Amanda que aun estaba despierta, me acerqué a su cama, que estaba a 2 o 3 metros de la de Samanta, sin decir una sola palabra se paró y me empezó a besar, me metía toda su lengua en la boca y sus manos parecía tener voluntad propia, entonces le dije:
- Vamos a coger? Si o no, ya estoy emputado de que jueguen con migo.
ella se rie y me dice:
- Esta vez la pasarás mejor que hace rato, pero seguime a mi.
y de repente enciende la luz, me acerca a la cama de Samanta, ella dormida, de costado y con la boca semi abierta, entonces nos paramos justo a lado de la cama, comiendonos a lengüetazos y mordiscos, cuando pensé, que ella quería que Samanta despierte y nos viera o se uniera, no lo se, pero la idea me excitó un montón. La seguia tocando y besando, mientras besaba a Amanda, tocaba a Samanta, las tetas, el culo, la concha, todo por encima de la ropa, pero ella no despertaba, Amanda me veía haciendo eso y me besaba mas fuerte. Entonces me abrí el pantalón y saqué mi verga, bastante dura, y cómo la boca de Samanta estaba medio abierta pensé..
- Por qué no?
y se la meti, suavemente, mientras Amanda me seguia besando el cuello y tocandose las tetas, me moví un poco, como si estuviera cogiendo con la boca de Samanta, entonces sentí que se movía, no abría los ojos, pero agarró mi verga con su mano libre y me empezo a pajear, leeentamente. En ese instante me sentía un dios, mis dedos entraban y salían de la concha mojada d Amanda y mi verga entraba y salía de la boca de Samanta, fue un momento que estoy seguro contaré hasta mis nietos. Minutos después, sobre la cama d Samanta, subí a Amanda, le quité el pantalón, la blusa, el sostén, me olvidé completamente del preservativo y penetré en ella, fue bastante fácil, porque su concha chorreaba de excitación, era una escena digna de una pelicula porno, una durmiendo y la otra gozando.
Mientras me cogía a Amanda, mis manos seguían recorriendo el cuerpo de Samanta, poco a poco la fui desnudando, hasta que llegué ahí abajo, tenia la concha aun humeda, le metí 1 dedo, 2...3... realmente quería que despierte, pero estaba demasiado ebria, entonces le dije a Amanda que juegue también con ella, nos acomodamos de modo que Amanda este al medio, yo tirandolé por atras, ella manoseando a Samanta. Probamos 3 poses mas en la cama hasta que terminé, mojando todo, concha, piernas, sabanas, entonces Amanda se agachó y me la empezo a chupar, tragando todo residuo de semen, mi verga aún seguía dura, viendo mi reloj, eran las 5:15 aprox. entonces decidí ir a mi habitación, ya que sólo en 3 horas más tenía que dar una exposición.
No se si Samanta supo lo que hicimos con ella, si estaba realmente dormida o despierta y disimulando, pero de lo que estoy seguro es que experiencias así, con adrenalina y todo, son las mejores... hoy en día tengo muy poco contacto con Amanda, un par de veces tuvimos sexchat, pero ya fue. De Samanta no volví a saber nada, pero estoy seguro que tiene algunos vagos recuerdos de lo que fue esa noche, tal vez un sueño humedo para ella, pero una fantasía cumplida para mi.

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