Mi novia tetona, su hermano y su primo.

Muy buenas gente. Aquellos que ya me hayan leído, han de saber que mi novia es una chica que se va para adelante, y siempre me ha calentado ver cómo otros desean sus tetas, se las imaginan y se las quieren morfar. En el relato pasado conté acerca de una fantasía que tengo de verla garchando en un trío con su mejor amiga. En éste caso, voy a relatar algo con un poco más de morbo que hasta el momento no econtraba las palabras adecuadas para relatarlo, y que aunque parezca sutil, me ha calentado al máximo.

La cuestión es que antes de juntarnos con Paula, ella vivió 5 años compartiendo un departamento con su hermano. Ellos siempre fueron muy unidos, DEMASIADO; al punto de que yo a veces he llegado a tener ciertos celos de su relación, ya que toda anécdota que cuenta, siempre está su hermano involucrado, además de contar con miles de gustos parecidos que tienen, y demás cosas de familia. Sólo se llevan 1 año; él mayor que ella. Marcos, vamos a llamarle, en secundaria repitió un año, y por supuesto cursaron juntos varios años. Son de compartir todo, al cabo de irse a vivir a un mismo lugar. Cuando yo conocí a Paula, por supuesto, fueron 5 años de ir a su departamento compartido, y siempre he notado varias cosas que me la dejaban picando. Ejemplo, las constantes bromas de Marcos hacia Paula sobre sus tetas. Es que, para ser honestos, si mi hermana tuviese las tetas de Paula, me costaría mucho no imaginármelas desnudas; al menos alguna vez pegarse una espiada, en la ducha o en cualquier lado, no lo juzgo. Para quienes no han leído de mi novia, un breve repaso: Pelo castaño claro, 1.57 mts, 60kg, y 120 de tetas. Retomando la cuestión, el departamento era chico y compartían la habitación también, por supuesto con camas separadas; pero lo que he notado es que cada vez que iba de visita y Paula se tenía que cambiar estando Marcos allí, lo único que hacía era ponerse de espaldas y cambiarse. Convengamos que por lo menos el hermano, ya le conocía muy bien el culo; aunque no de frente por supuesto, pero si vos la ves de espaldas cambiándose, ése par de gomas siempre desbordan de los costados. Otra cosa, las veces que Paula se ha estado bañando y Marcos debía ir a hacer alguna necesidad, se mandaba igual. Se supone que la cortina de la ducha no deja ver; pero aún sí, es una situación picante. De hecho, no me olvido un día en que él entró, y no salía más. Al parecer había ido a hacer lo segundo; pero después de un rato los escucho hablando, y salieron juntos compartiendo palabras, ella ya cambiada totalmente. Así es entonces, que siempre esa relación me hizo volar mucho la imaginación.

Resulta que un buen día Marcos nos invitó temprano a almorzar a la casa (él ya con su pareja), con la idea de pasar una tarde juntos yendo a algún lado, y finalizar con una cena. Lo que no esperábamos, era que estuviera Nicolás; su primo. Nicolás es uno de los tantos primos rompe pelotas que tiene, y éste tiene la particularidad de ser pendejo y medio pajero. Nicolás tiene 18 años recién cumplidos, y vino de visita de Mar del Plata, y Marcos lo está acobijando en su departamento. Así fue que llegamos, nos saludamos, todo muy lindo, y nos sentamos a comer. En la charla hablando un poco de todo, surgió un tema: correr. Resulta que Noelia, la novia de Marcos, es una flaca escopeta, pero sin joda. Le gusta la gimnasia, correr y todo lo que tiene que ver con lo aeróbico. Como había contado en comparación en el relato anterior sobre la mejor amiga de Paula, (Jazmín, una morocha de 1.70, flaca sin tetas) por lo menos esa tenía buen orto; ésta chica Noelia era el llamado truco de magia ''nada por aquí, nada por allá''. En fin, sin desviar el tema, los chicos andaban con ganas de ir a entrenar un poco en un parque cerca, y por supuesto, Noelia nos invitó. Ahí fue que Marcos respondió sin ningún tapujo:

-Nah! Estás en pedo? No se puede ir a correr con Paula, ya lo intentamos hace mucho, y es imposible con lo que le rebotan esas tetas!
-Ay qué desubicado Marcos- le dijo Noelia.
-Pero lo digo en serio, no sabés lo que es, ''Pum pum pum pum!''- hacía ruidos de golpes mientras con las manos imitaba como rebotaban las tetas- no puede ni correr.
-Jajaja tal cual, altas gomas prima!- tiró entre risas boludas el primo, y Paula los miraba con cara de orto.
-Nah, sin joda- dijo Marcos reponiéndose de la risa- en serio querés ir Paulita?- preguntó dirigéndose a ella- La última vez nos tuvimos que volver sin siquiera haber hecho la mitad del camino porque me dijiste que te dolían las tetas.
-Sí ya sé- respondió Paula- Tampoco vamos a correr una maratón, de última caminamos un rato, para no cortarte el mambo, Noe- le dijo ahora mirando a su cuñada. El primo miraba la situación con una sonrisa boba. Yo, nada acotaba.
-Tranqui Pau, si no querés no vamos- repuso Noelia.
-No no, vamos. De última paramos un ratito a tomar unos mates- dijo Paula.

Y así terminamos de comer, y como por supuesto, la invitación de almuerzo había sido informal, estábamos vestidos para la ocasión por así decirlo. Paula llevaba unas calzas cortas, una remera suelta y zapatillas. Yo, unos shorts y una remera, y a quién le importa cómo estaba yo vestido? En fin, luego de un rato pasada la digestión, y de mirar algo en la tele, partimos en los dos autos porque éramos multitud. Llegamos al parque. Empezamos a caminar con Paula, mientras Marcos y Noelia iban trotando lento adelante. El pesado del primo venía con nosotros hablando de cualquier pavada. Pasado un ratito que Marcos y Noelia se habían alejado, volvieron hacia nosotros y nos invitaron a trotar un poquito. Así arrancamos todos. No pasó un minuto que Marcos soltó:

-No te digo? No ves como rebotan esas dos cabezas de enano?- dijo entre risas señalándole las tetas a Paula, y a su lente trotar. El primo miraba.
-Ay, es tu hermana, asqueroso. Cómo vas a decir así?- dijo Noelia en un tono indignada.
-No pero, lo digo así por lo que les contaba en la comida- repuso Marcos, mientras las tetas de Paula ya eran el centro de atención.
-Es verdad, rebotan zarpado!- aprovechó a agregar muy desubicadamente Nicolás entre risas, que no le sacaba la mirada de las gomas rebotando.
-Déjenla en paz, manga de pajeros- les decía Noelia- No es culpa de la pobre chica tener el cuerpo que tiene. -Te molesta mucho Pau?- le preguntó parando el ritmo. ''No no'', contestó mientras seguíamos trotando despacio.- Bueno, tranqui vos- le dijo Noelia.

Y así seguimos un ratito más, Pau conmigo, Marcos y Noelia delante, y el primo venía casi a la par nuestra para no perderse el espectáculo. Yo ya me estaba poniendo nervioso porque me daba bronca; pero como ya he hecho mención, me estaba excitando que sus tetas llamen tanto la atención.

-Te duelen las tetas?- preguntó Nicolás descaradamente mirando el espectáculo.
-Por ahora no tanto, Nico. Gracias por preguntar- dijo Paula, lo cual me llamó demasiado la atención ése trato a una pregunta que indudablemente pecaba de lujuria, y no de preocupación.
-Debe ser dificíl no?- seguía insistiendo el paja.
-Y sí; pero para eso hay corpiños especiales, digo, si vas a correr- le contaba Paula.
-Los debés romper todos, vos, jaja- dijo el boludón, y Paula se reía ya de nervios, aunque para mí igualmente debía reír menos de la situación.

Luego de un ratito no muy largo paramos a tomar algo. Paula era una sopa, y el espectáculo de las tetas mojadas era totalmente exitante. A pesar de lo que hablaba de Marcos y los celos, el primo no dejaba de verle las gomas.

-Y Paulita? A pesar de todo, pudiste controlar a las bestias no?- dijo Marcos.
-Qué pelotudo que sos. Encima lo tenía a éste al lado rompiendo los huevos todo el tiempo- señalando al primo- y todo por tu culpa, boludón.- Esa reacción me pareció ahora sí, sensata.
-Bueeno, qué querés que diga? Lo habrás traumado al pobre pibe, va a soñar con tus tetas seguro jaja- respondió Marcos.
-Jajajaja, me encataría!- repuso el primo sin verguenza y Paula le metió una piña pequeñita en el brazo. El boludo se seguía riendo. Noelia me miraba indignada. Yo, cara de póker, pero por adentro ya me picaba el bicho del morbo.

Llegamos al departamento, y Marcos nos dio permiso de pegarnos una ducha porque éramos todos un desastre. Me duché yo primero, ya que iba a ser mucho más rápido que Paula. Después se metió ella. Al ratito que entró a la ducha, yo estaba ahí cerca sentado en un sillón, cuando escuché a Marcos que golpeó la puerta del baño y se mandó. Yo ya me había desacostumbrado a eso por así decirlo, y quise acercarme al baño para intuir qué ocurría ahí adentro. Los otros andaban viendo la tele alejados, y yo aproveché a acercarme a la puerta, y en eso escucho:

-Marki, no me pasás una gillete si tenés a mano?- yo ya medio paralizado, quise escuchar más y casi me muero con lo que escuché después.
-Por qué no te depilás en tu casa? Es la única que tengo- se escuchó decir a Marcos.
-Es un toque, no es nada, y siempre quiero aprovechar la ducha- respondió Paula- y seguido a ello, segundos de silencio.
-Tomá...- se oyó la voz de Marcos al oírse la cortina correrse y a los segundos se volvió a escuchar- Dejá, te la regalo- reiteró Marcos y soltó- Mirá esos cardos que tenés ahí! Menos mal que era poco! Me la vas a desafilar toda, forra- dijo, y me dejó atónito. La estaba viendo en bolas?? Yo ya tenía la pija a mil- Pero mirá boludo, si no es nada, bancá un toque...- repuso Paula y nada se escuchaba. Yo seguía atento... se esuchó la voz de Marcos nuevamente.
-No te ibas a cerrar el agujero del piercing vos?- Paula tuvo un piercing en el ombigo unos años, y sí, definitivamente la estaba viendo en bolas completamente, y depilarse la argolla encima.
-Sí, pero tengo que ver cómo hacerlo- respondió Paula.
-La verdad que si yo me llego a pasar la gillete así en la barba como vos te estás depilando, me arranco la yugular- se escuchó decir a Marcos que debía estar disfrutando el espectáculo de lo lindo. Un silencio después se escucha de nuevo Paula- tomá, como nueva, gracias!- Y en eso se escuchó la cortina cerrarse. Yo no aguantaba la erección, y en eso ya se empezaba a escuchar a Marcos lavarse las manos con intención de salir. Fui directo al sillón nuevamente, aunque me quería re contra pajear, ya.

En fin, nos sentamos a comer. Todo muy tranqui, nada inusual, y yo ya me había ido a pajear al baño antes, porque no me aguanté, y acabé muy fuerte. En fin, como dije, todo tranqui hasta que Marcos ya tuvo que empezar con las suyas. De repente, una miga vuela al escote de Paula. La embocó perfecto.

-Ay, no podés ser más pelotudo- le dijo Noelia. El primo se cagaba de risa. Paula con cara de orto. O sea, a pesar de saber que el tipo ya la vio en bolas miles de veces, se ve que a Paula lo que le molestaba era la presencia del primo y su cuñada, por supuesto. Además tal vez, debía ser para ellos algo tabú entre ajenos.
-Dale Pauli, si siempre jodíamos así. Para mí era entretenimiento puro, siempre trataba de batir mis propios récords, aunque no sea muy difícil embocarlo ahí- decía entre risas.
-Puedo probar?- dijo el primo con desfachatéz.
-No te pases- le dijo Paula muy secamente.
-Euuu, qué ortiva Pauli! Compartí un poco las tetas, que tenés para un batallón con esas garrafas. Dejá que el resto se entretenga!- decía Marcos de un modo bastante desubicado, mientras Paula se ponía colorada, y agregó algo peor- Mirá lo que es Noe!- señalándole el pecho- Ya extrañaba tus tetas Paulita!- Yo no acotaba nada. Noelia diciendo ''No podés ser tan asqueroso Marcos, dejate de joder'', y Paula como negando con la cabeza en pos de ''No puede ser''. El primo agregó:
-Jajaja, en serio? Te prestaba las tetas?- dijo muy descubicadamente.
-Nah, lo digo en joda cuña- dijo Marcos ya dirigiéndose a mí como dándose cuenta de que se estaba zarpando y yo estaba ahí- siempre jodemos así con ella.
Aunque haya aclarado eso, nunca respondió la pregunta del primo. Las cosas quedaron ahí, se cambió un poco de tema. El plato fuerte vino en la sobremesa.

Primero vino el café; pero después vino la joda. Sábado a la noche, Marcos y Noelia tienen la costumbre de hacer sus joditas en el departamento, invitar gente y esas cosas. Pusieron música, y trajeron el Tequila. Cuál era la idea? Ponernos en pedo con algún jueguito. Jugamos al clásico ''un limón medio limón'', y el que se equivocaba en el transcurso del juego, se tomaba una medida. Al cabo de estar bastante en pedo, Marcos dijo:

-Para la próxima, el que pierda en vez de volver a tomar, porque vamos a terminar vomitando todo, le toca un castigo. ''Bueno'', respondimos todos a la par- Yo decido los castigos, y si me toca a mí, me dan entre todos! Jaja- finalizó diciendo Marcos.

El primer castigo fue para Noelia. Tuvo que salir al balcón y gritar ''son todos putos'' a la calle. El próximo en la ronda fue Marcos. Noelia se adelantó a la decisión unánime, y pidió que muestre el culo en una historia de Instagram. Y eso de mostrar culos y esas cosas, hizo que, por qué no? La cosa se desvíe, siendo Paula la próxima en perder.
Así fue entonces, que mientras Marcos pensaba, alguien se adelantó:

-Tenés que mostrar las tetas!- dijo Nicolás. Yo con mucho calor encima ya.
-A vos ni en pedo- le dijo Paula. A lo que Marcos interrumpió
-Esperá, esperá... no. Tenés que salir al balcón y mostrar las tetas a la calle!
-Pero por qué tienen que ser las tetas?- dijo Paula muy molesta.
-Pero si tenés dos tambos lecheros!- dijo el primo muy descaradamente que ya parecía tener la misma confianza que Marcos- compartí para la hinchada!- decía ya fuera de sí el pendejo.
-Paulita- volvió a interrumpir Marcos- 'cuchá, yo tuve que mostrar el CULO por INSTAGRAM, entendés? Lo tuyo no es nada.

Así fue entonces que, tuvo que sacarse el corpiño por abajo de la remera, lo hizo a un lado, y salió al balcón a mostrar las tetas. Todos vimos de espaldas, y fue algo muy efímero por así decirlo mientras los otros dos gritaban como locos de fondo. Yo me calentaba cada vez más. Volvió a entrar, pero sin el corpiño puesto, y no se lo puso. Los pezones los tenía que parecían atravesar la remera. ''Ding dong! Ding dong!'' gritaba el primo a las risas. Paula se sentó y se tomó un tequila más. Después perdí yo, y me hicieron sacar el culo por la ventana a mí. Perdió Marcos, y Noelia lo obligó a tocarle el culo al primo. Volvió a perder Paula, y por supuesto entre Marcos y Nicolás acoplados le dijeron que ahora tenía que mostrar las tetas en una historia de Instagram. Paula se negó rotundamente, y yo que andaba re calienta ya le dije, ''Dale, ya fue. Dales el gusto a los pajeros'' - ''Esa!'' Gritaron como locos los otros dos, a lo que Paula con mirada medio consternada me dijo:

-Ni en pedo les doy el gusto, menos por Instagram, estás loco vos?- Sí, tenía razón, era una locura.
-Bueno, entonces- agregó Marcos- mostráselas al primo que se muere por verte las tetas!- y antes de que Paula dijera nada, Marcos soltó- Dale que yo ya las conozco- y yo ya sin asombro, pero en confirmación de su parte, pude reafirmar ahora mi teoría- tu novio también, y que yo sepa Noe también cuando han compartido vestuario. El único gil acá es tu primo, encima virgen- el primo con una sonrisa de oreja a oreja escuchaba atentamente todo lo que decía Marcos- dale el gusto Pauli, un toque nada más... 5 segundos! Yo cuento.

Paula que tal vez en sus cabáles no lo habría hecho, estaba muy en pedo ya, y de hecho, el haber mostrado las tetas por la ventana, fue un indicio de que no era la de siempre. Así después de hacerse rogar unos segundos, se acercó al primo que estaba sentado- yo no daba más!- y con el pecho a la altura de la cara, un tanto alejada, se levantó la remera y las dos ubres gordas de Paulita rebotaron todo su peso en la panza, quedando de cara a Nicolás. Yo con la pija explotada, y el primo con los ojos grandes de un Simpson. Ahí nomás el turro del hermano que ya estaba contando, le dio un pequeño empujón en la espalda, y la cara de Nicolás se hundió de lleno en las tetas de Paula. ''Ey!'' Dijo Paula que intentó ir para atrás, pero Marcos hacía presión, y el primo ya le había agarrado las dos tetas de cada lado, y hundía de lleno la cabeza ahí. Yo miraba anonadado y re contra a mil. Noelia apurada le metió un tremendo bife en la nuca a su novio, y Paula logró soltarse. ''PELOTUDOS'' dijo totalmente enojada. ''No juego más, pajeros de mierda''

-Son una maravilla mundial- le dijo Marcos codeando al primo- perdón cuña! Estamos jugando!- me dijo cuando yo no hacía otra cosa que mirar todo desde mi silla, medio recostado, con una erección de mil metros, y cara de desorientado.
-Qué gomas la puta madre!- le seguía diciendo Nicolás a Marcos- las veces que me pajié con las fotos, y ahora olvidate, no me borro más esto de la cabeza, decía el pendejo desorbitado.
-Pajeros de mierda- se repetía Paula mientras se ponía la remera y andaba con ganas de rajar.

Yo la convencí de que en el estado que estábamos, no podíamos ir a ninguna parte, y por supuesto, Noelia nos ofreció quedarnos. Y así fue que ya nadie podía responder de sí mismo, y nos dormimos todos del pedo que teníamos. Pero; eso no fue todo.

En el medio de la noche me despertó un pequeño ruido. Marcos y Noelia se habían ido a su cuarto, y el primo tenía su colchón inflable. Nosotros nos dormimos en los sillones. Ella estaba acostada en frente mío, y pude ver mientras habría los ojos entrecerrados, a Paula con la remera toda levantada, dormida completamente, pero dando como pequeños gemidos. Abrí los ojos por completo sorprendido y vi que Nicolás estaba encima de ella, con ambas manos juntando las tetas, chupándoselas como un bebé. La situación se había ido realmente de las manos; pero yo con la resaca y la calentura que tenía, ni siquiera atiné a nada, y dejé que el virgo se entretenga un poco con las gomas de Paula. Me quedé mirando re caliente, y mientras me pajeaba lento por adentro del pantalón, el tipo pasaba la lengua bordeando cada areola; abría la boca a más no poder y succionaba cada teta. Le mordisqueaba los pezones, unía las dos gomas y chupaba los dos pezones al mismo tiempo. Le hacía de todo mientras Paula no reaccionaba de sí, aunque parecía gustarle. En fin, estuvo un rato así hasta que se paró, y mirando perseguidamente (yo me hacía el dormido), con una mano le sostenía una goma y la amasaba, y con la otra le acabó en las tetas. El tipo limpió medio así nomás con la remera que tenía, y se fue al baño sigilosamente, y yo a punto de explotar me paré, y fui a acabarle las tetas también, re contra re caliente. A pesar de que tal vez en mi estado normal no hubiese limpiado semen de otro de las tetas de mi novia, esa noche parecía que estaba dispuesto a muho. No sé si ella estaría muy consiente, tenía los ojos cerrados y parecía muy dormida; el alcohol la deja K.O, y hasta tal vez pensaba que era yo quien antes le estaba chupando las tetas. La cuestión es que al otro día, nadie dijo nada, y yo hasta el día de hoy me lo sigo guardando como imágenes que me van a calentar siempre.

Es sabido también que mis relatos son prácticamente una ficción de todos mis morbos, y a pesar de que no sean reales, espero calentar a más de uno/a con lo que a mí hasta el momento me re contra calienta al escribir e imaginar. Es mi modo de desahogo, aunque las fotos son reales. Gracias por leerme!


Pauli mostrando el escote.
Mi novia tetona, su hermano y su primo.

5 comentarios - Mi novia tetona, su hermano y su primo.

Juannn5555 +1
Uff espero una segunda parte, buenísimo 🔥
perestroika
Muchas gracias loco! Tal vez haya segunda parte...
JMarston +1
muy bueno, queremos segunda parte
perestroika
Gracias loco! Ya estoy armando una segunda parte 😉
Lucas_vit124
La verdad no te corre sangre por las venas a la primera que dijeron algo así de mi novia yo lo cagaria tanto a trompadas que ni la madre lo reconoce
perestroika
Tranqui, justamente la idea era más excitarme que enojarme. De eso se trata el relato.
Carlosalgarrobo
Hace más relatos con el pajero del primo por favor!!!🔥🔥🔥