El Desfile

Después de la operación les conté que estuve un tiempo enyesado de la cintura para abajo, está misma fue realizada en un hospital de buenos aires, cuando fui a qué me sacaran los yesos fue muy excitante porque no llevaba casi nada de ropa solo una sábana que me tapaba mí cuerpo, a la hora de retirarmelo me sacaron la sábanas quedándome desnudo frente a los enfermeros.
Me tenían en una habitación chiquita en donde estaba preparado para ese tipo de cosas, afuera de eso estaban los dos doctores quee operaron,una mujer y un hombre, la mujer tenía unos 40 años, media 1,70 CM y tenía unas medidas aproximadas de 80,60,70. El hombre por el contrario tenía como 60 años canoso, media 1,75 CM y pesaba unos 90 kilos.
Luego de esto los enfermeros me sostienen y me llevan hasta la puerta, ahí salimos y veo que habían más pacientes que circulaban, me ponen en dos barandas en donde yo me tengo que sostener con mis brazos y levanto la cabeza y veo que todos a mí alrededor me estaban mirando, claro yo no tenía nada puesto, estaba desnudo frente a 8 personas, a los doctores les pareció raro verme asi, entonces llamo a mí madre y le preguntaron el porque de mí estado,ella respondió que lo único que habíamos llevado era una sábana, no sabía que me iban a parar, la doctora me miro y me dijo podes intentar caminar hasta terminar el camino de la baranda? Obvio le respondí, confundido y tímido por la situación arranque a dar los primeros pasos después de un tiempo de no hacerlo.
Habían tres adolescentes para ser exactos, dos mujeres y un varón, los tres me miraban con una especie de recelo, cómo si los enojara la situación pero a su vez como que les gustaba lo que veían, era muy raro todo, después de que me deje llevar por el dolor en las piernas y las fuerzas que estaba haciendo en los brazos, opacando todas las miradas alrededor, llegue a mí destino, la doctora me felicita y le pide a los enfermeros que me carguen devuelta hasta la camilla.
Yo quedé devil y cansado, después de que puse devuelta en la camilla, fui devuelta para la habitación chica en donde ella me controlo todo y yo estaba diez puntos de salud, así que me dio el alta, salgo de ahí ahora con la sábana puesta y una de las chicas que estaba ahí le pidió permiso a mí mamá porque me quería mostrar algo, mí mamá le dijo que no tenía ningún problema así que me dejó a mí arriba de la camilla y la chica me llevo a un pasillo largo dónde casualmente había una habitación desocupada, al oscuro quedé hasta que prendió la luz, ella se subió a la camilla y quedó frente a mí, llevaba puesto una bata de paciente, ella se desató lo de atrás y quedó desnuda frente a mí, sorprendido me quedé al verle los senos chiquitos pero puntiagudos cómo si estuviera excitadame miro y me dijo sacate la sábanas, las levante de un tirón y mí pene salto de su sueño como para demostrar que también estaba excitado, se agachó, agarró mí pene y lo empezo a lamer con un amor, cómo si de un chupetín se tratara, luego se metio toda mí cabeza y me empezó a masturbar, en ese momento me quedé quieto y quería simplemente disfrutar del momento así que en mis últimas gotas de semen quedó en su garganta porque ella se lo trago todo sin dejar una sola gota, ella dijo dulce cómo me gusta a mí.
Nos reincorporamos y ella decidió llevarme devuelta a dónde estaba mí mamá, ella dijo que volviamos porque si tardabamos más nos iban a encontrar y tenía razón así que yo acepte y volvimos, pero que ganas de cojermela tenía, esa conchita peluda parecía ser estrecha, ahora nunca lo voy a saber porque esa fue la única vez que la ví.
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2 comentarios - El Desfile

ral111
Me encantan tus historias bro sigue asi!