La gemela malvada (Parte 2: la boda)

Cómo llegué a estar en una cabaña fumando y tomando con la hermana gemela de mi novia lo conté acá
https://m.poringa.net/posts/relatos/3643763/La-gemela-malvada-Parte-1-la-reunion-familiar.html

"¡Ya sé! Si me pongo en tetas no pasa nada, total ya las viste, las ves siempre ¿querés verlas ahora?" Eso me dijo ella

Ante la pregunta quedé mudo y con la boca abierta, ella se dio vuelta avergonzada y se estaba por ir, pero la agarré de la cintura por atrás y le dije que no podía sólo verlas, que necesitaba tocarlas y eso hice, la manoseé toda y le bajé los breteles del vestido. Me excitó apoyarla y se me puso dura que ella parara la cola aún cuando decía "no, pará" y diciendo "no podemos hacer esto" me comió la boca mientras le manoseaba las tetas. Me volví loco y no pensé ni un segundo en la situación, que a unos metros (por suerte muchos) estaba mi novia Y TODA LA FAMILIA.

Cuando fuimos al sillón y me manoteó la pija reaccioné agarrandolá del pelo fuerte y al toque la solté como con culpa. "No soy como mi hermana, yo quiero eso del pelo y mucho más" y se desnudó completamente frente a mí, se sacó completamente el vestido, el corpiño y la bombachita. Su tatuaje de la cintura en realidad era una serpiente que recorría desde la ingle hasta abajo de sus pechos. Su pelvis estaba completamente depilada y aunque era idéntica a mi novia, no lo era en todo y esas diferencias me excitaron de sobremanera. La toqué y la besé intensamente y la agarré del pelo, le bajé la cabeza y la atraganté con mi verga hasta el fondo. Se babeaba toda y sus tetas se sentían muy bien calientes en mis piernas. En un momento frenó, me hizo parar y pensé que la había atrapado la cordura y quería dejar esto en el olvido. Pero no, se fue a un cuarto y acostada me dice "mirame como me toco y pajeate, quiero eso" y cuando yo amagué a decirle "pero te quiero cog..." ella volvió a decir QUIERO ESO, PA JEA TE

Ella se chupaba los dedos, se tocaba las tetas y me miraba gimiendo...cuando me empecé a pajear ella comenzó a tocarse entre mas piernas y a frotarse el clítoris, gimiendo más fuerte y me decía con la respiración cortada que vaya al lado de ella. Me agarró la pija y se la puso en la boca y me la chupó un rato hasta que por sus movimientos al masturbarse se salió y me dijo "pajeate" mientras se metió 3 dedos en la concha y empezó a gritar de placer. Yo tenía los huevos duros y estaba ya matándome verla y escucharla así.

-Acabá
-¿qué?
-Dale, dame la leche
-Qué trola sos me encanta
-A MÍ me podés dar toda la leche
-Me encanta
-Tenés que darmela
-Uy si, pendeja
-Soy mejor que ella y más puta, dame la leche
-mmm ahí va
-¡Dame la leche!

Más o menos fue así el intercambio de palabras previo a que le manchare de leche las tetas y el abdomen al mismo tiempo que ella acabo repetidas veces mojándose toda. Justo en ese momento se escucharon ruidos de arranque de autos y el grito de uno de los primos (que sabía que ella se escondía ahí a fumar porro) "¡ya vamos a las cabañas!" Ella se puso nerviosa, se vistió y se fue corriendo. Yo no sabía que hacer, entre el alivio porque no me descubrieran, las ganas de metérsela toda que me quedaron y la culpa por la locura que había cometido.

Llegue a la cabaña y mi novia estaba sentada en la cama ya más calmada y me dijo que ya se le había pasado el enojo y que si empezábamos a usar preservativo de nuevo yo podía acabarle adentro y así no había problema. Tuvimos sexo pero sólo para cumplir y yo estaba como en otro lado: estaba teniendo sexo con una mujer idéntica a la que acababa de manchar de leche, pero no era lo mismo, algo faltaba.

Después estuve distante con todo el mundo y casi en modo automático hasta el día de la fiesta, como que ya no tenía sentido nada para mí, salvo pensar en ellas. Bah en ella, si pensaba en mi novia era por comparación ¿Eso era prueba de que no la amaba? Para evadir esos pensamientos tomé mucho más de lo que debía en un compromiso familiar. No me levanté de mi silla durante el carnaval carioca y "la gemela" pasó como de casualidad sirviéndose algo para tomar y me dijo "vamos al baño de afuera y te la chupo, en 5 andá". Ahí me desperté y demasiado, me había quedado mal desde aquella vez.

No habían pasado ni 4 minutos que fui para afuera y la busqué, entramos al baño y empujando una de las puertas chapamos contra la pared. Y ella buscaba agacharse pero no, la di vuelta y le levante el vestido. Ella me pedía que se la dé en la boquita pero no, me corrí la tanga y de una se la puse toda. Se sintió hermoso penetrar fuerte esa conchita depilada y caliente. Le tapé la boca, la agarré fuerte de la cintura y le dí rápido y duro hasta acabar en pocos minutos y dejarla empapada.

Juramos que quedaba todo ahí y así fue. Mi novia y yo volvimos a Buenos Aires a tener nuestra segura y aburrida relación y su hermana se quedó en el Sur sin saber bien qué hacer de su vida, como siempre
Hasta que un par de meses después mi pareja me dijo que "teníamos que hablar" y en vez de decirme lo que se suele decir casi siempre después de esa frase, me preguntó si no me molestaba que la hermana se venga a quedar unos días en nuestra casa porque se venía a Capital para estudiar. 

1 comentario - La gemela malvada (Parte 2: la boda)

omar698 +1
Muy bueno !!!
Habra 3ra parte?
NoSoyUnRobot2
https://m.poringa.net/posts/relatos/3644889/La-gemela-malvada-Parte-3-la-provocacion.html