Mi tía y mis primas vienen a vivir a casa II

Aquí les traigo la parte dos de este relato que tanto les gustó, espero y allá mucho apoyo tanto a este como a todos mis post sin más por decir aquí les va, disfrutenlo..





—Luismiiii…Paulaaaa a comeeeer. Oí exclamar a mi madre.
Al poco estábamos todos sentados en la mesa comiendo, yo todavía no me creía lo que había pasado, intentaba entrar en la conversación, pero en mi cabeza solo veía a esa increíble mujer que tenia a mi lado haciéndome una mamada increíble. Ella sabia que la miraba, pero estaba hablando no se que de unos pantalones para el trabajo. Noté como su pie desnudo acariciaba mi pantorrilla como diciéndome «estoy contigo, a tu lado» Me limité a sonreír a los comentarios que hacían todos, como si estuviese atento a lo que decían.
—Luismi, Luismiiii, oí la voz de mi madre llamándome. Hijo parece que estas en babia, ¿Te ocurre algo?
—No mamá, es que tengo un problema con el trabajo que tengo que entregar y no me lo puedo quitar de la cabeza.
—Este chico no sabe desconectar de su carrera, ni cuando esta dormido. Dijo mi madre a modo de reproche cariñoso. Te preguntaba que si quieres postre.
—No mamá gracias solo tomaré un café solo.
—Pues entonces ayuda a recoger la mesa mientras preparo los cafés, me dijo mi madre.
Eso hice, recogimos la mesa en un santiamén, mi madre, mi tía y Alba se fueron hacia el salón con una bandeja y el café y en la cocina solo quedamos mi prima Noelia y yo terminando de meter todo en el lavavajillas. Cuando íbamos a salir mi prima me agarro del brazo.
—Luismi, ¿podemos hablar un momento?
—Claro Noelia, dime.
—Solo quería pedirte perdón por mi actitud de ayer. Se que fui egoísta y mal educada, pero entiéndeme que mi vida, perdón, nuestra vida a dado un giro de 180º y estoy todavía algo aturdida sin creer que nos esté pasando esto.
—Noelia, yo no te tengo que perdonar nada, es a tu madre a quien has ofendido. ¿Has hablado con ella?
—Si, y me ha explicado lo que creo que también te contó a ti, no apruebo lo que hizo, pero entiendo porque lo hizo y sus motivos, eso me hizo ver a mi madre de diferente manera de como la veía.
—¿Y cómo la veías?
—Mejor no quieras saberlo.
Imagine que la veía como una zorra ninfómana come hombres que todos los días se follaba a cuatro o cinco tíos y luego llegaba a su casa a esperar a su marido con mirada enamorada pero llena de leche por todos sus agujeritos. Creo que yo la miraba así antes de hablar con ella, Miré a Noelia con cariño, la atraje hacia mi y la di un abrazo. Me encantó sentir su cuerpecito pegado al mío y eso hizo que mi polla muy sensible desde antes de comer se volviese a erguir. Aunque intente que no lo notara fue muy evidente y ella se abrazó aún más a mi juntando su pubis a mi erección.
—Entonces Luismi…¿No estas enfadado conmigo?
—No cielo, si acaso algo molesto.
—¿Molesto? ¿Por qué?
—Por tu atuendo de ayer, cuando entraste a la cocina estabas para comerte con ropa y todo.
—¿Y porque no lo hiciste? Me pregunto traviesa.
—Es obvio Noelia, me habrías utilizado haciendo frente común ante tu madre.
Su mirada era entre divertida, traviesa y viciosa. Seguía abrazada a mi y se frotaba suavemente con mi polla, me estaba poniendo a mil la jodia niña, pero me miraba esperando algo más.
—Espera, dije confundido, me esta diciendo que si yo…ósea que si te hubiese, como decirlo…a ver… si me hubiese insinuado…tu y yo…
—¿Hubiésemos terminado liados? Aclaró mi prima seductoramente. Pues posiblemente Luismi, posiblemente, aunque eso ya no lo sabremos, ¿No crees?
Me dio un pico en los labios y salió por la puerta meneando su culito provocadoramente, yo me quedé en la cocina para tranquilizarme. Esto era mucho para mí, primero mi tía, estaba claro que iba a follar con ella si o si, ¿pero con mi prima Noelia? Es que ni se me pasaba por la cabeza aunque también lo desease y lo de hace un momento me indicó que todo podría ser posible.
Cuando entre en el salón todos estaban sentados charlando y tomando su café. Mi tía me miró y me indicó que me sentase a su lado en el sofá. Me sirvió un café y nos pusimos a ver una anodina película romanticona pero que enganchaba al televidente a la trama y posterior desenlace ya conocido por todos y todas. Deseaba abrazarla y que ella me abrazase a mí. Deseaba sentir sus labios de nuevo y quería tenerla desnuda para mí, pero la película transcurrió entre caritas de "que bonitoooo" o "que romántico, yo quiero algo así" Mi tía aprovechaba cuanto podía para agarrarse a mi brazo y dejarme notar su teta de la manera mas inocente pero sabedora lo que me ponía que hiciese eso.
Mis primas no perdían detalle de la película y mi madre, muy suya como siempre sin prestar atención a la película pero leyendo las noticias en su Tablet. Cuando terminó la película todos comentamos lo bonita que había sido y en esos momentos mi madre dijo algo que me puso los pelos de punta.
—¿Os apetece que vayamos al cine?
Mis primas saltaron de alegría con un sonoro siiiii, mi tía solo me echó una mirada que me dijo todo.
—A mi me apetecería, dije con tristeza fingida, pero tengo que estudiar mucho.
—A mi me gustaría, pero prefiero quedarme y preparar la ropa de mañana, quiero causar buena impresión en mi primer día de trabajo.
—Que aburridos sois, dijo mi madre. Venga chicas arreglaros que nos vamos al cine y lo vamos a pasar de película.
Las tres subieron a arreglarse. El corazón se me iba a salir por la boca, latía a mil pulsaciones y mi polla empezaba a llenarse de sangre sabedora de que iba a pasar. Mi tía miró hacia las habitaciones asegurándose que no había nadie y agarro mi mano con fuerza mientras me miraba y sonreía.
—Si metieses tu mano entre mis piernas, sabrías como estoy por ti. Llevo deseando esto hace mucho tiempo.
—¿El estar conmigo? Pregunté estúpidamente.
—Mi amor, el follar contigo. No podía ignorar tus miradas en la piscina y las veces que ibas al baño. Me parecías tan tierno, tan deseable que si no hubiese estado con mi marido te hubiese follado cuando tenías quince años.
—Tía me hubiese encantado que lo hubieses hecho, eres mi diosa, la mujer de mis sueños, algo inalcanzable para mí.
Recobramos la compostura cuando escuchamos la algarabía de mis primas y mi madre bajando por las escaleras. Cuando llegaron a nuestra altura se despidieron.
—Bueno muermos, vosotros os lo perdéis, dijo mi madre, llegaremos tarde así que si queréis cenar tenéis la nevera, serviros vosotros mismos.
Vimos como salían y según se cerró la puerta, nos fundimos en un beso lleno de pasión, aunque mi tía lo cortó rápidamente.
—Cariño se lo que deseamos los dos, pero toda precaución es poca. Yo me voy a la ducha, dejemos pasar un rato por si acaso.
Estaba muy excitado, mi polla me dolía a rabiar por la erección que tenía, necesitaba hacer algo, incluso pensé en hacerme una paja para luego poder aguantar más, pero quería correrme con mi tía. Me hubiese encantado meterme con ella en la ducha y empezar el juego, es algo que deseaba hacer desde hace mucho tiempo desde que vi alguna peli porno en la que los actores follaban bajo el agua de una ducha.
Pensé juiciosamente que ya había pasado tiempo suficiente. Ni mi madre ni mis primas iban a volver. Me desnudé me fui al baño que ocupaba mi tía y me metí debajo del agua con ella. Cuando me vio se mordió el labio inferior y enseguida se abrazó a mí, por fin notaba su cuerpo desnudo pegado al mío y esa sensación nunca la olvidaré.
—Mi amor, pensé que no te atreverías a entrar, me gusta que no me hayas obedecido
—No aguantaba más tía, necesito sentirte.
—Cariño, quiero que me llames Paula, me vuelve loca cuando lo escucho de tu boca.
—De acuerdo Paula.
Nos fundimos en un beso largo, lleno de vicio y deseo, nuestras manos no estaban quietas y acariciaban nuestros cuerpos. La piel de mi tía era como la seda, suave y cálida, mis labios se fueron hacia su cuello y empecé a besar lamer y mordisquear esa zona tan sensible. Los gemidos de mi tía se hicieron más profundos, mis dedos jugaban con su anito y su clítoris y mi boca llegó a sus tetas, enormes, generosas con un pezón marcadísimo que era casi como una judía y una areola marrón y pequeña. Desde luego el cirujano que la operó hizo un trabajo increíble porque eran totalmente simétricas y perfectas. Mis dedos seguían jugando entre sus piernas y mi boca devoraba esas tetas divinas, chupando y mordiendo esos pezones esplendidos mientras que la mano que me quedaba libre las amasaba y maltrataba.
—Mi amor me tienes a punto, quiero sentir tu boca en mi coño.
Mi tía apoyo la espalda en la pared y puso un pie en una de las repisas de obra de la ducha y poniendo sus manos en mis hombros me indicó el camino para que mi boca se apoderase de su coñito. Había visto muy pocos coños en mi vida, con el de mi tía era el tercero, pero me enamoré de él. Cerradito, pequeño, con unos labios mayores suaves y mullidos y unos labios menores pequeños cubriendo mínimamente el clítoris que se veía rojo y fuera de su capuchón. Mi boca no tardó en apoderarse de él, de lamerlo y mimarlo. Mi lengua jugaba con su coñito y la penetraba hasta que ya no podía más, la postura era algo incomoda así que me limité a su clítoris, y metí dos dedos dentro de su coñito para poder follarla con ellos.
—Me corro cielo, anunció mi tía con la respiración acelerada, no pares mi amor…así…asiiiii…aahhh.
Sus manos se aferraron a mi cabeza para que no dejase de chupar, su cuerpo temblaba y sus muslos aprisionaban mi cara. Noté su corrida cayendo por mi mano y mi brazo, inundando mi boca y mojando mi barbilla y cuello. Eso me volvió loco, su sabor era como la adrenalina, todavía estaba recuperándose de su orgasmo pero yo no aguantaba más, me puse en pie, y con algo de violencia la di la vuelta y ella sabiendo lo que iba a hacer apoyó sus manos y su cara en los azulejos y sacó su culito provocativamente.
—Te voy a follar Paula, te voy a follar hasta que te arda el coño y te rebosen mis corridas.
—Ahhhh…mi vida si, follame, vamos hazloooo.
Mi polla buscó la entrada de su coñito y se la clavé hasta los huevos despacio pero sin pausa.
—¡AHHHHHHH! Que gustooooo por diooooos…follameeeee.
Por fin mi deseo se hacía realidad y la sensación de estar follandome a mi tía era increíblemente mejor de lo que me imaginaba. Su coño era estrechito o mi polla demasiado grande, no lo sé, el caso es que su vagina aprisionaba mi balano deliciosamente, notaba la suavidad de su interior, como mi glande la abría sin problemas mientras ella gemía pidiendo más y el calor abrasador que emanaba de esa cueva del placer. Mi orgasmo estaba ya en puertas, muchos años deseando esto y ahora mis cinco sentidos se estaban inundando de ella. Me agarré a sus tetas mientras bombeaba furiosamente su coño y mi tía literalmente se moría de gusto.
—Paulaaa, me corrooo, no aguanto maaaas.
—Dentro mi amor, hazlo dentrooo…diooos me corro… me corrooooo…si…si…siiiiiiiiiiiii.
Noté como su vagina exprimía mi polla, como se aferraba a ella y la estrangulaba para sacar toda la leche de mis huevos. Clavé mi polla en lo más hondo de su ser hasta rozar su matriz, mi tía arqueó su espalda y echó su cabeza hacia atrás herida de placer. Creo que en mi vida me he corrido de esa manera tan brutal, mi rabo no paraba de soltar leche que golpeaba en el útero de mi tía haciéndola gemir de deseo.
—Mi amor para, paraaa por lo que mas quieras. Decía intentando recuperar la respiración.
—Te quiero Paula, le decía besando su espalda.
Mi polla seguía en su interior, dura como el diamante, sentía las pulsaciones de su orgasmo todavía sobre mi verga eso me mantenía encendido. Eso y el saber que estaba follándome a la mujer de mis sueños. Mis caderas tomaron la iniciativa y empecé un bombeo lento en el coño de mi tía.
—Mi amoooor que me haceees…ummmmm…sigueeeee.
Quise cambiar de posición, necesitaba ver su cara, besar sus labios. Me Sali de su interior y la di la vuelta estaba preciosa, con su carita arrebolada y sus ojitos brillantes de deseo. Nos abrazamos, levanté una pierna suya pasando mi brazo por la corva de su rodilla y la volví a penetrar de nuevo.
—Diooooos que ricoooo, gimió mi tía.
Empecé a bombear de nuevo sabiendo que esta vez iba a durar mucho más. No pasó mucho tiempo cuando vi como mi tía hacia su respiración mas profunda y me besaba con pasión, mi otra mano estaba aferrada a una nalga suya, notando su dureza y su suavidad, amasándola, atrayéndola hacia mi para hacer la penetración mas profunda. Sus caderas empezaron a moverse sin control y pego un grito que se tuvo que escuchar en toda la manzana.
—Me corroooooo…me corroooooo.
La abracé contra mi y busqué su boca para acallar sus gritos. Ella se aferró a mi cuello y noté como sus caderas se movían sin control, su cuerpo temblaba y bufaba presa del placer que estaba sintiendo. Yo no dejaba de bombear ese coñito divino, con una cadencia constante, aunque de vez en cuando la follaba salvajemente, creo que no había terminado su orgasmo cuando le sobrevino otro y al poco otro más, yo no aguantaba, mi orgasmo crecía imparable y con un bufido descargué mi corrida dentro del coño de mi tía. Nos costó tranquilizarnos, recuperar nuestras respiraciones, por suerte seguíamos bajo la ducha, si no creo que estaríamos empapados en sudor, Seguíamos muy abrazados, mi tía con un movimiento de cadera suave sacó mi miembro de su interior, dejé que se apoyase con sus dos pies aunque no deshicimos el abrazo, seguíamos besándonos pasionalmente.
—Mi vida ha sido impresionante, me encanta lo que me has hecho sentir, dijo mi tía con mimo, mientras apoyaba su cabeza en mi hombro.
—Paula, eres mi sueño hecho realidad. Te quiero.
—Yo también te quiero mi amor. Anda, vamos a lavarnos y a secarnos y vamos a la cama.
Eso fue música celestial para mis oídos, mi tía y yo nos enjabonamos mutuamente poniendo especial atención en nuestros sexos y fue inevitable que mi polla se volviese a erguir altiva y desafiante, preparada para un nuevo asalto. Mi tía la miró hipnotizada y la dio un par de mamadas.
—Bendita juventud, me vas a dejar el coño hecho unos zorros.
Cuando llegamos a la cama de mi tía, ella entro en cuatro provocativamente, mostrando su coño enrojecido de la follada y su anito, precioso algo dilatado. Parecía un cráter en miniatura y pedía ser lamido, chupado y poseído. Su culo era como una obra de arte esculpido a base de gimnasio, era redondito y respingón. Agarré esos dos globos perfectos de carne y los separé para hundir mi boca y mi lengua en ese esfínter, lubricarlo bien y follármelo, creo que mi tía entendió mis intenciones y me hizo parar.
—No mi amor, por ahí todavía no lo he hecho y además hace falta limpiarlo muy bien. Si no, sería muy asqueroso.
Mi tía vio mi cara de decepción. Follarme ese culazo era para mi ya el sumun del placer con esa diosa.
—Pero eso no significa que no desee que me folles el culito. Solo dame algo de tiempo y déjame prepararlo bien para mi hombre. Y ahora mi amor regálame otro orgasmo.
Mi tía apoyó su cara en el colchón ofreciéndome su coño. Estaba abierto y brillante de los juguitos que salían de su sexo. Apunté mi polla y la dejé ir dentro de golpe hasta que mis huevos rebotaron en su clítoris.
—Diooooos siiiiiii… revienta a tu zorra con tu polla. Aulló mi tía.
Empecé a follarla brutalmente, mi pelvis chocaba con su culo llenando la habitación de ruidos parecidos a azotes, mis huevos golpeaban su clítoris haciéndola dar unos grititos muy sensuales. Su anito boqueaba para mí, llamándome, provocándome. Chupé mi dedo pulgar y empecé a acariciar su esfínter, sé que le gustó por el gemido de placer que dio pero me llamó la atención.
—No cariño, decía con voz entrecortada, por ahí no.
Un azote en ese perfecto culo hizo que diese un grito y me mirase sumisa.
—Calla y disfruta zorra.
Metí mi dedo en su culito y ella suspiro de placer mientras mi polla la perforaba y mi dedo dilataba algo su esfínter. Sus caderas empezaron a moverse de nuevo preludio del orgasmo que iba creciendo en su interior. Era terriblemente excitante ver como su coño se comía mi polla , como su redondo culo se movía al ritmo de mis embestidas y como gemía, era algo que siempre había querido, hacer gemir de placer a mi tía mientras la follaba.
—Mi amor, mi amor…me corrooooo…ahhhhhh…diooooos.
Mi tía arqueo su espalda y levanto su cabeza intentando coger aire, su orgasmo exprimía de nuevo mi polla y mi dedo metido en su culo notaba como también lo estrangulaba presa del orgasmo que atravesaba su cuerpo.
—Cariñooo, haz que esto no termine, decía con voz entrecortada, te quierooo.
—Paulaaaa me corrooo…aggggg…tomaaaaa…tomaaaaaa.
Clavé de nuevo mi polla hasta los huevos mientras me vaciaba en su interior, para los dos fue un orgasmo muy largo que nos dejó agotados. Mi tía se dejó caer en la cama y yo caí encima de ella con mi polla bien clavada en su interior. Sabia que esto llegaba a su fin, no sabia que hora seria pero de seguro que nos tendríamos que vestir.
—Me encanta sentirte en mi interior, como me llenas, como me haces alcanzar unos orgasmos increíbles.
Mis labios la llenaban de besos, y susurraba en su oído lo que la quería y lo que la deseaba. Mi tía ronroneaba mimosa sintiéndose querida. En esos momentos una alarma sonó insistentemente, los dos nos sobresaltamos mi tía me hizo salirme de ella y alargó su mano apagando un despertador.
—Debemos vestirnos mi amor, creo que la película ya habrá terminado y tu madre y las niñas estarán aquí dentro de un rato. Dijo mi tía con pena.
—Paula, me encantaría pasar la noche contigo.
—Lo se cielo mío, yo también lo deseo, pero tenemos que ser muy cuidadosos. Anda ve a vestirte.
Nos dimos un beso y nos costó separarnos, dios, había sido una tarde increíble, todavía no me lo creía, yo un chaval de 20 años me había follado a una mujer de bandera, a mi amor platónico. Al poco ya estaba vestido y había cambiado un poco el aspecto de mi escritorio. Conocía a mi madre y sabia que se fijaba mucho en las cosas y como me dijo mi tía, todo cuidado era poco.
Me acerqué a su habitación y ya había hecho la cama, tenia algo de ropa cuidadosamente colocada sobre la cama, pero ella solo tenia unas braguitas muy sensuales puestas, eso hizo que mi polla nuevamente se pusiese dura, mientras me acercaba a ella y la abrazaba pegando mi dureza a su culo.
—Luismi para ya, dijo mi tía con voz seria. Sabes que me encantaría seguir pero debemos de parar. Bájate y espérame en la cocina, anda, dijo secamente.
Mi tía no había bajado aun cuando oí la puerta de la calle abrirse entrando mi madre y mis primas, me dieron un beso las tres y mi madre subió a cambiarse, mientras mis primas se quedaban conmigo hablando de la película que habían visto. Al poco bajaron mi madre y mi tía y se fueron a la cocina y a la hora estábamos cenando para irnos a dormir. Empezaba una nueva semana.
Durante toda la cena no hubo muestras de cariño por parte de mi tía como era su costumbre. Y cuando me fui a mi habitación solo un seco «buenas noches» salió de su boca sin ni siquiera mirarme a la cara. Estaba terminando un ejercicio sobre el trabajo que estaba realizando cuando unos nudillos golpearon mi puerta. Mi corazón se aceleró pensando que seria mi tía y al poco entraba mi madre a darme un beso e irse a dormir, tuve que hacer verdaderos esfuerzos por ocultar mi decepción, como comente mi madre se fijaba mucho en los detalles.
—No tardes en acostarte cariño, si no mañana no hay quien te levante. Dijo mi madre dándome un maternal beso en la frente.
—No mamá, termino esto y me voy a dormir.
—¿Te ha pasado algo esta tarde con tu tía? Parecía enfadada contigo.
Mentir no se me daba bien, pero puse mi mejor cara de «pero que me estas contando»
—No, dije con indiferencia, cada uno hemos estado a lo nuestro. Quizás esté nerviosa por que mañana empieza su nuevo trabajo…no sé.
—Si, dijo mi madre pensativa, quizás sea eso. Bueno cariño anda, no tardes en acostarte, hasta mañana.
Ahora si que estaba enfadado con mi tía, joder, después de lo bien que lo habíamos pasado, ahora la iba a cagar con alguna neura suya y es que encima no tenia ni idea de lo que le pasaba por la cabeza y no podía ir a preguntarla que es lo que ocurría.
No pase buena noche, me desperté infinidad de veces, con mi tía en la cabeza e intentando averiguar por qué estaría molesta. Como dije al principio iba a pasar por un infierno, aunque un infierno dulce, a las 48 horas de haber llegado a mi casa ya me había follado a mi tía y esto solo era el principio. Cuando bajé a desayunar al día siguiente pensé que estaría en la cocina esperándome en ropa interior y deseándome los buenos días con un revolcón de película…pero no, mi madre había salido ya y mi tía y mis primas ni se habían levantado, ni me apetecía desayunar, salí de casa , me monté en mi coche y me fui a la universidad.
Esa noche cuando llegó mi tía a casa después de su primer día, estaba agotada. Nos contó por encima como había sido su día, cenó algo ligero, se duchó y se fue a dormir. No pude ni cruzar dos palabras con ella, me ignoraba como si no existiese, como si lo que pasó entre los dos el domingo por la tarde solo hubiese sido un juego para ella y ya alcanzado el reto, dejarme tirado y pasar al siguiente nivel o quizás tomó consciencia de lo que habíamos hecho y sintió pánico al sentirse vulnerable y quiso poner tierra de por medio.
Fuera lo que fuese no me quise comer mas la cabeza con este asunto, me centré en mi mismo y en mi carrera y opte por mantenerme al margen. Esa misma noche cené pronto y me fui a mi habitación a continuar con mi trabajo y mis estudios. Esa semana dio para poco más. Lo único reseñable es que mi madre habló con el director del Joaquín Rodrigo y mi prima Alba empezaba el lunes siguiente en el instituto y lo único que me pidió es que la acompañase a conocer el centro y eso dio pie a que saludase a algunos antiguos profesores que se alegraron de verme y de saber que mi prima cursaría su último año de instituto allí.
Fue el viernes antes de irme de juerga con mis amigos que mi madre quiso hablar conmigo. Se que durante la semana me desentendí mucho de todo lo que pasaba en casa y mi madre tuvo que apechugar con todo y se que eso la estaba agobiando. Estaba en mi cuarto preparándome cuando unos nudillos golpearon mi puerta, entrando mi madre al poco de haber llamado. Después de las preguntas maternales de rigor afrontó lo que había venido a decirme.
—Luismi, necesito que me eches una mano con tu tía.
—¿Qué es lo que le pasa ahora mamá? Pregunte con resignación.
—Tu tía está muy triste otra vez y no consigo que hable conmigo y como se que tú tienes buena química con ella necesitaría que, no sé, la invites a cenar, que salga y se distraiga que se vuelva a abrir a ti y te cuente lo que pasa por su cabeza.
Eso, que se abra a mí, que me deje su coño bien abierto y la folle hasta desfallecer, pensé para mis adentros de forma satírica y libidinosa.
—Bueno mamá intentaré hablar con ella, pero desde que se puso a trabajar no hemos cruzado nada mas que los saludos de rigor. ¿Y llevarla a cenar? Mamá que con lo que me das no me llega ni para fin de mes.
—Bueno eso no es problema, te he hecho una transferencia a tu cuenta para estos imprevistos, dijo mi madre poniéndose en pie. Otra cosa cielo, mañana salgo temprano tengo un juicio en otra ciudad y necesito hablar con mi cliente y preparar el caso, vendré el domingo por la noche.
Eso para mi era una señal de que mi madre se iba a encontrar con algún amante secreto que tenía. Nunca habíamos hablado de ello, pero mi madre a pesar de tener 50 años era una preciosidad de mujer al igual que mi tía iba en la genética de la familia. Mi madre una o dos veces al mes pasaba el fin de semana fuera alegando trabajo pero seguro que no pararía de follar, solo había que ver la cara de felicidad que tenía cuando entraba el domingo por la noche por la puerta de casa.
Bien al paso que íbamos se presentaba un fin de semana un tanto atípico. La verdad y bien mirado me apetecía hacer algo diferente y cuando salí de mi habitación vi a mi prima Noelia sentada en el sofá, con una cara de aburrimiento muy grande me dije ¿Por qué no?....

8 comentarios - Mi tía y mis primas vienen a vivir a casa II

eleric +1
ladron de historias
eleric
andate a laputa que te pario
puto
AxelArz
@eleric puto si pero no marica como tu, anda a que te rompan el ojete y cierra la bocaza
eleric
ladron culo roto deja de robar pajero...chupa glande...no te tenes la capacidad de crear tus historias..deja de robar..
PAJAESVIDA
que buena historia! me la pone dura todo el tiempo... van 10! y una paja obvio!
theptro
Igual que lo anterior + 10 perfecr
cocoelbombero
Espectacular redaccion, esperamos mas amigo !!!
CroctusZ
Postea la siguiente parte amigo, está buenisima