Conociéndote... (parte1)

Creo que la historia comienza cuando por alguna extraña razón dí con un chat "para adultos" donde me invitaban a registrarme para tener mayor acceso a las conversaciones y a unas camaritas pequeñas que, al menos, podían mostrar a la otra persona que estaba en el chat.
Seguramente todos se referirán a una conocidísima página pero no era justamente ahí.

Lo cierto es que las veces que ingresaba a la sala de chat solía encontrar a una linda mujercita muy sociable y muy bonita que no tenía reparos en hablar de los más variados temas.
En algún momento entre tantas visitas a la sala de chat comencé a conversar con Aldana, primero temas muy generales para después empezar a conocernos un poco más. Llegó el tan esperado intercambio de facebooks y direcciones de skype por lo que fui abandonando mis accesos al chat adulto.

Pero una noche de insomio, encendí mi netbook y viendo que mi nueva amiga estaba conectada le escribí, sin obtener respuesta. Esperé un tiempo prudencial y mientras tanto entré al chat "adulto". Alli también estaba conectada y con la webcam encendida. Entré a su cam y grande fue mi sorpresa al encontar a mi amiga Aldana totalmente desnuda, gimiendo enloquecida mientras se masturbaba con un dildo enorme que entraba y salía de su concha empapada.
La caja de texto se inundaba de comentarios masculinos pidiendo poses, agujeros por donde meter semejante juguete u ofreciendo sus pijas en reemplazo del plástico. Aldana absorta en su tarea solo pedía que la cogieran... así.. como a ella le gustaba, fuerte, hasta el fondo.. más.. más...papi...

Su acabada fue un espectáculo de chorros al piso acompañados de gritos y temblores de su transpirado cuerpo. Mi verga no podía estar más hinchada con semejante vista. Apenas recuperó su aliento, apagó la cámara y se desconectó. Quedé con una calentura tremenda.

A los pocos minutos me escribe por skype....
- Hola, vi que estuvistes en la sala....
- Hola, si.. 


...pausa ...


- Hace mucho que estabas?... me vistes...
- Si, te vi... y me quedé muy caliente


La respuesta no llegaba... el tiempo se hizo eterno. hasta que recibí una videollamada.

Ahí estaba... hermosa, desnuda y con el pelo revuelto... su mirada penetrante... sus pechos redondos, perfectos.:
- Yo también estoy caliente con vos, cordobés... quiero coger con vos.

Continuará.

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