Todos mis relatos (re-subido) 1° parte

Hola amigos, acá les dejo todos mi relatos para que disfruten.
Espero sus comentarios

Mi hija, Se convirtió en mi puta
Si bien nunca ni siquiera lo había imaginado, ver convertirse a tu hijaen una putita es algo para lo que uno nunca está preparado, pero tengo quereconocer que fue lo mejor que me pasó.
Todo comenzó cuando me divorcié de su madre y al momento de preguntarle conquién quería quedarse, sin dudarlo dijo conmigo, Lorena , tal es su nombre,tenía 15 años cuando con su madre decidimos que lo mejor era distanciarnos,ella siempre fue muy apegada a mí, por lo que, si bien me llamó la atención, nofue una sorpresa que quisiera quedarse conmigo.

El tiempo transcurría y nuestra relación era cada vez más estrecha, y si bienella comenzaba a tener noviecitos, pasábamos muchas noches de fin de semanaviendo películas juntos.
Al tiempo yo conocí una chica bastante más joven, yo tenía 44 y ella 25 años,por lo que tarde algún tiempo en traerla a casa debido a que no sabía cómo ibaa reaccionar Lore ya que no había gran diferencia de edad con ella ya que ellatenía 17
Una noche, luego de ver una película, le comente que estaba viéndome con unachica y quería que ella la conozca a lo que dio un salto en el sofá yabrazándome me dijo que estaba muy contenta por mí y muy entusiasmada con ideade que la llevara a casa para que se conozcan.

El tiempo transcurrió y Carla, así se llamaba mi novia y Lore se hicieron muyamigas y compinches, a tal punto que Lore le confiaba sus más íntimos secretos,pero nunca supe que ese era el comienzo de mi nueva vida.

Con Carla empecé a experimentar cosas, a nivel sexual, que con mi ex eran soloposibles en mis fantasías, era una chica muy abierta de mente y a la cual legustaba experimentar sin tabúes. Así comenzamos a tener sexo en lugarespúblicos, conocí el swinger, hacíamos tríos con chicas y con hombres e inclusocuando me confesó su fanatismo por el sexo con varios hombres incursionamos enel Gangbang, cosa que solo conocía por Internet cuando mi ex acusaba dolor decabeza, pero al ver a mi novia chupando apasionadamente todas esas pijas (legóa estar hasta con 10 hombres) y cogiéndose a todos para que después uno por unole acabe en la boca (olvidé decir que era una apasionada de la leche) me partíala cabeza y no me importaba nada, la amaba así de puta.
Por supuesto el sexo en mi casa era cosa de todos los días y si yo estabacansado ella me la chupaba pero no se iba a dormir sin su cuota de pija yleche.
Esta situación cambió mi vida pero también la de mi hija ya que empecé a notaralgo distinto en ella pensé que era por mis descuidos que ésta nueva vida megeneraba, hubo situaciones en que me vio en bóxer yendo a la cocina a buscaragua o bien los ruidos en las noches de sexo con Carla, por lo que decidí teneruna charla con ella.
-Lore, vení, sentate conmigo, quiero que charlemos.
-Si Pá, que pasa? (me dijo con un tono de nena)
-Desde que llegó Carla a ésta casa algunas cosas cambiaron pero quiero quesepas que vos sos lo más importante para mí, por lo que si hay algo que a vosno te gusta me lo tenés que decir y lo solucionamos.
 
-No Pá, no hay nada con Carla y menos con vos, solo que estoy un poco celosaporque no tengo un novio con quién pueda disfrutar como lo hace Carla.

En una charla con Carla le pregunté si sabía si a Lore le pasaba algo más quelo que me había dicho y me dijo que sí,
 
-Lore está a punto de cumplir los 18 y quiere de regalo los implantes en laslolas, pero tiene vergüenza de pedírtelos.
-Pero si sabe que puede confiar en mí
-Si pero cree que le vas a decir que no, además sabe que le estas preparando lafiesta y no quiere hacer gastar más.
-Ella es una chica muy linda, no creo que le haga falta ponerse tetas, (mihijita es morocha y tiene unos lindo ojos verdes que saco de su madre, mide1.65, es delgada como toda adolecente que se cuida, y tiene una cola parada de98, la que hace que tanto en pollera, jeans y shortsitos sea un espectáculoverla irse) pero si es lo que quiere se las voy a pagar.
-Además no te olvides que está dando sus primeros pasos en el sexo y verse bienes lo más importante para una chica.
-Si es verdad, pero prefiero no pensar en eso, se que se la cogen pero prefierono pensar.
-Jajajaja, que anticuado, estoy segura que la vuelve loca chupar pijas como amí.
-No seas mala!!! Mejor me voy (pero ese comentario algo revolucionó en micabeza y al levantarme se pudo notar una clara erección)
-Epa, epa, algo vamos a tener que hacer con eso, papito degenarado jajaja
Por supuesto que Carla sabía más que lo que me decía, pero prefería no hablardel tema.

Mi hija cumple en invierno pero, a pedido de ella esperamos hasta el veranopara festejarlo ya que quería la fiesta en la quinta para lucir sus pechos enla pileta, para la fiesta dieciocho de mi hijita ya tenía las lolas hechas. Lafiesta no era más que una reunión de amigos y asado y por supuesto un día depileta, pero con Carla fuimos la noche antes a preparar todo y para aprovecharla casa solos para dar rienda suelta a nuestras fantasías, asique nos fuimosacompañados de una pareja de amigos y de unos chicos solos que conocíamos delos boliches swinger.
Para festejar el cumpleaños nos acompaño esta pareja con que habíamos pasado lanoche ya que la conocían a Lorena y ella los tomaba como a “tíos”, después elmedio día empezaron a llegar los chicos y entre ellos mi hija.
-Hola papi! Llegamos! Ya quiero meterme en la pile.
-Feliz cumple Lore. Estamos terminando de preparar todo, ustedes póngansecómodos.

Hasta ese momento nunca me había fijado en las compañeritas de Lore, pero conlo reducido de sus bikinis llamaron mucho mi atención, tenían unos culitosredonditos y parados y ver esas tangas metidas en sus colas es algo que mehacía perder la cabeza.
Y para peor se acerca Lore saltando con esas tetas enormes que se puso y conuna tanga similar a las de sus amigas y me abraza, La verdad que tener elsensual cuerpo de mi hija pegado al mío me estaba excitando y no pude contenermi erección, cosa que, nuevamente, noto Carla.

Con Martín nos dedicamos a atender la parrilla, cosa que nos daba oportunidadpara hablar de las nenas que habían venido, ya que si bien yo sabía que Carlano tendría problemas no sabíamos cómo iba a reaccionar Carmen (la esposa deMartín), Así fue que fantaseamos en cómo nos cogeríamos a esas pendejas con susconchitas depiladas y chiquitas y le meteríamos las pijas en la boca hasta quenos saquen la última gota de leche, hasta que en un momento, dos pendejas salende la pileta y comenzaron a caminar hacia nosotros. Las dos tenían un andarbastante gatuno y sus pechos se balanceaban con cada paso. Una era unapelirroja de ojos verdes que partía la tierra y la otra una rubiecita de pelocorto, no tan voluptuosa como su amiga pero se notaba que tenía el mejor culode las dos. Cuando finalmente llegaron, la pelirroja, con una sonrisa picaronadijo:
-Nos invitan algo para comer? Nos estamos muriendo de hambre
-Estamos en eso, contestó rápido Martín, - Falta un poquito pero si quieren lepodemos dar algo de chorizo para entretener la boca.
Yo no quería ni mirar pero ellas rieron y cómplices de la doble intencióndijeron:
-Bueno… pero que sea grande y nosotras lo elegimos.
-Vení. Decime que queres.- le dijo Martín a la rubiecita y se colocoestratégicamente detrás de ella dándole paso para que vea la parrilla pero a lavez aprovecho para quedarse apoyando ese perfecto culito enfundado en unabikini negra.
Sorprendentemente la chica no pareció perturbarse, sino que todo lo contrario,note como acomodo su colita para que Adrián la apoye mejor mientras miraban elasado.
--A ver. Yo también quiero algo dijo la pelirroja e hizo lo propio conmigo.-
Cuando se fueron Martín me dice:
-Viste, están para cualquier cosa.
-Si son una putitas, pero no vamos a hacer un escándalo en el cumple de Lore,tranquilicémonos.
 

Al terminar de almorzar nuestras mujeres nos propusieron hacer una siesta,asique los cuatro nos fuimos a la casa y dejamos a los chicos disfrutando de lapileta, por supuesto lo de la siesta era excusa y los cuatro terminamoscogiendo a lo loco, salvo que yo lo hice pensando en esas chicas pero tambiénen mi hija, en cómo le chupaba esas hermosas tetas y luego bajaba hasta metermi lengua en su conchita.
Si bien lo disfrutaba, pensar en eso me perturbaba bastante ya que se trababade mi hija, por lo que una vez que terminamos, Martín y Carmen se quedarondurmiendo y con Carla nos fuimos a caminar.
Carla me vio mal y me preguntó que me pasaba y como mi respuesta fue que nada,me preguntó si tenía que ver con las erecciones que había tenido con Lore, alver que ella se había dado cuenta le conté lo que sentía y ella rió y me dijoque me tranquilizara que no era para tanto que con tiempo y tranquilos ellatambién tenía cosas que decirme de Lore.

Luego de un rato de caminata, volvimos a la casa quinta. El terreno de la casaera muy grande y con varias entradas. En este caso entramos por una que no erala principal ya que nos quedaba más cómodo. Cerca de esta entrada se encuentraun cuarto de herramientas que quedaba bastante alejado del resto de lasconstrucciones de la quinta. Al pasar a unos metros de este cuartito, con Carlaescuchamos algunas voces murmurando y gemidos que venían de atrás del cuartito.Nos miramos con cara de duda, nos fuimos acercando sigilosamente.
 

La imagen que vi al espiar por la esquina de la pared, me dejo helado. Mihijita, Lorena, estaba en bolas cabalgando la pija de uno de sus amigosmientras que se las mamaba a dos que estaban frente a ella. Mi primer impulsofue saltar y cagar a piñas a todos. Pero Carla me calmó:
-Para. que vas a hacer loco?! Lo único que vas a lograr es armar un quilombo dela puta madre y no vas a solucionar nada.
-No lo puedo creer. Mi angelito. Mirala! Como una puta enfiestada por tresflacos.-
-Que le vas a hacer ella disfruta de sexo como quiere - me decía Carla comopara darle algo de lógica a la situación
-Pero es mi hija! No la puedo ver así.-
-Igual... no parece que la esté pasando mal. Relajate. Sugiero que nos quedemosacá para asegurarnos de que no le pase nada malo, y me quede junto a ellamirando la escena.
Mi hija seguía montando esa verga mientras que alternadamente mamaba las dospijas que tenía en frente. Era toda una experta. Movía su cinturita de unamanera extremadamente erótica haciendo que la pija se entierre cada vez mejor.Sus grandes tetas pero bien ubicadas, se balanceaban rítmicamente. Entre susperfectos y carnosos labios, desaparecían los gruesos trozos de carne de susamigos.
 

Mire a mi lado y vi que Carla se tocaba la concha por encima del pantalón, enese momento tome conciencia y note que yo tenía una importante erección.Evidentemente la imagen de una jovencita siendo cogida por tres hombres despertabaen mí una tremenda calentura, aunque esa jovencita fuese mi hija.

Volví a poner atención en la situación y ahora había cambiado. Lore seguíamontando a uno de los flacos en el piso, solo que ahora estaban enfrentadoscara a cara, dándonos una espectacular vista de ese redondo y duro culito.Seguía chupando una pija, pero uno de los jóvenes había encontrado otraposibilidad. Evidentemente atraído por el perfecto culito de mi hija, comenzó ajugar con su ano. Le iba introduciendo dedos y lo lubricaba. Lorena no seoponía en lo más mínimo, todo lo contrario, relajaba su estrecho anito parafacilitar la entrada de los dedos. En determinado momento se posiciono con supija dura como un mástil en el culito de Lore y la penetro sin más preámbulos.Lore pego unos grititos al principio pero éstos luego fueron reemplazados porgemidos que denotaban un placer extremo.
 

Mi angelito estaba siendo cogida por todos sus agujeros y le encantaba. Y yo,su padre, disfrutaba con la situación. Era perturbador.
 

Unos momentos más tarde, decidieron dar por terminada la orgia con Lore y lahicieron arrodillarse. Uno a uno fueron pasando sus pijas por la boquita de mihija y acabaron en su cara, sus pechos y su pelo. Era extremadamente erótica laimagen de mi dulce hijita prostituida por todo ese espeso y blanco semen y porla sonrisa en su carita, lo había disfrutado en grande.
 

Con Carla nos retiramos sigilosamente.
 

El primero en hablar fui yo:
-Y bueno. Termino siendo una putita. Que se le va a hacer.-
-Y si. cosas que pasan. Por lo menos es bastante buena en lo que hace, no teparece? Se ve que aprendió de mí-
-Jajajaja... que hija de puta.. Será que le estuviste ensañando? jajajaja.

Luego de ese comentario mío volvimos caminando en silencio hasta la casa y unavez allí Carla me contó que en más de una vez Lore le había dicho que seexcitaba pensando en mí y solía masturbarse mucho con eso, hasta unaoportunidad me había espiado bañándome y que en las noches que pasábamos viendopelículas alguna vez pensó en agacharse y chuparme la pija.
-Vos estás loca!!!! Fue mi primera reacción.
-No, solo que me pidió que no dijera nada porque era menor y no te queríacausar un problema o que enviaras con su madre, es por eso que no me sorprendeque al cumplir los dieciocho haga éstas cosas.
Ella me preguntó muchas veces sobre las cosas que hacemos con otra gente, misprácticas de Gangbang y también sobre nuestras relaciones hasta como la tenésde grande y que sabor tiene tu leche.
-Y vos le contaste todo?
-Si, hemos tenido unas charlas muy interesantes…. E incluso, tengo quereconocer que ante su curiosidad por mis historias con otra chica, hace unassemanas, tuvimos una sesión de sexo donde le dejé chuparme la concha para quesepa que se siente.
 
No podía creer lo escuchaba. Mi hijita se calentaba conmigo y había tenido sexocon su madrastra…. Mi cabeza daba vueltas.

En el camino de vuelta veníamos todos en silencio y entonces mi morbo pudo másy pregunte:
-Lore, como la pasaste hoy?
-Muy bien Papi, muchas gracias.
-Y que hicieron cuando nos fuimos a hacer la siesta? (Carla no me miraba perose sonreía)
-Nada especial, estuvimos con los chicos y chicas jugando.
-Ah bueno, pero la pasaste bien no?
-Si, muy bien.
-Bueno, si bien ya cumpliste hace unos meses, ahora es oficial, ya tenés 18años y podes hacer lo que quieras.
-Si, no veía las horas jajajaja.
Luego de conversar de otras cosas, Carla le dijo a Lore con un tono decomplicidad si no quería descansar y dormir un rato a lo que Lore asintió y seacostó en el asiento trasero con la cabeza hacia el lado del acompañante, desdedonde podía verme a mí.
Pasado un rato Carla comenzó a tocarme la pija con la intención de que se mepare para chupármela, como era costumbre en los viajes que hacíamos solos,primero me resistí pero me convenció de hacerlo, y empezó a chupármela, lasituación era muy erótica, mi novia chupándome la pija mientras manejaba y mihija “durmiendo” en el asiento trasero, era muy excitante y en minutos acabellenando la boca de Carla de semen.

Los meses pasaron y el morbo con mi hija aumentaba pero yo no me animaba a irmás allá de espiarla y de masturbarme dejando la puerta abierta para que ellapueda verme o cuando tenía sexo con Carla con la esperanza que entrara yparticipara con nosotros.
Un día Carla, luego de una charla con mi hijita, arregló todo para que Lore yyo nos quedemos solos, como era habitual nos tiramos en el sillón a ver unapelícula que nos había recomendado Carla y según ella estaba puesta en el DVD.Cuando la pusimos apareció en la pantalla una porno en la cual una chica muyjoven era penetrada por un hombre mayor mientras se las chupaba a otros dos,quise apurarme para sacarla pero Lore me freno y con vocecita de nena me dijo:
-Dejála papi, ya tengo edad para ver, además nunca vi una.
-Ok , si queres te dejo sola.
-No,no veámosla juntos, que nunca viste una porno?
Nos quedamos viendo y yo estaba bastante nervioso, ella estaba con una remeracortita y un pantalón muy ajustado, en un momento me dice:
-Te molesta si me recuesto en tu regazo?
-No hijita, ponete cómoda.
Con su cabeza sobre mis piernas y eventualmente rozando mi pija y la películacorriendo, no pensé en nada y puse mi mano derecha sobre su cola, ella no seinmutó por lo que baje un poco y le toqué toda la raya, desde su cola hasta suconcha y sentí un calor anormal en su entrepierna, (mi hijita estaba caliente.)
Sin sobresaltarse con mi mano me dijo:
 
-Carla me contó que ustedes están con otros chicos y entre todos la cogen.
-Si, es así.
-Te molestaría que yo hiciera lo mismo?
-No, siempre y cuando vos lo disfrutes como ella. Mientras que le seguíatocando el culito.
-A mí me gustan los hombres grandes sabes?
-Si? Porque? Pregunte con muchísimo morbo
-Porque no acaban enseguida como los jóvenes. Y acto seguido me desprendió labragueta y sacó mi pija y dura.
-Mmmm que linda pija tenés papi, me dejas que te la chupe?
Empezó a lamerme la cabezita y se pasaba la lengua por labios relamiéndose, yvolvía a lamer todo el tronco, bajaba y me chupaba los huevos y se la metíatoda dentro de la boquita, la llenaba de saliva y volvía a comenzar.
-Te gusta cómo te la chupo? Te gusta cómo te chupa la pija tu hijita?
Luego de un rato de chupármela llegó mi turno, le saqué la remera y no teníacorpiño con lo que quedaron frente a mí esas dos hermosas y grandes tetas lascuales chupe y llene de saliva esos pesones rosaditos de adolescente, luego lesaque el pantalón y tenía puesta una tanguita muy chiquita que decidí dejárselapuesta pero que corrí para zambullirme en esa conchita totalmente depilada y mojada,con los embates de mi lengua sentí como acababa y sentir ese flujo en boca mehizo chupársela más enérgicamente, después de un tiempo se puso en cuatro patasy me ofreció esa conchita para que me la cogiera diciéndome:
-Cógeme pá, quiero sentir tu pija dentro mío.
La imagen era maravillosa, mi pija partiendo en dos ese culito hermoso mientrasla tomaba del pelo como la mejor de las putas.
 
-Te gusta mi amor? Te gusta la pija de papi?- le decía mientras entraba y salíade esa hermosa conchita adolescente.
 
-Me encanta papi. Cogeme mas.- me decía entre gemidos
 
Cogimos en varias posiciones hasta que por fin iba a acabar y cuando se lo hicesaber, se arrodillo delante mío y me pidió que se la diera en la boca.
-Dale papi, dame toda la leche en la boquita como haces con Carla, quieroprobarla.
Y así lo hice, acabe como nunca, los chorros de semen saltaron a su boca yalgunos impactaron en su cara y pelo, ella me limpió la pija con su lenguahasta la última gota y cuando ya no tenía más de mi pene se limpió la cara conlos dedos y se los chupó, regalándome un espectáculo maravilloso.

Pasaron los meses y seguíamos cogiendo yo con mi hija, yo con Carla o los tres.
 
Cuando Carla se quedaba en su casa, Lorena traía a sus amigas para cogerlasentre los dos, yo les conseguía hombres para que se las cogieran o les chuparanlas pijas, esas noches terminaban con sus bocas llenas de leche y se pasaban elsemen una a la otra en besos de lengua para que yo viera.
Mi hija me chupaba la pija en el auto cada vez que podía, íbamos a cines pornoy yo le ponía la pija en la boca y en pocos segundos tenía una cola dedegenerados con la intención de llenarle de semen su boquita, teníamos sexo enla calle o en lugares públicos para que otra gente se nos uniera, mi hijita, yano era mi hijita era una puta fiestera.

Para su cumple de 21 ya vivíamos como una pareja y para festejarlo trajo unanena de 18 para que yo la cogiera y recordara lo que fue con ella y me pidióque le consiguiera cuatro hombres mayores para que la cojan a ella.
Esa noche fue mágica, trajo una nenita rubia de tetas grandes pero no como lasde ella, con un culo redondito, con una minifalda blanca y un top rosa.
Yo puse un aviso en una página web y enseguida conseguí cuatro viejosdegenerados con ganas de cogerse una pendeja de 21.
Lore los recibió en tanga y portaligas y enseguida se le fueron al humo, laempezaron a manosear y chupar toda, ella gemía de placer y me miraba y me dabalas gracias, ella se agachó y comenzó a chuparles las pijas, le pegaban con laspijas en la cara y se las hacían tragar enteras, yo mientras tanto sentado ensillón disfrutaba el espectáculo y me pajeaba frenéticamente, luego se puso encuatro y uno a uno pasó cogiéndosela por la concha mientras ella chupa laspijas que se le pusieran adelante, después el que la tenía más grande se acostóy mi hijita se subió para montarlo y los demás fueron pasando por su culomientras que ella chupaba las pijas de quienes quedan afuera. Así estuvieroncasi dos horas hasta que agachada en medio de todos esos penes los cincoempezaron a acabar un su boquita y su cara, tragando la leche para que yo meexcitara aún más, una vez que todos acabaron los sacó rápido del lugar y asícon la cara llena de semen hizo entrar a la pendeja y se sentó a ver cómo me lacojía.
La pendeja tenía una concha muy estrecha y mojada la cual chupe hasta que lahice acabar y un culo muy apretadito que tuve la oportunidad de desvirgar, mela cojí por unos veinte minutos y cuando le dí de tomar mi leche, Lore la besoprofundamente traspasándose la leche y también la sacó rápido del lugar.
Nos quedamos solos, me miró con su cara angelical y abrió su boca mostrándomeque tenía mi semen y lo tragó luego con vos de nenita que recibe un regalo medio las gracias y cogimos toda la noche con la premisa de mi hijita de sacarmehasta la última gota de semen.
 
Así es como mi hija se convirtió en mi puta.
 
Mi hija, El viaje con mi nena
Buscando nuevas experiencias decidimos planificar un viaje hacia elNoroeste del país. Ya con las reservas en los hoteles por dónde íbamos a pasarse nos descompuso la camioneta, con las mini vacaciones ya organizadas,decidimos comprar dos pasajes de micro y emprendimos el viaje. 
Por supuesto esto agregó un condimento más a nuestras experiencias sexuales yaque a Lorena y a mí se nos cruzaban muchas ideas para divertirnos en el viaje.
 
Salimos desde la terminal de Retiro en un micro de doble piso pero pedimosasientos en la parte inferior y por supuesto atrás de todo, salimos una nocheantes de lo planeado y en un horario nocturno previendo que de esa formaviajara menos gente, ya que ambos sabíamos que nos íbamos a portal mal.
 
Desde hace ya un tiempo, con mi hija vivimos como una pareja y nos comportamoscomo tal pero para la mayoría que nos ven y no tienen idea que somos padre ehija, creen que solo se trata de un hombre mayor que sale con pendejas o unapendeja que le gusta vivir de arriba, por lo que en la plataforma esperando quesaliera el micro, nos miraban como bichos raros, cosa que nos divierte mucho.
 
Al subir al micro nos acomodamos y empezamos a observar a quienes nos iban aacompañar, pero la mayoría del pasaje subía e iba directamente al piso dearriba, solo una chica de unos 28/30 años compenetrada en la música de enormesauriculares, se sentó unos asientos más adelante y del lado contrario alnuestro. Al principio nos emocionó mucho que fuera ella la que viajaría cercanuestro ya que era una linda mujer de cabello morocho, largo, con muy lindaspiernas y si bien de poco busto, su vestido dejaba entrever que tenía una lindacola redondita, pero nos dimos cuenta que teníamos pocas posibilidades ya queal subir ni siquiera nos tomo en cuenta y enseguida se acurrucó en el asientose tapó con una pequeña frazadita y se mantuvo atenta a lo que escuchaba y no alo que pasaba en el micro.
 
La gente siguió subiendo y delante de la chica se sentaron dos hombres uno muyjoven y el otro de unos 40 años y adelante nuestro un hombre mayor de unos65/70 años, todos si bien nos vieron no repararon mucho en nosotros y seacomodaron en sus asientos.
 
El micro arrancó y enseguida pusieron una película, miramos la peli mientrascomimos el refrigerio y si bien la película era entretenida, Lore extrajo de sumochila la Notebook y nos pusimos a ver una de las películas porno que habíaguardado en la memoria.
 
Como todas las veces que miramos éstas películas, Lorena me dice cosas al oídoque hacen que la pija se me ponga como una roca, e inmediatamente comenzó atocármela sobre el pantalón.
 
-Te gusta papi como la chica le chupa la pija? Te gustaría que te la chica tela chupe a vos o… te gustaría que te la chupe yo?
 
- Ella es muy linda, pero vos sos real, asique prefiero mil veces que me lachupes vos.
 
- Sos un degeneradito papi.
 
- Sabes que si, pero… te gusta.
 
Continuamos el viaje viendo la película, tacándonos y diciéndonos cosas sucias,pero se ve que nuestra vos fue en aumento ya que en asiento de adelante sesentía cierta incomodidad ya que la persona que estaba allí se movia comotratando de escuchar mejor o de llegar a ver algo de lo que pasaba con mi hija.
 
A esa altura yo estaba ya muy caliente con el manoseo de Lorena a mi verga conlo que me desabroche el pantalón para que la pudiera sacar y hacer con ella loque quisiera, y comencé a tocarle la conchita sobre los shorts, cuando meti mimano allí ya se notaba que Lore tenía la concha mojada ya que se sentía suhumedad, enseguida llevé mis dedos por la pierna hasta llegar a su tanguita,jugué un rato con ella y luego llegué a su conchita, ella se depila toda con locual sus flujos, que a esa altura ya eran muchos, facilitó el trabajo para quepudiera introducirle los dedos para luego poder saborear el sabroso jugo de suconcha.
 
Paso un rato de nuestros juegos, cuando vimos que entre los asientos se asomabaun ojo indiscreto… era el viejo, que, ya no aguantando su calentura no tuvoningún reparo en darse vuelta y mirar lo que hacíamos, esto nos estimuló más yLorena ardió en llamas y ya no solo me masturbó sino que tomo mi verga y empezóa chupármela con el objetivo que nuestro espectador tuviera un buenespectáculo, luego se acercó a mi oído y me dijo:
 
- El abuelito está muy caliente, voy a ayudarlo un ratito y vuelvo, te parecepapi?
 
- Por supuesto hijita, ayuda al abuelito a que este más relajado.
 
Lorena se levantó del asiento y se sentó al lado del viejito y empezó amanosearlo mientras lo besaba, el viejo no daba más y enseguida sacó su pija,era una pija gordita pero aún estaba flácida, Lore lo pajeó y comenzó achupársela, yo desde atrás y ya asomado por sobre los asientos me deleitaba conlo que veía, mire a mi alrededor y pude ver que la chica que estaba en losasientos del otro lado ya no estaba tan concentrada en su Ipod sino que ya sehabía dado cuenta de lo que pasaba a su alrededor y mirando de reojo y tapadacon la frasada se podía ver que se estaba tocando, al ver que yo la había vistodisimuló estar dormida por lo que entendí que solo quería mirar y lejos de ellaestaba prenderse en algún tipo de juego conmigo, por lo que le saqué la vistade encima para permitirle que siga disfrutando a su manera.
 
Volviendo a Lore, ya le había bajado los pantalones al abuelito para realizarleun tratamiento especial para hacer que la pija se le pare y se le ponga duracomo roca, levantándole las piernas al viejito y sentada en el piso delante delasiento comenzó a chuparle el culo (si nunca se lo hicieron les recomiendo quele pidan a sus esposas, novias o hijas que se lo hagan, es indescriptible lasensación de una lengua jugando en su ano) y una vez que lo tuvo bien lubricadocomenzó a introducirle un dedo haciéndole un masaje prostático que hizo que esapija sectagenaria se parara como seguramente hacía años que no lo hacía, elviejo comenzó a gemir de placer mientras Lore le chupaba los huevos, recorríacon su lengua todo el largo de la pija para llegar a la cabeza para ir bajandointroduciéndosela toda en la boca mientras introducía el dedo en su culo, elespectáculo que yo podía ver era único ya que ella levantaba la vista y memiraba con cara de nena traviesa. Cuando el viejo llegó al orgasmo habíajuntado tanta leche que Lorena recibió mucha en la boca pero tuvo que sacar esapija dejando que parte le cayera sobre el rostro y el pelo (igual es un bañoque a ella le encanta recibir) acto seguido se acercó y le dio al viejito unbeso mojado en leche, luego se levantó y mirándome con la cara y boca llena deespeso semen me mostro como lo tragó y se fue al baño a limpiarse, no sin antesde mirar hacia la joven que se masturbó durante todo el espectáculo,mostrándole el maravilloso espectáculo que da una mujer con la cara llena deleche.
Al volver del baño pudo ver que los hombres sentados más adelante habíanescuchado lo que sucedió asientos atrás ya que por sus miradas se veía queestaban muy excitados pero no se habían animado a mirar.
 
Continuamos el viaje y llegamos a un parada y bajamos para comer algo y estirarlas piernas, por supuesto las miradas de éstos hombres nunca dejaron de estarencima nuestro, al subir nuevamente la chica ya no estaba y la tensión era aúnmayor ya que nos habían visto con buena luz, sobre todo a mi hijita.
 
Cuando el micro se puso en marcha, el hombre más grande se sentó cerca nuestroy como Lore estaba del lado del pasillo empezó a entablar una conversación, alprincipio relacionadas con el viaje, la película que pasaron, etc, cosas sinimportancia como para romper el hielo, hasta que la conversación se empezó atornarse más erótica, el hombre comenzó a hacernos preguntas como cual eranuestra relación y tamaña fue su sorpresa cuando le dijimos que éramos padre ehija, al principio no nos creyó pero poco a poco le fuimos demostrando nuestrarelación, cuando se dio cuenta que realmente es así amagó a irse pero luchandocontra su moralidad continuo haciendo preguntas cada vez más picantes, En unmomento Lore le dijo, - Te gustaría saber cómo nos divertimos con mi papi?, conbrillo en los ojos el hombre asintió sin decir palabra, Lore se sentó en suspiernas y comenzó a besarlo, él inmediatamente comenzó a tocarle la concha y elculo y a desabrocharle el pantaloncito, le chupaba las tetas con desesperación,el tipo estaba realmente caliente, cuando la tuvo totalmente desnuda la tiroboca arriba en el asiento comenzó a chuparle la concha que a esa altura yaestaba muy mojada.
 
El otro tipo más joven que viajaba con él se empezó a acercar y con miaprobación se sacó los pantalones y se acomodó para que mi nenita le chupara lapija, cosa que no se hizo esperar, instantes después el mayor se la empezó acoger con fuerza, ella no podía dejar de jadear de placer mientras tenía unaverga clavada en la concha y otra en la boca.
 
El vejete que hacía un rato se había deleitado con Lore se paró y comenzó apajearse cerca de ellos (se ve que todavía tenía leche para dar) al ver esasituación Lore se arrodillo en el estrecho pasillo y empezó a chuparle laspijas a los tres, cosa que es su debilidad.
 
Los tres degenerados tomaban del pelo a mi hijita y hacían que se introduzcalas pijas hasta el fondo generando mucha saliva y después les chupaba loshuevos y le resfregaban las vergas por toda su carita, era una imagen muyexitante por lo que comencé a pajearme mientras disfrutaba del show.
 
La situación continuaba mientras que de la cabina, a la cual se tenía accesodesde el sector donde íbamos nosotros, apareció uno de los choferes y tamañafue su sorpresa al ver la orgia que se llevaba a cabo en su micro, pero lejosde detenerla se arrimó para participar.
 
A Lorenita la sometían entre todos cambiando de posiciones, la pusieronparadita contra los asientos y mientras uno parado sobre un asiento le hacíachupar la pija otro la cogía con fuerza desde atrás haciendo chocar los huevoscontra la conchita de Lore y así fueron pasando todos por la boquita y conchitade mi nena por más de una hora, después llegó el momento de la doblepenetración y así volvieron pasar todos por su colita, ella disfrutaba tantoteniendo todas esas vergas a su disposición que no paraba de acabar llenando deflujo caliente a las pijas, manos y bocas que pasaban por su conchita depilada.
 
Llegó el momento de que ellos acabaran, entonces Lorenita se arrodillo ymientras yo le sostenía la cabeza apoyando mi pija en su frente, empezaron aacabarle en su boquita, el primero fue el más joven descargando unos pocoschorros de semen, luego fue el turno del chofer quién se ve que hacía mucho queestaba de viaje porque su descarga fue descomunal, le llenó la boca y salpicósu carita angelical, ella mantenía el semen de ambos en su boca mientras memiraba, al verla con la leche en la boca se descargó nuevamente el vejetedejando bastante semen espeso y casi al unísono le acabó el más grande de losamigos quién largó unos chorros de leche caliente que terminaron de llenar suboquita y dejaron su cara con una buenas manchas de semen blanco, las cuales selimpió con sus dedos llevando toda esa leche al interior de su boca, la saboreocomo un exquisito manjar y mirándome con carita cómplice se tragó toda la lechecalentita, inmediatamente le introduje mi verga y ella chupó hasta que me sacótoda mi leche como una buena nena obediente.
 
Luego nos vestimos y cada uno se fue a su lugar, dormimos y a la mañanasiguiente llegamos a destino, nos saludamos todos como buenos amigos con lapromesa de encontrarnos nuevamente para una orgía como la vivida.
 
Mi hija, adicta a las pijas
Todo comenzó cuando decidimos empezar las vacaciones, sentados con unmapa enfrente empezaron las propuestas. 
Al no poder decidirnos pensamos que lo mejor, tanto para descansar como parallevar adelante nuestras fantasías, sobre todo las de Lorena.
 
Lorena es mi joven hija, que al día de ésta historia tenía 23 años y desde laseparación con su madre vive conmigo, con todo lo que eso significa, tal locontado en mi anterior post.
 
Mi hijita es una fanática y viciosa de las pijas y yo un fanático de verlachuparlas y éste viaje era la oportunidad perfecta para despuntar el vicio deambos.
 
Salimos con rumbo sur y empezamos por la costa Atlántica, ya que era verano ylas playas estaban llenas de gente, nos registramos en un hotel céntrico,salimos a cenar y a divertirnos un rato y alrededor de las dos de la mañana nosfuimos a bailar, Lorena estaba vestida con una pollerita muy corta y con unaremera atada a la cintura que dejaba ver su delgada pancita con el aro quecolgaba brillando de su ombligo, una botas blancas altas hasta la rodilla detacos muy finos y altos.
 
Todos los pibes se daban vuelta para mirarla y se podía ver como babiaban peroninguno se acercaba ni siquiera para sacarla a bailar, nosotros nosfraneleábamos para insunuar y hacer que se acerquen pero nada, los pibesprefieren estar con sus celulares y hablar por whatssap que cogerse una mina.Pero por suerte en los boliches de verano están los veteranos gateros (nodiscrimino, soy uno de ellos) que están buscando pendejas putitas para coger.
 
Se nos acercó un tipo de unos 45 años y se puso a bailar muy cerca nuestro y noquitaba su mirada lasciva de las tetas, culo y piernas de mi nenita,entendiendo que no se iba a animar si yo estaba allí, le dije a Lore que iba abuscar un trago y la deje sola en la pista, al alejarme el tipo se tiro decabeza y empezó a hablarle al oído, a los pocos minutos ya estaba tocándole elculo e invitándola para que salieran del lugar para estar solos, salieron ycaminaron para la playa, al llegar a un sector donde hay una entrada a unmuelle de pescadores, allí se pararon y Lore comenzó a masajearle la pija porencima del pantalón, yo que los seguí pase por atrás del tipo y me paré cercade ellos para poder mirar pero esto no lo inmutó ya que su calentura era mayor,Lore saco su pija y empezó a chupársela y tragársela toda, cosa que haciadelirar al tipo que no dejaba de decirles cosas sucias a Lore, yo tenía unavisión perfecta y sentía como me apretaba el pantalón por mi erección al vercomo mi hijita se comía esa verga y chupaba con pasión sus huevos, en unmomento el hombre la retiro y comenzó a pajearse frente a su cara y segundosdespués lanzó unos interminables chorros de leche hacia la boquita de Lore quetrató recibirla toda pero gran parte cayó en su cara y pelo.
 
El tipo se fue y yo me acerque mientras Lore con cara de felicidad se limpiabalos restos de semen.
 
Con vos de nenita, como era su costumbre me dijo: - Gracias por éstasvacaciones papi.
 
Pasamos unos días en la playa donde Lore pudo chupar pijas de noche en unpuesto del guarda vida, en el depósito de un supermercado a un repositor y alvendedor de fichas de una casa de videos juegos mientras éste le vendía a lospendejos.
 
Decidimos volver al viaje y nos fuimos a Córdoba (Villa Carlos Paz) ya quesabíamos por experiencia que podíamos tener más oportunidades.
 
Ya en el hotel se sentía una extraña tensión cuando estábamos en las zonascomunes y la gente nos veía, Lore siempre vestía provocativa y en la piletausaba una bikini que no dejaba mucho a la imaginación.
 
En el centro de Carlos Paz tenemos un amigo que tiene un restaurante ydecidimos ir a cenar allí, para visitarlo y porque él conoce lo que hacemos ynos ayuda.
 
Llegamos y José, al vernos nos recibió con un fuerte abrazo y un brillo en losojos que dejaba entrever la felicidad que sentía por la atención que iba arecibir. Nos preparó una mesa especial cerca de donde él estaba para poderconversar mientras controlaba lo que pasaba en el salón.
 
José es un hombre de 67 años y lo conocimos en un viaje que hizo a Bs. As.Luego de cenar fuimos con José hacia el fondo, un depósito detrás de la cocina,Lore luego de un beso de lengua con mucha saliva con José se agachó y empezó achuparle la pija, José tiene una verga corta pero gruesa que hace que Loretenga que abrir su boquita más de la cuenta, al cabo de un rato y con unosronquidos que nacían del centro del pecho José acabó largo abundante lecheespesa dentro la boquita de Lore y luego de mostrárnosla como una obedienteputita se la trago toda.
 
José se fue y cuando nos quedamos solos le empecé a tocar la concha a mi hijitaya que al chupar pijas ella se calienta tanto que acaba ni bien se la toco, medejó los dedos muy mojados los cuales inmediatamente metí en mi boca, y seguidoa eso me agache para saborear la conchita mojada y caliente de mi nenita.
 
Al poco rato entro un muchacho joven, uno de los mozos, el cual sin mediarpalabra se bajo los pantalones y metió su pija en la boca de Lore, se veíanervios y los pocos segundos acabó, y mientras tanto pajeaba a Lore y ellacavaba sin parar, una vez que éste salió vino otro y así pasaron 15 hombres dediferentes edades, comensales que José nos mandaba y éstos dejaban a susesposas, novias o familias en la mesa para que mi hijita se las chupara, todosacabaron en la boca, tetas, cara y pelo de Lore que quedo llena de espeso yblanco semen.
 
Lore se lavo y volvimos a la mesa para el postre, al irnos, José nos dio unosdatos de lugares camino al hotel donde podríamos parar y así lo hicimos, Lore chupópijas en una estación de servicio, en un kiosco de dos vejetes de 70 añosamigos de él y los patovicas de un boliche, por supuesto yo no solo miraba yaque Lore, como ya les conté me chupa la pija en el auto y cada noche.
 
Volvimos a Bs As satisfechos y comenzamos a preparar nuevos viajes para tenermás anécdotas para contar.
 
Mi hija, La fiesta del Futbol
Si la persona con la que vivis te da todo lo que pedís y encima esfanática del futbol no podes pretender nada más, y no solo eso, sino que debesdarle todo lo que te pida. 
Esto es lo que me pasa con mi hijita. A Lorena le encanta el futbol al puntodel fanatismo, y por supuesto, como toda mujer saca el mayor provecho de todasituación, por lo que aprovecha ver un buen partido para calentarse con losfutbolistas, en más de una oportunidad la pude observar tocarse y tener fuertesorgasmos viendo sus jugadores favoritos.
 

Estando yo de viaje me llama y con voz de desesperación me dice que eltelevisor se rompió y por ser fin de semana no consigue service y tampoco hayabierta alguna casa de electrodomésticos como para comprar uno, y encima elpartido de la selección ya esta por empezar, al principio no tuve muchasrespuestas para darle, pero luego me acorde que el vecino de la casa de allado, quién siempre le tuvo muchas ganas de cogerla pero no se animaba, seguroque estaba en casa y seguramente no tendría problemas en verlo con ella, cuandole dije ésto primero dudo pero después aceptó ir. Cortamos con la condición quedespués debía contarme que pasó con lujo de detalles.
 

A mi regreso y después de buen descanso, mientras nos tomábamos un tragocomenzó a contarme lo acontecido esa noche.
 

-//"Llegue a la casa Martín (así se llamaba el vecino) toque timbre ytardo en salir pero cuando me vio se sorprendió bastante, no esperaba verme,sola y menos con esa remera y la pollera que permiten apreciar mis atributos.
 
-Hola vecina, que necesitas?
 
-Me da un poco de vergüenza... pero se me rompió el televisor justo ahora queesta el partido, y vos sabes que para los fanáticos como vos y yo eso esterrible, y como vi que no fuiste a la cancha pensé que me podías ayudar.
 
- Si, como no? pasa que lo vemos juntos.... pero... como no teníamos guita parair a la cancha decidimos verlo en casa por lo que van a venir unos amigos, sino te molesta.
 
- No para nada, todos hinchamos por lo mismo.
 

Pasó un ratito y llegaron cuatro de sus amigos con cervezas y la picada, en esemomento pensé en que bien que se la pasan lo hombres!!! un par de birras y estátodo bien, no como nosotras que somos unas histéricas que siempre buscamossacarle el cuero a la otra.
 
Tamaña fue su sorpresa cuando me vieron sentada en el living, por lo queenseguida dije:
 
- Si les molesta me voy.
 
Martín se apuro y dijo, - No quedate tranqui todos somos del mismo equipo ycuantos más alentemos mejor.
 
Sus amigos asistieron y empezaron a destapar las cervezas y a ofrecerme detomar y comer.
 
Vimos la previa y muy relajados comentando sobre los partidos, los jugadores yalgunas cosas personales, pero la cerveza comenzó a hacer lo suyo y tuve que iral baño.
 
Al volver, algunos de los chicos se habían sacado la remera, y las zapatillas,la verdad estaban muy relajados, martín se desesperaba porque se cubrieran yaque a mi podía caerme mal; nada más lejos de eso, ya que algunos estaban muybien.
 
Le dije a Martín: - Quedate tranquilo ustedes la pasan bien, no les quieroarruinar la noche, sino me voy y listo.
 
Pase hacia el centro del sofá y cuando me senté, la remera se me levantó y sepudo ver uno de mis tatuajes, el de las patitas que baja desde mi cintura yentra en mi bombachita.
 
- Hasta donde irán esas patitas?? comento uno.
 
- Ah solo mi amor lo sabe, como sus novias saben de sus tatuajes prohibidos leconteste, todos rieron, pero con ese comentario abrí una puerta difícil decerrar.
 
- Yo tengo uno prohibido! querés verlo? dijo uno, he inmediatamente se bajo elpantalón y dejo ver un tatuaje de Tweety que decia "he visto un lindogatito", todos reimos pero al mostrar el tatto también dejo ver parte desu pija toda depilada.
 
Martín se enojó y pidió que se calmaran, yo al ver la situación que se habíagenerado lo pare y dije.
 
- Bueno muchachos, vamos a hacerla fácil, con la tensión que hay no vamos apoder el partido, asique la situación es así, de acá a que empiece el partidocojemos y el acaba, acaba, pero en el partido no me toca nadie, ok?
 

Casi sin pestañar, el del tatoo se desnudo y comenzó a chuparme la concha,corriendome la tanguita, al ver la situación los demás no perdieron tiempo yempezaron a chuparme las tetas y a poner sus pijas en mi boca y a pasarmelaspor la cara.
 
Cuando el que me chupaba la conchita se alejó para desvertirse, Martín ocupó sulugar y casi sin preguntar me empezó a cojer, tiene una pija venosa que mehacía delirar.
 
pasaron todos por mi conchita y luego llegó la hora de la doble penetraciónmientras chupaba cuanta pija me ponían delante, todos pasaron por mi cola,concha y boca.
 
Esa situación se mantuvo por un rato hasta que el primero acabo en mi boca ylos demás al ver escapar el semen de mis labios empezaron a eyacular sobre mirostro y boca.
 
aún saboreando la leche de los cuatro amigos de Martín, éste me empezó a cogercon mucha ternura y la tensión subió tanto que al momento de acabarme dentro mijugosa y depilada concha, algunos de los machos ya recuperados volvieron aacabar y la leche saltó hacia mi rostro, cabeza y tetas.
 

Con un fuerte olor en el ambiente a semen y flujo nos limpiamos y como buenosamigos nos quedamos viendo el partido".
 

Al escuchar la historia yo ya no podía más de la calentura, por lo que tome lacabezita de mi hijita y la lleve hacia mi pija, cosa que ella aceptó contenta yme la chupó hasta llenarle su boquita de espesa leche, una vez que trago misemen me dijo que quería que le armara una fiestita con los jugadores de suclub favorito, cosa que no dude en empezar a organizar.... pero eso es otrahistoria.
 

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