Culeando a Mary, haciendo cornudo a su esposo (1a parte)

Esta historia es real, sucedió a penas hace un par de semanas cuando me volví a encontrar a Mary, una excompañera de un trabajo que tuve en una cafetería mientras estudiaba la universidad. Por esa época ella a penas tenía 17 años y yo tenía 23, ella era muy inocente pero algunas veces nos manoseabamos en los vestidores o en los pasillos de la cafetería sin llegar nunca más allá porque ella siempre ponía freno ante mí, había otro compañero con quien compartía las caricias de Mary, por motivos de mi carrera tuve que dejar el trabajo y pasaron 3 años para que me volviera a reencontrar con ella.

Nos volvimos a encontrar casualmente cuando en un supermercado, intercambiamos teléfonos y por whatsapp nos pusimos al corriente de nuestras vidas. Me contó que ya estaba casada y tenía un hijo de meses con él. Poco a poco intentaba saber si ella tenía algún interés en mí o sólo quería platicar en forma amistosa, con cada mensaje notaba que tenía el interés porque nos viéramos, así que me decidí a invitarla a salir, le pregunté a donde quería ir y me dijo que a donde yo decidiera estaría bien, elegí un lugar para tomar una cerveza y poder platicar tranquilamente.

Mary mide aproximadamente 165, delgada, de tez morena, con unos pechos pequeños pero bien firmes, lo que más resaltaba de ella era su culo mediado, bien redondo y carnoso. El día que la vi llevaba un shor pequeño que dejaba ver muy bien ese culito que tanto me gustaba y una blusa pequeña de tirantes, iba muy puta a decir verdad, había dejado al hijo con su marido y se había salido de la casa diciendo que iba a salir con una amiga; "maldita zorra, seguro el cabrón de su marido la mata si sabe que salió con un hombre que antes se la manoseaba", pensé. La salude y pasamos a sentarnos en el lugar, pedimos un par de cervezas y algo para comer, comenzamos platicando de todo, hasta que llegamos al tema de su hijo y su marido.

- ¿y que cómo va la vida de casada, seguro eres una mujer muy feliz, no? - Le pregunté esperando una respuesta tipica de las parejas casadas
- Pues no me va tan mal, aunque últimamente he tenido muchos problemas con el estúpido de mi marido y tener un hijo a está edad es una verdadera molestia- me respondió, pude notar su enfado y pensé que habia encontrado el tema perfecto para al menos salir con una mamada de ella ese día

- Enserio, ¿qué la tiene muy corta y no te satisface? Recuerdo que eras muy caliente cuando trabajabamos juntos- le dije riendo, me echó una mirada que pensé me metería una bofetada y se iría de inmediato
- pues tienes un poco de razón, el muy pendejo es el típico cabrón que te la mete dos veces y se viene, siempre me deja mojada, a veces ni siquiera soy capas de lubricar... Es un asco, y lo peor es de que le di un hijo-
con cada palabra podía notar el rencor que le tenía a su marido y lo insatisfecha que estaba, así que decidí lanzarme por todo, de todos modos si se enojaba no me importaba tanto su amistad, yo sabía que por lo único que la había vuelto a ver era por suerte y que quería sacar algo de sexo con ella.


- Pues si estuvieras conmigo te haría venir como una pequeña cerda, una y otra vez- le dije mientras que con las manos imitaba el tamaño de mi verga
-Eres un completo hijo de puta, ¿cómo crees que le voy hacer algo así a mi marido? Lo amo a pesar de todo y tenemos un hijo.

"Maldita vieja calienta vergas" pensé, me estaba tirando el discurso de la esposa abnegada y fiel, de mucha flojera.
- Bueno, si nunca quieres tener un orgasmo allá tú, al final la única que se va a quedar insatisfecha vas a hacer tú y siempre vas a pensar que para lo único que hay que coger es para tener hijos, las mismas ideas que nuestros padres- se quedó callada y pensativa... la tenía en mis manos y debía saber muy bien que iba a seguir si quería que en 20 minutos estuvieramos cogiendo en un motel

- Mira, yo no te estoy pidiendo que dejes a tu marido por una cogida conmigo, ni que abandones a tu hijo, si quieres jugar a la esposa fiel y que aguanta todo, es tu problema no el mio, lo único que te estoy ofreciendo es pasar una tarde de sexo y ya, si no quieres volver a verme después lo entenderé y si decides volver a buscarme me gustará más, así que voy a pedir la cuenta y si te quieres ir conmigo a coger a un motel te espero en el carro - me levanté y fui a la caja a pagar, me di la media vuelta y Mary ya no estaba sentada en la mesa, lo único que pensé es que se habría ido a seguir su papel de esposa mojigata, salí del lugar y fui a donde estaba estacionado mi carro, al ver que Mary estaba apoyada sobre la puerta del conductor

- Que bueno que decidiste el placer a la vida de pendeja que aguanta todo, súbete que hoy te voy a hacer mujer- Mary sólo me dirigió una pequeña sonrisa, le dio la vuelta al carro y se subió. Manejé hasta un motel en la carretera, pedí la habitación y pasamos, ella no decía ni una palabra ni hacía ningún movimiento, llegamos a la habitación y por fin me habló

- Sé que lo que voy a hacer está mal, así que quiero que me cojas como nunca te has cogido a otra vieja, quiero que me dejes bien llena de tu caldo para que el pendejo de mi marido sepa que hoy me cogieron como a una verdadera hembra-
No podía creer lo que estaba escuchando, lo decía con tanto coraje, de coraje había sacado a la puta que Mary llevaba dentro, la mojigata que había conocido en el trabajo se había transformado y no la defraudaría.

- Hoy vas a saber lo que es un hombre, te voy a romper toda y te vas a llevar una buena dotación de mis mecos dentro de ti, con suerte y te dejo preñada para que el pendejo de tu marido se haga cargo de mi hijo- Lo último lo decía enserio, no habíamos comprado condones

Como locos nos comenzamos a besar, ella lo hacía con tanta furia que me rompió el labio, sentí el sabor de mi sangre, la separé de mi y lo único que hice fue aventar contra la cama boca abajo, parando ese culito que aun conservaba toda su ropa,

- Así que quieres dejar el papel de mojigata y quieres jugar rudo, eh! pues ahora vas a aprender como se coge rudo, putita - estaba fuera de mi, esa putita habia logrado sacar mi lado más hijo de puta y no la dejaría ir hasta hacerla venir como a una perrita en celo.

Como pude le baje los putishorts que llevaba encontrándome con una tanga de hilo, tenía ante mi ese culito que sabía virgen, pero no la quería espantar tan rápido tratando de entrar por su ano, así que me arrodillé, le corrí su hijo a un lado y comencé a mamar esa concha con algunos pelitos que le llegaban hasta su ano. Me quedé pegado ahí bebiendo todos sus jugos que sacaba, lamía desde su clítoris hasta su ano introducía mi lengua por cada uno de sus orificios, cada lamida era más intensa que la anterior, solo pordía sostenerla de sus caderas para que mi lengua entrara lo más profundo, ella no se guardaba nada dentro, comenzaba a gemir yendo desde unos suspiros hasta comenzar a dejar sacar algunos gritos, la tuve así hasta que dejó escapar una cantidad increible de su flujo, la tenía a punto a la pendeja.

-Ahora sí vas a probar a un hombre, putita, no al verga chica de tu esposo -
-Dámelo ya, me tienes como una perra, déjame toda tu leche dentro de mi-
Froté mi verga contra su conchita para lubricarla aunque con todo el flujo de Mary era más que suficiente habia hecho un buen trabajo oral. Sin piedad se la dejé ir hasta lo más profundo teniéndola en 4, comencé a bombearla con una furia sin igual, ella gemía como una verdadera poseída y de vez en cuando me puteaba
-¡SÍ MÉTELA, DEJA TODO TU SEMEN DENTRO DE TU NUEVA PERRA! ¡QUIERO SER TU PUTA!¡QUIERO DEJARTE SECO, PENDEJO! ¡ERES UN MALDITO SEMENTAL, HIJO DE PERRA!
-Así que la mojigata por fin esta disfrutando y quiere convertirse en una puta... Todas mis putas me dan el culo, te lo advierto -
- HOY SOY TUYA, RÓMPEME TODA, TODOS MIS HUECOS SON TUYOS-

Con todas esas palabras sabía que Mary estaba disfrutando y no iba a dejarla ir sin haberle llenado todos sus huecos de mi carne y mi leche. Comencé a meterle un dedo por el culo, quería dilatarla aunque no me importaba metersela sin nada de lubricante, se lo merecía por ser tan pendeja y seguir con un pendejo como su esposo. Ella acepto uno, dos, tres de mis dedos mientras la seguía bombeando por el coño, ambos habíamos perdido la cuenta de cuantas veces se había venido, lo único que sabía yo era que mis huevos estaban mojados por sus fluidos.

Así estuvimos por más de 15 minutos, ya no podía aguantar, se me endureció de una forma increible mi miembro y mis bolas se contrajeron, sabía que me iba a correr en cualquier momento... Sin decirle nada me descargué dentro de su vagina, con unas últimas embestidas profundas quería dejarle todo mi semen dentro de ella. Me derrumbe sobre su espalda, la tome del cabello y le dije: "Vamos puta, limpiame la verga que quiero seguirte cogiendo"

Me tiré a un costado de la cama y ella muy obediente comenzó a recorrer mi verga flacida con su lengua, nada espectacular pero lo suficiente como para ponerme duro nuevamente.
-Qué rico sabe tu semen- me dijo
-Abre bien la boca pendeja- Fue lo único que le dije antes de tomar su cabeza con ambas manos y comenzar a cogerle la boca de forma bestial, lo último que hice fue dejarme mi verga hasta la garganta por unos segundos hasta sentir que estaba teniendo arcadas, la solté, se tiró al piso y comenzó a toser y escupir mucha saliva...
-Putita, debes de aprender a hacer garganta profunda, mira como te pones con un pene de verdad dentro de tu boca jajajaja!!!- Me estaba burlando de ella mientras la veía como escupía sobre la alfombra sucia del hotel.

Sólo podía verla ahí, de rodillas escupiendo saliva, me acerque, me acomodé detrás de ella, ensalive dos de mis dedos y sin delicadeza se los metí por el culo, ella sólo alcanzó a dar un ligero grito, metía y sacaba mis dedos con rapidez; me escupí la otra mano y comencé a pasarla sobre la cabeza de mi miembro, saqué mis dedos de Mary, ya habían hecho su trabajo, apunte mi verga a su ano de color marrón listo para ser usado por primera vez...

Continuará...

3 comentarios - Culeando a Mary, haciendo cornudo a su esposo (1a parte)

GabrielOs221 +1
Espero que la siguiente parte tenga fotos dejo puntos