Romina, mi perra cap 46 a 49

Romina y la trampa del deseo 19

Habíamos vuelto de las vacaciones y entramos con la llegada de marzo en un mes de bastante calma, no tuvimos ninguna visita de nadie, la nena empezó el jardín. Estabamos como siempre que pasaba algo en el período de asimilar las cosas que habían pasado.
Un sábado que estabamos en casa tomando mate y la nena estaba en casa de sus abuelos maternos, Romi se acercó mirándome, metió la mano en mi malla agarrándome la pija, mientras empezaba a juguetear con ella dijo:
- Seguí tomando las pastillas anticonceptivas cuando estuvimos en la costa..., pero a vos te dije que no..., y no hiciste nada por evitar que tu jefe me llenara... - empezó a pajearme lentamente- Tenés ganas de verme llena de la leche de otro...?, de verdad te calienta...? - mi pija estaba bien dura pero no me animaba a hablar de nada me parecía muy fuerte el tema.- Porque algún día me voy a cansar..., y me voy a hacer llenar..., y me parece que después del permiso que diste..., nuestro próximo hijo no se va a parecer mucho a vos... - me pajeo más fuerte hasta que me hizo acabar dentro de la malla, saco la mano sucia de mi semen y me la paso por la cara - Anda a lavarte puerquita...
Pasaron casi otros quince días más en los que mantuvimos una vida bastante normal, rutina doméstica que nos empezaba a resultar cómoda, mi jefe no me había comentado nada sobre las vacaciones. Un miércoles a la tarde estaba trabajando en la oficina y me pasaron un llamado, el jefe se había retirado en la mañana temprano ese día.
- Hola?
- Que haces
- Jefe, que necesita?.
- Sabes quien esta culo arriba en tu cama con mi pija bien enterrada...?, Escucha... - escuche los comentarios de Romi- Si hacemelo bien..., bombeame...., que linda la siento en el culito..., ¿estás escuchando cornudo pajero...? - pregunto Romi, se escucho de nuevo la voz del jefe- Venite para acá quiero que la encuentres recién llenita por la cola..., así disfrutas un poco vos también - dijo y enseguida corto.
Cuando llegue a casa Romi estaba desnudita en la cama acostada de costado su culo mirando hacia la puerta, me acerque lentamente.
- Hola amor...?, el jefe aguanto lo más que pudo..., quería que me encotraras recién llenita por atrás..., acercate a mirar... - me arrodille al costado de la cama restos de semen había en la puerta de su culito.- Limpialo con la lenguita, hará cinco minutos que se fue el jefe..., dale..., hace tu trabajo..., puerquita..., - empecé a pasarle la lengua despacio- Si..., limpiame bien..., despacio..., mete el dedito así sentís como esta de calentito y lleno..., le metí el dedo en el culo y sentí como se cerraba el esfínter alrededor de mi dedo y sentí lo caliente que estaba su culito.
- Que ganas de cogértelo....!!!
- Si pero ya te dije estos días..., no se si será por la edad o que pero no estás como antes..., si te vaciás muy seguido tu interés decae..., así que guarda tu lechita para otro momento que yo decida..., juga un ratito más con tu lenguita..., en un ratito tenés que ir a buscar a la nena.
Me quede un rato más chupándola hasta que se dio vuelta y me beso.
- Que gusto ácido tenes en la boca... - dijo sonriendo- anda a buscar a la nena puerquita....
El viernes volví a recibir otro llamado del jefe me decía que la estaba cogiendo y que quería que fuera para casa, que le avisara por teléfono cuando estuviera a diez minutos de casa así sabía mejor cuando acabar y no tenía que andar haciendo cálculos dijo riéndose. Le avise cuando estaba por llegar. Cuando entre al cuarto Romi estaba acostada boca arriba, tenía los pechos embarrados de semen.
- Me cogió bien cogida la conchita... y decidió dejarte un regalito a la vista..., ponete un forro y vení a cogerme... pero igual no acabes...
- Es que estoy muy caliente hace mucho que no me dejas acabar.
- Entonces no..., limpiame nada más... - me acosté sobre ella y empece a chuparle los pechos, Romi gemía todo el tiempo.
- Si..., limpiame bien... puerquita..., si te portas bien esta noche te voy a aliviar un poquito..., apurate que tenés que ir a buscar a la nena...
En la noche Romi se vistió con un vestido de esos transparentes que tiene con una tanguita y nada más, estaba deliciosa cuando la nena se durmió nos quedamos en el living escuchando música, bailamos suavemente besándonos y acariciándonos. Yo no aguantaba más de la calentura. Fuimos al cuarto y Romi me pidió que la desnudara y le diera un buen masaje, se acostó culo arriba y así lo hice mi calentura era cada vez mayor. Después me indico que me desnudara y me acostara boca arriba, mi pija daba saltitos todo el tiempo estaba muy cerca de llegar. Romi tomo mi pija con su manito derecha y me empezó a acariciar suavecito.
- Que calentito estás..., viste que bien me atendés cuando estás caliente..., me satisfaces cualquier capricho... - me soltó la pija y se quedo a la altura de mi miembro mirándome- si te pido que llames a tu papa y le preguntes cuando va a venir a visitarnos seguro lo haces... - mi pija dio un saltito, Romi se rió- me cogió una vez solita..., y apurado..., llamalo a ver cuando nos visita... - tome el teléfono y llame a casa de mis padres, me atendió mi mamá estaba contentisima de escucharme, me pasó con mi padre.
- Papá Romi quiere saber cuando nos vas a venir a visitar - Romi agarró mi pija y empezó a pajearme violentamente-
- Cuando vos quieras, que te parece mañana en la noche, lo único que tu mamá justo sale con unas amigas, voy a ir solo... - mi pija empezó a escupir montones de leche Romi se mordía el labio inferior y me apretaba la pija sintiendo el paso de la leche mientras la apuntaba hacia mi vientre, corte el teléfono. Romi se acercó a besarme.
- Viste que atento que estás cuando estás caliente..., Cuando viene nuestro papi...?
- Mañana, pero viene solo, mi mamá no puede venir. - Romi me miro sonriente.
- Entonces mañana es fiesta..., te amo..., puerquita pajera...

Romina y la trampa del deseo 20

Toda la tarde del sábado Romi estaba más nerviosa que de costumbre, en un momento me acerque hasta el baño y estaba terminando de depilarse, estaba hermosa. Me molestaba bastante la situación, obviamente me calentaba pero también me producía mucho dolor.
La nena iba a estar en casa de sus primos, hacía mucho que no se veían y estaba contentísima. Cerca de las 18 hs, la vinieron a buscar. Romi me empezó a mostrar conjuntitos de ropa interior.
- Cual le gustará más a tu papi...? - y se paseaba mostrándome conjuntitos, finalmente eligió uno rojo que se puso con el vestido transparente del mismo color, obviamente deshecho el corpiño, se puso unos aros redondos que le quedaban hermosos.
Cuando estaba terminando de arreglarse me miró a mi que ya estaba vestido.
- La tanga que me saque esta tirada en el baño..., ponetela, puerca... - me iba a ir hacia el cuarto y me ordeno que lo hiciera delante de ella.- Que linda te queda..., ese culito lo tenemos que inaugurar, no...? - me miró sonriendo y me indico que saliera que se tenía que pintar.
Cerca de las 21 hs llego mi padre, fui a abrirle, mientras Romi estaba en la cocina terminando con la mesa. Me estrecho la mano, traía una botella de champan que me entrego y un ramo de rosas rojas en la otra, miro por sobre mi hombro buscándola a Romi, que justo salía de la cocina.
- Buenas noches suegrito..., que gusto verlo...
- El gusto es mío, se te ve preciosa - dijo acercándose a darle las flores al tiempo que le daba un beso en cada mejilla y la tomaba de la cintura.- estás hecha una reina.
- Bueno gracias..., usted se ve muy elegante también..., querido porque no servís el champan..., así brindamos - dijo Romi mientras se iba a buscar un florero y ponía las flores sobre la mesa del comedor. Volví con tres copas servidas en una bandeja mi padre y Romi tomaron sus copas yo tome la mía apoyando la bandeja a un costado.
- Por esta noche - brindó mi padre y los tres levantamos las copas brindando con él.
- Me gustaría aclarar que paso la noche de fin de año..., me parece que habíamos tomado demasiado y nos descontrolamos... - dijo Romi con voz sensual, mi padre la tomo de la cintura y atrayéndola hacia el la beso mientras le acariciaba la espalda, cuando se separaron tomo la copa de Romi me la dio junto con la de él y empezo a besarla de nueva mientras le acariciaba el culo sobre el vestido.
- Esta noche te voy a gozar con tiempo, sin ningún apuro. Este culo de puta deliciosa que tenes.
- No me hable así... - dijo Romi mientras lo empujaba con sus manos en el pecho. Mi padre la tomo de las manos que puso junto a sus muslos y volvió a besarla, Romi contestaba el beso. mi padre le llevo una mano hacia atrás y con la suya la apretó del culo hacia él apoyándola bien contra su pija
- Te hablo como te gusta, sos una perrita viciosa - la tomó de la mano y la hizo arrodillar- camina en cuatro patitas y move la cola. - Romi empezó a caminar en cuatro patas por el living- Move bien el culito..., lento..., con cadencia..., veni hacia mi ahora..., - Romi fue caminando despacio mi padre la agarró suave del pelo y le puso la cara frente a su miembro.- Mi amiguito te espera, hacele un buen trabajo. - Romi le bajo el cierre, libero la pija del encierro y empezó a chuparla. estuvo un ratito en la tarea hasta que mi padre la ayudo a levantarse.
- Esto era solo para que no tengamos que fingir nada, ya todos sabemos cual es la situación. - la volvió a besar y se acariciaron largo tiempo
Después de un rato pasamos a la cocina a cenar, mi padre le corrió la silla para que se sentara y se sentó a su lado.
- Vos vas a ser nuestro mozo hoy - me dijo mi padre- servinos la comida. - Tomo la mano de Romi y la puso sobre su miembro la beso y le acariciaba los pechos sobre el vestido a Romi se la veía cada vez más caliente. La cena transcurrió bastante normal, parecían una parejita en un restaurante y yo el mozo que los atendía. Después de la cena salieron hacia el living, mi padre se sentó en el sillón y Romi puso algo de música suave mi padre la atrajo hacia el y la sentó en su regazo acariciándola y besándola, con su mano derecha empezó a jugar con la conchita de Romi levantándole el vestido y corriendo la tanga a un lado dedeandola, luego solo la acomodo sobre el sillón y bajando su cierre la clavo sobre el sillón.
- Te gusta mirar como se cogen a tu mujer hijito...? - obviamente no conteste. Romi gemía bien fuerte. Mi padre lo hacía con mucho detenimiento, la besaba y le chupaba las tetas mientras la bombeaba.
- Que rico..., me gusta mucho..., te puedo pedir un favor...?
- lo que quieras perrita mía.
- Mira..., tu hijito siempre que me quiere hacer el culito..., se calienta mucho..., a veces no me la termina de meter y ya acabo..., no me harías el favor... - Dijo Romi con demasiada voz de puta, mi corazón me parecía que iba a explotar, mi padre se salió se arriba de ella, Romi se puso de pie, se saco el vestido mirándome y se arrodillo al borde del sillón con los zapatos y la tanga puesta, lo miro sobre su hombro- hacemelo lento y suave..., que dure mucho..., me encanta sentir la lechita también... cuando explota una pija... - Mi padre no perdió más tiempo se acomodó detrás de ella y se entretuvo primero jugando con sus deditos en el culo de Romi después se dedico a chuparlo mientras seguía jugando con sus dedos, finalmente se acomodó y empezo a hacerlo lentamente hasta que se la metió entera.
- La sentís bien ahí?
- Si..., que rico..., dame ahora..., bombeame bien... hacelo por tu hijo..., que le gusta mirarme con una pija en el culo... - mi padre me miro sonriendo y empezó su bombeo lento y muy profundo, luego de un rato se detuvo y se quedo apoyado sobre la espalda de Romi.
- Que rica que sos pendeja, no me voy a cansar de cogerte nunca, sabes que puedo seguir un montón todavía te lo aguantas?
- Si me duele pero me gusta... y más si el pajero mira..., sabes que...?
- no, contame
- Cuando me llenan de leche sabes que hace tu hijo...?
- Se pajea...?
- No me limpia con la lengua...., y es muy hábil la puerquita... Puerca..., mostrale a tu papá que linda que estás... - agache la cabeza y me baje los pantalones, escuche la risa de mi padre, los dos me miraban. Girate y mostranos que linda te queda..., dijo Romi
- Que puta sos, no me equivoque para nada, eh?
- No, soy muy puta..., pero necesito alguien que me dome...
- Me parece que encontraste a tu domador, le decía mientras había empezado a cogerla bien duro de nuevo.
- Me duele..., para un poquito..., me duele..., me haces doler... bruto...., - decía Romi con voz de puta.
- Te dije que puedo aguantar mucho. Querés que pare un poquito?
- Por favor...
- Bueno cuando tenga ganas paro. - empezó a bombearla bien duro de nuevo se quedo un rato quieto y luego se salió de a poquito le dio un beso a Romi y se sentó en el sillón. Romi se fue un ratito hacia el baño. Cuando volvía del baño mi padre la hizo arrodillar entre sus piernas
- Límpiamela bien así te cojo la conchita. - me indico acercarme y tomo un baso y bebió mientras Romi lo limpiaba. se levantaron y fueron a la cama. mi padre se acostó en ella y Romi empezó a montarlo giro la cabeza a mirarme
- No te da vergüenza..., puerca..., te gusta ver como me cogen..., queres ver como me llenan el culo de leche... y después me lo limpias...?, pedile a tu papi... puerca...
Mi padre la acomodo a Romi sobre la cama, le puso una almohada abajo del pubis y volvió al ataque, de a ratos paraba y se quedaba apoyado sobre Romi, en un momento empezo a bombearla mas duro Romi gritaba y le pedía que se lo llenara de leche. Mi padre la clavo cuando acabo y se quedo apoyado en su espalda hasta que su pija salió sola, luego se acostó boca arriba al costado de Romi. Sin que Romi me dijera nada me fui a su culo a chupárselo. Romi giro la cara y se besaba con mi padre.
- Limpialo bien puerca..., no podes ser tan puerca.... sucia...
Finalmente me indicaron que me fuera a dormir al living, no volvieron a coger en la noche en la mañana Romi solo le chupo la pija hasta que mi padre le lleno la boca, me entere porque vino a despertarme con un beso y sentí el caudal de leche que pasaba a mi boca mientras escuchaba la risa de mi padre desde el cuarto.

Romina y la trampa del deseo 21

El tiempo siguió pasando, la visita de mi padre por distintas circunstancias no se volvió a repetir, salíamos seguido durante un tiempo con el jefe, yo era el mirón personal de ellos y los tres disfrutábamos del juego a nuestra manera. Romi solía mantenerme más caliente últimamente porque se había dado cuenta que mi actitud era mucho más atenta y condescendiente. Una noche después de que habíamos estado con el jefe, Romi me dijo que me iba a dejar que la cogiera. Que me apurara en el baño que me esperaba en la cama. Me hizo poner un forro y estaba sobre ella montándola, me ordeno quedarme quieto y con el dedo índice de su mano derecha empezó a jugar en mi culito. Me dijo:
- Me parece que tenes una deuda conmigo desde las vacaciones..., no...? –se refería a cuando me había dejado presenciar como el jefe se garchaba a su madre.
- Si, es verdad. –Me miro con cara de perversa.
- Quiero ver como te cogen..., - me quede bien duro sobre ella, no me interesaba en lo más mínimo la idea.
- Vos sabes que a mi no me dan ganas de probar.
- Pero a mi si..., y si queres seguir jugando...
- No estoy dispuesto. – me hizo salir de encima de ella y me acosté a su lado.
- Tengo muchas ganas de verte cogida por un macho y pense en Oscar, te acordas del chabon de seguridad, por volver a cogerme a mi es capaz de cualquier cosa. –se puso de costado y empezó a jugar con mi pija.- quiero verte penetrado, y que sientas la pija de Oscar llenándote el culo de leche y después nos veas teniendo sexo. – por primera vez la situación no me parecía caliente Romi lo noto y se dio la vuelta y se fue a dormir, por una semana no volvimos a hablar del tema.
Llego el fin de semana y Romi me informó que iba a salir sola con el jefe, me pase toda la noche dando vueltas en la cama hasta que me quede dormido, cuando me desperté sentí la mano de Romi que me guiaba la mía a su culito. Me hizo meter el dedo y sentí como estaba caliente, su esfínter me apretaba el dedo y sentía restos de semen dentro de el.
- Quedo bien cogido, ahora dormite tranquilo pajero. Por ahora no vas a tener más que esto así que acostumbrate, a tocarme u olerme recién cogida y no te permito pajearte, me sacó la mano y se quedo dormida al instante. La desperté para almorzar y almorzamos con la nena como si todo marchara sobre ruedas, Romi me daba tiernos besos, me acariciaba y jugueteaba. A la tarde se iba con la nena donde los padres y me quede solo en casa, esperaba que Romi se cansara de este juego y recapacitara.
Pasaron dos semanas más Romi no me daba bola, sexualmente hablando, ni juegos ni nada, el fin de semana siguiente no salió pero el otro si. Otra vez se repitió la situación de su llegada casi de mañana, me volvió a tomar la mano y me hizo sentir la leche en su concha y en su culo, me beso y tenía gusto a semen antes de dormirse me dijo.
Que lastima que te lo perdiste..., repetí doblete con el chico de limpieza..., - puso más voz de puta y dijo: me hicieron de todo..., son unos viciosos degenerados y sonriéndome se dio la vuelta y se fue a dormir. Yo hacía un montón que no garchaba y empezaba a desesperar con la situación. Me sentía bastante molesto con la situación, decidí que hablaría con Romi después de comer. La nena estaba cansada y se fue a dormir la siesta, Romi también se acostó, se puso solo una tanguita y se quedo con el culito para mi lado. Me dijo:
Vení a la cama con migo, te voy a dejar que me apoyes la pija, pero ni se te ocurra moverte para acabar, si acabas solo esta bien, sino aguántate. Y se quedo profundamente dormida. Yo trataba de moverme sin que se diera cuenta y era tal la calentura que acabe así apoyado en la que era mi esposa y hacía rato que no cogía. Me sentí muy mal. Cuando Romi se despertó me dijo que era un degeneradito y se fue a bañar. Le dije que teníamos que hablar, prepare el mate y después del baño fuimos a la cocina a charlar.
- Mira amor, me parece que no podemos seguir así, no me hace gracia esta situación.
- Y bueno..., resolvela de una vez...., - me miro fijo a los ojos y dijo.- lo llamo a Oscar y seguimos jugando normalmente...
- Pero no entendes que no quiero... –me interrumpió
- Yo no estoy para entenderte..., buscate un psicólogo... yo estoy para gozarte y humillarte..., ¿te olvidaste....
- Pero es demasiado, proteste.
- Te doy tiempo hasta el martes..., después se acabo el juego..., no me vas a ver más con nadie..., si tenes ganas... el martes cuando vengas del trabajo me pedís que arregle con Oscar para el fin de semana y sino acostumbrate a ser cornudo en ausencia. –se puso de pie y salió de la cocina. Los días siguientes fueron una revolución interna profunda para mi, el martes volví del trabajo, entre la bese a la nena que jugaba en el comedor y fui a la cocina, Romi me acerco un mate y me miro. Se hizo un largo silencio.
- Llamalo a Oscar..., le dije. –Romi sonrió y dijo, tardaste demasiado para resolver, pero valió la pena esperar, después de comer yo acuesto a la nena y vos te vas a la cama a acostarte ponete una tanga de las mías y acostate culo arriba y me esperas. Después de la cena así lo hicimos. Romi entró al cuarto y se acerco despacito a la cama, se acostó arriba mío y empezó a jugar con su dedo medio en mi culo, corriendo el tanga a un costado. Me dijo al oído.
- Lo llame a Oscar..., el sábado le parece bien..., como te lo imaginas...?, yo ya lo veo entrando bien despacio en tu culo, - me puso de costado, mi pija estaba bien dura otra vez.- te veo en cuatro en la cama y Oscar cogiéndote a fondo el culo mientras me chupas la concha, no aguanto las ganas de que sea sábado..., me empezó a pajear mas fuerte y acabe como un cerdo manchando toda la cama, me ordeno que limpiara y se fue a dormir.

Romina y la trampa del deseo 22

Desde el Martes al Viernes Romi me provocaba todo el tiempo con el tema de lo que nos esperaba el sábado, que iba a disfrutar como toda una reina, me gastaba cada vez que teníamos sexo, me deliraba sin parar. El viernes cuando volví del trabajo me aseguro que había pensado que no estaba del todo presentable, la nena estaba jugando en el living y Romi me mando a mi al baño, me hizo desnudar y me dijo que me iba a depilar todo, me afeito lentamente por delante y por detrás, no me dejo ni un solo pelo por ningún lado. A la noche en la cama me puso culo arriba y se entretuvo jugando con sus dedos por todo mi culo pasándome aceite y metiendo sus dedos aceitados en mi culito. La tarde del sábado Romi se fue a llevar a la nena a la casa de sus padres y yo me fui a jugar al fútbol, cuando volví Romi estaba vestida con el vestido rojo transparente, tanguita y sin sujetador, me beso sonriente y victoriosa. Me hizo vestir con mi ropa normal, pero con una tanguita cola less. Cuando sonó el timbre me mando a abrir a mi, cuando abrí la puerta ahí estaba Oscar, estaba mucho más delgado pero se lo veía igual de fuerte y poderoso, me apretó la mano sonriendo. Romi vino al encuentro de él se miraron y se besaron comiéndose la boca como desesperados.
- Que lindo que estas, dijo Romi
- Y vos estas igual de partible que siempre, te voy a destruir.
Volvieron a abrazarse y besarse mientras sé metían mano como desesperados decidieron pedir unas pizzas antes que nada, cenamos como si fuéramos un trío de amigos, no hubo ningún comentario sobre lo que pasaría después, ni nada Ni siquiera se tocaron en la comida, finalizada la cena Romi dijo que era hora de pasar al living, puso música suave y empezó a bailar con Oscar, se apretaron un rato largo, luego me hizo seña de acercarme me hizo arrodillar delante de ella y levantándose el vestido me hizo chuparla por sobre la tanga mientras seguía apretando con Oscar, su mano libero el miembro de este que estaba bien gordo y cabezón como siempre y tenía una dureza increíble, me tomo de la cabeza y me giro hacia el quedando mi boca justo delante del miembro, en ese momento se separaron un instante, al levantar mi cabeza vi que los dos me miraban, Romi hablo.
- Que lo disfrutes, dijo y me empujo la cabeza hacia él, lo empece a chupar tímidamente, tenía un gusto fuerte pero la situación me superaba mientras Romi y Oscar volvieron a besarse y tocarse. Romi me indico parar y sacarme toda la ropa quedando solo con la tanga, me pidió que me acomodara al borde del sillón arrodillado en el suelo, los sentí sonreír a los dos, Romi salió a buscar el aceite a la cocina, volvió y se arrodillo detrás de mí, me bajo la tanga dejándola enganchada en los muslos y me empezo a lubricar lentamente, le dijo a Oscar:
- Que lindo culito te vas a comer, mírala con la tanguita en los muslos parece una adolescente quinceañera, decía mientras con sus dedos me lubricaba bien el culo, Oscar se había desnudado también y se acerco y la franeleaba a Romi, Romi dejo de aceitarme y se la chupeteo un rato a Oscar y se la aceito también, luego sentí que este se acomodaba detrás de mí. Romi hablo y me separo ella misma los cachetes del culo.
- Despacito, primero metele la cabeza nada mas..., quiero que lo disfrute..., que se envicie...,
Sentí la pija de Oscar pugnando por entrar y de golpe sentí un dolor y me sentí invadido por dentro sentí mucho dolor.
- Es solo la cabecita papi..., quedate quietito así te acostumbras..., me encanta verte así.
Se puso delante de mí en el sillón y me dio su concha para que la chupara corriendo a un costado la tanga mientras se besaba con Oscar que estaba justo a su altura, me tomo de la nuca encajándome en su concha y debe haberle hecho una seña a Oscar porque sentí como su pija empezaba a meterse lentamente en mi culo, lo sentí entrar despacio hasta sentir sus muslos contra mis glúteos; me la había encajado hasta el fondo, era una situación rara, me molestaba profundamente y me ofendía el estar siendo penetrado por un hombre, pero a la vez sentía una sensación física muy placentera, mi pija estaba bien dura y Romi justo había bajado del sillón y se tocaba mientras la miraba.
- La tiene dura como cuando esta super calentito..., y le da saltitos también.
Oscar paso sus manos por mi pecho y me tomo de los hombros empezando un bombeo lento y profundo que me empezo a excitar todavía más, quería que la tierra me tragara, me molestaba que se dieran cuenta, pero era obvio que lo estaba disfrutando.
- Tanto hacerte rogar... y estas gozando como una colegiala..., no...??, dijo Romi
No le conteste nada, no hacia falta para mi decir nada. Oscar volvió a clavarme a fondo y se quedo quieto.
- Que lindo culo tenes, puto. No té molesta que te diga puto no?
No conteste me sentía humillado pero más me molestaba el goce que era inocultable.
- Te voy a llenar de leche el culito... puto...,
Me empezó a bombear con dureza ahora, Romi estaba de rodillas a nuestro lado y se pajeaba mientras miraba, sentí que Oscar se tensaba, sentí su miembro poniéndose más duro aún y un torrente que me invadía, explote yo sin siquiera tocarme y como pocas veces lo había hecho, escondí mi cabeza en el sillón, quería escaparme, Romi hablo.
- Acabo solita la perra, sin tocarse..., parece que le gusto-
Oscar se salió lentamente y poniéndose de pie la levanto a Romi y se besaron se fue al baño a lavarse y Romi se arrodillo detrás mío y jugaba con sus deditos en mi culo, metió su dedo bien a fondo.
- Que lindo se siente..., que llenito quedaste..., y eso que no querías no... te gusto como te cogieron... mariconcita...,
Oscar volvía del baño, se había limpiado y la tomo a Romi llevándola en brazos hacia la cama, la tiro encima de ella, su pija estaba dura de nuevo se acomodo entre las piernas de Romi y la penetro despacio, los dos estaban alteradisimos, empezaba la segunda parte de la noche-

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