Si en casa no te dan lo que pides sales buscarlo

Me casé a los 18 años con mi novio de toda la vida 5 años mayor que yo, desde entonces vivimos en una ciudad del norte del país cercana al mar. Tenemos un hijo que vive con su pareja en otra ciudad y somos abuelos de 2 nietos que vemos menos de lo que realmente me apetecería pero la vida es así. Mi único entretenimiento son las labores del hogar, atender a mi marido (Manuel) y el paseo cotidiano con mi amiga y vecina Ana, un año mayor que yo, lo que me permite mantener una figura digna de mi edad.

Me llamo Rosa. Actualmente tengo 45 años, 55 kg mi peso ideal para mis 160 cm de altura, tengo el pelo rubio, ojos azules, cara redonda, nariz respingona, labios gruesos, dicen que atractiva (cuando joven sí, ahora ya no tanto), conservo mi figura 90-60-95 lo que me permite usar biquini sin complejos, el pelo lo he tenido de todas las medidas y cortes, ahora lo llevo liso estilo Bob. He procurado resultar atractiva para mi marido lo que nos ha permitido mantener una vida sexual plena hasta hace dos años en que el pajarito le dejó de funcionar, él dice que por el estrés, de hacerlo dos veces por semana hemos pasado a una al mes.

Rosa- ¿Manolo tienes una amante?

Manuel- ¿Qué dices?

Rosa- Que si tienes una amante, porque no encuentro otra explicación a tu falta de ganas.

Manuel- No, no tengo ninguna amante, tengo problemas de estrés y eso me impide concentrarme.

Rosa- Pues hay médicos que te pueden recetar la pastillita azul para que te concentres y te vuelva a funcionar el pajarito.

Manuel- No es problema médico, es problema de estrés

Rosa- Pero no tendrás problemas de estrés en la lengua o en los dedos, y yo sí tengo un problema en la almeja coño que llevas un mes sin mirarme.

Manuel- Perdona cariño pero es que estamos muy liados en el banco, los problemas me los traigo a casa y no me puedo concentrar veras que en unos meses se solucionan y todo vuelve a la normalidad.

Comento con mi amiga Ana mis problemas, tenemos confianza para eso y para más.

Rosa- Chica tengo un problema desde hace meses

Ana- Tan poca confianza me tienes que no me has dicho nada

Rosa- Es que es con mi marido, chica que ya no me funciona, de dos a la semana ha pasado a uno al mes y hace dos meses que ni me mira ni me toca

Ana- Eso le pasa al mío, dice que es del estrés, pero yo creo que tiene algo por ahí.

Rosa- Pues eso le he dicho yo, pero no sé qué hacer, me pongo desnuda delante y me aparta para ver la tele, será cabrón.

Ana- Pues es una idea

Rosa- ¿Cuál?

Ana- Que los hagamos cabrones jajajajaja

Rosa- Le estaría bien merecido, pero es muy fuerte ¿no?

Ana- Chica, en confianza, a mí cuando me pica me busco quien me lo rasque, si es mi marido bien y si no pues peor para él.

Rosa- Coño tía, no sé yo pfffffffff que fuerte ¿no?

Ana- Chica, aquí no puede ser, pero un día de compras, en otro sitio, un chico que te guste se lo pones facilón te abres de patas y te echa un par de polvos que te dejan satisfecha para un tiempo. Nadie sabe nada y tú a tu vida normal.

Rosa- Pfffffffff calla, calla que me estoy poniendo como una moto

Ana- Mañana hablamos que ya hay moros en la costa jajajajaja

La conversación durante el paseo más que tranquilizarme me había puesto cachondísima, entré en el aseo para darme una ducha, mis bragas estaban empapadas de imaginar, los pezones los tenía como garbanzos de duros, me hice dos pajotes con los dedos pellizcándome los pezones que me calmaron un poco y me di una ducha de agua fría. Mi marido estaba viendo el televisor, fui al dormitorio y me puse unas bragas tanga negras, un negligé negro transparente escotado, unas gotas de perfume en el canalillo y unos zapatos negros de tacón, me miré en el espejo, chica si no se le levanta es que es maricón y salí al comedor en plan mimosa buscando provocarlo……

Rosa- ¿Qué quieres de cena?

Manuel- Ostias Rosa que te van a ver los vecinos

Rosa- ¿Es que ya no te gusto?

Manuel- Claro que sí cariño, anda y hazme un par de huevos fritos que tengo hambre.

Rosa- ¿Huevos?......... Un par de cuernos es lo que vas a tener

Manuel- ¿Qué dices?

Rosa- Nada, cosas mías.

Otra noche sin mojar con el bollo echando chispas. Nada más despertarme llamé a Ana y la invité a desayunar.

Rosa- Chica, ayer con la conversación llegué echando chispas, me puse un tanga, un negligé y taconazos ¿y qué crees que me dice?

Ana- Te echaría un kiki jajajajaja

Rosa- El Cabrón va y me pide un par de huevos fritos, chica este se ha vuelto marica

Ana- jajajajajaja

Rosa- Oye hablando de lo de ayer, a ver cuándo organizas algo que me apunto, pero ya, que tengo el bollo que me echa chispas.

Ana- Tranki chica que todavía quedan machos para atender a dos casadas insatisfechas, te vas a hartar.

Rosa- Eso es lo que me apetece hartarme

Ana- Los viernes son el mejor día, los maridos en casa hasta el lunes y los machos con los huevos cargados para el fin de semana. Píldora o condón a tu gusto, yo prefiero la píldora que el lefazo da más gustirrinín. Ah, se me olvida echa unas bragas de repuesto que las que lleves no vienen de vuelta jajajajaja

Rosa- Yo tomo la píldora a ver si le doy uso. ¿Qué ropa, no me apetece ir muy putón?

Ana- A tu gusto, decentes pero sugerentes, chica metida en faena te dura poco puesta jajajajaja. Ve diciendo que el viernes nos vamos de cena.

El viernes me preparé para la ocasión, sujetador y tanga rojos, un vestido escotado con falda de vuelo a medio muslo de color rojo, chaqueta de fiesta negra, taconazos finos negros y un bolso cruzado negro, una tanga roja extra en el bolso y los complementos, maquillaje y demás, un toque sutil de perfume y nos fuimos de cena.

Ana también iba insinuando pero sin desojar la margarita con un vestido escotado de tubo amarillo, torera blanca, zapatos de tacón fino y bolso blancos.

Fuimos a cenar a otra ciudad, un restaurante agradable, buen ambiente, más hombres solos que mujeres (empezamos bien) aunque no todos potables jajaja, terminada la cena tomamos café, pagamos y fuimos de marcha. Primer pub mucha chavalería nada interesante y entramos en otro un poco más serio música de los 90, pedimos unos tragos y se pusieron al lado dos chicos de unos 30 años muy guapos que nos sacaron conversación al momento, Antonio y Luis.

Antonio- Oye ¿habéis estado cenando en el restaurante………?

Ana- Si, ¿vosotros también?

Luis- Si, os hemos reconocido por lo guapas que sois y por los vestidos.

Rosa- Gracias por lo de guapas jajaja

Antonio- La belleza es para admirar y cuando es verdad hay que reconocerlo.

Ana- Pues vosotros tampoco estáis nada mal verdad Rosa.

Rosa- La envoltura es apetecible jajaja

Estuvimos hablando con ellos una charla bastante distendida, les dijimos que vinimos de cena que los maridos están en casa, parece que les gusto eso, nos sacaron a bailar en una pequeña pista del fondo oscura, música romántica, bailamos agarrados al principio un poco despegados aunque me sentía nerviosa poco a poco fuimos ganando confianza y terminamos pegados. Apoyé mi cara en su hombro y sentí el roce de sus labios en mi frente, un escalofrió recorrió mi espalda mientras sentí en mi vientre como a Luis le engordaba el pajarito (joder pajarito eso era un avestruz), yo tenía claro a lo que iba, mientras mis bragas se mojaban subí los labios y le di un beso en el cuello, la mano que tenía en la cintura bajó hasta apoyarse en mi culo, me abracé a su espalda apretándolo a mí, el sí lo tenía ya ahora depende de él.

Giramos un cuarto de vuelta y vimos como Antonio le comía la boca a Ana

Luis- Nos vamos

Rosa- Si, ¿y ella?

Luis- ¿Traéis coche?

Rosa- Si, Ana trae el suyo.

Luis- Pues que se lleve a Antonio, le dirá el camino.

Rosa- Vale

Luis- Cuando queráis ya sabes el camino, nosotros nos vamos.

La verdad iba cachonda y nerviosa. Se agarró a mi cintura hasta llegar a su coche, subimos lo puso en marcha y fuimos a su piso

Luis- ¿Le pones muchos cuernos a tu marido?

Rosa- No, es la primera vez que se los quiero poner.

Luis- Pues te voy a dar para que vengas a repetir.

Le cogí la mano y me la llevé a la entrepierna

Rosa- Palpa como me tienes desde que te sentí bailando

Apartó el tanga y metió un dedo

Luis- ¿El cabrón no te folla?

Rosa- Ummmmm Noooo, desde hace meses uffffff que dedazo

Me espatarré en el asiento, paseó el dedo desde mi clítoris hasta mi ano, rotaba en el ano y volvía arriba, hundía el dedo dos o tres metidas e invertía el recorrido, estiré la mano para agarrar su pene por encima del pantalón.

Luis- Espera, en 2 minutos llegamos.

Entró a un parking y aparcó en una plaza. Me besó los labios y bajamos, subimos en el ascensor a la 2ª planta y entramos en un piso, me giré y le comí la boca cuando cerró la puerta llevando mi mano a su bragueta.

Rosa- Pfffffffff que pedazo tienes

Luis- El cabrón la tiene pequeña

Rosa- Y delgada pfffffffff vaya grosor que estoy tocando

Luis- ¿Quieres tomar algo?

Rosa- Tengo en la mano todo lo que quiero

Me llevó a una habitación y nos empezamos a desnudar el uno al otro, me dejó desnuda en un plis plas, me senté en la cama y besando su abdomen le quité el pantalón y los slips, un nabo de 20 cm apareció ante mis ojos con dos huevos como pelotas de ping pon, un glande rojo que olía agrio a macho, le di un lengüetazo desde los huevos hasta el glande y lo engullí, sentí mi boca llena saboreándola, ligero sabor a pis y un gustazo a precum, palpé sus testículos que estaban a rebosar, se salió de mi boca y me hizo acostar instintivamente me abrí de piernas, entendió el mensaje y me montó penetrándome

Luis- Joder nena que cerrada estás

Rosa- Ayyyyyy que gorda despacio por favor, a mi edad y me estas volviendo a desvirgar, uffffffffffffff me llenas toda

Sentí toda la clavada hasta que con un último golpe los huevos golpearon mi culo, se detuvo un momento ante mis ruegos e inició el bombeo empecé a segregar flujo lo que hizo más suave el mete y saca, lentamente al principio con movimientos cortos hasta ir ensanchándome a su medida para continuar con movimientos largos que provocaban el repiqueteo de sus huevos en mi culo, el peso de su cuerpo sobre el mío y los bocaditos en mi lóbulo me hicieron jadear mi primer orgasmo en su oreja, joder que máquina de follar, incansable me siguió penetrando, estábamos empapados de sudor, mi coño era un charco goteando sobre la cama y notaba en mi culo la humedad de las sabanas, su excitación era máxima intentó salirse y me abracé con las piernas a sus muslos enlacé mi tercer orgasmo cuando explotó en mi interior llenándome con 6 chorros de leche, permaneció un poco dentro de mí reponiéndose mientras su nabo perdía un poco de dureza, me desmontó y cayó acostado junto a mí, giramos la cara y nos besamos los labios.

Rosa- Lo necesitaba.

Miré a su poya, estaba llena de leche y no me pude resistir bajé y se la comí limpiándosela.

Rosa- Necesito lavarme me has dejado inundada.

Me llevó al baño, en otra habitación oí los jadeos de Ana, me llevé el dedo a los labios en señal de silencio

Rosa- Hay más gente que se lo está pasando bien jajaja

Oriné en el wáter y me lavé en el bidé, Luis orinó a mi lado, a esta distancia y con esa luz parecía más gorda y larga, me parece increíble que me la haya podido meter entera cuando me la meta mi marido va a bailar como el badajo de una campana jajaja

Luis- ¿de qué te ríes?

Se lo expliqué y nos reímos juntos, fuimos otra vez a la cama, pensé que habíamos terminado y era hora de vestirnos pero me volvió a besar los labios, nos comimos la boca jugando con las lenguas bajó por mi cuello mordiéndomelo a mis pezones que se pusieron duros como piedras, el ombligo que besó, la barriguita y el monte de Venus, subió encima haciendo un 69, su poya estaba morcillona, lamí desde el perineo hasta su glande y la volví a engullir recreándome en su sabor mientras él me lamia desde mi clítoris hasta mi ano, nunca me habían comido el culo y su lengua en mi ojete la sentí muy placentera dejándome todo el ano ensalivado, subió al clítoris y hundió su lengua en mi raja alternando, me estaba llegando a otro orgasmo cuando masajeando con un dedo mi ano intentaba introducirlo, yo seguí engullendo su poya agarrada a sus caderas y masajeando sus huevos, exploté en un orgasmo cuando hundió el dedo en mi ano sentí un dolor placentero que me hizo relajarme y elevar mis caderas, la posición me permitía poco movimiento con la boca y seguí lengüeteando su glande que parece le gusta por sus quejidos de placer, mueve el dedo en mi ano agrandándomelo mientras su lengua en mi clítoris me lo tiene tan sensible que me vuelvo a correr en su boca, he perdido la cuenta de los orgasmos que me ha dado y su poya está dura como un hierro, me saca el dedo del culo y se incorpora dejando sus huevos en mi boca que lengüeteo echa el cuerpo hacia adelante y se abre las nalgas ofreciéndome su culo para que lo lama, no lo he hecho nunca pero hundo mi lengua en su ojete con un fuerte olor que sabe amargo los pelos me producen cosquillas en la lengua y mucho morbo, sigo dándole lengua hasta que se baja, me pone de cucharita y me penetra por el coño estoy muy lubricada y me entra entera, metí los pies entre sus piernas sacando el culo para facilitarle la follada empecé a mover las caderas a los lados para encajarla mejor

Rosa- Ummmmmmmmmmmmmm

Luis- Sabes que solo las putas le comen el culo a sus chulos

Rosa- Nooooooooo ummmmmmmmmm sigue follándome

Luis- El cornudo te folla el culo

Rosa- Nooooooooo nadie me la ha metido por el culo

Luis- ¿Quieres que te lo folle yo?

Rosa- Siiiiiiiii pero sigue, no te pares, que me estoy corriendoooooooooo

Me arrastró al borde de la cama me puso a cuatro patas y me volvió a meter en el coño, arqueé la espalda levantando la cabeza del gustazo comenzó a embestirme con clavadas largas, caí apoyando la cabeza en la cama lo que me hizo elevar más el culo, me cerró las piernas y las nalgas se abren, no sé de dónde sacó un tubo de crema con el que me empezó a untar en el ojete metiendo un dedo dentro embadurnado de crema, sin dejar de embestir empezó a estirar el ano tirando con el dedo, lo saco y metió varias veces, volvió a untarme crema por el exterior y el interior, comencé a mover las caderas del gustazo y volví a explotar en otro orgasmo.

Sacó su nabo de mi coño se embadurno de crema y lo apoyó en mi ojete, me dio un fuerte azote en cada una de mis nalgas que me hizo relajarlas y me metió el glande de un empujón agarrado a mis caderas

Rosa- Ay ayyy ayyyyyy, sácala, sácala por favor

Luis- ¿Te duele?

Rosa- Siiiiiiiii ayyyyyyyyy me estoy cagando, sácamela

Luis- Cállate

Me dio una fuerte nalgada que lejos de enojarme me puso calentorra, su despotismo abusando de su posición y fuerza me hizo rendirme, la posición dominante que ejercía hizo erizar mi piel y un escalofrío placentero me recorrió la espalda escapando un gemido que me salió del alma

Rosa- Ahhhhhhhhhhhhhh me estas partiendo

Luis- ¿Te duele?

Rosa- Siiiiiiiiiiiii uffffffffffffff

Luis- ¿Te la saco?

Rosa- Ahhhhhhhhhhhhhh nooooooooooooo, me duele pero me gusta.

Fuertemente sujeto a mis caderas me la fue enterrando lentamente hasta que sus huevos golpearon mi coño, me dolía pero es un dolor placentero y soportable, me hice un dedo en el clítoris y me pellizqué un pezón, a los pocos segundos me sacudió el orgasmo más placentero de la noche hasta el momento, mi esfínter le apretó el nabo que se puso más duro si eso era posible

Rosa- Ahhhhhhhhhhhhhh uffffffffffffff me corroooooooooooo ahhhhhhhhhhhhhh que gustoooooooooo ahhhhhhhhhhhhhh

La sacó hasta dejar solo el glande dentro y se echó más crema en el tronco de la poya, de un fuerte empujón me la volvió a clavar entera, sus huevos golpearon mi coño con un seco PLAS.

Rosa- Ahhhhhhhhh que gorda la siento.

Luis- ¿Te la saco?

Rosa- No por favor ahora noooooooo me duele pero me gusta muchooooooooo

Empezó a embestirme con clavadas largas y profundas PLAS PLAS PLAS, llevé mis manos atrás y me abrí las nalgas para que entrase más, echando su cuerpo sobre el mío caí debajo, puso una almohada bajo mi coño lo que hizo que mi culo quedase más arriba facilitándole la follada, pasó la manos por debajo de mis brazos agarrándome las tetas masajeándolas y pellizcándome los pezones, me agarré a sus muslos atrayéndolo mientras me mordía el cuello y los hombros, empecé a sentir un gustazo enorme que salía de dentro de mi ano que me hizo empezar a rotar las caderas sintiendo su poya entrar y salir, llevó una mano a mi coño y me frotó la pipa exploté en un orgasmo que se unió al gustazo que me llegó del culo y empecé a temblar, mi orgasmo no tenía fin

Luis- ¿Qué te pasa?

Rosa- Ahhhhhhhhhhhhhh noooo seeee, el orgasmo noooo paraaaaa ahhhhhhhhh uffffffffffffff

Mi esfínter lo aprieta y afloja a voluntad propia mientras no paro de correrme lo siento clavarme fuerte y profundo mientras se corre, descansa sobre mi espalda besándomela, su nabo se desinfla y siento como sale de mí cae a mi lado en la cama, me estoy relajando, mi respiración vuelve a su ritmo normal. Se me escapa un pedete y siento como sale un poco de su corrida

Rosa- Perdón

Luis- jajajajaja. Ven vamos a lavarnos.

Fuimos al wáter y me senté en la taza y salió su corrida manchada de marrón. Luis estaba manchado de heces, restos de su corrida y la crema que usamos, después me dijo que es vaselina. Se lavó en el bidet y me cedió el sitio donde me asee el culo.

Luis- ¿Te duele?

Rosa- Sí, un poco, tengo una sensación rara como si estuviese vuelto.

Me hizo inclinar me lo vio y pasando un dedo no hay rastros de sangre ni heridas.

Luis- Estás bien, un poco abierto pero se te cierra solo, no te preocupes.

Me llevó otra vez a la habitación y nos sentamos en la cama.

Luis- ¿Quieres desayunar?

Rosa- Pues sí me apetece algo después de una noche agotadora jajajajaja

Luis- Pues esmérate que te lo vas a tragar directamente del envase.

Rosa- Pfffffffff ¿Tienes más ganas? Joder eres una máquina de follar

Luis- Venga una buena lamida de culo para que se ponga dura y luego me la comes

Se tendió de espaldas levantando las piernas encogidas su huevos estaban frente a mi boca y su ano un poco más abajo, su poya descapullada descansa sobre su pelvis. Me puse de rodillas en el suelo bajando la cabeza olí su raja y metí la lengua en su culo peludo de sabor amargo centrándome en el agujero con lamidas intensas repasando con la punta de la lengua, con la mano masajeé los huevos notando como cogían volumen, avancé a su nabo que poco a poco se ponía erecto, en la punta de la lengua notaba como su ojete se abría y cerraba lo que le acentuaba el amargor. Me cogió del pelo y me hizo subir lamiendo su zona perianal hasta los huevos que me entretuve metiéndolos dentro de la boca dejándolos ensalivados, volvió a agarrarme del pelo y me llevó arriba, lamí todo el tronco hasta el glande, abrí la boca y me lo metí chupando y lamiendo la cabeza, su mano en mi nuca marcaron el ritmo que él quería, metiéndola hasta la garganta y dejándola allí hasta que me faltaba el aire, la sacaba y unas babas espesas unían mi lengua y su glande hasta que caían sobre sus huevos, volvía a metérmela en cuanto respiraba hasta el fondo. Me hizo quedar de rodillas y se puso de píe, me volvió a meter el nabo en la boca y empezó a follármela, sentí la puerta del cuarto abrirse sin dejar me follarme la boca

Antonio- Oye que se tienen que ir

Luis- En cuanto termine de desayunar

Ana- Tranquila que te espero jajaja

No sé si se quedaron de espectadores o se fueron, yo seguí comiendo nabo durante 10 minutos más hasta que me la hundió hasta la garganta y se corrió, los dos primeros lefazos me los tragué, la sacó un poco y los dos segundos me los dio en mitad de la lengua, le di un chupetón a la cabeza y la sacó, abrí la boca mirándole a los ojos le mostré su lefada la cerré y me los tragué. Una última gota colgaba de su glande le di una lamida me la metí en la boca succioné los restos y me los tragué, terminé pasando la lengua por los labios. Me dio un beso en la boca y una palmada en el culo.

Las bragas estaban pegoteadas así que se las dejé de recuerdo y me puse las limpias, me terminé de vestir y salimos al comedor, fui al aseo a arreglarme el pelo y maquillarme.

Ana- Bueno chicos ha sido un placer para mí

Rosa- Y para mi jajaja

Luis- No queréis quedar para otro día

Ana- Dadnos vuestro teléfono y si tenemos un rato como hoy os llamamos, si podéis bien, si no también, esto no es amor, es sexo. Chao chicos gracias por los polvetes jajaja.

Eran las 5 de la mañana cuando nos montamos en el coche y volvimos a casa.

Ana- ¿Qué tal?

Rosa- Harta, voy escocida y desayunada jajaja ¿Y tú?

Ana- También he desayunado jajajajaja

¿Hemos vuelto a llamar a los chicos?

Nooooooo, en cuanto salimos de allí Ana arrugó el papel y tiró los números de teléfono, no buscamos el amor buscamos sexo.

2 comentarios - Si en casa no te dan lo que pides sales buscarlo

kramalo
esta muy bueno...!!!
IBQleon
que rica chaqueta me estoy dando con tu relato besos