Una historia, varias putas, varios cornudos. Solo el inicio.

Voy a contarles una vieja historia, la de una familia, la mia, en un año muy particular.
Por ese entonces yo tenía 15 años, era un pendejo bastante quilombero, aunque en casa me tenian cagando.Ahi viviamos con mi viejo, mi vieja, ambos de 53 en aquel entonces, y mi hermana de 20. Una familia tipo.
Mi vieja se conservaba excelente, era una mina que llamaba la atención, por su cuerpo, su sensualidad y sus movimientos... era una autentica puta fina… yo aún no lo sabía. De joven había estado muy buena, hoy en día se mantenía a base de gimnasio, tetas hechas y dietas a full. Físicamente alta, flaca, con sus abdominales marcados en su pancita, muy atlética. Pelo castaño, enrulado que le llegaba hasta el pecho. Una boca carnosa, seductora y una mirada de puta cara que te paraba la pija, lo admito.
Mi hermana había salido a ella, no tan alta pero con un culo hermoso, redondito y parado, sin las tetas hechas de mi vieja, pero tampoco lo necesitaba, no era ninguna tabla. Mi hermana estaba hecha una diosa, rubia, ojos claros, bocona… típica chetita en realidad.

Todas las mañana mi vieja y mi hermana salían a entrenar, mi viejo a laburar, y como lo que les voy a contar sucedió durante el verano, yo me quedaba en casa.
En mi casa frecuentaba bastante mi primo. Seba. Recién había cumplido sus 18. Había terminado el colegio, tenía una banda de rock y había cortado con su novia de hacía dos años. Se llevaba muy bien, tanto conmigo como con mi hermana. Seba era enorme y musculoso. Tipo rugbier.
Ese verano llego a casa un lunes a la mañana mientras mi hermana y mama se iban a correr. Ambas daban unas vueltas por parque Chacabuco y se quedaba ahí haciendo gimnasia con un personal trainer.
Saludo a ambas y nos quedamos pasando el día. Seba nos avisó que se quedaba a dormir hasta el viernes, cosa que no pasaba seguido desde que se había puesto de novio. Pero ahora estaba soltero de hacia unas semanas y pensábamos disfrutar del parque y la pileta de casa.

El lunes por la tarde después de comer mama se fue a dormir la siesta, mi hermana de su amiga y yo y mi primo nos quedamos en la pile. Para boludear se me ocurre decirle que quería probar sus cigarrillos, cosa que accede. Nos vamos a la terraza y fume por primera vez unos puchos que me hicieron toser todo (No era faso, aclaro). No me gusto. El se cagaba de la risa. Le hice prometer mil veces que no le cuente a nadie. El se reía y me dice
.- Que pendejo mamero que sos. No me rompas las bolas
Y me dio un coscorrón.
.- Vamos a la pile?

Con mi primo nos quedamos tomando sol y metiéndonos a refrescarnos en el agua. El tenía puesta una bermuda ancha, color blanco. Tenía unos re brazos, un pecho grandote. Pintaba para patovica un poco más. No tenía abdominales marcados. Era más bien gordote.
Al ratito de estar hablando pasa mamá. Yo acostado en una reposera y el parado adelante, entre la reposera y la pileta. Cuando pide permiso y pasa entre la reposera y mi primo le pone una mano en la pancita y le dice…
.- Epa, estamos comiendo bien…
Y lo abraza, como lo hacía comúnmente ya que es su sobrino.
Él le puso su mano en la cintura y la otra en la panza de mi vieja…
.-Nunca voy a poder tener unos así…
Los acaricio unos segundos y la dejo pasar a mama.
Fue una situación rara. Al pasar Seba le miro el culo descaradamente, mordiéndose los labios, cosa que me molesto y mucho.

Mi vieja estaba impresionante. Tenía una camiseta blanca semitransparente que le llegaba a la cintura. Usándola abierta, se podía ver la parte de arriba del bikini blanco, con detalles dorados apretando esos pechos redondos. Abajo una cola less del mismo color. Mama las usaba chiquita y ajustadita para que no le quede marcada la maya. Sabri mi hermana también.
Al ratito de estar viendo como mi primo le relogeaba el culo a mi vieja, que estaba tirada boca abajo moviendo el culito de un lado a otro mientras leia, escucho llegar a mi hermana.
.- Venga un abrazo primito… pobrecito que se peleó con su novia…
Seba que estaba al palo por ver a mi vieja la abraza pasando sus dos brazos por la espalda… pegándose bien a mi hermana, que lo rodeo con sus brazos por el cuello y es puso en puntas de pie. Mire y mi primo le había pegado el bulto contra ella. Estuvo unos segundos y mi hermana tiro la colita para atrás, separándose justo cuando yo ya estaba empezando a sospechar que se estaba dejando apoyar por la pija de mi primo. Eso me alivio un poco.
.- No pasa nada prima. En un rato si queres te cuento todo bien.
.- Dale, genial. Voy a estar en mi pieza cualquier cosa.
Y se fue.
La admiración que sentía por mi primo, y también el cagazo por la fuerza que tenía, no dejo que me tirara encima a cagarlo a trompadas cuando se fue mi hermana y le miro el orto. Seba estaba al palo, se notaba una pija enorme por la bermuda. Lo primero que pensé fue que si ese bulto era tal como parecía, mina que cogiera la hacía mierda.
El resto de la tarde la pasamos en la pileta, Seba no paraba de mirarle el culo a mi vieja, se acercaba a hablarle, arrodillándose siempre a la altura de su culo, por lo que ella tenía q levantarse para mirarlo. En un momento para levantarse se apoya en la pierna de mama, bien cerca de su nalga derecha. Mi vieja se sobresaltó un poco, pero se hizo la boluda. Seba se quedó tomando sol al lado, sin sacarle la mirada. Al rato mi vieja se pone la camisa y se va… pensativa, seguramente enojada por el descaro de su sobrino, en su propio parque, su propia pileta, mientras su esposo trabajaba y su hijo tomaba sol al lado.
Al rato que se va mi vieja, mi primo me dice que va a hablar con mi hermana sobre su ruptura. Vamos a mi habitación, que junto con el resto de las habitaciones queda en un primer piso.
Nos cambiamos, mi primo se pone unos pantalones cortos de tenis y una musculosa. El pantalón le marcaba el bulto de su pija. Ya no estaba al palo, pero era enorme.
Se va así para lo de mi hermana. Ella estaba acostada, mirando la televisión. La cama de mi hermana se encuentra en el medio de la pieza, uno al entrar ve la cama y de frente la tele al costado de un mueble con puertas de vidrio.
Seba entro, se volvieron a abrazar y se sentó a la izquierda de mi hermana la cual cambio su postura de acostada a sentada en el medio de la cama.
Los escuchaba desde lejos, él se hacia el pobrecito, ella lo mimaba como con ternura. Ella siendo la mayor y estando de novia, como que le hacía de consejera. Mi primo me estaba pareciendo cada vez más hipócrita, su novia lo había dejado por que él le había metido los cuernos varias veces pero ahora se hacía pasar por el incomprendido.
Cuando me asome a la puerta supo el por qué. Mi primo estaba recostado sobre el respaldo de la cama, y mi hermana lo abrazaba por debajo de sus brazos, apoyando su cabeza en el hombro derecho de mi primo.
.-No pasa nada maricen, le decía
Y el pasaba su mano por la cara haciendo de cuenta que no quería llorar.
.- Gracias primita… y mi primo contaba cosas, boludeces de su relación, daba vueltas en las mismas cosas.
Mi hermana tenía su pelo rubio atado para atrás, una musculosa blanca bien pegada a su cuerpo que terminaba en su pancita. En su ombligo un piercing y un short corto que usaba cuando era chica. Blanco y ya casi se transparentaba por los años. Ella lo amaba y por eso siempre dormía con él. Por la poca luz que entraba por la ventana se divisaba la tanguita, no muy chiquita, pero si bien metida en la cola que tenía puesta. Estaba por entrar pero algo me dejo atónito. Así como mi primo se hacia el pobrecito y con su mano izquierda limpiaba lagrimas falsas, con su mano derecha acariciaba la cintura de mi hermana. Suave, despacito movía sus dedos sobre al costado de la pancita descubierta de mi hermana. La mano de mi primo era enorme, la tenía apoyada entre el final de la remera y el inicio del short. Sobre la piel de mi hermana. Su dedo pulgar se movía lento, subiendo y bajando en círculos, llegaba a pasar por debajo de la musculosa de mi hermana. El resto de los dedos los iba moviendo despacito también, llegando con el más chiquito a tocar el elástico del short. Estuvieron así un rato. Cuando mi primo ya estaba diciendo cualquier gilada que no tenía nada que ver solo por seguir ahí en la misma posición, acariciando a su prima y ante el silencio de mi hermana se quedó callado y ambos miraban la televisión, un programa típico de preguntas y respuestas de la tarde. No podía decirse que estuviera haciéndole algo zarpado, pero era raro. Me quede parado viendo un rato y decidí entrar.
Al saludar mi hermana haciéndose la boluda le saca la mano a mi primo de su cintura. Eso me choco más… si no fuera nada malo, por que ocultarlo? Mi primo me guiña un ojo…
.- bueno, después te seguiré contando si quieres. No por vos primito eh, no lo tomes a mal. Pero me cuesta abrirme a decir cosas frente a hombres…
.- Dale dale, no hay problema. Él te entiende, No hermoso?! Veni sentate a ver la tele con nosotros.
Me acostó delante de ellos mirando para la tele. Los tenia de espaldas. En un momento me doy vuelta para comentar algo y mi hermana ni miraba la tele, tenía los ojos puestos en la pija de mi primo marcada en su pantalón. La postura era la misma que antes, solo que esta vez no podía ver que hacia mi primo con su otra mano. Por dentro me carcomía la duda. La pija de mi primo no podía estar así porque si… mirándola la tele sin saber si levantarme y mirar desde afuera, darme vuelta de una y agarrarlos infraganti, entre miles de opciones.
De a poco me puse a pensar que tampoco era nada zarpado lo que había visto y que al girar y ver a mi hermana relogear el bulto de mi primo tampoco era señal de nada. El otro tarado se había puesto ese pantalón apropósito, capaz que justo me di vuelta cuando ella se daba cuenta. En fin, en esos pensamientos estaba cuando me di cuenta que por la luz de la tv nos reflejábamos en el vidrio del mueble del costado. Se me paro el corazón, mire y si…
Mi primo tenia su mano nuevamente sobre mi hermana. Pero esta vez la tenía más cerca de su ombligo, y dos dedos se movían pasando el elástico del short. Se seguía moviendo lento, despacito. Ahora podía entender por qué la pija tan al palo. Veía la mirada de mi hermana perderse en su pija mordiéndose los labios, apenas miraba la tele para decir algo como para disimular. Vi como la mano de mi primo bajo un poco más... sus dos dedos ya había pasado el elástico de la tanguita, eso seguro, pero ahora se acercaban mas al pubis de mi hermana. Para mi tranquilidad mi hermana sin decir nada le agarro la mano, y sujetándola con la suya la apoyo en su cintura nuevamente. Lugar donde se podría decir, no pasaba nada.
Llega la publicidad, mi hermana le saca la mano de la cintura a mi primo y yo me doy vuelta y nos ponemos a hablar giladas del programa. Empieza el programa y mi hermana me agarra de la cabeza y me dice.- Ahora déjame ver. Y me da vuelta como para que siga dándoles la espalda.
Lo vi sonreír a mi primo por el reflejo, con aire socarrón y recostándose un poco más atrás, tirando la cintura para adelante dejando más a vista su pija dura.
Obviamente al ratito de obedecer mi primo apoyo su mano en mi hermana. Esta vez ya mitad de su mano estaba por encima del short, dos dedos sobre la nalga de mi hermana. Y así se movía, despacito. En un momento baja más la mano, ya donde apenas se la podía ver y mi hermana cerraba los ojos. Cuando mi primo fue un poco más abajo, seguramente ya llegando al medio de sus nalgas, donde habrá tocado esa tanguita metiéndose en el culito repingon de su prima, ahí ella le agarra la mano y la pone sobre su pancita. Por sin que llegue a tocar el short, cerca de su ombligo.
Estuvo un rato mi primo acariciando hasta que mi hermana cambia de posición, se recuesta a mi derecha. Estábamos los dos dándole la espalda a mi primo que no paraba de mirarle el orto a mi hermana, que miraba directo a la tele evitando sonreír. Al rato de estar así mi primo comenzó a pasarle la yema de sus dedos por las pantorrillas de mi hermana… suavecito subía y bajaba… mi hermana ni se mosqueaba. La mano de a poco empezó a subir… pasando por detrás de sus rodillas… y llegando apenas a sus muslos. Mas no podía porque era imposible estando yo ahí estirarse sin que me diera cuenta. Mi hermana ni se movía, pero sabía muy bien que mi primo tenía toda la imagen de su culito en punta. En un momento me case, dije que me iba y me levante.
.- Sabrina no podes estar así con ese short… se te ve todo prácticamente. No pude evitar decirle.
.- Ay que celoso! Dale tonto no pasa nada el primo ya me vio en maya mil veces, es como un hermano.
Y volvió a la posición anterior apoyándose en su hombro
.- Y esta maricoteta pobrecito
Así quedaron cuando me fui, pase por mi habitación que queda enfrentada a la de mi hermana y volví a salir para ver que sucedía…
Me sorprendió... mi primo pensé que se iba a aprovechar que tenia todo servido pero no. Cuando su mano empezó a bajar mi hermana lo paro en seco
.- Dale primito, no te abuses…
.- No, disculpa... se me cayó la mano jajaja
Mi primo le dio un pellizco como si no le importara, pero coloco su mano en la cintura. El pajero volvió a bajar y mi hermana de nuevo le protesto.
.- Basta o no te hablo más, me voy a bañar.
.- Dale dale, mejor. Gracias por escucharme prima. Te quiero
.- yo también gor, anda tranqui.
Cruce a mi habitación y pude ver entrar a mi primo con la pija re dura y bastante enojado por haber pensado que tenía todo servido y le hayan parado el carro. Al rato veo pasar a mi hermana por delante de mi puerta yendo a bañarse. Su sonrisa maliciosa me encanto.
Lo mire a mi primo que estaba acostado en la cama de al lado.
.- Vos deja de hacerte el vivo con mi hermana
.- Y vos rómpeme las bolas y cuento que fumaste. Jajá
.- No dale, enserio te digo.
.- Basta Migue, hacete hombre.

Llego mi viejo, comimos todos tranquilos. Mi hermana tenía puestas unas calzas negras, con una remera larga hasta la mitad de su culo. Mi vieja tenía puesto prácticamente lo mismo, calza azul y remera negra. Estaban hermosas las dos. Mi vieja con sus pelos enrulados, mi hermana con pelo lacio, distintas pero iguales a la vez. Durante la sobremesa mi viejo nos contó que el finde íbamos a pasarlo a monte hermoso. Una linda ciudad balnearia. Mi primo fue invitado obviamente, aunque quedo en confirmar.
Mi hermana y mi primo agarraron una cerveza y nos fuimos para el quincho. Estuvimos jodiendo un rato largo, mi primo cada tanto la abrazaba, cuan pajero, mi hermana se hacia la boluda y se separaba.
.- Vamos a la terraza, dice mi primo
.-Dale, vamos dice Sabry.
Yo dije que me iba a dormir. De pronto quería ver que era lo que pasaba si los dejaba solos. Obviamente no quería, pero a la vez si me excitaba la situación. Ellos fueron para las escaleras, yo al pasillo que da para la entrada a la cocina. Mi idea era entrar hacer tiempo e ir, pero en la cocina cierta conversación entre mi vieja y mi viejo hizo que me quede escuchando:
.- Sabes amor, yo entiendo que es la edad y el calor, pero me parece que tu sobrino esta más pajero que nunca.
.- ¿si? ¿Qué hizo?
Mi vieja estaba de espaldas a mi viejo, lavando los platos, mientras él tomaba un vaso de vino.
.- Hoy no paraba de mirarme el culo. Hasta se agachaba haciéndose el boludo para quedar lo más cerca. Parecía que quería una radiografía
.- ¿vos como estabas?
.- Con la maya blanca, nada del otro mundo. Es un pendejo maleducado
.- jajajajaja. Es un pajero de aquellos. Como el padre. Yo creo que tenes que hacerlo sufrir por maleducado.
.- Jajaja ¿Si? ¿Qué sugerís que haga? Bicho perverso! Jaja
Mi viejo se acercó por atrás, y mientras le acariciaba la cola por encima de la maya le decía…
.- Digamos que provocarlo hasta que se pajee... tenes con que…
Diciéndole eso le mando la mano bien abajo en su concha. A mama se le escapo un suspiro…
.- Los chicos…
.- Están en el quincho… de acá ve si vienen.
Se refería a una ventana que daba al fondo y estaba arriba de la pileta donde mi vieja terminaba de lavar los platos
.- Tal vez mañana puedas pasearte un rato con tu pijamita y alguna tanguita… ¿o lo haría acabar en seco al pajerito?
Mientras decía esto mi viejo se agachaba por atrás de mi vieja, bajando despacito la calza, que bajaba junto con la tanguita roja que tenía puesta. La imagen de mi viejo bajándole todo y agacharse para lamerle la cola a mama y ver a ella que me mordía los labios y sacaba su colita para afuera como una gata en celo hizo que se me pare la pija mal. Ya había visto mucho ese mismo día, tenía las hormonas a full y la mente confundida. De pronto mi vieja y mi hermana dejaban de ser esas inmaculadas mujeres para empezar a notar lo calientes que eran. No podía parar de mirar a papa lamiéndole la concha a mama, que mirando por la ventana se abría bien el culo para que la cabeza de mi viejo pueda entrar mejor. Mi vieja empezaba a gemir... movia la cintura en círculos contra la cara de papa, lo agarraba de los pelos y lo enterraba mas en su culo, mi viejo no paraba de lamerla.
Viendo esto no sabía si quedarme o subir a ver qué estaba haciendo mi hermana. De repente mi viejo se levanta... se apoya en la mesa sacando la pija de su pantalón…
.- Ay si… dame pija papi
Mama se arrodillo delante de él, y agarrando la cabeza de la verga con dos dedos, le pego una terrible lamida desde los huevos hasta la punta. Ahí se quedó moviendo la cabeza en círculos, con la lengüita recorriendo la cabeza de la chota. La escupió un poquito y empezó a pajearla.
.- Te parece que ande en casa sin corpiño. Así el pendejo se calienta
.- Me encanta… y que lo abraces y sienta tus pezones
.- Ufff como se le va a parar la pija… como esta!

Mama no paraba de lamer la verga, las bolas… estaba como extasiada. La escupía, pajeaba hasta que se la metió a la boca entera. La mano de mi viejo en la nuca la acercaba más y más a él mientras se tragaba la pija como una experta en garganta profunda. Mi vieja chupaba la pija como una profesional, como una puta paga, como una pornostar… como yo jamás me lo hubiera imaginado.
Papa la agarro del pelo y poniéndola contra la mesada que daba a la ventana del fondo le metió la pija de una. Mi vieja gimió fuerte. El empezó a bombearla con fuerza. Tenía que ponerle la mano en la boca para que no gritara. Mi vieja empujaba el culo contra mi vieja, se notaba desesperaba, minutos después los dos acababan. Pude ver la pija saliendo de la concha de mi vieja, toda llena de leche y jugos, chorreando, y mi vieja apoyándose como el mármol de la mesada diciéndole
.- Como me gusta tu pija…
Mi viejo salió para el baño y yo raje para la terraza. Pase por debajo de la ventana y subí las escaleras despacito para no hacer ruido.
En la terraza tenemos una mesa con dos bancos a los costados. Cuando subí estaban ellos sentados de espaldas a las escaleras, haciendo algo sobre la mesa. La noche seguía sorprendiéndome... mi hermana estaba sentada arriba de mi primo. Que le acariciaba la espalda por debajo de la remera.
.- Hay no puedooo. Dijo mi hermana
.- Jajaja… me parece que perdes otra apuesta…
.- Nono, ya bastante que me hiciste sentar arriba tuyo depravado... dame una oportunidad mas.
.- No, ya no pudiste, si quieres otra oportunidad cambiamos la apuesta…
.- Ok, si lo armo ahora, vos me regalas otro y me lo fumo con mi novio mañana
.- Ahh sos cruel, lo quieres para fumar con él y no conmigo. Ok. Pero si no lo armas caminas de aca hasta el cuartito de las herramientas… en tanga.
.- Jajajaja hijo de puta! Mira lo que inventas para mirarme el orto. Soy tu prima degenerado.
.- Apuestas son apuestas
.- Ok. Igual voy a poder y te voy a cagar.

Otra sorpresa más estaba dándome la noche. Mi hermana estaba hablando de armar un porro, de hecho estaba armando un porro, o eso intentaba. Se ve que le pidió a mi primo y el astuto le habrá apostado a que ella no podría hacerlo… y así termino sentada arriba de él. Ahora si no podía armar este porro mi hermana se tenía poner en tanga para él.
Mientras mi hermana volvía a intentar armar su porro mi primo seguía acariciando su espalda, ya bajando hasta la calza. Ahí continúo hasta dejar la mano inmóvil en uno de los cachetes del orto de mi hermana.
.- Deja de tocarme depravado tramposo. Así no se puede
Y le corrió la mano.
Mi hermana sigue intentando…
.-No puedo!!!
.- Viste? Te dije...
Mi primo agarro las cosas de la mesa y a los segundo el porro ya estaba armado.
.- ¿Ves? Así se gana una apuesta…
.-jajaja no vas a hacerme hacer eso no?
.- Claro que si… apuestas son apuestas
.- Vos me tocaste hiciste trampa….
.-Cumplí dale.
Mi hermana quedo pensativa un rato y se levantó. Dándole la espalda a mi primo y sonriendo se bajó las calzas hasta quedar solo con una tanguita blanca de encaje. Giro.
.- Así está bien?
.- No… tenes que caminar hasta allá…
Mi hermana empezó a caminar moviendo la cola,
.-Acá está bien?
.- Si, ahora ven para acá…
Mi hermana se paró al lado de mi primo y le dijo
.-Agárrame de la cintura así no me caigo
Y empezó a ponerse la calza. Agachándose…
Mi primo se puso detrás de ella y agarrándola de la cinturita, a los costados de la tanguita le apoyo la pija en el medio del culo mientras mi hermana se subía la calza.
.- Listo? Cumplo… ahora dámelo
.- Obvio
.- El porro, bobo… SOS MI PRIMO!!! No sé qué te haces la cabeza nene!!!
Mi hermana haciéndose la ofendida agarro el porro, se rio, le dio un abrazo y le dijo gracias.
Ahí yo salió corriendo para la casa. Entre y no estaban ni mama ni papa. Los dos estaban en el living mirando una peli. Mi hermana bajo con carita nena caprichosa satisfecha y se fue a dormir.
Al rato bajo mi primo. Bastante perturbado. Evidentemente mi hermana estaba haciendo con mi primo lo mismo que con todos los flacos pajeros a los que les podía sacar algo. Hacerlos calentar, hasta salirse ella con la suya.
Esa noche mi primo fue el baño y al volver, vi su sombra con una tela en la mano. Haciéndome el dormido pude ver que se estaba pajeando debajo de las sabanas. Cuando termino saco de abajo la tela, era la tanguita que había usado a la tarde mi hermana. Se ve que la había sacado del canasto de ropa sucia del baño. Al rato volvió al baño. Se ver que la fue a dejar. Yo moría de la duda, así que al rato me levante y fui al baño. Ahí estaba… la tanguita de mi hermana llena de leche. El tarado ni siquiera había disimulado. Tire la cadena sin hacer nada y cruce a mi habitación. Al rato escucho la puerta de mi hermana abrirse… tenía el velador prendido. Al estar su pieza pegada al baño seguramente la despertó el ruido de la cadena. Fue hasta el baño... la vi pasar por la puerta de mi pieza y ahí recordé… Al ver la tanga llena de leche la solté arriba del canasto de la ropa y ni siquiera lo cerré. Mi hermana en ese momento estaría viendo su tanga llena de leche. Me hice la cabeza de que iba a tomar por un degenerado a mi primo, iba a hablar con mis viejos y ahí se pudría todo. La verdad que me sentía bastante contento, el idiota ese me había amenazado con una boludez al lado de masturbarse con la tanga de su prima. Si se daba como pensaba era un éxito. La noche tenía otra sorpresa para mí.
Mariana salió con la tanga directo para su habitación. La vi entrar y me acerque, había cerrado la puerta, pero podía ver por la hendija de la puerta. ¿Para qué se habría llevado la tanga?
Mire y estaba sentada sobre la cama, justo frente a mí. Miraba su tanga…se mordía los labios pensativa hasta que la llevo a la nariz. La olio y suspiro como si fuera una rosa, o una fragancia de perfume francés. Se volvió a morder los labios y su mano izquierda bajo hasta su pierna. Volvió a oler y se recostó para atrás… ya solo podía ver sus piernas, cintura y pechos… Con su mano izquierda comenzó a acariciarse por arriba del pantalón, con la otra mano, la que tenía la tanga la llevaba para el lado de su cara. No podía ver si la olía, si estaba lamiendo… solo imaginarlo.
Su mano paso por abajo del short… su cintura se movía para arriba y para abajo. Ahora la otra mano, donde tenía la tanga bajo para sacarse todo. Volvió a sentarse. Ahí pude ver cómo le daba lamidas a la tanguita mientras dos dedos entraban en su conchita, movía la cintura para adelante y para atrás, se estaba cogiendo los dedos. Volvió a lamer su tanguita y bajo la mano para frotarse el clítoris mientras su tercer dedo entraba en la concha. No pude más de la calentura. Ahí nomás sin importarme que fuera mi hermana saque mi pija y comencé a pajearme. A medida que la fui sacando ella más ritmo le metía a sus movimientos. Estaba por acabar, ella adentro de su habitación y yo afuera… llega el orgasmo... estoy acabando contra la puerta cuando veo un flash.
Se me helo la sangre, era mi primo que me acababa de sacar una foto mientras me pajeaba mirando por la cerradura de la pieza de mi hermana. Se acercó y se agacho a ver q estaba viendo. Ni él lo podía creer. Le alegro la noche. Su prima paseándose y en la mano la tanguita llena de leche que él le había dejado. Sonrió. Me miro, saco su pija y se empezó a pajear. Yo le quise sacar el celular y me apunto con el dedo haciéndome gesto de que cobraba. Me quede viendo como mi primo se pajeaba viendo a mi hermana y me fui a la habitación. Cuando volvió estaba excitadísimo… Me decía que mi hermana seguio dando lamidas a la leche aun calentita de la tanguita, hasta el punto de meterse la tanguita en la boca y seguir tocándose con las dos manos…
.-Primo que putita es tu hermana. Se estaba pajeando con la leche que le deje en la tanguita…
.-EH? Me hice el boludo y el me conto como había acabado en la tanguita, que la había sacado del baño para olerla y pajearse. Que la había encontrado con olor a concha, que seguro fue por la calentura que le da estar con el; que también tenia un poquito de olor a culo, pero que eso lo calentaba mas, hacia ver que la putita cheta era una roñosa mas a la que le iba a dejar el culo abierto. Me decia lo contento que estaba de que tenía una prima que se partía al medio y que resultaba una hermosa putita.
.- En cuanto a la foto que te saque primo…. No te gustaría que la vieran por internet y tus conocidos sepan que te pajeas con tu hermana… Así que vos vas a ayudarme a que culito se abra para mí, ok? Se deja toquetear la putita, pero lo hace para conseguir cosas. Le gusta calentar pero después cogerse al novio… voy a hacer que se caliente tanto que no le importe cogerme acá con todos ustedes en la casa. Me va a pedir verga todo el día… esta verga!!! Agarrándose la pija me la mostraba desde su cama. Nunca mas vengas a salir con la pelotudez esa de que esta con poca ropa ni nada de eso ok? OK???
Estaba cagado, no me quedaba otra que colaborar con el imbécil ese. Si mis conocidos me veían en la foto que me saco me tenía que ir a vivir al Congo belga. Mi primo me tenía en sus manos, a la vez mi vieja iba a empezar a calentarlo para hacerlo sufrir, mi hermana iba a intentar calentarlo cada vez que quiera algo sin saber que la habían descubierto lo putita que era, y sin saber que iba a ser puesta a prueba a ver qué tan buena nena resultaba. Se venía también el viaje a la costa… yo me estaba empezando a desesperar. Las sorpresas continuarían, de eso estaba seguro.

Continuara.

2 comentarios - Una historia, varias putas, varios cornudos. Solo el inicio.

josemma
excelente... espero la otra parte!!! van puntos +10
mikeness
lista!
0Punk-Lactal0
Uf! Interesante relato! Espero la continuación.
mikeness
ya esta el nuevo!