Caperucita roja y el lobo 3
Y finalmente sonó el timbre.
-Estoy linda? -dijo Denisse mirándose en el espejo. y se fue a atender. yo solo podía escuchar lo que hablaban abajo.
-Adelante Omar pase por favor...
-hola linda... y tu marido?
-Tuvo que trabajar...
-Bueno no hay problema, que linda te vestiste para mí...
-No, me visto así porque me gusta estar linda... no es para usted... no se equivoque... usted fue bueno con nosotros y me pareció que estaba bien que viera como quedo nuestra casa... pero nada más... no se equivoque... -y rápidamente agregó- Quiere tomar algo?
-Tenes cerveza... así brindamos...
Denisse fue a buscar sirvió las copas y brindaron.
-No suelo tomar... me pone alegre enseguida... -dijo Denisse.
-Que bueno... además de hermosa, alegre... sos imparable...
Denisse no dijo nada. estuvieron un rato en silencio y después Denisse lo llevó a recorrer el piso de abajo.
-Porque no me mostras tu cuarto... a ver como quedó...
Los escuche subir las escaleras, entro primero al cuarto Denisse, Omar entró detrás de ella cerró la puerta con llave y se la guardo en el bolsillo de su pantalón.
-Que hace Omar? me parece que se equivoca.
-Te pusiste un vestido muy lindo... porque no lo modelas un poco para mí, caminas un poco... te lo sacas sensualmente...
-Me parece que usted se equivoca...
-No tenemos todo el día... yo te miro así desde la puerta... no me acerco... sacate el vestido lentamente... deja caer los breteles de los hombros y cae solo. -Denisse lo miro con cara de perra-
-De frente a ud o de espaldas? pero no se acerca verdad?
-No. no me acerco... sacatelo despacito de espaldas y después te das vuelta...
-Después se va a ir y no me molesta más?
-Vemos después... ahora hace lo que te dije... -me dí cuenta que a Denisse la calentaba mucho que le hablaran con autoridad. parecía que eso la deshacía. y obviamente Omar también se daba cuenta. Denisse corrió primero un bretel y después dejo caer el otro, lentamente dejó deslizar el vestido por su cuerpo.
-Muy bonito... ahora date vuelta... -Denisse se dio vuelta y puso una mano tapándose su conchita sobre la ropa interior y otra sobre sus pechos.- Baja las manos... como te sentís?
-No se... me siento expuesta...
-Date vuelta ahora...
-Para qué?
-Date vuelta... -el se empezó a acercar hasta quedar parado detrás de ella a unos centímetros. el se quedó parado ahí sin hacer nada unos instantes.- Da un paso para atrás, y ella tocó su cuerpo y al hacerlo el pasó su mano derecha abrazándola por su vientre y la izquierda arriba de sus pechos.
-Dejeme... dejeme... -decía Denisse empujando su colita contra el bulto de él, lo que obviamente lo calentaba más aún.
-Seguro te voy a dejar... pero primero te voy a acariciar un rato.- y empezó a jugar con su mano derecha en su conchita, por dentro de la tanga y a acariciar con la otra sus pechos. de a ratos sacaba su mano derecha que ya la estaba dedeando y le daba sus dedos a chupar. El la sentó en la cama, le bajo la tanga y arrodillado a los pies de Denisse empezó a deborarle la concha como un desesperado, los gemidos de Denisse iban en aumento y después le apretaba la cabeza contra su almejita.
-Si que rico... seguí así... me gusta sentir tu lengua... -Denisse tenía los ojos cerrados y noté en omar una sonrisa de triunfo. el siguió un largo rato en lo suyo, luego se puso de pie, se bajo sus pantalones y sus boxers, apareció una pija, bastante gruesa, de largo normal.
-Ponete un forro... en la mesa de luz de mi marido... en la de al lado del espejo hay. lo vi pasar a centímetros del espejo, agarró los forros de mi mesita y se puso uno, Denisse se acomodó acostada sobre la cama, se saco la tanga y el sujetador. El se puso el forro y se acomodó sobre ella su panza caía derramada sobre ella, pero su pija no tardó en perderse en la intimidad de mi mujer.
-Que bien me aprieta tu conchita... que jugosa que sos... estás caliente putita...?
-Me gusta la pija... -dijo y entró un orgasmo muy profundo, mientras yo tenía mi primer orgasmo sin tocarme. que vergüenza sentía y sabía que esto solo podía agravarse, me saqué el forró lo ate, mi pija seguía dura y me puse otro.
El se salió de Denisse y le dijo que se pusiera en cuatro, como la perrita que era. Denisse hizo caso enseguida.
-Que linda estas... move esa colita dale... -Denisse se movía sensualmente provocandolo. el apoyo su pansa sobre la cola de Denisse y jugaba con su pija por su rajita.- Si la querés pedila...
-Damela...
-Que cosa?
-Tu pija...
-Que hago?
-Dame tu pija.... cogeme...
El se la metió y empezó a cogerla a lo bruto agarrándola de las caderas y la cintura de Denisse que es realmente fina, deliciosa. Cuando el estaba por llegar se salió y le dijo que se arrodillara en la cama. se puso de pie en la cama, se sacó el forro y empezó a pajearse delante de la cara de Denisse.
-Abrí la boquita... -ella la abría y sacaba la lengua de a ratos esperando su descarga. El empezó a escupir su leche parte entró en su boca, parte salpico su cara y sus pechos.- Siiii aaaaahhhhh. que rica putita sos... que pechos preciosos... toma mi leche putita... - yo empecé a pajearme frenéticamente y tuve mi segundo orgasmo, cuando el le salpicaba su leche por toda la cara y los pechos. Finalmente se la dio a chupar, después descansaron un minuto, Denisse le dijo que yo estaría por llegar que se tenía que ir, el se cambió y le dijo que le gustaba lo agradecida que era. Ella todavía desnuda lo acompaño hasta abajo, mientras yo me sacaba el forrito y lo ataba. Ella abrió el placard desde afuera y yo lo abrí desde adentró, me dijo que le diera los forritos, le dí los dos forros.
-Uyyyy cuanta lechita que echaste... -y me dio un beso con restos de semen de Omar.- Ahora vamos a descansar un ratito, después nos duchamos y salimos a cenar, te parece?- Se tiró en la cama y me hizo apoyar mi cabeza en sus pechos que estaban salpicados por la leche de Omar.- Descansa un ratito... te gustan mis pechos? porque no los chupas? -le dije que prefería que no.
Después se levantó y fue caminando muy sensualmente hacia el baño.
-Vení amor... me siento sucia... necesito que me limpies bien... porque todo lo que hago.... lo hago por tu culpa... La alcance en el baño, los dos entramos a la ducha.
Y finalmente sonó el timbre.
-Estoy linda? -dijo Denisse mirándose en el espejo. y se fue a atender. yo solo podía escuchar lo que hablaban abajo.
-Adelante Omar pase por favor...
-hola linda... y tu marido?
-Tuvo que trabajar...
-Bueno no hay problema, que linda te vestiste para mí...
-No, me visto así porque me gusta estar linda... no es para usted... no se equivoque... usted fue bueno con nosotros y me pareció que estaba bien que viera como quedo nuestra casa... pero nada más... no se equivoque... -y rápidamente agregó- Quiere tomar algo?
-Tenes cerveza... así brindamos...
Denisse fue a buscar sirvió las copas y brindaron.
-No suelo tomar... me pone alegre enseguida... -dijo Denisse.
-Que bueno... además de hermosa, alegre... sos imparable...
Denisse no dijo nada. estuvieron un rato en silencio y después Denisse lo llevó a recorrer el piso de abajo.
-Porque no me mostras tu cuarto... a ver como quedó...
Los escuche subir las escaleras, entro primero al cuarto Denisse, Omar entró detrás de ella cerró la puerta con llave y se la guardo en el bolsillo de su pantalón.
-Que hace Omar? me parece que se equivoca.
-Te pusiste un vestido muy lindo... porque no lo modelas un poco para mí, caminas un poco... te lo sacas sensualmente...
-Me parece que usted se equivoca...
-No tenemos todo el día... yo te miro así desde la puerta... no me acerco... sacate el vestido lentamente... deja caer los breteles de los hombros y cae solo. -Denisse lo miro con cara de perra-
-De frente a ud o de espaldas? pero no se acerca verdad?
-No. no me acerco... sacatelo despacito de espaldas y después te das vuelta...
-Después se va a ir y no me molesta más?
-Vemos después... ahora hace lo que te dije... -me dí cuenta que a Denisse la calentaba mucho que le hablaran con autoridad. parecía que eso la deshacía. y obviamente Omar también se daba cuenta. Denisse corrió primero un bretel y después dejo caer el otro, lentamente dejó deslizar el vestido por su cuerpo.
-Muy bonito... ahora date vuelta... -Denisse se dio vuelta y puso una mano tapándose su conchita sobre la ropa interior y otra sobre sus pechos.- Baja las manos... como te sentís?
-No se... me siento expuesta...
-Date vuelta ahora...
-Para qué?
-Date vuelta... -el se empezó a acercar hasta quedar parado detrás de ella a unos centímetros. el se quedó parado ahí sin hacer nada unos instantes.- Da un paso para atrás, y ella tocó su cuerpo y al hacerlo el pasó su mano derecha abrazándola por su vientre y la izquierda arriba de sus pechos.
-Dejeme... dejeme... -decía Denisse empujando su colita contra el bulto de él, lo que obviamente lo calentaba más aún.
-Seguro te voy a dejar... pero primero te voy a acariciar un rato.- y empezó a jugar con su mano derecha en su conchita, por dentro de la tanga y a acariciar con la otra sus pechos. de a ratos sacaba su mano derecha que ya la estaba dedeando y le daba sus dedos a chupar. El la sentó en la cama, le bajo la tanga y arrodillado a los pies de Denisse empezó a deborarle la concha como un desesperado, los gemidos de Denisse iban en aumento y después le apretaba la cabeza contra su almejita.
-Si que rico... seguí así... me gusta sentir tu lengua... -Denisse tenía los ojos cerrados y noté en omar una sonrisa de triunfo. el siguió un largo rato en lo suyo, luego se puso de pie, se bajo sus pantalones y sus boxers, apareció una pija, bastante gruesa, de largo normal.
-Ponete un forro... en la mesa de luz de mi marido... en la de al lado del espejo hay. lo vi pasar a centímetros del espejo, agarró los forros de mi mesita y se puso uno, Denisse se acomodó acostada sobre la cama, se saco la tanga y el sujetador. El se puso el forro y se acomodó sobre ella su panza caía derramada sobre ella, pero su pija no tardó en perderse en la intimidad de mi mujer.
-Que bien me aprieta tu conchita... que jugosa que sos... estás caliente putita...?
-Me gusta la pija... -dijo y entró un orgasmo muy profundo, mientras yo tenía mi primer orgasmo sin tocarme. que vergüenza sentía y sabía que esto solo podía agravarse, me saqué el forró lo ate, mi pija seguía dura y me puse otro.
El se salió de Denisse y le dijo que se pusiera en cuatro, como la perrita que era. Denisse hizo caso enseguida.
-Que linda estas... move esa colita dale... -Denisse se movía sensualmente provocandolo. el apoyo su pansa sobre la cola de Denisse y jugaba con su pija por su rajita.- Si la querés pedila...
-Damela...
-Que cosa?
-Tu pija...
-Que hago?
-Dame tu pija.... cogeme...
El se la metió y empezó a cogerla a lo bruto agarrándola de las caderas y la cintura de Denisse que es realmente fina, deliciosa. Cuando el estaba por llegar se salió y le dijo que se arrodillara en la cama. se puso de pie en la cama, se sacó el forro y empezó a pajearse delante de la cara de Denisse.
-Abrí la boquita... -ella la abría y sacaba la lengua de a ratos esperando su descarga. El empezó a escupir su leche parte entró en su boca, parte salpico su cara y sus pechos.- Siiii aaaaahhhhh. que rica putita sos... que pechos preciosos... toma mi leche putita... - yo empecé a pajearme frenéticamente y tuve mi segundo orgasmo, cuando el le salpicaba su leche por toda la cara y los pechos. Finalmente se la dio a chupar, después descansaron un minuto, Denisse le dijo que yo estaría por llegar que se tenía que ir, el se cambió y le dijo que le gustaba lo agradecida que era. Ella todavía desnuda lo acompaño hasta abajo, mientras yo me sacaba el forrito y lo ataba. Ella abrió el placard desde afuera y yo lo abrí desde adentró, me dijo que le diera los forritos, le dí los dos forros.
-Uyyyy cuanta lechita que echaste... -y me dio un beso con restos de semen de Omar.- Ahora vamos a descansar un ratito, después nos duchamos y salimos a cenar, te parece?- Se tiró en la cama y me hizo apoyar mi cabeza en sus pechos que estaban salpicados por la leche de Omar.- Descansa un ratito... te gustan mis pechos? porque no los chupas? -le dije que prefería que no.
Después se levantó y fue caminando muy sensualmente hacia el baño.
-Vení amor... me siento sucia... necesito que me limpies bien... porque todo lo que hago.... lo hago por tu culpa... La alcance en el baño, los dos entramos a la ducha.
1 comentario - Caperucita roja y el lobo 3