Mi compañero del colegio, mi amante II

¿Ya leyeron la primera parte de este relato? Acá lo tienen: Mi compañero del colegio, mi amante I

Ese domingo al llegar de regreso de ese viaje maravilloso, mi cabeza explotaba, no podía creer lo que había pasado, y moría por terminar lo que habíamos empezado. Tuve que clavarme terrible paja para aliviar por lo menos un poco la tensión.

Al martes siguiente, nos volvemos a ver en el colegio, con miradas cómplices y algunos roces cuando nadie miraba. Los dos estábamos completamente seguros de lo que pasaría en algún momento no muy lejano.

La mañana transcurrió dentro de lo posible con normalidad, hasta que llegó la hora de la salida. Todos se apresuraron a irse rápidamente, pero Pablo y yo no estábamos con tanto apuro. Apenas nos miramos y entendimos que iba a pasar. Salí tranquilamente, sabiendo que él me seguiría, y entré al baño masculino. Apenas entre, me dirigí a un local donde no nos vería nadie y también podría vigilar en el caso de que alguien se acercara. 

En el momento que entra Pablo, lo agarro de su camisa y le como la boca. Me explotaba la cabeza, porque éramos dos tipos totalmente masculinos, que pasábamos todo el tiempo como heteros, pero que en aquel momento estábamos fundidos en un beso pasional donde su barba me provocaba aún más calentura.

Sabíamos que no podríamos pasar al nivel que deseábamos en aquel lugar y en aquel momento ya que no era 100% seguro, pero aunque sea podíamos repetir un poco lo anterior.

Rápidamente le desprendo el pantalón y me trago su pija con voracidad, disfrutando de aquel delicioso pedazo de carne que tenía en la boca. Tanta era la calentura, que prácticamente me trague todos sus, aproximadamente, 20 cm de pija con un grosor impresionante.

Estaba decidido a tragarme todo su néctar, la calentura hablaba más alto, pero esta vez quien se adelantó a frenarme fue él. No en vano, ya que me tocaba a mí recibir el mejor pete de mi vida. Se atragantaba con ganas, dejándome la chota bien mojada y súper sensible, con lo que me costó mucho no explotar en un lechazo fulminante.

Lo freno, lo doy vuelta y lo pongo pegado a la pared, apoyándole mi chota, que a esta altura estaba por las nubes, en su hermosa cola mientras lo manoseaba por entero y le besaba la nuca, aumentando a 300% toda la tensión sexual que había en aquel baño.

En cuestión de un segundo de distracción, Pablo se suelta, me domina y me coloca contra la pared totalmente entregado. No solo me manoseaba fuertemente y con ganas, me había bajado un poco el pantalón y encajado su enorme chota entre los cachetes de mi cola, frotándose suavemente mientras me respiraba en la nuca y en el oído, abrazándome por atrás de una forma protectora y a la vez sexual.


Todo esto duro apenas 15 minutos pero parecía una eternidad, de la cual ninguno de los dos queríamos salir. Justo al momento que me doy vuelta para decirle “cogeme ya”, sentimos que se aproximaba la preceptora, tuvimos que disimular e irnos muy rápido.


¿Pero piensan que esto fue todo? Por supuesto que no, la tercera es la vencida: Mi compañero del colegio, mi amante III


¿Qué les pareció esta continuidad? Sus comentarios me incentivan a contar otras experiencias para calentarlos bastante. Si quieren, manden mp y nos calentamos por whatsapp.

2 comentarios - Mi compañero del colegio, mi amante II

qoqopelado
Encantado, estaba pensande en encontrarme en esa situación de dar boca y recibir verga por ambos lados....