Cuento erótico

El otro dia tuve un sueño muy cachondo y se me ocurrió crear un cuento erotico.



Querido diario:
Hoy 25 de agosto del 2017 tuve mi primer entrevista de trabajo. No de lo que esperaba pero necesito el dinero.
Una vez en la empresa me senté a esperar. Pasaban los minutos y nadie me llamaba. Me estaba enloqueciendo, para colmo, no había llevado el curriculum.
A las 1545 hs escucho esa voz que tanto me era familiar *allá por mi pasado*. No era otro que el. Federico, mi primer novio...

Al principio no nos reconocimos. El de traje azul, corbata roja y camisa blanca. Yo de pollera gris topo, camisa blanca y mis lentes de siempre.
Me dijo que pase y que me sentara en el sillón. Me hizo esperar fácil 15 minutos. Pero volvió con un café y un chocolate. Sí, ese chocolate. *Pensé que no se acordaría*
Por mas que nos conociésemos se presentó como el gerente de recursos humanos de la empresa.

Charla va, charla viene entré en calor. El café caliente me subía la temperatura, pero recordar lo vivido con el me excitaba.
Comencé soltándome el pelo. *Recordé que a el le gustaba el pelo largo y me lo solté*.
Veía como me miraba, veía como se mordía los labios al ver mi camisa. No dudé y aproveché la situación. Me desabroche dos botones.
Me pidió el curriculum pero le dije que no lo tenía. El se enojó. Pero me sigió haciendo la entrevista igual. Era mi hora, debía calentarlo. Sabia lo que le gustaba y no pensé en nada mas que posar mi dedo indice sobre mis labios y empezar a mordermelo.

Veía que "Fefe" se estaba excitando, lo veía en su cara, lo veía en sus ojos. Me pidió que escribiera algo en un papel que tenia ahí, y lo hice. Me apoyé sobre el escritorio dejando al descubierto mi escote. Seguía sin sacarme la vista de mis pechos. Me volví a sentar y me pregunto sin escrúpulos. "Por que no trajiste corpiño?".
Jamas pensé que me había olvidado de ponerme el corpiño, pero como estaba ahí no tuve otra que hacerme la zonza y decir "ay no se, me lo habré olvidado". Acto seguido volví a meterme el dedo en la boca y lo bajé suavemente hacia mis pechos.


Emi comenzó a transpirar y yo me terminé de excitar. Me levanté para hacer otras pruebas de la entrevista. Me agarró y me dio vuelta. Puso sus manos sobre mi cintura y las llevo a mi panza. Fue subiendo hasta mis pechos, los cuales fueron fuertemente agarrados por sus manos *hace mucho no me sentía así. Las extrañaba* Saco mis senos fuera de la camisa y me dio vuelta de nuevo.

Las miro y su sonrisa cambió. Desabrocho los botones que faltaban.

Me tiro apasionadamente contra la pared y empezó a besar mis pezones que bien erectos estaban.
Me dio vuelta una vez mas y con su mano derecha toco de nuevo mi cintura, pero esta vez bajo hacia mis nalgas. Siguió bajando hasta entrar en mi vagina. Un suspiro con un fuerte "ay!!" salio de mi boca. *Realmente extrañaba sus manos. Nadie me había tocado de tal manera*

Mientras que me tocaba me preguntó: "Si te pido una lapicera que tan rápido me la darías?"

Yo, picarona y astuta decidí seguirle el juego. Agarré su miembro viril, que bastante se notaba, y seguí jugando con "emilianito". *Así lo llamaba a mis 17 años*

El, ante la situación, me retrucó la apuesta y me dijo "y si esta seca?. Como harías para que vuelva a salir tinta?" . Su brageta fue abierta por mis manos y sacaron "la lapicera" que bastante caliente estaba. Empecé a masturbarlo, pero al poco tiempo le di un consejo. "Si la mojas, la tinta se exparse mas rápido" Acto seguido mi boca tragó su pene completamente. Por varios minutos. Una vez lubricado proseguí con la masturbación, por muchos minutos.



"Va a explotar la lapicera", me dijo. Otra vez me la comí, pero esta vez por su seguridad. Esta explotó y dejó fluir la tinta. Pero Como buena secretaria que quería ser, me tragué toda la tinta. *Fefe se excitaba aun mas*

"Pasemos a la otra habitación para hablar del contrato" dijo el gerente de recursos humanos

Me agarró la mano y me llevó a otro cuarto. Me tiro en una especie de sillón y me saco la pollera gris topo. Una cola less negra y radiante traía conmigo, tapandome la futa prohibida. Mucha belleza la de la cola less, pero no duro ni un minuto pegada a mi cuerpo. Sentí Un firme lenguetazo pasar por mi vagina. Mi cara Cambio levemente.



Un dedo entró para ver que este todo bien. Lo estaba...

Introdujo otro y agudizo el placer. Tras varios minutos de trabajo intenso un fuerte "squirt" salio por mi vagina, mojandolo a el y dándole la señal.

Mi concha, bien mojadíta, permitía el paso de cualquier cosa. El me preguntó:
"Firmamos el contrato? La lapicera esta lista para cuando lo dispongas..."

Un SI raro salio de mi boca. No podía hablar. El placer me consumía de apoco.

Acto seguido su miembro penetra mi vagina feroz pero a la vez suavemente, entrando y saliendo una y otra vez.
Ninguno de los dos dudó en recordar las poses que hacíamos en la juventud. Me levanto del sillón. Me alzo al mejor estilo "koala" y me hizo sentir su fuego recorriendo mi cuerpo... Él cansado , tiro sus pertenencia del escritorio y me tiro ahí. Salvajemente me volvió a penetrar una y otra vez hasta que no pude mas y lo volví a squirtiar *no se si lo recordaba o que, pero habia cumplido mi fantasia*. Luego me volvio a acabar, pero esta vez en mis tetas. Como le solia gustar.



Nos cambiamos y nos despedimos como si no nos conocieramos. Aún espero su llamado. solo que no se si por el trabajo o por volverlo a ver ...


espero que les guste 🙂

1 comentario - Cuento erótico

DaiaXXX
buenizimo el relato.. si podes pasate por mi primer post 😳
assssa
gracias!