A mi marido le gusta ver a las chicas que salen a correr en el parquecito que está frente a nuestra casa. Le excitan las mujeres con mallones o shorcitos de yoga. Las mira por la ventana y se le pone bien dura su verga. Entonces me obliga a mamársela mientras él sigue mirando a las chicas. Se viene super rápido de la exitación que siente.
El otro día una vecina muy tontita se puso a coquetearle pensando que estaba solo. Se puso a platicar con mi marido y se acercó a la ventana. Ella hablaba de su short y le preguntaba a mi marido que si se le veía bien. Ella no tiene chichis pero está bien nalgona y piernuda. Mi marido tuvo un orgasmo bien lechoso en mi cara mientras platicaba con ella y ella ni en cuenta.
Otro día también íbamos en la camioneta de noche y estaba una jovencita como de veintitantos con sus amigas vestdas como para ir a una fiesta. Una de ellas estaba super piernuda y gordita. Era una guerita chaparrita y piernuda con un minivestido blanco y volado tan corto que se le alcanzaba a ver su calzón blanco cuando se movía. Mi marido estacionó la camioneta a un lado de ellas. Yo lo volteé a ver y la tenía bien parada.
Como los vidrios de la camioneta son polarizados se sacó su verga, me tomó del pelo con violencia y me obligó a mamársela. No duró ni cinco minutos y me detuvo con su mano para hacerme tragar su lechita. Me dejó toda embarrada la cara y luego me pidió que saliera a hablar con ellas.
Salí con los labios embarrados de semen y les pregunté una dirección. Las chicas ni en cuenta que yo estaba embarrada, así que al final les di las gracias cariñosamente y abracé a la de blanco. Las chicas creyeron que yo estaba borracha así que solo se rieron. Pero yo me limpié el semen en su ropa.
Luego me subí a la camioneta y avanzamos. Desde la esquina siguiente vimos cómo la chica sintió el aroma a semen de mi marido y se olía la blusa. Como le había salido bien espeso ese día se tocó y se embarró sus dedos y luego los olió. Entonces se vio cómo les habló a sus amigas y como que les preguntaba qué era. Sus amigas también olieron el semen de mi hombre y se vio que a una de ellas le dio mucho asco y como que quiso vomitar.
Eso excitó a mi marido y ya en casa me dio una culiada dura como le gusta darme.
El otro día una vecina muy tontita se puso a coquetearle pensando que estaba solo. Se puso a platicar con mi marido y se acercó a la ventana. Ella hablaba de su short y le preguntaba a mi marido que si se le veía bien. Ella no tiene chichis pero está bien nalgona y piernuda. Mi marido tuvo un orgasmo bien lechoso en mi cara mientras platicaba con ella y ella ni en cuenta.
Otro día también íbamos en la camioneta de noche y estaba una jovencita como de veintitantos con sus amigas vestdas como para ir a una fiesta. Una de ellas estaba super piernuda y gordita. Era una guerita chaparrita y piernuda con un minivestido blanco y volado tan corto que se le alcanzaba a ver su calzón blanco cuando se movía. Mi marido estacionó la camioneta a un lado de ellas. Yo lo volteé a ver y la tenía bien parada.
Como los vidrios de la camioneta son polarizados se sacó su verga, me tomó del pelo con violencia y me obligó a mamársela. No duró ni cinco minutos y me detuvo con su mano para hacerme tragar su lechita. Me dejó toda embarrada la cara y luego me pidió que saliera a hablar con ellas.
Salí con los labios embarrados de semen y les pregunté una dirección. Las chicas ni en cuenta que yo estaba embarrada, así que al final les di las gracias cariñosamente y abracé a la de blanco. Las chicas creyeron que yo estaba borracha así que solo se rieron. Pero yo me limpié el semen en su ropa.
Luego me subí a la camioneta y avanzamos. Desde la esquina siguiente vimos cómo la chica sintió el aroma a semen de mi marido y se olía la blusa. Como le había salido bien espeso ese día se tocó y se embarró sus dedos y luego los olió. Entonces se vio cómo les habló a sus amigas y como que les preguntaba qué era. Sus amigas también olieron el semen de mi hombre y se vio que a una de ellas le dio mucho asco y como que quiso vomitar.
Eso excitó a mi marido y ya en casa me dio una culiada dura como le gusta darme.
1 comentarios - Las cochinadas de mi marido