El amor de mi vida, la ninfómana 2

Después de que la amiga no echo de la casa, ella me invita a tomar a su casa, vivía en frente, entramos, todo impecable, me pidió que no haga ruido porque dormían los hijos y fuimos a un patio grande, en la parte de atrás tenía una mesita, dos sillas y trajo unas virras, un equipo de música chico y ahí nos quedamos, ella me contaba boludeces y yo le miraba la boca, me vuelve loco su boca, seguíamos tomando y ya me imaginaba comiéndole esa boca hermosa, ella lo notaba pero no decía nada, no aguante más y le comí la boca, ella solo se dejó, y seguí por más. La agarre de la nuca y le mordí un labio, ahí soltó un tímido gemido de dolor, me provocaba morderla, cogerla de la forma más salvaje, y empecé a manocearle las tetas, las tiene firmes y reaccionaron sus pezones, bien carnosos y duros, se los pellizque , soltó otro gemido y se mordió los labios,
Sin dudarlo le abrí la camisa y empecé a comerle las tetas, ella con mucha dulzura me agarró de la cabeza para que la poye en su mano mientras le chupaba los pezones, cuando estaba en eso, siento un rato sabor, algo dulce, y me alejo para mirar, estaba brotandole leche de las tetas, nunca me había pasado, pero mi pija enloqueció, sentí una locura indescriptible, la levanté y la puse contra la pared, le baje la calza y empecé a chuparle el orto, una delicia, suave perfumado, y ella solo lo paro, no pude evitarlo pero le apoye la pija, lo unte frotándolo en su concha y se lo apoye en el orto, le separé los cachetes y le metí la cabeza, ella ahogo un grito profundo, y empezó a pechar su cola contra mi pija, la tome firme de las caderas y empecé a cogerla con toda mi fuerza, con furia, y desesperación, mi pija peleaba por entrar, su orto por no dejarla y gane la batalla en cuatro pechones, le metí la pija enterra, ella grito y lloraba, pero no dejaba de pechar su orto contra mi pija, sentí algo corriéndome por las piernas, era sangre que salía de su orto, literalmente le rompí el culo, y ella me dijo dame fuerte, no puedo explicar esa locura, me la cogí lo más fuerte que pude y ella empezó a acabar cada 5 bombazos, sentía ese orto un paraíso para la pija, y sin más se lo llene de leche, me salían chorros interminables, y no quería sacarla así que seguí cogiéndola, ella se empezó a pajear la concha y a gemir como putita, lo que más loco me volvía y yo seguía rompiendole bien el orto, volví a descargar toda la leche que me quedaba, y así saque mi pija, era un puñal lleno de sangre y leche, y ella al verla así se tiró de cabeza y empezó a chuparmela arrodillada mientras se pajeaba la concha y acababa como perrita en celo, me dejó la pija impecable.
Una vez que terminó, empezó a untarse los dedos en su concha y a chuparselos, me miraba avergonzada agachando su cabeza, pero no podía parar de untarse los dedos por más vergüenza que sentía.
Yo solo me senté en la silla, me prendí un cigarrillo y la miraba, no dejo de untarse los dedos llenos de leche y sangre hasta que salían limpios, y una vez que dejó su concha impecable hacia lo mismo con su orto, se subió la calza y su concha estaba bien marcada, los labios inchados, vino se me sentó arriba y me dijo quiero más papi, cogeme la cola, la pija no me daba más, bancame un toque y seguimos, y se enojo echándome de la casa,
Intente hablar hacerla entrar en razón pero me echo,
Así paso mi primer encuentro. La pija me quedo destruida pero sentía una locura indescriptible
Los leo.

2 comentarios - El amor de mi vida, la ninfómana 2

ferchus2008
hola que buen relato,pasame foto de la ninfomana por chat
juanybarro +2
excelente y increíble, me gusto .
es real?