Con mi mujer adoptamos una adolescente de 18 años (2)

La convivencia con Melisa se hizo llevadera, al no estar comunicada la piecita con nuestra casa no teníamos mucho contacto. Para mi era mucho mejor, nos evitaba problemas, y la realidad es que nos faltaba experiencia en el tema de tener inquilinos.

Pero con el pasar de los días Sara se puso muy maternal con Melisa y para mi gusto un poco intensa. Le empezó a llevar el almuerzo y cena todos los días. Quedaron en ver pelis juntas los sábados y empezaba a trazarse entre ellas algo parecido a una amistad incipiente.

Tuvimos una charla sobre nuestra nueva inquilina mientras almorzábamos.

─Sara, no mal acostumbres a Melisa, después va a pensar que es nuestra obligación darle de comer.

─No lo hago por obligación, me despierta mi lado maternal. Vos sabés que nunca te pude dar hijos, y bueno, pensé que podía ser una buena idea darle algo de contención a la chica.

─¿Segura que es tu lado maternal solamente? ─dije con un sesgo de incredulidad─. No nos metas en quilombos, ya veo que después la piba nos acusa de cualquier cosa.

─¿De que nos va a acusar? ¿De tener un trato amable y contenerla? Igualmente el otro día pasó algo. Espero que no te enojes.

─¿Qué hiciste ahora?

─Nada malo, entré a llevarle unos tallarines y estaba llorando, pensé que le podía haber pasado algo grave, pero parece que estaba muy saturada con el tema del estudio. Dice que no está pudiendo llevar el ritmo de las clases. ─dijo Sara, como demorando algo que no se animaba a decirme por miedo a mi reacción─. Le dije que era normal, que la educación universitaria era complicada. Que yo había dejado contaduría por que no me daba la cabeza y era muy difícil, además ya laburaba con el tema de spinning. Así que le dije que si no quería ir a hacer bici conmigo para que se olvide un rato de todo.

─¿Y qué más pasó?

─Bueno, me siguió contando de su familia. Su tía Nanu la crió, mi compañera del colegio. No tiene mamá por que murió cuando ella tenía tres años en un accidente, y al padre nunca lo conoció. Practicamente se crió con su abuela, por que Nanu trabajaba todo el día. Dice que en su pueblo pasó cosas muy traumáticas, tuvo relaciones conflictivas con chabones grandes, vivió la noche, tuvo que laburar desde los diez años para ayudar en la casa. Yo le dije que con nosotros nunca más le va a pasar nada malo, que la vamos a cuidar.

─¿No te parece demasiado? Hacés cosas sin consultarme, te dije que no te comprometieras así. Es solo una piba que le alquilamos una piecita, no somos Caritas ─dije con un leve fastidio.

─Pero amor… Yo te prometo que si me dejás seguir cuidando la nena, el más favorecido vas a ser vos. Te voy a dar la sorpresa de tu vida y el mejor regalo que jamás te hicieron. Dejáme cuidarla como si fuera una hija adolescente, vos sabés que siempre quise ser mamá.

─Siento que hay algo que no me estás contando.

─Bueno, pero prométeme que no te vas a enojar. O si te vas a enojar que sea cuando me cogés, pero no quiero que estemos mal. Todo lo que hago en la vida es para que te sientas orgulloso de mi.

─Exagerada!

─Cuando estaba llorando en la cama la abracé y la puse contra mis pechos, y me llenó las tetas de lágrimas. Entonces agarré una toalla y le sequé las lágrimas y no pude aguantarme y le dí un beso. No sé como se dio, primero le bese la frente, después la punta de la naríz, después un par de picos hasta que se tocaron nuestras lenguas. Y terminamos chapando furioso, después se durmió en mi falda mientras le acariciaba el pelo. ¿No te pone celoso amor? ¿Qué me haya chapado una nena? ¿No te gustaría a vos? Besar a una chiquita, así, de dieciocho, apenas legal, con aliento a chicle de tutty frutty? Seguro que su conchita nuevita también debe tener gusto a tutty frutty o a vainilla, con los pliegues bien finitos, debe apretar mucho. ¿No te gustaría?

─¿Vos te das cuenta que la piba nos puede denunciar? Quizás por sacarnos unos pesos nos caga la vida. No te podés confiar así de alguien que apenas conocemos.

─No amor, dejáme terminar y te explico por qué. No soy tan boluda como pensás.

─Ok, ahora explicáme, ¿dónde está lo maternal? Te la querés coger a la pendeja esa, extrañás tu lado lésbico dominante, eso lo puedo entender, pero eso lo conseguís en cualquier club. Podemos buscar una mina por internet. No sé por que necesariamente tiene que ser esa pendeja. Además sigo sin entender por que lo mezclás con el tema de la maternidad. Las madres nos se cogen a las hijas.

─Bebé, yo quiero ser mamá, pero podemos jugar con ella también. No tenemos lazos sanguíneos. No veo por qué no podemos hacer las dos cosas. Además, no me dejás que te termine de contar.

─La verdad que después del beso dudé si me había mandado una cagada. Eso fue el miércoles. No te conté por que llegáste muy cansado del laburo y no te quería preocupar. Castigáme después por esconderte cosas, necesito que me pegues cachetazos y quedar marcada como para no poder salir a la calle. Quiero que piensen que me pegas y yo no digo nada por miedo. Es mi fantasía.

─ ¡Estás loca!

─Bueno, dejáme terminar, ves que me interrumpís a cada rato, encima me decís cosas que me calientan, me dan ganas de pajearme o de meterme cosas en el culo. De que me agarres del pelo y me arrastres así hasta el dormitorio y me violes.

─Nadie te interrumpe, Sara, vos sola te inventas tus historias. Dale, decíme lo que me tenés que decir de una vez.

─Como te dije después del beso dudé si me había mandado una cagada, pero al otro día cuando le llevé el desayuno y le pregunté si iba a venir a la clase de spinning me hizo pasar al cuarto. Estaba con el toallón, de repente veo que se quedó desnuda y se empezó a poner crema. Hasta yo que soy putisima me sorprendí. Me dijo que no iba a poder ir a la clase de spinning por que no tenía ropa para hacer gimnasia. Mi amor, tiene una sola muda esa chica, es muy humilde, se lava la ropa y se la vuelve a poner. No podemos permitir eso. ¿Cómo permitís que tu hija ande así sin ropa? Le quiero comprar de todo, pantalones, faldas, blusas, abrigos ahora que estamos en invierno, pijamas, ropa intima. Ropa de salir necesita, otra para la facu, ropa de deporte. ¿Sabías que el sueño de mi vida siempre fue ir de compras con mi hija?
Me preguntó si hacía mucho estábamos casados. Le dije que hace 10 años, que siempre soñamos tener una hija pero no se nos dio. Puso cara triste y dijo que a ella también le hubiese gustado tener papá y mamá. Me dijo que vos le parecías un tipo muy fachero, como los de las peliculas y que yo parecía modelo. Que hacíamos linda pareja, que si hubiéramos tenido hijos habrían tenido mucha suerte.

─No es mi hija, tampoco tuya. Dale, terminá de una vez.

─Bueno, entonces le digo que yo tenía un poco de ropa que le podía ir. Que antes vendía ropa deportiva y me había quedado un conjuntito S como para ella. Era una calza blanca y un topcito celeste, no sabés lo buena que estaba. Me dió orgullo, te juro. Podría ser mi hija te digo, tremendo mujerón, le saqué unas fotos para vos. Posaba y todo. Entonces hicimos la clase, la piba tiene muchísimo estado físico, está barbara, metió mejor tiempo que mis alumnas que llevan tres años.
Pero lo más raro no fué eso.
Cuando terminó la clase estábamos transpiradas y se empezó a zarpar. Me dijo que tenía linda cola, que estaba muy dura, como una piedra, que a ella le gustaría tenerla así, y me empezó a sobar el culo, con ganas, ¿entendés? No era solo tocar. Estaba babosa, caliente, y a mi me terminó poniendo igual. Después me miró a los ojos y me tiró que tenía las tetas grandes, que el sueño de ella era tener tetas grandotas y me metió las manos por debajo de la remera y me las amasó la pendeja zarpada. ¿Podés creer? Después se fue como si nada. Me quedé congelada, eso que no soy una mina frígida, pero la bebita me da más de lo que espero. Supera mis expectativas. Lo mejor es que todo eso quedó en las cámaras del gimnasio. Para que después no digas que nos va a denunciar y todo ese cuento. Hay videos de la mina prácticamente abusándose de tu mujer. Así que dejá de ser tan aburrido y medido para todo. Siento que es mejor que la familia que siempre deseamos. Vamos a tener una novia e hijita al mismo tiempo.
Me faltó contarte algo. Esto ya es lo último y te juro que no hay más.

─Ajam

─Bueno, viste que ella está saturada con el tema del cbc. Le dije que vos la podías ayudar en matemática. Tengo una idea, ponéte el shorcito ese de fútbol, esperala así, sin bóxer, que se marque como si tuvieras un desodorante, quiero que empieces a calentarla. Tu pija es enorme, se te va a marcar en el pantalón y a ella se le va a hacer agua la boca. Tenemos que aprovechar todas las ventajas que tenemos.

─Sara, no todas las minas son iguales con respecto a las pijas grandes.

─Mi abuelo decía que somos todas putas, y una mas puta que la otra, y no se equivocaba. A todas nos gustan las pijas grandes, cabezonas, derechas, preciosas, bah como la tuya. En el contexto indicado somos todas actrices porno. Se amable con ella, tratala dulce, si te pregunta por el precio de las clases decíle que lo hable conmigo. Estaba con culpa de no poder pagar. Yo pienso que nos puede pagar las clases chupándote la pija, un buen petizo y cuentas saldadas. Pero no te acobardes, y si te toca o te quiere petear antes no des muchas vueltas y pelá.
Creo que Dios nos puso en el camino a Meli. Es todo lo que necesitábamos en nuestro matrimonio.

─¿Me mostrás las fotos que le sacáste?

─¡Sabía que eras un hijo de puta, eso me encanta de vos! Te las muestro pero primero me tenés que castigar, te estuve escondiendo lo que pasó con la nena. Fui una mala esposa, mi abuelo se hubiera sacado el cinturón y me habría enseñado a no guardar secretos. ¿Querés que te muestre las fotos cuando me estés cogiendo así pensás que soy Meli y me llenás la concha de leche?

4 comentarios - Con mi mujer adoptamos una adolescente de 18 años (2)

alfgus116 +1
Ufff, que caliente esto
A full me parò la pija
Gracias-
christostoichkov +1
Gracias a vos por comentar!
TheOne1511 +1
Recaliente termino espero la continuacion
christostoichkov +1
Muchas gracias, se viene pronto!