Mi mejor amiga XIX

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Sigan 😁

Las historias avanzan, sobre todo el capítulo 3 MPM.
Las causas del tiempo que pasa entre publicación y publicación, ya las saben. Sepan disculpar pero no hay otra alternativa 😬
De todas formas, aún queda mucho por contar.
Todo a su tiempo…

Saludos y gracias







Mi mejor amiga. Capítulo XIX


Mis planes se habían visto truncados, al menos por el momento.
Qué oportuna clausura del predio…
Me sentía muy motivado para agarrar al hijo de puta ese. No podía manejar peor suerte.
Aunque bueno, por otro lado, veía la cara de felicidad de Eliana con la posposición de su partido y sus intenciones de llegar a jugar la final y estaba bien con eso.
Nada era mejor que verla ilusionada. Sobre todo, teniendo en cuenta el trágico momento que tuvo que pasar.
La buena noticia, es que de a poco se iba recuperando de sus lesiones. Aunque aún sentía dolor en la zona costal y en el rostro, con el correr de los días, comenzó a deambular con mayor fluidez.
La primera semana la pasó en la casa de su padre. Y era lógico.
Por un lado, el terror que sentía su progenitor era demasiado grande como para dejarla que se quede sola en su casa y, por otro, era necesario que los primeros días estuviera atendida por las limitaciones que tenía a causa de las heridas.
De más está decir, que la visité todos los días. Ahora que tenía auto y mayor comodidad y libertad para moverme, no tenía que preocuparme por el tiempo o los horarios. Podía ir a donde quisiera y cuando quisiera.
Quizá, mi suegro no pensaba de la misma forma, ya que si bien me abrió las puertas de su casa que fuera en cualquier momento, no quería que me quedara a cuidarla.
“Para eso estoy yo” expresó en una ocasión.
Pero en el fondo, con el Eli sabíamos que no era únicamente por eso. Le preocupaba más que su hija y yo hiciéramos cosas indebidas en su dulce hogar familiar…
Parecía no recordar que Eliana vivía en una casa, sola y que podía hacer lo que plazca…
En fin, era chistoso y no llegaba a molestarme en verdad.
La que sí estaba un poco, digamos, fastidiosa, era ella.
Según sus palabras, “no lo aguantaba más” al viejo. Cada 15 minutos entraba a su habitación o a dónde ella estuviera para ver si estaba bien o necesitaba algo.
También, no la dejaba hacer ninguna clase de esfuerzo. Incluso, se tomaba el tiempo para moverle la silla en la mesa para que se sentara…
Obvio que me lo contaba entre risas, ya que estaba orgullosa de su padre, pero siendo Eliana tan independiente desde muy chica, no quería saber nada con el exceso de atención. Por lo que “resistió” una semana allí, je.
Un sábado a la noche me escribió para que cuando la visitara al otro día, la regresara a su casa.
Reconozco que me asombró esa circunstancia.
¿Volver a estar sola?
No había pasado mucho tiempo desde el ataque.
YO: Estás segura, hermosa?
ELI: Sí, amor… Nada como la paz de mi casa
ELI: Además, ya estoy mejor, mirá
Seguido a esas palabras, me envió una selfie sonriendo y con el pulgar levantado.
Más allá de los moretones y magulladuras que aún tenía y que perdurarían un tiempo más, la belleza de su cara seguía teniendo ese brillo tan característico.
YO: Qué linda que sos… golpeadita y todo jaja
ELI: Jaja… Además, no voy a estar sola 😉
YO: ¿Ah, no?
ELI: Nop 😛
YO: Y quién va a ir?? 🤔
ELI: Un chico…
ELI: 😱
YO: Posta??
ELI: Sí… Uno que me gusta mucho 🥰
YO: Uhhh… Bueno…
ELI: Encima tiene auto ahora…
YO: Jajaja qué bueno! Te van a llevar a pasear!!
ELI: No sé en realidad… Se lo compró hace días y aún no me llevó 😒
YO: Jajaja es cierto…
ELI: Así que bueno, espero no te moleste que me lleve él…
El sentido del humor parecía permanecer intacto…
YO: 😪
ELI: Jajajaja
ELI: Mentiraaa
ELI: Ya tengo ganas de que me vengas a buscar 😍
YO: Yo también… Unas ganas de abrazarte y apretarte toda…
YO: Aunque todavía no puedo jaja
ELI: Jaja las costillas sí me duelen 😬
YO: Mucho?
ELI: Sí, si hago fuerza sí…
YO: Tratá de no moverte mucho…
ELI: Lo sé, pero tengo que empezar a entrenar en algún momento
Claro.
Ya sabía por dónde iba la mano.
Yo no quería ser pesimista con ella ni tampoco quitarle la ilusión, pero era bastante complicado que pudiera llegar al partido en condiciones.
Llegar curada ya era difícil…
YO: Tranqui… No es el último partido que vas a jugar tampoco…
ELI: Voy a llegar… Hoy hablé con las chicas. Todavía no saben cuando van fijar el partido porque el calendario del club está ocupado los fines de semana.
YO: ¿Ah sí?
ELI: Sí… Están viendo si pueden correr algún evento o, en el peor de los casos, buscar otra sede…
YO: Fua..
Eso era una buena noticia para ella. Sin dudas…
ELI: De la forma que sea, no creo que sea ya, ya…
YO: Bueno, bien entonces jaja
ELI: Sip 😊
YO: Te amo, hermosa…
YO: Me tenes loquito, sabes?
ELI: ❤❤❤
ELI: Yo más, bombón… Necesitaría un buen beso tuyo en este momento…
YO: Si fuese por mí, iría en este instante, pero tu viejo me va a meter un escopetazo
ELI: Jajaja
ELI: Mañana me das muchos…
YO: Olvidate 😈
ELI: Mmmm jaja
YO: Jaja
ELI: Cuando me recupere bien… Quiero ir a aprender tae kwon do o algo parecido…
¿Posta?
Me quedé con su confesión.
Pero no era mala idea.
YO: ¿Sí?
ELI: Sí, recién veía en Insta una profe de por acá cerca…
YO: Mirá…
YO: Yo me compraría un fierro, pero bueno jaja
ELI: Jjaja no estaría mal tampoco…
YO: Mmm me gusta… Chica ruda
ELI: Jajaja
ELI: 😜
YO: Hermosa…
YO: Siento una impotencia todavía…
Era cierto.
Me sentía culpable de lo que le pasó.
Yo sabía en el fondo que de haber llegado unos minutos antes, la cosa hubiera sido totalmente distinta.
Y más allá de la culpa, era la incapacidad de poder hacer algo al respecto.
En todo momento maquinaba…
Sí, claro, quizá si en ese momento aparecía yo, la plaga esa podría no haberse presentado y aguardar otro momento. Tal vez…
Pero en mi cabeza era consciente que de haber llegado y tomado in fraganti al tipo, las cosas podrían haber sido de otra manera.
ELI: Juan… Te dije que no pienses más en eso
ELI: No le des más vueltas
ELI: No sabes qué podría haber pasado
YO: Lo sé, pero igual
ELI: Te entiendo, pero ya está… Ya va a caer
YO: Sí, de eso seguro
ELI: No te preocupes más por eso… Hay otras cosas en las que podes pensar
ELI: 😘
YO: Jajaja
YO: Ah sí?
ELI: Claro 😳
YO: Sos un bombón… Ya te voy a agarrar jaja
ELI: Eso espero!! jaja
ELI: Hace bastante que no hacemos cositas 🙈
YO: Sí… Quiero 😋
ELI: Haja lindo!!
Era increíble que tan solo unos días después de semejante suceso, estuviéramos pensando en eso.
Bastante barata la había sacado.
Tuvo agallas… Y un poco de suerte también.
Pero parecía que de a poco las cosas iban a mejorar. Claro, la tranquilidad absoluta iba a llegar en el momento que capturaran al degenerado ese. Porque de algo yo estaba totalmente seguro. Que no hay dos sin tres…
Y probablemente pudo quedar molesto con la terrible y memorable defensa que Eliana le había ofrecido.
Sí…
No se iba a quedar en el molde. Yo sabía que no.
Solo era cuestión de tiempo para que se presentara otra vez.
Aunque claro, en esa oportunidad, nuevamente iba a estar yo para hacerme cargo.
Determinación…
Era eso lo que sentía…

Al otro día y, tal como le había prometido, la fui a buscar a la casa de su padre.
De más está decir que él no estaba para nada de acuerdo con la decisión de su hija.
Le insistió hasta el hartazgo que se quedara pero ella, algo cabeza dura, no cedió.
Por supuesto que buscó mi complicidad para intentar disuadirla, pero no funcionó.
Únicamente, le generó cierto consuelo el hecho de que yo me iba a mantener muy cerca de ella, en todo momento.
Esa mañana tenía un brillo en el rostro que me reconfortó.
Tenía una pollera de jean y una musculosa, blanca.
El cabello, recogido con un rodete.
Lo bella que se veía hacía que las magulladuras que dibujaban sus piernas, manos y rostro, pasaran desapercibidas.
El moretón en uno de sus ojos, comenzaba a tomar un color cada vez más claro y ya no le costaba tanto caminar. Aunque lo hacía despacio…
La sonrisa que puso al verme me alegró el día desde temprano.
Le di un beso en la boca, con cuidado, por el corte que sanaba allí.
“Hola, hermoso” me dijo.
Lucía entusiasmada.
Cargué sus cosas en el baúl mientras se despedía de su inseguro viejo.
Yo, por mi parte, le hice un gesto de que no se preocupara.
Él sabía que yo ya la había defendido una vez y que no duraría poner mi cuerpo por ella otra vez.
Por dentro pensaba, que ahora iba a cargar con una gran responsabilidad. Me encantaba hacerlo, ojo, pero tenía que ser consciente de lo que iba a venir y estar preparado.
Le abrí la puerta para que subiera al auto. Un poco por caballero, otro poco por necesidad.
Ella me sonreía y cuando lo hacía todo mi sistema nervioso comenzaba a temblar.
Era una hermosa sensación.
Antes de subir yo, su papá me llamó con la voz en alto.
“¡Juan!”
Yo me voltee y lo miré.
“Te la encargo” expresó, seguido de un gesto de que depositaba toda su confianza en mí.
Uf…
¡Qué cargo que tenía!
Por supuesto que le respondí con pasividad, dado que me sentía totalmente capacitado para hacerme cargo de la situación.
Aún no sabía si iba a quedarme todos los días con ella, pero que no me le iba a despegar tan fácilmente, eso era seguro.
Además, quería que la situación fuera lo más natural posible y no que ella se viera forzada a recibirme 24/7 por seguridad.
Yo quería que Eliana se sintiera cómoda conmigo. Que me quisiera allí…
“Qué lindo que está, te felicito” fue su primera frase arriba de mi vehículo.
YO: Gracias…
ELI: El olorcito a nuevo es fatal…- Expresó mientras se miraba el rostro en el espejito del parasol.
YO: Jeje…
ELI: Espero que no me quede marca acá…- Exclamó con algo de bronca, tocandose la zona de la piel cerca del labio.
Tenía un corte profundo allí, cicatrizado completamente con cascaritas.
YO: Por las dudes ni te toques…
ELI: Ay, pero es medio molesto jaja.- Continuó mientras se repasaba sus secuelas físicas.
YO: Te ves divina toda magulladita jaja
ELI: Jajaja bobo… Es incómodo al besarte ¿no?
YO: Para nada… Olvidate… Además, mientras más tiempò tengas la cascarita, mejor…
ELI: Puede ser… Acá en el ojo decís que no me queda nada ¿no?
La miré.
Más que observar su ojo morado, pensé en abalanzarme sobre su humanidad y besarla, je.
Estaba muy linda…
YO: No, ahí ya no creo… Ya se está lleno lo oscuro
ELI: Espero…
YO: Tranquila… Yo me preocuparía más por otra cosa…- Le dije haciendo un gesto con la mirada.
ELI: ¿Qué?
YO: Y… Cómo vas a hacer para aguantarme estos días…
Automáticamente la invadió una sonrisa de tentada.
Incluso se ruborizó.
ELI: Jajaja… ¡Lo mejor de todo esto!.- Expresó agarrandome una pierna con dulzura y dándome un lento beso en la mejilla.
Cómo no morirme de la ternura…
YO: ¿Sí?
ELI: Sí, la otra razón para volar de lo de mi viejo jaja
YO: Jajaja bombón…
Dejó su mano apoyada en mí por el resto del viaje.
Podía ver en su rostro ese sentimiento de paz, alivio y bienestar.
Eso, de alguna manera, me provocaba tranquilidad.
Y tampoco iba a estar para nada mal que durante algunos días hiciéramos “vida de pareja”.
¡Qué loco!
No había pasado casi nada de tiempo desde que comenzamos a estar juntos y ya habíamos vivido un montón de cosas terribles.
Es más, ambos ya tenías marcas de ello, porque el puntazo que recibí en el costado, iba a permanecer conmigo toda la vida.

Eliana permaneció calma durante todo el viaje. Recién cuando nos encontrábamos recorriendo los últimos metros se puso algo impaciente.
Lo noté en su mirada.
Y no era para menos…
Cuando pasábamos por el sector donde había sido atacada, me di cuenta de que los nervios estaban latentes en ella. Miraba para todos lados.
La tomé del brazo y le hice un mimo en un claro signo de seguridad.
No dijo nada, pero sabía que tenía un pequeño nudo en la garganta.
Subí el auto de culata a la vereda y bajamos.
ELI: Home, sweet home…- Expresó sonriendo.
YO: Nada como estar en casa…
Aún se la notaba intranquila. Creo que escaneó toda la cuadra con la mirada…
Yo opté por no decirle nada. No tenía por qué estar recordándole a cada segundo que ya todo había pasado y que no debía preocuparse.
Además, sabía que contaba conmigo para lo que fuera…
Mientras entraba sus pertenencias, ella se quedó en la puerta saludando algunos vecinos que se acercaron a ver cómo estaba.
Ella era muy querida en el barrio, sobre todo en esa cuadra, siendo que ella vivía sola desde muy chica. Como si fuera la niña mimada de los vecinos, je.
En el interín, abrí todas las ventanas ya que todo estaba bastante tétrico, luego de tantos días. No quería que entrase en una depresión ni bien ingresara.
Enseguida se me ocurrió una cosa bastante productiva.
Cuando entró en la casa, le propuse salir a comprar inmediatamente, pero yendo caminando.
Al principio me miró con una sonrisita nerviosa, pero dijo que sí.
A solo unas cuadras había un supermercado y se necesitaban bastantes cosas.
Una vez que se instaló, fuimos.
Fue uno de los momentos más tiernos de los últimos días.
Todo el viaje de ida y vuelta, caminó junto a mí, agarrándome la mano.
Durante el primer tramo, casi no habló. Miraba para atrás constantemente y apoyaba su cabeza en mi hombro.
Ya en el segundo, estaba bastante más suelta y conversamos fluidamente.
Para mi, era importante eso.
YO: ¿Podes respirar bien? ¿No te jode?
ELI: Sí, sí… Por ahora no me molesta.
YO: Entonces ¿cuando arrancas a entrenar? jaja
ELI: Vos reíte…- Exclamó haciendo una mueca.
YO: Jaja de verdad te pregunto…
ELI: Lo más pronto posible… Cuando me pueda agachar jajaja
YO: Jajaja tranqui…
ELI: ¿Vos me vas a ayudar?.- Dijo mirándome con cara de angelito. Me la morfaba ahí…
YO: Obvio, bombón…
ELI: Che, la gente nos mira…- Soltó como con carpa
Me empecé a reir.
ELI: ¿Qué?
YO: Deben pensar que soy un novio golpeador…-
La risa pareció llegar a ella, pero de una manera poco común.
Se tentó, mal.
YO: “Salí de ahí, Maravilla” deben pensar cuando te miran…
ELI: ¡Pará, boludo!.- Exclamó riendose al punto de casi llorar de la risa.
Pocas veces la había visto así, pero me gustaba.
YO: Jaja estás llorando…
ELI: ¡Ay, dios!...- Expresó toda colorada.
YO: Dejá de reirte o te fajo de nuevo… jajaja.- Le dije actuado
ELI: Juan… Pará… Dale…- No podía pronunciar más de una palabra completa sin reírse.
La verdad que ella necesitaba un momento así. Y yo también.
YO: ¡Me miran todos mal! ¿Podes creer?
ELI: Jajaja
YO: Ahora vienen y me linchan… ¡Lo único que falta!
Bueno, a decir verdad siempre la hacía reír.
Ver su sonrisa es de esas cosas que revitalizan a uno, más allá del efecto de felicidad que pueda provocar en el otro.
Además, era lo mejor que podía pasarnos, que la tranquilidad y la alegría volvieran a formar parte de nuestra vida cotidiana.
Yo no me atrevía a preguntarle qué sentía respecto a que su agresor aún merodeaba por ahí, pero suponía que lo tenía en la cabeza, también.
No puedo concebir aún, la brutalidad con la que avanzó a Eliana.
¿Cómo puede una persona ser así?
Tan despectivo con un ser humano…
Me viene a la mente y me enbronco.
Por supuesto que no iba a permitir que volviera a pasarle. Sobre mi cadáver, la iba a tocar de nuevo…

Esa primera noche, la noté algo intranquila. Y lo sé porque casi que no pude pegar un ojo.
Estuve atento a cada sonido que se escuchara, cada ladrido de perro de la cuadra. Pero yo no era el único…
Eliana no dejaba de dar vueltas en la cama. Se acomodaba de un lado a otro, a veces quejándose del dolor.
Era normal que se sintiera de esa manera, pero aún así, me daba mucha impotencia. Por más que me pusiera en su lugar, no había forma de comprender al 100% lo que había vivido.
Con mucho cuidado, la abracé varias veces. Traté de acobijarla, darle calor, contención, pero no hubo caso.
Recién pudo dormirse cuando faltaba poco tiempo para que amaneciera, producto del esfuerzo, supongo, de intentar descansar. Por ende, a mí me pasó igual.
Casi me quedo ciego cuando me desperté horas después.
Un rayo de sol que entraba por la ventana, casi me quema las córneas.
Así como cuando queres abrir los ojos y los sentís tan secos que duelen…
Como con efecto resaca, maniobré para levantarme.
Uf…
Re abombado.
Miré a mi alrededor, como si saliera de una operación de cataratas, reconociendo el ambiente. Es decir, intentando hacerlo, je.
Noté que Eliana no estaba acostada a mi lado.
Miré la hora y dije “whaaat?”. Eran las 3 de la tarde.
Sí que habíamos seguido de largo o yo, al menos.
Me levanté y caminé como zombie por la casa, solo con el short de dormir hasta llegar al comedor.
Una extraña melodía que me llamó la atención. Como si fuera música de ¿gimnasio? pensé.
Al mirar bien, me topé con una escena explosiva.
Y digo explosiva, no por lo que estaba haciendo Eliana, ya que ella era la protagonista. Si no por el contexto.
“¿Qué haces?” me salió recriminarle desde adentro. Fue involuntario.
Tenía su cabello recogido y atado con una gomita. Una calza ajustada de color negra. Estaba calzada con unas zapatillas blancas y en la parte de arriba solo portaba un corpiño, que dejaba ver su hermosa piel, acompañada de varios moretones y magulladuras.
Se encontraba entrenando.
ELI: ¡Amor! ¿Te despertó la música?.- Exclamó como si nada mientras hacía sentadillas lentamente.
Quedé estupefacto.
La miré como diciendo “¿estás loca?”
YO: Eliana no podes hacer eso…
ELI: Ya termino…
Juro que no sabía qué hacer ni qué decir. Me quedé mirándola como un boludo. Así como cuando llevas algo en la mano y se te cae y te quedas por un rato con cara de nada preguntándote ¿por qué?
Claro que verla así era una imagen que quería tener siempre. Para colmo, estaba divina. Pero ponerse a entrenar ya, no era una buena idea. No si aún no tenía completamente sanadas sus heridas.
YO: Amor… Tendría que esperar un poco más para arrancar a entrenar ¿no crees?
Ella continuaba agachandose, despacio y levantándose con los brazos extendidos, al ritmo de la chica del video que miraba.
No voy a negar que mi atención fue hacia su cola en varias oportunidades en esos segundos.
¿Y cómo no? Si era perfecta…
Para colmo y no sé por qué, verla en esa actitud ruda, me gustó muchísimo. Como una guerrera, hermosa…
ELI: Tranqui… Uhh…- Respiraba algo agitada.
Se tomaba un poco las costillas, del lado derecho cuando subía. Era evidente que esa zona aún estaba lejos de curarse.
Tenía transpiración en el cuerpo, lo que indicaba dos posibles situaciones: que estuviera entrenando hace rato o qué le costara demasiado hacerlo.
Aunque pensándolo bien, podrían ser ambas…
YO: ¿Y si te lastimas peor por no esperar a que te cures bien?
ELI: ¡Listo!.- Exclamó pegando un mini saltito final.
Tenía los músculos de las piernas marcados por el ejercicio.
Y la calza que le ajustaba a la cintura….
¡Mamita!
Aunque tratase de ponerme serio para aconsejarla de la mejor manera, no podía evitar estupidizarme.
ELI: ¡Buen día!.- Expresó con una sonrisa.
Simplemente me reí.
¿Qué otra cosa podría hacer?
Ella era fuerte… Y toda una diosa…
ELI: ¡Ey, bobo! jajaja.- Me dijo entre risas.
Claro, yo me había quedado mirando sus gomas.
El corpiño se las sujetaba fuerte. Por demás, diría. Al punto de parecer dos globos a punto de explotar.
YO: Jajaja
ELI: ¿Qué miras, baboso?.- Continuó riendo.
Encima, como las tenía bien arriba. Una locura.
Se miró ella misma, producto de mi reacción.
ELI: Ahh jaja… Es que me lo puse así para que no me joda acá…- Expresó señalando sus costillas.
Me puse algo colorado.
YO: ¡Sos una bomba, Eliana!.- Me salió decirle.
ELI: Jaja… Lindo…- Soltó mientras venía a darme un beso de buenos días.
Chuiikkk…
Riquísimo.
Nada mejor que uno de esos para comenzar el día. Sí, a las 3 de la tarde…
YO: ¿Te duele?.- Le dije mientras le acariciaba suavemente la zona.
ELI: Un poco, sí… Pero igual hice tranqui…
YO: Sos cabezona, eh…
ELI: Jaja no me voy a quedar quieta…
YO: ¿Ah, no? ¿Y qué otras cosas pensar hacer?.- Le contesté en tono jocoso.
Una mueca se le formó en el rostro.
ELI: Se me ocurren varias…- Respondió de igual forma.
Ella me tenía sujetado levemente de la cintura. Yo también intentaba no tirarle el cuerpo encima.
YO: Mmm ¿como en el hospital?
ELI: Jajaja ¡No! Esa fue una mala decisión.- Exclamó a carcajadas.
YO: Sí, lo fue jaja
ELI: Pero ya estoy bastante mejor… Jmm…- Hizo un gesto pícaro.
YO: Ya veo que sí…- La tomé con cuidado del rostro y le di otro beso. Pero uno más largo y lento, disfrutando cada milímetro de piel y labio que tocaba.
Qué fácil era suspirar estando junto a ella…
Involuntariamente, bajé mis manos y las apoyé en su cola.
Uff…
Nunca las había sentido tan voluptuosas y firmes.
YO: Haa…- Me salió hacer dentro de su boca, provocando que Eliana me mordiera sutilmente.
Qué culo tremendo…
Me encantaba tocarla allí. Se sentía muy bien y ella no le molestaba.
Ya el calor se hacía presente y, con él, la ansiedad.
Los besos comenzaban a ser un poco más brutos, por parte de los dos.
Cómo así también lo eran sus caricias.
ELI: Haa… Umm…- Hacía apretando mis labios y chocando su lengua contra la mía.
Qué sabrosa que estaba…
YO: Te amo, hermosa… Omm… Me gustas mucho…
Un suspiro salvaje salió de su ser y me agarró del pelo. Bastante fuerte…
A la vez, se pegó a mí de manera bruta.
Yo lo disfrutaba pero en cualquier momento se iba a lastimar.
Abrí los ojos unos instantes y ví como esas tetas preciosas se pegan a mi pecho.
Dios…
Sentí una punzada en el medio de la verga, que ya parecía querer mostrarse.
¡Lo que eran esas gomas!
Blancas, suaves…
Sentí muchas ganas de tomarlas con las manos y comerlas todas.
Las cosas iban creciendo en intensidad. Eso era evidente.
Ella bajó una mano a mi cadera y con la otra, arrastró su palma por todo mi torso. Lo hizo con convicción y noté un gesto en su cara. Como forzado.
YO: ¡Pará, amor! Tranqui… jaja
Se rió pero me miró con cara asesina.
ELI: Tengo ganitas… je.- Expresó mientras respiraba agitada.
YO: Yo también… No te imaginas… Pero con calma.
ELI: Jeje… Igual me tendría que bañar primero…
YO: Y… Yo diría…
ELI: ¡Ey! jaja
YO: Jajaja
ELI: Mmm muaaa.- Hizo dándome un último beso.
YO: Amo cómo te queda esa calza… Sabelo…
ELI: Chancho… Me doy un baño y desayunamos algo…
YO: Más bien cenamos… Jajaja
ELI: ¡Mal!.- Soltó riendo.
Me encantó verla con tanta energía.
YO: ¿Necesitas ayuda?
ELI: ¡Nope!.- Gritó desde lejos.
En solo unos instantes, había logrado que pasara de la sorpresa a la excitación.
Terriblemente encarpado terminé, je.
Me causó gracia ver como se formaba el bulto en mi short.
Ahora que lo pensaba, tenía muchas ganas de hacerle el amor. Pero mal…
Los días previos no había tenido tiempo como para pensar en ello, pero ahora que la veía mejor, sentí unas ganas incontenibles de sacarle todo y lamerla por todos lados.
Esa calza…
Bueno, mejor que pensara en otra cosa, porque para poder tener sexo, ella debía primero estar completamente bien.
No tenía por qué comportarme como un simio…
Aunque su actitud también me había dejado perplejo.
Ese rostro sediento que tenía mientras nos besábamos…
¿Será porque me vio en cuero? ¿Con el torso marcado?
Si supiera que estaba así porque casi que no pude comer en esos días…
En fin, a veces la contención temporaria genera que cuando efectivamente aquello tenga que suceder, ocurra, sea mucho mejor…
Y como venían las cosas, iba a ser tremendo…

Me puse a preparar el desayuno-merienda. El día anterior habíamos comprado varias cosas y tenía margen de maniobra en la cocina.
Desde donde estaba, oía el sonido de la lluvia del baño.
Armaba un plato con unos duraznos con crema, acompañado de unas tostadas con mermelada de frutilla y un jugo natural de naranjas.
Tampoco era la gran cosa, pero iba con mucho afecto…
“¡Amor!” escuché que me gritó.
Enseguida fui a ver qué necesitaba. Es más, me había parecido extraño que no me llamara en tanto rato…
YO: ¿Qué necesitas, preciosa?
Siempre me salía un adjetivo calificativo, ja. Era natural.
ELI: ¿Me enjabonas la espalda?.- Me solicitó dulcemente.
Abrió un poco la mampara e hizo una maniobra que casi logra que se me caigan los lienzos.
Se giró, de espaldas, tomándose el largo pelo negro.
De esa manera, exhibió completamente su cola desnuda.
YO: Uff…- Expresé sin querer.
Impresionante…
Se me iba a hacer muy difícil la estadía en su morada si pasaban cosas como estas…
Era increíble, porque con las marcas de su lucha esparcidas por el cuerpo, se veía muy sexi. Claro, eso si no tomara en cuenta su origen.
Porque no era lo mismo que se la hiciera jugando al fútbol o, incluso, realizando algún arte marcial que de la verdadera manera en que se le generaron…
Pero se entiende.
Su silueta perfecta y mojada, parecía salida de una película erótica.
ELI: ¿Me pasas?.- Exclamó girando la cabeza parcialmente hacia mí y sonriendo de forma socarrona.
Sí, era consciente de lo que hacía y de lo que me provocaba.
Tragué saliva y me acerqué como un muerto vivo en busca de carne.
Con un brazo, se cubría sus pechos.
ELI: Gracias, gor… En lo de mi viejo estaba complicada…-
YO: Jeje…
ELI: ¿Te queres meter? jaja
YO: Te quiero hacer el amor… Eso quiero…- Le dije en tono de broma, como si estuviera desesperado.
Comenzó a reírse tiernamente.
Cuando lo hacía de esa forma, ruborizándose, no existía nada igual.
ELI: Mmmm… Hizo haciendo gesto con los ojos.
Yo, por mi parte, le enjabonaba suavemente la espalda y sí, la mirada se me iba a su cola.
Dios… Era única…
Mentiría si dijera que no tenía el pene más hinchado que una bombita de agua en verano.
YO: ¿Te dije que sos una bomba?
ELI: Tan tierno él… Yo soy la afortunada…
¿Ella?
De ninguna manera…
YO: No, ni loco… ¿Por qué? jaja
ELI: Porque sos un amor conmigo… No solamente me gustas, estás para mí. ¡Estuviste para mí!
La miré.
Ella se giró totalmente, aún tapándose.
Su piel, mojada a causa del agua, lucía tan brillante que hacía deshidratar mis ojos como un rayo ultravioleta.
ELI: A veces no puedo creer que estemos juntos… Que estés conmigo.- Exclamó con una vocecita tan finita como el hilo que aún trataba de mantenerme a distancia para que no le cayera encima…
¿Podía ser tan dulce?
Yo era el afortunado de los dos…
Sin palabras me dejó.
Con un poco de espuma en la mano, la sujeté de la mejilla. Como ella hizo lo propio conmigo, por un momento descubrió completamente sus pechos.
Se me hizo un nudo en la garganta…
¿Cuánto más podría aguantar?
Para colmo, la jabón caía en ellas y recorría todo el tramo entre su cuello, el pliegue y la zona de sus pezones rosados.
La boca se me hacía agua…
La miré con deseo una vez más y, finalmente, me prendí a sus labios.
Eliana se encontraba completamente desnuda, diosa, besándome apasionadamente. La verdad que no podía tener mejor suerte…
Lo que rica que estaba… Más sabrosa que cualquier manjar que pudiera uno degustar.
YO: Me encanta lo que decis… ¡Espero merecerlo, hermosa!
ELI: Olvidate, amigo… ¡No te suelto más a vos!- Exclamó riendose en mi boca.
En verdad tenía dudas de estar a la altura…
YO: Jajaja… Eh, ¿so´ mi guacha?
Emitió una carcajada.
No podía dejar de mirarla.
Las piernas…
Y su zona más íntima. Estaba depilada.
¿Acaso no mentía respecto a sus intenciones?
No quise mirarla demasiado psicópata, pero en un momento que se movió y tomé contacto visual con una pequeña parte de sus labios vaginales, casi me da un infarto…
Una delicia por donde se la mirara.
YO: Bueno, te dejo terminar de bañarte…
Eliana soltó mi rostro y volvió a cubrirse, como de reflejo.
Más hermosa se veía así…
Como si cada parte de su anatomía, fuera un algoritmo especial, único en su especie.
Bueno, me tenía tan maravillado que buscaba todo el tiempo una nueva manera de describirla.
ELI: ¡Gracias por ayudarme!
YO: ¿Viste?
ELI: ¿Qué?.- Preguntó curiosa.
YO: ¿Ahora quien ayuda a quien? jaja
ELI: ¿Sí no?
Era irónico, pero real…
A veces, la vida pega ciertos giros que resultan cuanto menos, curiosos.
Dejé que terminara de asearse y volví para finalizar la ¿cena a esta altura? je.
Tengo que admitir que hacer cosas para Eliana, me encantaba…
Desde que había descubierto mi amor por ella, me salían hacer cosas que nunca hubiera imaginado hacer. Por más simples que parezcan.
Una buena compañía, una conversación, una comida…
Lo hacía con gusto, lo disfrutaba…
Aún sigo cuestionandome cómo pudo ser posible que no la notara antes. Que no fuera capaz de tomar conocimiento de la semejante persona que tenía enfrente.
Siempre estuvo frente a mis ojos…
¡Qué locura!
Ahora entendía algunas miradas o gestos que ella me hizo en el pasado si le hablaba de alguna otra chica o, también, de Flavia.
“¡Estúpido!” me gritaría cierto personaje si estuviéramos en otro planeta…
En fin, sería absurdo pensar en cosas como esas cuando teníamos todo por delante…
Estaba seguro que un largo camino juntos nos esperaría.
Mientras dejaba todo listo en la mesa y trataba de bajar mi erección, miré mi celular.
Me dio paja ver la cantidad de mensajes que tenía.
“Después los leo” pensé.
Sentí la puerta del baño abriéndose.
Ella ya había terminado.
“Vamos a ver qué le parece” me dije a mi mismo.
Giré mi cabeza hacia el sector por donde venía.
No es que pudiera sorprenderme que ella viniera del baño en paños menores, después de todo, es su casa.
Lo que captó toda mi atención a punto tal de que dejé caer mi teléfono sobre la mesa, fue lo que ella hizo.
Salió del baño tomándose del pelo, como de costumbre, pero lo más espectacular de la escena y lo que, en definitiva, logró hacerme babear, fue la manera en la que dejó el toilette.
Portaba una bata blanca, como las de hotel, abierta parcialmente.
Conforme se colocaba el ganchito en el pelo, la prenda se abría dejando ver más y más piel.
Sentí que un calor del inframundo se apoderaba de mí.
Sus hermosas tetas, apenas escondían sus pezones y la abertura de la tela dejaba ver un camino de carne hasta su entrepierna.
No sé si lo hizo a propósito o sin querer, pero me observó de una forma tan sensual que permanecí quieto, contemplandola.
No fue sino hasta que volví a ver algo que me dañó la cabeza.
En su zona más baja una pielcita rosada emergía por entre la parte más alta de sus muslos.
Sí, era su rica vulva…

15 comentarios - Mi mejor amiga XIX

juani427 +1
Que alegría ver que volviste!!!!!! Voy a prepararme un café y un puchito pafa diafrutarlo como corresponde. Como siempre +10 y a favoritos
matias550 +2
Ni lo leí y ya le doy 10 puntos.
JukUik
Que bueeeeno!!! Extrañaba esta historia, ojala y continues y los proximos capitulos no tarden tanto!
diegoprey
+10 como siempre...excelente historia 👏👏👏
superquicho
Excelente como siempre y por favor no tardes tanto en continuar con las historias! Gracias Genio
cete08
muy buena historia.. y muy esperada.. van 10
cete08
muy buena historia.. y muy esperada.. van 10
electroman61
me encanto como siempre genio! puede ser que falte una parte? el anterior termino con ellos a punto de tocarse en el hospital y este siguio con ella en la casa ya, oh me perdi de algun posteo pero no creo jaja😄
hiphop911 +1
Fijate que en una parte hacen referencia a eso!
Monstruo0501
Buen día. Puedo preguntar con mucho respeto, si algún día podrás seguir escribiendo la saga de mi mejor amiga. Siempre busco esa publicación y pues preguntaba si seguirás o ya no escribes más? Para no seguir a la espera. Saludos mi Brother.
hiphop911 +2
Sí, aún no termina…. Pronto vuelven todas
calitox20 +2
Cuando vas a subir el capítulo 20 de esta gran saga, es muy esperado
diegoprey +2
Me adhiero a la consulta del amigo...
hiphop911 +1
@diegoprey en cuanto pueda…
Zn350 +3
Para que año sigue esta serie?
TheLyonNitrium
para el 2045 vuelve seguro
3shaka3 +1
esta historia sigue?