2012.03 Las hermanas comparten

Desperté desnuda en la cama junto a Nicole después de una tarde y eventualmente una noche de sexo. Me estiré en la cama y eso hizo que ella también despertara. Me pellizcó un pezón y me dijo, “Buenos días”. Yo me reí y le dije, “Para, que duele. Si sigues me vas a calentar”. No se detuvo. Forcejeamos y terminé sobre ella, nuestras vulvas rozándose y sus piernas alrededor mío apretaban mis caderas contra ella. “Quiero saber cómo fue la primera vez de ustedes dos”, comenté.


“Un día lo invite a venir al departamento, sabía que le gustaba mi poto y lo deje verlo para ponerle duro el pico”, dijo Nicole. Ella me dijo que Lucas la tenía en el sillón y comenzó a jugar con sus glúteos. Los besó, los lamió e incluso los chupó por un tiempo. Mientras hacía eso, la mano de ella se deslizó hacia su pene. “Sentí su pene tan grande, que no sabía si continuar”, dijo Nicole. Me dijo que Lucas le dijo que no le tuviera miedo y se puso de pie y se sacó el pene del pantalón frente a su cara. Lucas le dijo que se lo metiera en la boca. Yo sabía por mi propia experiencia lo intimidante que era tener frente a una cosa grande por primera vez, aun así, me sentí caliente de sólo escucharla.


“Dani, él se hizo más grande cuando me lo metí en la boca, apenas podía meter la cabeza en mi boca”, dijo Nicole. Me contó que él se cansó de lo mal que ella lo chupaba, así que le bajó los pantalones y paso a jugar con su sexo con los dedos. También usó su lengua lamiéndola. Me dijo lo bien que se sintió por eso. “Me fui cortá sólo con su lengua”, dijo.


Me estaba excitando por lo que me estaba diciendo. Mi sexo estaba mojado y temblando contra el de ella. Quería que fuera su lengua la que me lamiera en ese momento. Comencé a frotar mi sexo contra el de ella mientras continuaba hablando.


“Después de eso se puso fea la cosa”, dijo. “¿Por qué?", le pregunté. Después de que Lucas se había comido su vagina, se puso encima de ella. Dijo que Lucas tomó su gran pene y lo restregó de arriba a abajo en los labios de su vagina varias veces. Nicole dijo que Lucas simplemente lo metió todo en su vagina.


“Grité cuando sentí su pico rajándome por dentro”, dijo, “Dani, me dolió tanto que empecé a llorar, me dolió mucho”. Continuó diciendo que Lucas seguía metiendo su pene dentro y fuera de ella. Lucas enterró su pene profundamente y le dolió aún más a ella. Dijo que Lucas gimió y se sintió como si estuviera orinando dentro de su vagina. Todo había terminado en solo unos minutos. Luego sacó su pene y se bajó de ella.


“Corrí hacia el baño, mientras corría podía sentir algo bajando por mis piernas. Cuando llegué al baño vi que era sangre y su semen”, dijo. “Fue la media cagá nuestra primera vez”, terminó. Yo ya había empezado a jugar con mi clítoris antes de que ella hablara de la sangre y el dolor. “¿Quieres chuparle el pico?”, preguntó Nicole. “Solo puedes chuparlo, pero no montarlo”, agregó antes de que tuviera tiempo de contestar. Mi sexo se mojó al instante cuando escuché lo que me acababa de preguntar. Si ya había tenido sexo con mi hermana, no veía ningún impedimento moral para no tener sexo con su pololo, el protagonista de mis fantasías desde que había llegado a vivir a Santiago. La miré y le dije, “¿Tú crees que él quiera eso?”. “Sé que le gustará”, respondió. “Pero recuerda que es solo la boca”, agregó.


“Sí, quiero”, dije dando esa pequeña sonrisa malvada mía mientras los pensamientos corrían por mi cabeza. “Bien, nosotros tres vamos a pasarla la raja”, respondió mientras me daba un abrazo. Esa misma tarde fue el momento que ella eligió para que hiciéramos lo que habíamos acordado. Ambos me recogieron en auto y todos nos dirigimos al cine a ver una película. En el camino Lucas me miró de manera que sabía lo que habíamos hecho mi hermana y yo y eso me dio cierta vergüenza así que desvié la mirada en cada oportunidad. Después de la película yo conduje de regreso a casa, pero Nicole quiso que fuéramos a un lugar apartado, donde nadie nos pudiera molestar, me dio las indicaciones y nos conduje ahí. Me recosté en el asiento delantero cuando los escuché besarse en el asiento de atrás. También pude ver que Lucas ya había quitado algo de la ropa de Nicole. Mi mano se deslizó hacia mis propios pantalones mientras lo veía comenzar a chupar y lamer las tetas de Nicole.


Vi a Nicole sonreír en el espejo retrovisor. La vi hacer que Lucas se levantara un poco y escuché que la ropa se deslizaba. Me estaba frotando la vagina con fuerza a través de los pantalones mientras esto sucedía. Pronto vi la cabeza de Nicole bajar por el espejo retrovisor seguido de sonidos de succión y sorbimiento. Deslicé mis manos por la parte delantera de mis pantalones. No usé calzón esa tarde, por si acaso. Mis dedos tocaron mi vagina sintiendo los jugos que ya fluían de ella.


Lenta y silenciosamente, giré un poco en el asiento delantero para tener una mejor vista. Terminé dándome la vuelta por completo cuando vi que Lucas tenía la cabeza reclinada en el asiento y tenía los ojos cerrados. Los gemidos bajos escaparon de su boca cuando Nicole intensificó el sexo oral. Deslicé dos dedos en mi vagina mojada mientras la veía usar su mano y su boca en el pene de su pololo. El pene de Lucas era todo lo que Nicole me había contado. Era tan grande como había visto de manera fugaz el día que llegué a vivir al departamento, sin duda era el más grande que había visto en mi vida. Estaba sacando un dedo de mi vagina mientras veía la cabeza de Nicole moviéndose arriba y abajo sobre su pene. Ella buscó debajo de ese pene y comenzó a jugar con un par de grandes e impresionantes testículos colgantes. Nicole usó su boca, lengua y su mano sobre su pene y la otra mano jugó con esas bolas. Mis propios jugos fluían libremente cuando miré su pene. Tuve que cerrar la boca con fuerza mientras comenzaba a tener orgasmos con mis dedos. Mis ojos se cerraron cuando mi orgasmo se sacudió a través de mi cuerpo.


Cuando abrí los ojos, vi que Lucas tenía su mano sobre la cabeza de mi hermana y la estaba ayudando moviéndola hacia arriba y hacia abajo sobre su pene. Miré a Lucas a los ojos y vi que me estaba mirando directamente. Debió haberme escuchado cuando llegué al clímax con mis dedos. Él solo me sonrió cuando comenzó a gemir. “Ya voy a terminar”, gritó Lucas mientras salía de la boca de Nicole.


Ella le quitó la boca del pene y lo masturbó con la mano. Vi cómo el pene de Lucas parecía hincharse mientras palpitaba en su mano. Lucas gimió fuertemente cuando su pene comenzó a escupir semen. El semen de Lucas salió disparado en largas y gruesas corrientes cayendo sobre la mano de Nicole mientras ella seguía masturbándolo.


“Ahh mierda”, gemí mientras veía su semen dispararse desde su pene. Metí mis dos dedos de nuevo en mi propia vagina y tuve otro orgasmo mientras veía fluir el semen de su pene. Les di a ambos esa maliciosa sonrisa antes de darme vuelta en el asiento delantero. “Tengo que mear, ¿quieren algo de comer mientras yo estoy fuera?”, dijo Lucas extendiendo la mano hacia la puerta y saliendo del auto. Lucas me miró con esos encantadores ojos azules cuando otra sonrisa apareció en su rostro.


“Trae lo que encuentres”, dijo Nicole desde el asiento trasero. “Quiero un gran completo”, le dije, devolviéndole una pequeña sonrisa sexy. Lo vi alejarse con mi vagina retorciéndose. Me volví hacia Nicole en el asiento de atrás y le dije, “Era verdad, él tiene un pene enorme, también lo chupaste todo”. Nicole solo sonrió y respondió, “Ahora recuerda, Dani, eso es todo lo que puedes hacer, chuparle el pene”. “Lo sé”, respondí, ya que estaría feliz de tomar su próxima descarga. mi boca.


Lucas regresó al auto con bebidas y tres completos. Me los entregó por la ventana. Froté mi mano contra la suya mientras le quitaba la bandeja. No podía creerlo cuando me sonrió y frotó su mano contra la mía cuando me entregó la comida. Lucas se metió en el asiento. Nicole se inclinó y tomó sus bebidas y el completo de Lucas. Nicole me guiñó un ojo mientras me quitaba la comida. Sabía que esa era una señal.


Nicole se volvió y comenzó a pasarle el completo a Lucas, pero se lo quitó y dijo, “Solo puedes tener esta salchicha si Dani puede tener la tuya”. “¿Qué?”, respondió Lucas. “Daniela quiere chuparte el pene”, dijo Nicole. “Sí, claro, y la vas a dejar”, respondió Lucas cuestionadora. “Está bien que te lo chupe, es mi regalo para ti”, respondió ella. “Pero eso es todo lo que va a hacer”, agregó dándole una mirada severa. Lucas me miró y me preguntó, “¿Estás bien con esto también?”. Solo sacudí mi cabeza, sí. Nicole dijo, “Claro que está bien con eso. Deberías ver cómo juega con su vagina mientras le digo lo que tú y yo hacemos”. “¡NICOLE!”, grité cuando me puse roja. “No tenías que decirle eso”, añadí.


“¿No es cierto?, No puedes quitar la mano de tu vagina cuando te digo cómo me lo mete o me come la vagina”, respondió Nicole. “¿Le contaste sobre nuestro sexo?”, respondió Lucas mirando a Nicole. “Sí, Dani y yo no tenemos secretos entre nosotras ahora”, respondió Nicole. “Bueno, si ustedes, señoritas, están de acuerdo, estoy seguro de que voy a aprovechar esto”, dijo Lucas mientras sonreía, mirándome. “Sabía que ibas a querer”, respondió ella con una pequeña risa que nos hizo reír a los tres.


Lucas y yo comimos nuestros completos, Nicole realmente comió la mayoría del suyo. Estaba perdida en mis pensamientos en el asiento delantero, pensando en chupar el enorme pene. Estaba bastante segura de que iba a disfrutar lo que le iba a hacer a su pene. “Tengo que orinar”, dijo Nicole. “Yo también”, le respondí.


Ella y yo salimos del auto y fuimos al baño de un local cercano. El baño estaba vacío, así que las dos entramos en el único puesto. Nicole cerró la puerta, se bajó los pantalones y se sentó. La orina de ella aterrizó con fuerza en el inodoro. La escuché golpear el agua cuando ella dejó de orinar.


“Ahora recuerda que solo lo vas a chupar”, dijo. “Lo sé y no haré nada que no digas”, respondí. “Date prisa, tengo que en serio tengo que mear”, agregué. Ella tomó un poco de papel higiénico y se secó. Se puso de pie y se movió a un lado con los pantalones aún bajos. Me bajé los pantalones y apenas me puse en cuclillas, mi orina comenzó a salir. Nicole metió su mano entre mis piernas dejando que mi orina corriera sobre ella.


Ella pasó sus dedos contra mi vagina mientras orinaba. Estaba esperando que ella metiera sus dedos en mi vagina, pero cuando mi orina se detuvo, ella retiró su mano mojada con mi orina y ella preguntó, “¿Entonces harás cualquier cosa que yo diga?” “Entonces, lame tu orina de mi mano”, agregó empujando su mano mojada hacia mi cara.


Saqué la lengua y lamí sus dedos. Esto no era nada nuevo para mí, durante el sexo ya antes había probado la orina, incluso la había tragado. “Es suficiente, es hora de que chupes un pene real”, dijo alejando sus dedos de mi cara.


Regresamos al auto y ella me dijo que me sentara en el asiento trasero con Lucas. Nicole se sentó en el asiento delantero con las manos y las rodillas mirando hacia el asiento trasero. Lucas estaba todo el camino a un lado del auto conmigo al otro lado.


Ella me miró y me dijo, “Adelante, Dani, puedes besarlo para ponerlo duro”. Miré a Lucas que me estaba mirando. Me incliné hacia él y Lucas me tomó en sus brazos. Nuestros labios se encontraron y nos dimos un beso rápido. “Puedes hacerlo mejor que eso. Te he visto besar mucho mejor a nuestro primo, hermanita”, dijo Nicole.


“NICOLE”, grité mientras me deslizaba hacia mi lado nuevamente alejándome lo más posible de Lucas. “No seas tímida Dani, mira cuánto más grande se volvió su pene después de que dije eso”, dijo ella.


Tímidamente miré la parte delantera de los pantalones de Lucas. Nicole tenía razón, pude ver su pene duro marcarse en sus pantalones. Pero todavía estaba avergonzada por lo que Nicole le había dicho. Pensé que iba a pensar que estaba enferma o algo por tener ese acercamiento con mi primo. Pensé que no querría tener nada que ver conmigo.


Me puse roja nuevamente cuando me alejé de Lucas solo mirando por la ventana del auto. Lucas se acercó a mí y me tomó de la mano. Me giré para mirarlo y lo miré a sus ojos azules, pero bajé la cabeza, avergonzada.


Lucas dijo, “Dani, no hay nada de malo en que experimentes así. Para ser sincero contigo, me excita que te hayas divertido con tu propio primo”. Lucas comenzó a frotarme la mano ligeramente mientras agregaba, “Además, apuesto a que a tu primo le encantó. Si tuviera una prima o una hermana como tú y ella quisiera hacerlo, estoy seguro de que no le diría que no”.


Eso me hizo sonreír cuando Lucas acercó su mano al lado de mi cara, Lucas rozó su mano contra mi mejilla por unos segundos y luego colocó sus dedos debajo de mi barbilla, levantando mi cabeza y girándola hacia él. Se inclinó y me besó una vez más. Cuando nuestros labios se tocaron, puro placer recorrió mi cuerpo. Podía sentir que mi corazón comenzaba a acelerarse cuando lo besé profundamente en esos hermosos labios suyos. Deslicé mi lengua en su boca y él deslizó la suya en la mía.


“Oye, no dije que pudieras ponerte tan cariñosa con él”, dijo Nicole desde el asiento delantero. Lucas rompió nuestro beso cuando la escuchó decir eso. Lucas volvió a su lado del automóvil. Lo miré mientras lo hacía y él rodó los ojos al moverse. Pero luego me di cuenta de que Lucas todavía me sujetaba la mano. Comenzó a frotar sus dedos ligeramente en la parte inferior de la palma de mi mano. “Toca su pene a en su pantalón, Dani”, dijo Nicole.


Me acerqué y pasé toda la mano por la parte delantera de sus pantalones. Lucas se recostó en el asiento mientras mi mano exploraba en busca de su pene. Su pene se sentía mucho más grande y mucho más duro que el de las parejas que había tenido hasta entonces, incluido el de mi padre biológico. Podía sentir mi vagina comenzar a temblar cuando sentí su pene.


“Dale, agarra su pene con la mano”, dijo Nicole. Hice lo que ella dijo, miré a Nicole y pude ver que ella tenía las tetas expuestas, se había quitado toda la ropa sobre la cintura. Pude ver que tenía un brazo encima del asiento mientras su otro brazo bajaba por la parte delantera de su cuerpo. Sabía que estaba jugando con su vagina cuando me dijo qué hacer.


“Saca su pene de su pantalón”, dijo ella con un ligero gemido. Le bajé los pantalones para liberar su pene y sobre sus enormes bolas encontré el gigante falo. “¡ES ENORME!”, le dije mientras mi mano lo agarraba. "Sube y baja tu mano sobre su pene", dijo Nicole. Iba a hacer lo que ella dijo cuándo Lucas levantó la cabeza del asiento trasero y dijo, “Mi amor, ¿por qué no te callas y miras? Si Daniela necesita tu ayuda, la pedirá”.


Pensé con seguridad que ese era el final de esta aventura, pero escuché un “OK” con un leve gemido proveniente del asiento delantero. Miré a Nicole, ella no dijo nada, solo se estaba frotando contra su brazo. Volví mi atención a ese hermoso gran pene que tenía en mi mano.


Masturbé el pene de Lucas con mi mano. Pasé mis dedos sobre la cabeza de su pene cada vez que la subía. Estaba viendo mi propia mano subiendo y bajando sobre su pene cuando sentí la mano de Lucas ir debajo de mi barbilla nuevamente. Lucas levantó mi cara y la giró hacia su cara. Él se inclinó y yo me incliné cuando una vez más nos encontramos en un beso. Mi mano todavía tiraba de su pene mientras nos besábamos profundamente. Mi cuerpo estaba en llamas mientras empujaba mi lengua nuevamente dentro de su boca. La lengua de Lucas se movió salvajemente hacia la mía cuando entró en su boca. Nos besamos mientras le masturbaba el pene con la mano.


Rompí nuestro beso ya que quería mi boca alrededor de ese pene suyo. Pero cuando rompí nuestro beso, Lucas me rodeó con uno de sus grandes y fuertes brazos y me levantó para que estuviéramos cara a cara de nuevo. Miré esos ojos encantadores suyos.


Juro que vi una chispa, una luz o algo en sus ojos cuando nuestros labios se encontraron una vez más. Nuestro beso se convirtió en el beso profundo más apasionado que he tenido. Una calidez profunda llenó mi cuerpo mientras nos besábamos. Yo era como una muñeca flácida solo por sus besos cuando Lucas rompió nuestro beso. Me miró y dijo, “Por favor, Dani chupa mi pene”.


No tuvo que decirme dos veces antes de que mi boca cayera sobre su pene. Llevé más de la mitad a mi boca antes de levantar la cabeza. Con mi lengua le lamí la cabeza de su pene, metiendo la punta de mi lengua en el agujero de su uretra mientras volvía a caer sobre su pene. Moví mi cabeza hacia arriba y hacia abajo salvajemente sobre su pene. “Ohh sí, chúpamelo Dani”, Lucas gimió ligeramente.


Volví a dedicarme a su pene, me llevé solo la cabeza a la boca y la chupé mientras usaba mi mano sobre el resto de su pene. Podía sentir su pene palpitando en mi mano y en mi boca. Saqué su pene de mi boca, dejando salir una gran corriente de su líquido pre seminal que colgaba de mis labios. “Aaaaaaahh”, gimió Nicole desde el asiento delantero.


Cuando la miré, su líquido pre seminal se desprendió de su pene y cayó sobre mis labios. Usé mi mano sobre su pene mientras me inclinaba hacia adelante para darle a Nicole un beso profundo en sus labios. Ella lamió mis labios tomando el líquido de ellos. Dejé a Nicole y regresé mi boca al pene.


Lamí desde la base de sus bolas hasta la cabeza de su pene y luego hacia abajo. Hice esto unas cinco o seis veces cubriendo su pene con mi saliva. Luego miré a Lucas y le di esa pequeña sonrisa sexy y malvada.


Volví a su pene y me lo llevé a la boca. Mi boca estaba con mucho esfuerzo contra el vello púbico cuando comencé a mover lentamente la boca por su pene. Chupé con mi boca hasta su cabeza de pene dando una profunda y dura chupada cuando llegué allí. Luego bajé mi boca de nuevo en su pene una vez más. Hice esto durante unos cinco minutos moviendo mi boca arriba y abajo de su pene.


“Eres demasiado buena en esto, te lo metiste todo en la boca”, gimió Lucas cuando sentí su mano ir a la parte posterior de mi cabeza. Lucas jugaba con mi largo cabello mientras yo movía mi boca arriba y abajo por su pene. Pronto me estaba moviendo rápido y chupándolo profundamente con la boca. Sentí su pene comenzar a latir y sentí que se hizo más grande en mi boca. Con mi mano froté sus bolas mientras chupaba ese hermoso pene suyo.


“¡MIERDA Dani, ya casi termino!”, gritó Lucas sacando mi cabeza de su pene. Simplemente me liberé de su mano y volví a su pene. Pasé mi boca arriba y abajo por su pene tan rápido como pude mientras chupaba al mismo tiempo. El pene de Lucas dio un gran latido. “AHHH”, gimió Lucas mientras su cabeza entraba en el asiento trasero.


El pene de Lucas se retorció y palpitó en mi boca cuando tres o cuatro fuertes corrientes de esperma tibia estallaron profundamente en mi boca. Me tragué un poco y el resto yacía en mi boca mientras sacaba mi boca de su pene. Miré a Lucas que tenía una gran sonrisa en su rostro. Lucas una vez más colocó su mano debajo de mi barbilla y jaló mi rostro hacia el suyo. Nuestros labios se cerraron en un profundo beso apasionado. La lengua de Lucas se disparó contra la mía hambrientamente lamiendo su propio semen que llenaba mi boca. Me excitó tanto que él hiciera eso. Por ese beso tuve un orgasmo en ese momento cuando su lengua estaba buscando su semen en mi boca. Mis propios pantalones se mojaron con mis jugos.


Rompí nuestro beso y miré en sus ojos que aún brillaban casi como si tal vez, solo tal vez Lucas tuviera algunos sentimientos hacia mí. Me lamí los labios cuando volví hacia Nicole, ella solo respiraba con dificultad con la boca abierta y la mirada en blanco. “Hermana, ¿estás bien?”, le pregunté sin saber si estaba enojada o simplemente perdida en su propio orgasmo. “Sí, pero creo que mojé todo el asiento por verte chuparle el pene”, respondió


“Tengo que conducir a casa ahí”, dijo Lucas. Nicole y yo nos echamos a reír e incluso Lucas se unió a nosotras para reírnos de eso. Todos nos reímos por un momento antes de que Lucas mirara a Nicole y dijera, “Gracias por ese regalo”. Lucas se volvió hacia mí y me abrazó una vez más y dijo, “Y gracias Dani”, mientras me besaba una vez más profundamente en mis labios.


“OK ustedes dos, es suficiente”, dijo Nicole, “Ahora, Dani cambia lugares conmigo”, agregó. Nicole volvió a sentarse en el asiento trasero con Lucas mientras yo me metí al frente. Ella tenía razón sobre mojar el asiento delantero. Estaba empapado por todo el asiento del conductor. Puse unas servilletas allí esperando que sirvieran de algo o al menos secara antes de que Lucas tuviera que llevarnos a casa.


Lucas salió a buscar bebidas. Eso me dio algo de tiempo con Nicole. Me volví hacia ella en el asiento trasero. “Gracias, disfruté eso. Eres tan afortunada de tenerlo”, le dije. “Está bien, Dani. Solo espero que él no lo haya disfrutado tanto como tú”, respondió Kim con preocupación en su rostro.


Lucas pronto regresó y se metió en la parte de atrás con Nicole una vez más. Miré por el espejo retrovisor y vi que Nicole se había quedado profundamente dormida apoyada contra Lucas. Mis ojos también encontraron a los de Lucas en el espejo retrovisor, pero no estaba dormido ni estaba revisando su teléfono, sus ojos estaban sobre mí.


Me di la vuelta y Lucas me estaba mirando directamente. No pude evitar sonreírle. Lucas pasó su mano por mi mejilla, peinando mi cabello hacia atrás y con una gran sonrisa mientras me susurraba, “Gracias de nuevo”.


Me di vuelta y me hundí en el asiento delantero sintiéndome tan llena de alegría. Me había divertido esta tarde, pero la alegría pronto me dejó cuando me di cuenta de que este momento estaba a punto de terminar cuando Nicole despertara, y así fue. Después Lucas nos acompañó a casa.


Lucas nos acompañó a la puerta donde besó a Nicole con mucha pasión. Dejé a Nicole por la puerta y cuando estaba a punto de entrar, sentí la mano de Lucas agarrar la mía. Lucas me empujó hacia la puerta y hacia él. “No tan rápido Daniela”, dijo Lucas mientras me atraía hacia él.


Lucas me rodeó con un brazo y con el otro volvió a tirar de mi rostro hacia el suyo. Me besó completamente una vez más en los labios. Lancé mis brazos alrededor de su cuello cuando nuestra lengua entró en la boca del otro. Nos quedamos allí encerrados en un profundo beso. Lucas me besó y abrazó en lo que pareció una eternidad, pero sé que fueron solo unos segundos.


“Adiós, fue excelente”, dijo Lucas. Me quedé allí observando a Lucas mientras caminaba hacia su auto y se fue. Estaba flotando en el aire nocturno cuando volví a la puerta. Entré en mi habitación para encontrar a Nicole ya dormida en mi cama. Me acosté junto a ella mientras los pensamientos sobre esa tarde pasaron por mi mente. Me quité la ropa y me toqué con los ojos cerrados pensando en lo maravilloso que fue tener el pene de Lucas en mi boca. Mojé mi cama con mis jugos pensando en el sexo con el pene suyo.


2 comentarios - 2012.03 Las hermanas comparten

DnIncubus +1
Muy buen relato, al parecer si se está dando lo que sospecha Nicole, esto se pone bueno, saludos gent!!! 😎