Historia de tatuajes 4

De alguna manera esto de ser tatuador hiba merojando mucho más, al ser uno de los encargados del estudio ha ia siertos privilegios ,que podias tener una cercanía con la gente que entra al local.
En fin cierto día estando en el estudio pasa frente a mi una hermosa chica ,solo para que se la imaginen piel blanca, peliroja ,no muy alta una cintura que hacía perder la vista en ella ojos color miel y una boca perfectamente delineada y carnosa ,eso so debo confesar que no tenía mucho pecho pero lo compensaba con el gran atributo ,unas hermosas nalgas grande y perfectamente pataditas unas nalgas de gym.
Al momento de verla pasar la invite al local si quería cotizar algún trabajo ,o checar algún diseño muy amable por cierto asintió y dijo gracias ,por lo cual siguió su camino pensé que no la volvería a ver ya que en tremenda ciudad cua tas oportunidades puedes tener para ver a la misma mujer .
Por sorpresa dos semanas después la volvi a encontrar en el metro de la ciudad Armando me de valor la tomé del brazo y le dije:
Hola como estas se me olvido pedir tu nombre,para ver si de alguna manera aún se acordaba de mi ,
Ella: claro que si como estas ese día llevaba un poco de prisa me llamo sherry apunta mi número.
Eso me impactó sabia que algo hiba bien , me propuso que ese mismo día pasara por ella a la escuela ,una escuela de fotografía, sin pensarlo dije si ,no sabia que era lo que hiba a suceder ,pase por ella a eso de las 8 p.m. su hr de salida ,le regale una flor para verme más romántico,
Ella : acompáñame caminemos a mi casa y nos vamos conociendo
Quería invitarla a cenar pero no quiso ,al parecer solo quería hablar ,me contaba que había estado en una escuela religiosa pero que no le gustaba mucho que siempre había tenido ese gusanito de explorar su cuerpo así que había tenido algunas aventuras con compañeras que tuvo , recuerdo bien que nos centramos frente a unas oficinas de gobierno en la confia doctores, en fin seguíamos platicando sentados sobre las escaleras pero llego el momento de irnos y como todo un buen caballero le di un pequeño beso en la mejilla ,sin más ella me tomo de la sudadera que llevaba y me dijo:
Ella : yo con las ganas no me quedo
Puffff algo explotó en mi cuando me rono un beso ,de esos besos de cogeme ya estoy hirviendo y si no deje pasar la oportunidad de besarla con pasión lujuria ,tomándola en mis brazos con deceo no me importo estar parado enfrente de las oficinas y en plena avenida, mis.manos bajaron hasta su cintura y empeze a meter mi mano por abajo del pantalón que me dejo sentir una pequeña mini tanga solo un hilo blanco mientras yo llevaba su mano a mi miembro que ya quería salir del pantalón duro destilando un poco de presemen ,empeze a meter uno de mis dedos en su ano que apretaba de una manera deliciosa ,ya la lujuria y la excitación al saber que alguien nos veria nos inundó me enpujo detrás de unos pequeños árboles y sin más la empeine la luz de los carros me hacían ver lo hermosa que su trasero esas nalgas perfectas se veían las abrí un poco ya que no resistí en pasar mi lengua sobre ellas su culito tenía un color melocotón hermoso pase mi lengua por el ya sus pequeños gemidos se escapaban me saque la verga y sin más se la intruge en su vagina perfectamente rasura ni un bellito en esa vagina en esa posición creo cogimos unos 30 minutos ,ni un alma en la avenida ,pero en un segundo detrás de nosotros paso un sr de edad avanzada, que bien no nos importo para nada que nos viera ella seguía pujando y suspirando no aguante más y tuve que venirme en medio de sus nalgas ,que bueno que fue de esa manera ya que antes de que pasara el efecto de la verga dura la introduje rapido en su culo sin permiso parece que le gusto ,la mala suerte nos alcanza hasta que empezamos a ver que muchas patrullas pasaban,tuvimos que interrumpir para que no nos llevaran por faltas a la moral ,nos despedimos y tuvimos dos encuentros más ya que después de eso me confesó que era casada así que nos tuvimos que dejar de ver pero valió la pena esa sensación de adrenalina de deceo ,saber que alguien puede verte y esas nalgas valían la pena cada bendito segundo en que fueron mías.

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