Mi primera vez con mamá

Bueno,parece que está cuarentena se presta para lo que sea,voy a contar lo que me paso hace 4 meses con mi mamá. Es el primer relato que escribo y como no puedo contarle a nadie lo que me paso,lo hago desde el anonimato y me desahogo.

Siempre desde niño mi mamá fue para mi una gran excitación,al principio sólo fantaseaba con darle besos apasionados largos y fuertes,ya más de grande me di cuenta que la podía espiar por la rendija de la puerta mientras se bañaba y se cambiaba,(voy a describirla por encima,morocha gordita con tetas grandes).

Eternas pajas me hacía pensando en mi mamá y ya creando en mi mente situaciones en las que ella venía desnuda hacia mí,se sentaba arriba mío y cogiamos hasta más no poder.


La primera vez que toque su panocha fue cuando un día se cortó la luz en mi barrio y dormí con ella,pensé demasiado en si tocarla o no y lo hice,bajo las sábanas fui deslizando mi mano hasta llegar abajo de su pancita,siempre fijándome que estuviera re contra dormida,cuando llegue fue una sorpresa para mi que no tuviera ropa interior,empecé a tocar su concha peluda y el corazon me iba a mil por hora,procure tocar sólo un poco para que no se despierte así que saque la mano y me chupe los dedos como nunca,también fui corriendo su blusa vieja que usaba para dormir y pase la lengua por su pezón derecho.Esa noche fue una fiesta que me dio mucho material para las pajas,lamentablemente no se dio más,hasta esta cuarentena.

Jamás deje de pensar en ella,tal vez en menor cantidad cuando llegaron mis primeras novias pero siempre estaba en mi mente la señora esa,leí miles de relatos en Poringa y cada vez la deseaba más.

Al estar separada de mi padre se podría decir que mi mamá estaba experimentando cosas que nunca hizo porque siempre estubo juntada,así que tuvo sus novios,etc.Jamás tuve celos ni nada pero deseaba ser yo quien le diera satisfacción todos los días,en fín mi historia comienza un día en que veo a mi madre llorando en su cuarto con el celular en la mano,automáticamente le pregunto preocupado que había pasado y me dice que se peleo con el novio,mi instinto de querer protegerla y consolarla me llevo a abrazarla con pena para que no se sintiera sola,estaba muy angustiada y nos quedamos acostados abrazados en silencio mientras seguro a ella por dentro se le caía el mundo encima.Paso una hora entera hasta que ella dice algo por fin.

 - Gracias hijo,eres el único hombre que vale la pena.

Yo la agarró más fuerte como mostrando cariño y empiezo a captar ciertas señales,se relamia los labios y tragaba saliba notablemente y me acariciaba la mano con la que yo la abrazaba.
Sentí que le tenía que decir algo y dije:

-Que se vayan a la mierda,no saben de lo que se pierden.

-¡Si!,perro de mierda NO voy a sufir por el. Me contestó como si le hubiese dicho eso al exnovio.

Entre risas se dio vuelta,me miro a la cara,yo le mire los labios y casi por impulso la besé,Al toque me siguió y casi desesperados nos estábamos comiendo la boca a besos,le agarré el culo con una mano y la puse arriba mío,ella arrancó a frotarse para que se me paré la verga,pero ya estaba parada así que me sentí en el cielo,la di vuelta para quedar arriba le arranque la blusa por la mitad literalmente y mientras yo le besaba el cuello,la señora se sacaba el corpiño desesperadamente,por fin tenía sus tetas enfrente mío,y no sin que no se diera cuenta,esta vez deseaba mostramelas así que me puse loco y empecé a chuparselas como un desquiciado,pero la ansiedad me gano y le baje los pantalones,la tanga y como ya estaba re contra mojada,saque mi pito y se lo metí por la pucha depilada.




Foto de un palo más reciente ya que la que cuento ahora no la grabé por obvias razones.

La cara de placer de mi mamá era algo nuevo y a la vez increíble para mí,me encantaba.
Mientras se la metía gemia por inercia y me animba a metersela más fuerte,Nos pusimos de cucharita y seguí metiéndosela mientras agarraba sus tetas.
-¡SIII DIOS SIIIIII!.Gritaba la muy puta.
Casi al instante sentí su primer orgasmo,eso me motivo a seguir siendo su hombre,así que la puse encuatro,la agarré de los pelos y le dije al oído,ahora eres mi puta.
Se rió placenteramente como si eso esperaba que le dijera y comenzamos de nuevo,el culo rojo tenía de tantas nalgadas que le di,hasta que casi por conexión acabamos los dos con un grito que lo abran escuchado hasta los vecinos.
Nos quedamos los dos acostados en la cama sabiendo que nada iba a ser igual.

Esto sigue así que si quieren que siga contando apoyen a este simple pibe que se come a su mamá.