me cogio mi profe se zumba

Tiempo atrás empecé a ir al gimnasio, a hacer fitness, a marcar mi cuerpo y sacar más cola, por si me hiciera falta, ja! fui a hacer pesas, un tanto por eso, otro tanto para que los chicos del gym me miren, es que se me hace muy sexi cuando me miran, siento el deseo de los hombres sobre mi cuerpo, y yo me visto para ellos, para que me desvistan con la mirada.
Y de esas primeras clases en máquinas para musculación, agregué clases nocturnas de bailes de zumba.
Roberto Carlos era el profesor, brasileño de origen, argentino por opción, un moreno alto, de casi dos metros, musculoso, piel bronceada, con numerosos tatuajes, de cabellos oscuros y ojos negros como la noche, con ese perfil de macho recio, de esos que dejan bien parado al sexo masculino.
Movía las caderas al compás de la música como pocos, diablos… solía usar musculosas caladas las cuales se pegaban a su cuerpo producto de la transpiración, y pantalones holgados que no impedían adivinar algo demasiado generoso entre sus piernas, algo que era evidente y motivo de comentarios de las chicas.
Y en ese entorno, ese moreno se había transformado en el premio codiciado, quien sería la afortunada en llevárselo a la cama, y ese desafío se me hacía demasiado difícil de evitar, ese era mi juego, el que me gustaba, porque quería que él me eligiera por el resto de todas…
Y sabíamos algo más, Roberto Carlos era casado, padre de familia, y yo estaba dispuesta a ser infiel, pero no sabíamos que opinaba el, porque él hablaba muy bien de su esposa y sus hijos, así que bueno, solo me quedaba averiguarlo…
Es que ese mulato me podía, no podía mirarlo sin deseo, quería que fuera mío 
 mi plan de seducción
Llegaron mis peinados en cola de caballo, mis labios pintados, dejé de lado las largas remeras para pasar a pequeños top de gimnasia, tangas de infarto bajo short blancos de licra, de esos que se transparentan y como dije al principio, solo para resaltar mi culo pornográfico, empezaron roces casuales, palabras inocentes, y poses sugerentes,
Pronto conseguiría dos cosas, la atención de Roberto Carlos, ser su alumna preferida con la cual intercambiaba sonrisas cómplices, ser su centro de atención, tener sus ojos clavados en mi cuerpo y además… estar en boca de todas las chicas del gym, me transformé en la puta del lugar, en la típica calienta vergas que andaba detrás del profesor, pero poco me importó…
Y las cosas se hicieron más que evidentes, éramos cómplices, nuestro destino era la cama, las chicas del gym me preguntaban qué tal cogía asumiendo algo que aún no había sucedido, pero que no tardaría en darse...
Una tarde como cualquiera me ayudaba a elongar, se puso tras de mí en un plan acostumbrado, solo que yo busqué intencionalmente pegar mi trasero a su bulto, él tomó la indirecta y empujó hacia adelante, disimuladamente para no levantar sospechas, y yo volví a empujar, ahora refregando un poco, entonces me dijo
No seas puta, dejá de provocarme porque te voy a meter la verga en el culo y después vas a llorar…
Ja! para tanto es? sabes que me muero de ganas? Cuando quieras, donde quieras…
Había algo más que me enloquecía de ese hombre, como dije, el hecho que fuera casado, tenía familia, y yo quería corromperlo y llevarlo a la cama, como sea, 
Viernes, día de gym, ya casi había terminado cuando le dije a Roberto Carlos que estaría sola por la noche, mi marido, quien era totalmente ajeno a lo que termino de escribir, tenía una cena de amigos, yo ya lo conocía, y esas cenas duraban hasta altas horas de la madrugada, fui directa, le dije que quería coger
El miraba un tanto incrédulo, como adivinando si hablaba en serio o no, así que le dije, que le mandaría un whatsapp y que si le parecía bien tipo veintitrés podríamos encontrarnos.
Y así fue, apenas mi esposo dejó el hogar con un dulce beso en mis labios, le avisé a Roberto Carlos y fui corriendo a cambiarme, ya estaba bañada, depilada y perfumada, me puse un vestido floreado, algo holgado pasando mis rodillas, si algo quería en ese momento, es pasar desapercibida al salir, no necesitaba llamar la atención de las viejas chusmas del barrio, pero, de todas maneras, tenía una sorpresa para ese mulato.
Tomé un taxi para encontrarme con él en un sitio apartado, llegué, pagué me bajé, él ya me esperaba, me hizo un guiño con las luces de su coche y me dirigí a su encuentro, subí y me acomodé a su lado.
Estás muy bonita! - me dijo con una sonrisa compradora 
Arrancó camino a algún telo  mientras conducía lo miraba atentamente, él se concentraba en el tránsito, así que tomé su mano derecha con la mía y la llevé a mi muslo, levanté suavemente el vestido y lo hice subir lentamente, quería que llegara a la sorpresa, cuando llegó a mi vagina depilada notó que no tenía ropa interior, le arranqué una sonrisa y empujé más su mano entre mis piernas, intentó infructuosamente colar uno o dos dedos en el interior de mi raja, pero el acceso no era fácil, por lo que la retiró y la coló por el escote de mi vestido, para comprobar que tampoco tenía sostén…
Esos juegos en el viaje lograron que estuviéramos a punto caramelo llegado el momento…
El cuarto era amplio,
Me incorporé a un lado de la cama, bajé de mis tacos, aflojé mi vestido y lo dejé caer al suelo, me quedé como dios me trajo al mundo ante sus ojos atontados, me pidió que girara, para ver mi trasero, previsible…
Entonces apagué la luz, apenas tenues reflejos de las farolas de la acera se colaban por los gruesos cortinados, dando una imagen de casi oscuridad total, me acerqué a él y ahora si nos besamos profundamente, sentí su respiración agitada, aún tenía sus prendas y contrastaba con mi total desnudez, le fregué la verga por sobre la ropa, aun apuntaba al suelo, pero ya pude notar algo interesante, me apretó las nalgas y ahora si, sin problemas metió un par de dedos en mi conchita, bien profundo, bien rico…
Me estremecí en sus brazos, comenzó a llenarme de besos, esos besos profundos, y yo a recorrer la perfección de sus músculos, me acurruqué en su cuerpo varonil, y sentí su pija crecer rápidamente hasta refregarla en mi vientre, mierda, no pude resistirlo, me arrodillé a sus pies, aflojé sus ropas con premura para llegar a su sexo, no podía verla con claridad, pero la abracé con una mano y aún quedaba mucho por cubrir, tenía un aroma embriagante, la sentí latir entre mis dedos, solo hizo que me mojara más y más…
Me dispuse a torturarlo, pelé bien su glande, besé sus ricos testículos, y recorrí esa preciosura desde la base hasta la punta, lentamente, una y otra vez, muy lento, demasiado…
Roberto Carlos pronto empezaba a estremecerse, quería que se la comiera toda, que se la chupara con ganas, pero yo solo apretaba mi húmeda lengua contra la bese de su cabeza llevándolo a una lenta agonía, incluso pude saborear una pequeña gota acuosa de un incipiente semen que escapaba por la punta de su pija
El parecía estar en trance, hasta que me levantó por la fuerza, tomando el control de la situación, me tiró sobre la cama, se terminó de desnudar, se arrodilló en el piso y escabulló su cabeza entre mis piernas, me mantuvo con la fuerza de sus brazos, dando pequeños pellizcos en mis pezones y me pagó con la misma moneda, empezó a rozar con su lengua los labios de mi sexo, en un lento y eterno camino que me llevaban a la nada, porque deseaba que lamiera mi clítoris pero no lo hacía, apenas lo rodeaba y hacía que me retorciera en deseo.
Estaba en desventaja, abusaba de su fuerza masculina para mantenerme a raya y yo nada podía hacer, solo retorcerme y gemir, le implore
Basta hijo de puta, cógeme, ¡quiero toda tu verga dentro!
Él se apiadó, vino sobre mí y me la metió por completo, tan rica, tan grande, tan gruesa, me hizo vibrar, me arrancó un gemido de puta, empezó a moverse dentro mío, lo besé, sentí sus propios gemidos, ensartándome hasta el fondo, una y otra vez, quise acariciar mi clítoris para llegar a ese orgasmo que lo tenía a flor de piel, pero él me lo impidió, nuevamente abusando de su masculinidad me retuvo los brazos para que yo no pudiera tocarme, y me cogió en cuanta forma y posición imaginen, hasta que recordé la charla del gym y le dije directamente
Y papi? no me dijiste que me ibas a romper el culo? supongo que no me dejaras con las ganas…
La verdad… habría que hacer unas ‘sentadillas’ para fortalecer esos glúteos…
Bastardo, solo se recostó boca arriba con su verga erecta mirando al cielo, mientras yo lubricaba mi esfínter, me puse en cuclillas a su lado, bajé lentamente y solo la dejé entrar, hasta donde se podía porque toda no me entraba…
Y como si estuviera en una de sus clases, flexionaba sobre él, parada en las plantas de mis pies, regalándole las curvas de mi culo, arriba y abajo, diez veces, y otra serie más, y una tercera, se sentía hermoso, y me sentía muy puta, con esa verga hermosa en mí culo.
Al fin pude masturbarme libremente, apretando mi clítoris entre mis dedos, me sentí venir, que rico orgasmo con su enorme verga en mi trasero…
Volvió a tomar la iniciativa luego que no pude más, en mezcla de cansancio y placer, puso un almohadón sobre la cama y me recostó sobre el boca abajo, de manera que mi colita quedara levantado, como si acaso hiciera falta, lo sentí acomodarse como para cabalgarme, y me la metió nuevamente…
La posición favoreció la penetración tan profunda que me arrancó un grito, mezcla de placer y dolor, y empezó a darme, sin prisa, sin pausa, rompiéndome bien el culo, como a mí me gustaba…
Al fin la sacó y empecé a sentir su semen caliente quemando mi piel, mis nalgas, mi espalda, un chorro, otro y otro más…
Se retiró y cayó rendido a mi derecha, nos besamos apasionadamente…
Aun había tiempo y cogimos un buen rato más, luego nos bañamos y emprendimos el regreso.

me cogio mi profe se zumba

24 comentarios - me cogio mi profe se zumba

Alejandro0885
q buen relato!!! como para no coner tremenda hembra
Morboso29
+10 Como siempre dejas al palo con tus relatos
calleje99
que buena putita...insaciable!!
bacomalbec
Siempre me dejas con la pija chorreando...
paraguaya28
me envanta y calienta eso
poringaporonga
muy buen relato, mucha imágenes.
Para cogerte!!!
jonathanpuyol
No podes ser tan puta mujer tanto t gusta la pija yegua?
paraguaya28
siii , me encanta
jonathanpuyol
@paraguaya28 q tengo q hacer para tener esas tetas en mis manos y mi verga en tu boca de petera?
michian +1
sos muy puta....esta muy bien,,, van los 10
rikioskar
No.podes estar tan buena mujer!!!
sebas2514
la verdad yo te veo asi en el gym, te agarro en el vestuario y cojo toda @paraguaya28, como me calienta verte tan exitante , te gustaria que te haga el amor bebe??

trola
paraguaya28 +1
me calienta mucho todo lo que me decis siempre , me hace sentir mujy perra
sebas2514
que bueno , ojala te caliente tanto como a mi tus fotos y tus relatos , como me gustaria que te toques pensndo en mi bebe❤
ferchus2008
hola paraguaya28 como nos calentas con mi mujer,los relatos son mortales como vos,esperamos conocerte un finde,besitos donde mas te guste
paraguaya28 +1
y a mi me calienta leerlos , de donde sos
ferchus2008
@paraguaya28hola somos de quilmes
leosex4
Como para no hacer ese hermoso orto
paraguaya28
te gusta mi cola
leosex4 +1
me encanta te la chuparia hadta que se abra para despues datle verga y verga mientras me miras con esa cara de putita y pedis mas
juanrapalacios
paraguaya28 me encanta tu culo..te gusta mucho que te lo rompan?? cuando nos vemos, me calentas demaciado x lo putas q sos
paraguaya28
me gusta mucho el sexo anal . lo disfruto
juanrapalacios
paraguaya28 te gusta que t llenen el orto de leche?
DONGATO02
Me dejaste la pija al palo y babosa me la limpiad con la lengua.
Después al culito
marckrex
que lindo relato,como me gustaria ortearte ese ojete hermoso que tenes ,+10
brujo2009 +1
Con ese estado como para no cogerte
Ignacioale20
Confesate por mentir y devolve la turra a su pabellón
oskil01
Que hermosa yegua con ese culo no me canso tus relatos y con fotos de gata!
AldinGomez
EM HUBIERA ENCANTADO SER TU MAESTRO DE AMOR MI AMOR EM HUBIERA ENCANTADO MAMARTE Y LAMERTE LOS PEZONES MIENTRAS TE COJIA M VIDA