Buenas noches gente de P! Andaba con ganas de subir un relato y pensaba de que experiencia podría ser o imaginar alguno. Pero me decidí a hacer algo nuevo, una idea que surje de un par de comentarios sin sentido que me llevaron a reflexionar.
Estamos inmersos en un mundo donde el sexo vende y aquí mismo publicamos siempre lo más caliente y no las cosas no tan bellas de este mundo.
Por ello les quise traer algo nuevo. Experiencias personales fallidas que me han sucedido a lo largo del tiempo como una manera de ver que puede fallar y ser incómodo pero siempre hay que disfrutar. Obviamente fiel a mi estilo no dejaré de imprimir esa cuota de pornografía y erotismo a estás situaciones. Que lo disfruten
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Experiencia N°1: que mejor que empezar con la primera vez, aaah esa utopía, ese idilio, ese momento mágico... Y nada, puede suceder de mil formas lo único seguro es que algo va a fallar o no va a salir como lo pensado. Era yo más joven y tenía una novia virgen también y hacía unos cuantos meses estábamos de novios. Solíamos vernos en nuestra plaza favorita y cuando no había gente alrededor deslizabamos nuestras manos hacia nuestros sexos sobre la ropa explorando. La había sentido mojada tantas veces que ya no daba más de pensar en cómo sería.
Llego el día en que estábamos listos en mi casa solos. Estábamos viendo TV en el sillón cuando comenzamos a los besos y a tocarnos. Luego de un rato la lleve a mi cama y puse sus canciones favoritas. Sin dejar de besarnos pasamos las manos bajo la ropa y nos tocamos de manera inexperta. Ella no se atrevía a sacarla. Le dije querés verla? Y sin esperar respuesta la saqué y se la enseñe. Waow todo eso entra? Me dijo ella al tiempo que se bajaba la ropa interior. Porque yo la quiero acá- continuo diciendo.
No podía dejar de mirarla estaba con vello pero se veía rosada hermosa. Nos dimos sexo oral por primera vez. Llego el gran momento. Fui a buscar un preservativo y no conseguía abrirlo. Finalmente lo logramos entre los dos y ella lo saco e intento ponerlo en mi verga lubricada con su saliva pero no lo conseguía así que entre los dos lo hicimos. Sin embargo no bajo más que un poco pero decidimos hacerlo igual. De a poco y siendo incómodo comencé a hacerla entrar. En esa conchita super cerrada sentir como de a poco entraba y se abría... Sentir esa tibieza que envolvía mi verga por primera vez... Fue mágico. Sin embargo comenzamos a hacerlo y se sintió raro. Por ello baje la mano hasta la zona a tantear.
Esta todo bien? preguntó ella.
Si le dije mientras la sacaba y con horror comprobaba que el preservativo no estaba.
Antes de asustarla decidí meterle los dedos. Por fortuna sentí que estaba allí y lo retire. Le exprese lo sucedido y todo el ambiente se hizo trizas además del miedo de que hubiese quedado preñada aunque apenas lo habíamos hecho. Nos fuimos a una farmacia y allí nos dijeron que probablemente no había sucedido nada que no tomase la pastilla que queríamos solicitar. Fueron días de miedo y aprension hasta que finalmente llegó su menstruación y a le vez siguiente tuvimos sexo como verdaderamente era y fue hermoso. Podría titularse el primer susto.
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Experiencia 2: esto me sucedió con una compañera de estudios. Con sobrepeso, lentes y muy poco valorada ella casi no tenía amigos y yo era uno de ellos. Obviamente no tiene nada que ver lo que menciono pero la gente suele marginar. Nos habíamos hecho amigos ente charlas y un día casi sin querer me había tocado la verga en una clase. Desde allí fue un sin cesar de que cada vez que nos sentabamos juntos o se apagaban las luces para ver una película o lo que sea nos tocabamos el uno al otro.
Un día se dieron las circunstancias y vino a mi casa. Una cosa llevó a la otra y terminamos besándonos en mi cama. No paso mucho tiempo antes de que me estuviera pajeando y yo sacándole la ropa. Pronto sus tetas (increíblemente grandes) quedaron a mi vista y solo pude bajar hacía ellas a besarlas mientras seguía pajeandome. Sin embargo la cosa no salió como esperaba. De sus tetas salió un olor a transpiración bastante fuerte que me hizo retroceder e intentar por otro lado. Tocandola entre las piernas un olor a cebolla tiñó el ambiente (si, a cebolla). Ella se dió cuenta que no podía estar así a pesar que yo no había hecho nada que me delatara y se negó a seguir. Poco después se fue de mi casa y nunca más sucedió nada ni ella lo menciono.
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Por último en este post, experiencia N°3.
Llegaba la noche del viernes y no tenía ningún plan, que hacer? No paso mucho tiempo antes de que comenzara a sentirme mal y pesado. Crei que saliendo se me pasaría y rápidamente hablé con una amiga con la cual habíamos tenido un sexo fenomenal y me invitó a su casa sola. Tome un remis y fui. Durante el viaje me sentía débil y afiebrado pero estaba seguro que se me pasaría.
Llegue a su casa nos saludamos y ella se fue a cambiar para salir a un bar. Yo no creí poder soportar una noche fuera, de hecho era verano y estaba comenzando a tiritar. Mi cuerpo temblaba y me di cuenta que debería haberme quedado en casa pero era tarde. Ella bajo cuál princesa de las escaleras vestida increíblemente y me besó y le devolví el beso comenzamos a ir de un lado a otro besándonos hasta que le propuse quedarnos en su casa. Fuimos a su habitación y rápidamente se desnudó ella misma frente a mi mostrando su ropa interior de encaje transparente que era una belleza. Sin dejar de mirarme a la cara se arrodilló mientras yo me sentaba en la cama y comenzó a chuparmela sin parar. Mi temperatura debía estar a mil grados y la cabeza me daba vueltas. Cuando fue el momento de hacerlo por todo esto perdió fuerza se me ablandó y no podía levantarla de nuevo. Terrible jaja. Llego el momento en que se me puso super dura de nuevo pero al momento de ponerme el preservativo otra vez se me bajo y ya ni podía estar de pie. Me acosté y le dije que no podía. Por suerte, y por eso quise terminar con esta experiencia, ella solo hizo una broma y terminamos hablando abrazados hasta las 4 de la mañana, hablando de todo en su cama y cada tanto durmiendo. Finalmente nos quedamos los dos dormidos y me despertó la alarma. Me fui y tuve que volver sin haber logrado hacerlo. Tres días después me había recuperado de la gripe.
Sin embargo, y aquí radica la importancia de este post. Estás son cosas que suceden y casi nadie las expresa. Pero no tienen nada de malo y constituyen nuestro ser. Todo es experiencia. Y si bien sucede, es importante siempre contar con una persona que le quite importancia al asunto y le importes tú. Y si estás en ese rol, que seas tú la persona que cuide a la otra así sea la primera vez que la encuentres. Porque esa persona te está entregando toda su humanidad y deja en ti una parte de ella, por eso respeta y honra a esas personas.
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Bien amigos de P! Hasta acá el día de hoy si quieren dejar sus experiencias sería genial aquí a todos nos ha pasado algo y tú experiencia puede servir a alguien más. Espero que les haya gustado hasta la próxima!
Estamos inmersos en un mundo donde el sexo vende y aquí mismo publicamos siempre lo más caliente y no las cosas no tan bellas de este mundo.
Por ello les quise traer algo nuevo. Experiencias personales fallidas que me han sucedido a lo largo del tiempo como una manera de ver que puede fallar y ser incómodo pero siempre hay que disfrutar. Obviamente fiel a mi estilo no dejaré de imprimir esa cuota de pornografía y erotismo a estás situaciones. Que lo disfruten
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Experiencia N°1: que mejor que empezar con la primera vez, aaah esa utopía, ese idilio, ese momento mágico... Y nada, puede suceder de mil formas lo único seguro es que algo va a fallar o no va a salir como lo pensado. Era yo más joven y tenía una novia virgen también y hacía unos cuantos meses estábamos de novios. Solíamos vernos en nuestra plaza favorita y cuando no había gente alrededor deslizabamos nuestras manos hacia nuestros sexos sobre la ropa explorando. La había sentido mojada tantas veces que ya no daba más de pensar en cómo sería.
Llego el día en que estábamos listos en mi casa solos. Estábamos viendo TV en el sillón cuando comenzamos a los besos y a tocarnos. Luego de un rato la lleve a mi cama y puse sus canciones favoritas. Sin dejar de besarnos pasamos las manos bajo la ropa y nos tocamos de manera inexperta. Ella no se atrevía a sacarla. Le dije querés verla? Y sin esperar respuesta la saqué y se la enseñe. Waow todo eso entra? Me dijo ella al tiempo que se bajaba la ropa interior. Porque yo la quiero acá- continuo diciendo.
No podía dejar de mirarla estaba con vello pero se veía rosada hermosa. Nos dimos sexo oral por primera vez. Llego el gran momento. Fui a buscar un preservativo y no conseguía abrirlo. Finalmente lo logramos entre los dos y ella lo saco e intento ponerlo en mi verga lubricada con su saliva pero no lo conseguía así que entre los dos lo hicimos. Sin embargo no bajo más que un poco pero decidimos hacerlo igual. De a poco y siendo incómodo comencé a hacerla entrar. En esa conchita super cerrada sentir como de a poco entraba y se abría... Sentir esa tibieza que envolvía mi verga por primera vez... Fue mágico. Sin embargo comenzamos a hacerlo y se sintió raro. Por ello baje la mano hasta la zona a tantear.
Esta todo bien? preguntó ella.
Si le dije mientras la sacaba y con horror comprobaba que el preservativo no estaba.
Antes de asustarla decidí meterle los dedos. Por fortuna sentí que estaba allí y lo retire. Le exprese lo sucedido y todo el ambiente se hizo trizas además del miedo de que hubiese quedado preñada aunque apenas lo habíamos hecho. Nos fuimos a una farmacia y allí nos dijeron que probablemente no había sucedido nada que no tomase la pastilla que queríamos solicitar. Fueron días de miedo y aprension hasta que finalmente llegó su menstruación y a le vez siguiente tuvimos sexo como verdaderamente era y fue hermoso. Podría titularse el primer susto.
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Experiencia 2: esto me sucedió con una compañera de estudios. Con sobrepeso, lentes y muy poco valorada ella casi no tenía amigos y yo era uno de ellos. Obviamente no tiene nada que ver lo que menciono pero la gente suele marginar. Nos habíamos hecho amigos ente charlas y un día casi sin querer me había tocado la verga en una clase. Desde allí fue un sin cesar de que cada vez que nos sentabamos juntos o se apagaban las luces para ver una película o lo que sea nos tocabamos el uno al otro.
Un día se dieron las circunstancias y vino a mi casa. Una cosa llevó a la otra y terminamos besándonos en mi cama. No paso mucho tiempo antes de que me estuviera pajeando y yo sacándole la ropa. Pronto sus tetas (increíblemente grandes) quedaron a mi vista y solo pude bajar hacía ellas a besarlas mientras seguía pajeandome. Sin embargo la cosa no salió como esperaba. De sus tetas salió un olor a transpiración bastante fuerte que me hizo retroceder e intentar por otro lado. Tocandola entre las piernas un olor a cebolla tiñó el ambiente (si, a cebolla). Ella se dió cuenta que no podía estar así a pesar que yo no había hecho nada que me delatara y se negó a seguir. Poco después se fue de mi casa y nunca más sucedió nada ni ella lo menciono.
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Por último en este post, experiencia N°3.
Llegaba la noche del viernes y no tenía ningún plan, que hacer? No paso mucho tiempo antes de que comenzara a sentirme mal y pesado. Crei que saliendo se me pasaría y rápidamente hablé con una amiga con la cual habíamos tenido un sexo fenomenal y me invitó a su casa sola. Tome un remis y fui. Durante el viaje me sentía débil y afiebrado pero estaba seguro que se me pasaría.
Llegue a su casa nos saludamos y ella se fue a cambiar para salir a un bar. Yo no creí poder soportar una noche fuera, de hecho era verano y estaba comenzando a tiritar. Mi cuerpo temblaba y me di cuenta que debería haberme quedado en casa pero era tarde. Ella bajo cuál princesa de las escaleras vestida increíblemente y me besó y le devolví el beso comenzamos a ir de un lado a otro besándonos hasta que le propuse quedarnos en su casa. Fuimos a su habitación y rápidamente se desnudó ella misma frente a mi mostrando su ropa interior de encaje transparente que era una belleza. Sin dejar de mirarme a la cara se arrodilló mientras yo me sentaba en la cama y comenzó a chuparmela sin parar. Mi temperatura debía estar a mil grados y la cabeza me daba vueltas. Cuando fue el momento de hacerlo por todo esto perdió fuerza se me ablandó y no podía levantarla de nuevo. Terrible jaja. Llego el momento en que se me puso super dura de nuevo pero al momento de ponerme el preservativo otra vez se me bajo y ya ni podía estar de pie. Me acosté y le dije que no podía. Por suerte, y por eso quise terminar con esta experiencia, ella solo hizo una broma y terminamos hablando abrazados hasta las 4 de la mañana, hablando de todo en su cama y cada tanto durmiendo. Finalmente nos quedamos los dos dormidos y me despertó la alarma. Me fui y tuve que volver sin haber logrado hacerlo. Tres días después me había recuperado de la gripe.
Sin embargo, y aquí radica la importancia de este post. Estás son cosas que suceden y casi nadie las expresa. Pero no tienen nada de malo y constituyen nuestro ser. Todo es experiencia. Y si bien sucede, es importante siempre contar con una persona que le quite importancia al asunto y le importes tú. Y si estás en ese rol, que seas tú la persona que cuide a la otra así sea la primera vez que la encuentres. Porque esa persona te está entregando toda su humanidad y deja en ti una parte de ella, por eso respeta y honra a esas personas.
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Bien amigos de P! Hasta acá el día de hoy si quieren dejar sus experiencias sería genial aquí a todos nos ha pasado algo y tú experiencia puede servir a alguien más. Espero que les haya gustado hasta la próxima!
1 comentario - Experiencias fallidas reales