BUENO ANTES QUE NADA ESTE ES MI PRIMER POST Y COMO TAL QUIERO QUE ME DIGAN QUE LES PARECIÓ.
ES UNA HISTORIA REAL QUE LE PASO A UN AMIGO, PABLO (real).
Todo arrancó una tarde (viernes si mal no recuerdo) de trabajo en la oficina de la empresa (no importa el nombre) de soluciones informáticas en la que trabajo. Yo no tenia un dia normal, ya que ese dia había recibido una vez más reproches por parte de mi novia Julieta, con la que ya llevamos mas de 5 años de relación, y como experimentarán algunos, a veces la rutina se hace un poco dificil. Con Julieta hacia 2 meses que practicamente no teniamos sexo, si no era porque le dolia la cabeza, era porque tenia sueño o alguna que otra vez porque yo llegaba muy cansado de mi otro trabaja (soy además profesor de Informatica).Mariela es una empleada que trabaja en el sector 2 de la empresa, en la parte de recepcion de nuevos reclamos o trabajos por asi decirlo. Ingreso hace 6 meses, sinceramente nunca la habia visto detenidamente, obviamente habiamos hablado entre los empleados como siempre que ingresa alguno/a nueva. Ella es bastante alta (1,85 aprox.), morocha, bien de pechos (diria que 85) y una cola excelente, ella lo sabe y por lo tanto siempre se viste provocativa y resaltando sus atributos. Luciendo sus 23 años, tiene una frescura y una actitud que a cualquiera atrae, va mucho al frente sin pudor.
Yo que trabajo hace 7 años en la empresa, soy gerente de ventas. Por lo tanto tengo a mi control varias secciones, entre ellas, la seccion en la que ingresó Mariela.
Los primeros meses fueron normales por asi decirlo, trato fluido por esto mismo que remarco de su actitud, pero ultimamente (ultimo mes y medio), nose si debido a mis problemas con Juli o solo por calentura, comencé a ver con otra cara a Mariela. Ella (supongo que ya se habia dado cuenta) tambien comienza a tener un trato mas cercano, en los recreos del mate o a la salida en el estacionamiento de la empresa.
Agustín, dueño de la empresa y amigo mio de varios años (estudiamos juntos y ahora laburamos hace 7 años juntos) esta al tanto de toda mi situacion con Juli y obviamente con lo que me empezaba a pasar con Mariela (o como el le llamaba informalmente "la pendeja";). Siempre que necesitaba un consejo, sabia que podia contar con el, como el podia contar conmigo para lo que necesite.
Pero por mas que quisiera escucharlo o tomar en cuenta lo que me diga Agustín: "no te enganches, hace las cosas bien, etc ,etc etc...." . Yo sentia la necesidad incontenible de acercarme a la "pendeja" a conocerla un poco mas.
Varias veces hablamos sobre temas comunes al trabajo y yo notaba como ella me insinuaba algo, con su mirada y sus gestos. Seguramente se daba cuenta que yo estaba prendido fuego con ella, y no sabia o no podia disimularlo correctamente.
Hasta que por la mañana de dicho viernes, yo me fui de mi casa muy mal. Como dije en el primer parrafo, discutimos con Julieta. Practicamente ni nos saludamos al partir para nuestros respectivos trabajos. La discusión era cada vez más frecuentes entre nosotros y mas aun desde que me enteré de una cagada que se mandó ella (la cual siempre me negó, pero se que es verdad...).
Al entrar al trabajo en el estacionamiento me recibe Agustín, como siempre hacemos, vamos a desayunar al lado de nuestro trabajo. Ahí le cuento todo lo que habia pasado, el como siempre me aconseja y trata de levantar. Pero ese dia me sentia raro, distinto, nunca había sentido esa sensación. Sentía la necesidad de cambiar un poco de aire, esto sumado a que hacía rato no tenia sexo con nadie, me empujaban a la inevitable situacion de "avanzar" un poco con Mariela.
Entro a la seccion, saludo a mis empleados como siempre y llego al escritorio de ella. Me mira e inmediatamente se da cuenta de todo, me pregunta que habia pasado y si estaba todo bien, le digo que no se preocupe. Insiste, vuelve a preguntarme. Trato de consentrarme en el trabajo y dejo atras la charla.
En el corte para el mate y las facturas, se me acerca (raro ya que siempre el que se acercaba era yo).
- ey, que pasa hoy que estas cortante conmigo?
- no, no pienses eso. Solo que, como te dije antes, tengo unos problemas en casa.
- ahhh bueno, pero si de eso no queres hablar entonces nose como ayudarte - me dice poniendo cara de compradora. - no te dejas ayudar.
- Es complicado Mariela, no es una situacion fácil , pero obviamente que agradezco que te preocupes- trato de quedar bien sin cortarla demasiado.
-¿siempre sos tan formal vos? - me disparó y sorprendió.
-ja ja , me haces reir, pero sincerament no soy tan serio como decis vos - a esta altura ya tenia ganas de encararla directamente y sin rodeos.
- me parece que si, nunca te vi de manera "informal".
A esta altura ya no me importaba nada mas que mirar como esa morocha enorme provocaba con cada palabra que me decía.
- pero hay lugares y lugares para ser formal e informal Mariela, ¿no te parece?.
- si, claro que sí. pero no siempre hay que ser tan estructurados...
Seguimos cada uno con nuestra tarea, yo quede todo el tiempo pensando en Mariela. Mis ganas de hablarle eran enormes pero sabia que ella tambien estaba caliente conmigo y por eso me estaba provocando de esa manera.
A la hora de la salida del trabajo (18hs) yo siempre me quedo un rato más hasta que controlo un poco todo el desorden que pueda quedar en mi escritorio y apago luces.
Mi amigo Agustín, el dueño, se va temprano los viernes (17hs) ya que juega al futbol con los amigos. Por lo tanto yo cierro todo los viernes.
Acomodo toda mi oficina y me voy al sector de los empleados a ver si habian apagado todas las luces y computadoras, cuando aparece Mariela:
- no sabia que te quedabas hasta tarde Mariela.
- es que hoy fue un dia muy muy atareado - tenía razón, habia sido un dia muy bravo.
- la verdad que si, estoy agotado - me hago el cansado.
- ¿y vos que haces a esta hora? ¿te toco cerrar a vos hoy?
- claro, todos los viernes cierro yo porque agus se va a jugar al futbol.
- ahhh mira vos, no sabia que el jefe era deportista.
- ja ja, trata de serlo.
- ¿y que vas a hacer ahora?.-me dice clavándome los ojos verdes directo en mis ojos, pareciendo que nada mas que nosotros dos existe.
-lo que mas quiero es cerrar e irme a dormir o despejarme un poco.
-si, yo tambien, esta semana no pude hacer nada practicamente.- junta sus cosas - si queres podemos hablar mas "informalmente" ya que nunca te conoci de esa manera
- nose que decirte, tengo que hacer un par de cosas en mi casa - mentira, nada podia importar mas que eso, solo que no me decidia sobre que hacer ante semejante hembra.
- que aburrido que sos, al final no queres hacer nada...- se da vuelta y muestra todo el orto bien marcado que relucian sus jeans ajustadísimos.
- no me digas eso, me haces quedar como un viejo aburrido - me acerco por atras de ella tratando de frenar que se vaya.
-entonces que...- se da vuelta y me mira - ¿tomamos algo?
-si, pero antes quiero decirte algo - la agarro del brazo, ya estoy jugado.- siempre sos asi con tus superiores nena?
- no -dice sorprendida por mi reaccion- solo con los hombres que me calientan.
-desde cuando
-desde siempre, siempre tu aspecto me parecio atractivo y mas aun al ver como me miras siempre con ganas de partirme al medio con la mirada.
- veni para aca - la llevo hacia un cuarto al lado de la gerencia donde se guardan archivos y maquinas dañadas- ahora vas a ver como te parto.
comenzamos a subir, le agarre con mis manos sus dos cachetes enormes y duros como una piedra, perfectamente amoldados a mis dedos. Ella mete la mano dentro de mi pantalon, yo ya estaba a mil hacía rato. Mientras subimos escaleras, le como la boca.
-como me calentas pendeja, siempre me encantaste.- entramos al cuarto y la tiro sobre el escritorio.
- veni y mostrame como sos informalmente, dale. - y se desprendió uno a uno los botones de la camisa ya toda arrugada por el franeleo.
me acerco y le empiezo a acariciar las tetas, tambien hermosas. Ella sigue con la mano en mi jean, ahora desabrocha el cinto y comienza a bajar el boxer, saca la verga y empieza a chupar. Yo estoy disfrutando y a la vez pensando en todas las vecdes que imaginé estar en esta situación con esta pendeja hermosa. Rápidamente comienza a pajearme y a chupar cada vez mas rapido, realmente es buena. A los 5 minutos ya siento que estoy por acabar pero ella se da cuenta y se para y me dice:
- ahora te toca a vos
me levanto y le saco el pantalon en un solo movimiento. Comienzo a acariciarla y siento que esta absolutamente mojada, me acerco a la zona prohibida y comienzo a meterle lengua y saliva, ella disfruta y gime como si nunca hubiera pasado esa situación. Le meto 1 dedo y la masturbo, despues cuando se afloja le meto 2, primero se queja pero despues gime con mas fuerza, esta por acabar, sigo hasta que siento que se acaba toda. La siento en un sillon-cama que hay en la sala. me pongo un forro y se la meto hasta el fondo, sintiendo una experiencia que hacia rato no sentia...
la cojo con fuerza, casi desesperado de tanto tiempo que no lo hacía. Ella grita cada vez mas fuerte, es insaciable. Se da vuelta y me pide ir arriba, se pone a cabalgar y yo le chupo todas las hermosas tetas que saltaban para todos lados, de pronto se acaba de nuevo. Apenas termina me dice - vení quiero que me acabes acá - se señala las tetas y se pone en 4. Salgo disparado del sillón y le doy bien duro hasta que me acabo una cantidad enorme de leche en las tetas, ella la desparrama con las manos y se limpia con unos papeles que habia arriba del escritorio.
En seguida siento ganas de seguir cogiendo asi que vuelvo a ponerme un forro mientras ella se limpia las tetas. Le doy en 4 hasta que se acaba por 3ra vez, se para y vamos contra la pared. Me acabo nuevamente, esta vez adentro de ella. Nos besamos, ya era demasiado tarde para un 3ro.
Salgo para mi casa, no sin antes pedirle sus datos y acordar un nuevo encuentro. Al llegar a casa Julieta no pregunta demasiado ya que todavía sigue enojada. Para mí mejor que no pregunte asi no tengo que mentirle.
Desde ese viernes , Mariela dejo de ser esa pendeja imposible para pasar a ser una pendeja con la cual experimento un sexo que hacia rato no sentia.
continuará...
ES UNA HISTORIA REAL QUE LE PASO A UN AMIGO, PABLO (real).
Todo arrancó una tarde (viernes si mal no recuerdo) de trabajo en la oficina de la empresa (no importa el nombre) de soluciones informáticas en la que trabajo. Yo no tenia un dia normal, ya que ese dia había recibido una vez más reproches por parte de mi novia Julieta, con la que ya llevamos mas de 5 años de relación, y como experimentarán algunos, a veces la rutina se hace un poco dificil. Con Julieta hacia 2 meses que practicamente no teniamos sexo, si no era porque le dolia la cabeza, era porque tenia sueño o alguna que otra vez porque yo llegaba muy cansado de mi otro trabaja (soy además profesor de Informatica).Mariela es una empleada que trabaja en el sector 2 de la empresa, en la parte de recepcion de nuevos reclamos o trabajos por asi decirlo. Ingreso hace 6 meses, sinceramente nunca la habia visto detenidamente, obviamente habiamos hablado entre los empleados como siempre que ingresa alguno/a nueva. Ella es bastante alta (1,85 aprox.), morocha, bien de pechos (diria que 85) y una cola excelente, ella lo sabe y por lo tanto siempre se viste provocativa y resaltando sus atributos. Luciendo sus 23 años, tiene una frescura y una actitud que a cualquiera atrae, va mucho al frente sin pudor.
Yo que trabajo hace 7 años en la empresa, soy gerente de ventas. Por lo tanto tengo a mi control varias secciones, entre ellas, la seccion en la que ingresó Mariela.
Los primeros meses fueron normales por asi decirlo, trato fluido por esto mismo que remarco de su actitud, pero ultimamente (ultimo mes y medio), nose si debido a mis problemas con Juli o solo por calentura, comencé a ver con otra cara a Mariela. Ella (supongo que ya se habia dado cuenta) tambien comienza a tener un trato mas cercano, en los recreos del mate o a la salida en el estacionamiento de la empresa.
Agustín, dueño de la empresa y amigo mio de varios años (estudiamos juntos y ahora laburamos hace 7 años juntos) esta al tanto de toda mi situacion con Juli y obviamente con lo que me empezaba a pasar con Mariela (o como el le llamaba informalmente "la pendeja";). Siempre que necesitaba un consejo, sabia que podia contar con el, como el podia contar conmigo para lo que necesite.
Pero por mas que quisiera escucharlo o tomar en cuenta lo que me diga Agustín: "no te enganches, hace las cosas bien, etc ,etc etc...." . Yo sentia la necesidad incontenible de acercarme a la "pendeja" a conocerla un poco mas.
Varias veces hablamos sobre temas comunes al trabajo y yo notaba como ella me insinuaba algo, con su mirada y sus gestos. Seguramente se daba cuenta que yo estaba prendido fuego con ella, y no sabia o no podia disimularlo correctamente.
Hasta que por la mañana de dicho viernes, yo me fui de mi casa muy mal. Como dije en el primer parrafo, discutimos con Julieta. Practicamente ni nos saludamos al partir para nuestros respectivos trabajos. La discusión era cada vez más frecuentes entre nosotros y mas aun desde que me enteré de una cagada que se mandó ella (la cual siempre me negó, pero se que es verdad...).
Al entrar al trabajo en el estacionamiento me recibe Agustín, como siempre hacemos, vamos a desayunar al lado de nuestro trabajo. Ahí le cuento todo lo que habia pasado, el como siempre me aconseja y trata de levantar. Pero ese dia me sentia raro, distinto, nunca había sentido esa sensación. Sentía la necesidad de cambiar un poco de aire, esto sumado a que hacía rato no tenia sexo con nadie, me empujaban a la inevitable situacion de "avanzar" un poco con Mariela.
Entro a la seccion, saludo a mis empleados como siempre y llego al escritorio de ella. Me mira e inmediatamente se da cuenta de todo, me pregunta que habia pasado y si estaba todo bien, le digo que no se preocupe. Insiste, vuelve a preguntarme. Trato de consentrarme en el trabajo y dejo atras la charla.
En el corte para el mate y las facturas, se me acerca (raro ya que siempre el que se acercaba era yo).
- ey, que pasa hoy que estas cortante conmigo?
- no, no pienses eso. Solo que, como te dije antes, tengo unos problemas en casa.
- ahhh bueno, pero si de eso no queres hablar entonces nose como ayudarte - me dice poniendo cara de compradora. - no te dejas ayudar.
- Es complicado Mariela, no es una situacion fácil , pero obviamente que agradezco que te preocupes- trato de quedar bien sin cortarla demasiado.
-¿siempre sos tan formal vos? - me disparó y sorprendió.
-ja ja , me haces reir, pero sincerament no soy tan serio como decis vos - a esta altura ya tenia ganas de encararla directamente y sin rodeos.
- me parece que si, nunca te vi de manera "informal".
A esta altura ya no me importaba nada mas que mirar como esa morocha enorme provocaba con cada palabra que me decía.
- pero hay lugares y lugares para ser formal e informal Mariela, ¿no te parece?.
- si, claro que sí. pero no siempre hay que ser tan estructurados...
Seguimos cada uno con nuestra tarea, yo quede todo el tiempo pensando en Mariela. Mis ganas de hablarle eran enormes pero sabia que ella tambien estaba caliente conmigo y por eso me estaba provocando de esa manera.
A la hora de la salida del trabajo (18hs) yo siempre me quedo un rato más hasta que controlo un poco todo el desorden que pueda quedar en mi escritorio y apago luces.
Mi amigo Agustín, el dueño, se va temprano los viernes (17hs) ya que juega al futbol con los amigos. Por lo tanto yo cierro todo los viernes.
Acomodo toda mi oficina y me voy al sector de los empleados a ver si habian apagado todas las luces y computadoras, cuando aparece Mariela:
- no sabia que te quedabas hasta tarde Mariela.
- es que hoy fue un dia muy muy atareado - tenía razón, habia sido un dia muy bravo.
- la verdad que si, estoy agotado - me hago el cansado.
- ¿y vos que haces a esta hora? ¿te toco cerrar a vos hoy?
- claro, todos los viernes cierro yo porque agus se va a jugar al futbol.
- ahhh mira vos, no sabia que el jefe era deportista.
- ja ja, trata de serlo.
- ¿y que vas a hacer ahora?.-me dice clavándome los ojos verdes directo en mis ojos, pareciendo que nada mas que nosotros dos existe.
-lo que mas quiero es cerrar e irme a dormir o despejarme un poco.
-si, yo tambien, esta semana no pude hacer nada practicamente.- junta sus cosas - si queres podemos hablar mas "informalmente" ya que nunca te conoci de esa manera
- nose que decirte, tengo que hacer un par de cosas en mi casa - mentira, nada podia importar mas que eso, solo que no me decidia sobre que hacer ante semejante hembra.
- que aburrido que sos, al final no queres hacer nada...- se da vuelta y muestra todo el orto bien marcado que relucian sus jeans ajustadísimos.
- no me digas eso, me haces quedar como un viejo aburrido - me acerco por atras de ella tratando de frenar que se vaya.
-entonces que...- se da vuelta y me mira - ¿tomamos algo?
-si, pero antes quiero decirte algo - la agarro del brazo, ya estoy jugado.- siempre sos asi con tus superiores nena?
- no -dice sorprendida por mi reaccion- solo con los hombres que me calientan.
-desde cuando
-desde siempre, siempre tu aspecto me parecio atractivo y mas aun al ver como me miras siempre con ganas de partirme al medio con la mirada.
- veni para aca - la llevo hacia un cuarto al lado de la gerencia donde se guardan archivos y maquinas dañadas- ahora vas a ver como te parto.
comenzamos a subir, le agarre con mis manos sus dos cachetes enormes y duros como una piedra, perfectamente amoldados a mis dedos. Ella mete la mano dentro de mi pantalon, yo ya estaba a mil hacía rato. Mientras subimos escaleras, le como la boca.
-como me calentas pendeja, siempre me encantaste.- entramos al cuarto y la tiro sobre el escritorio.
- veni y mostrame como sos informalmente, dale. - y se desprendió uno a uno los botones de la camisa ya toda arrugada por el franeleo.
me acerco y le empiezo a acariciar las tetas, tambien hermosas. Ella sigue con la mano en mi jean, ahora desabrocha el cinto y comienza a bajar el boxer, saca la verga y empieza a chupar. Yo estoy disfrutando y a la vez pensando en todas las vecdes que imaginé estar en esta situación con esta pendeja hermosa. Rápidamente comienza a pajearme y a chupar cada vez mas rapido, realmente es buena. A los 5 minutos ya siento que estoy por acabar pero ella se da cuenta y se para y me dice:
- ahora te toca a vos
me levanto y le saco el pantalon en un solo movimiento. Comienzo a acariciarla y siento que esta absolutamente mojada, me acerco a la zona prohibida y comienzo a meterle lengua y saliva, ella disfruta y gime como si nunca hubiera pasado esa situación. Le meto 1 dedo y la masturbo, despues cuando se afloja le meto 2, primero se queja pero despues gime con mas fuerza, esta por acabar, sigo hasta que siento que se acaba toda. La siento en un sillon-cama que hay en la sala. me pongo un forro y se la meto hasta el fondo, sintiendo una experiencia que hacia rato no sentia...
la cojo con fuerza, casi desesperado de tanto tiempo que no lo hacía. Ella grita cada vez mas fuerte, es insaciable. Se da vuelta y me pide ir arriba, se pone a cabalgar y yo le chupo todas las hermosas tetas que saltaban para todos lados, de pronto se acaba de nuevo. Apenas termina me dice - vení quiero que me acabes acá - se señala las tetas y se pone en 4. Salgo disparado del sillón y le doy bien duro hasta que me acabo una cantidad enorme de leche en las tetas, ella la desparrama con las manos y se limpia con unos papeles que habia arriba del escritorio.
En seguida siento ganas de seguir cogiendo asi que vuelvo a ponerme un forro mientras ella se limpia las tetas. Le doy en 4 hasta que se acaba por 3ra vez, se para y vamos contra la pared. Me acabo nuevamente, esta vez adentro de ella. Nos besamos, ya era demasiado tarde para un 3ro.
Salgo para mi casa, no sin antes pedirle sus datos y acordar un nuevo encuentro. Al llegar a casa Julieta no pregunta demasiado ya que todavía sigue enojada. Para mí mejor que no pregunte asi no tengo que mentirle.
Desde ese viernes , Mariela dejo de ser esa pendeja imposible para pasar a ser una pendeja con la cual experimento un sexo que hacia rato no sentia.
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