Yendo con los primos

Primos de leche

Siendo de una ciudad no tan grande ni tan independiente de las cosas del campo, pues es que vivimos cerca de varias poblaciones, de hecho donde vivo está rodeado de puros pueblos y sus respectivos sembradíos así como su “Naturaleza” (lo que no es ciudad y no es alterado para así producir). Es pues que se acercan las vacaciones de verano y resulta que a mi madre se le ocurre pasar este lapso con la familia del campo pues ella es de allá y quería salir un rato de la rutina de la ciudad.

En primera instancia a mi parece mientras haya que hacer para no estar en casa es bueno para mí, recuerdo que llegamos a con los primos una semana en la que ellos aún siguen en la escuela (no me pregunten por qué que ni yo entiendo…) y como los mayores son de mi edad pues solo unos ya terminaron mientras que los más burros siguen asistiendo para salvar el semestre. Es una de levantadas temprano y llegadas tarde-noche por proyectos y por ver a sus novias o tareas de la casa como arrear u ordeñar las vacas, cabras o burras.

En una de estas, a eso del jueves como ya había la mayoría de mis primos libres, llega la hora de juntarme más con ellos y ayudarles en sus tareas del rancho (antes no porque no soporto hacer esas tareas a compañía de mi padre y tíos que se sienten más “machos”), ya que con ellos se pasa rápido el rato por la “bebida” que nos refresca (cheves de a litro cada una).
Recuerdo que esa mañana me tocó despertar en el cuarto de los primos (hombres duermen separados de mujeres y de los padres, pero cada grupo todos en un solo cuarto) y levantarnos a todos para ir a laburar.

Lo que me gustó es que en mi estado actual, todos los primos duermen o solo con playera de tirantes o solo con calzoncillos puesto a ellos no les molestan los moyotes o mosquitos (que para mi son un martirio), y al levantarme veo eso sí un buffete para la vista, empezando desde los más chicos (14 años) tenemos a los niños que duermen en interiores, pero como es su época, casi todos amanecen con la pija dura, levantada y húmeda, quién sabe qué es lo que sueñan.

Pero se nota su vida en el campo, marcados, de pies a cabeza y por los cuellos, y las espaldas, lo más orgásmico hasta el momento es que duermen de dos en dos en cada campo de la litera por lo que tenés a estas parejas uno detrás de otro en puro interior y algunos abrazados, otros no, pero si listos para arremeter, cabe decir que como aún no tiene la malicia o crianza de la ciudad, es de lo más natural y normal para ellos, pero no para mí.

Luego tenemos a la mayoría que están en la prepa, los cuales duermen con playeras solamente, ellos duermen cada uno en camas separadas, he aquí que lo más notable es que sus pijamas están tiradas al suelo con las cobijas porque según cuentan al sentir el calor en la noche, se desatapan y solos en su lapsus mensus (dormidos ) se quitan la ropa, éstos no pude ver directamente los pectorales pero si las pijas y los traseros que créanme quisiera uno por uno levantarlos con una paja individual para que se levantaran placenteramente y con energía para trabajar, sus piernas con campeonas pues las tienen gruesas, duras, boludas y firmes (como sus pijas). Otra cosa que me gusta mucho es que amanecen en ocasiones abrazando las sábanas como si estuvieran listos para arremeter a un ser con esas pijas circuncidadas. Sus traseros no se quedan atrás, pues ellos se dedican a arrear el ganado y caminan y corren tras las piezas por toda la cordillera.

Algunos de éstos también tiene unos brazos de ancla, pues jalan una cabeza (también de ganado) rebelde que no hace caso como las de más.
Y por último están mis favoritos, mis primos de mi edad, ya van a la uni y de hecho solo diferenciamos con días nuestros cumpleaños, así que con ellos me la paso joya cuando nos juntamos.

Éstos por ser los mayores y como no hay espacio en cuarto totalmente, nos toca dormir en el porche fuera del cuarto de los hombres, en los sillones que hay afuera además de servir de vigías en caso que se necesite o exista la fecha de ataque de ladrones (no serviría de mucho….), serpientes, etc. En los corrales.

Estos tíos (los primos) son como dije mis favoritos, ya que tenemos por así decirlo un “pacto” mientras duermo con ropa o tapado de los moyotes o mosquitos, como a ellos no les importa, duermen totalmente desnudos, así es, duermen sin signo de ropa, a lo mucho una sábana toda la noche aunque como les cuento a ellos les da “calor” y se destapan apenas apagan luces en la casa.

Pues me levanto y despierto a la camada (no sin antes tomar las respectivas fotos….). Ya despiertos la mayoría cada quien “jala” para sus quehaceres después de almorzar. Pero como somos los mayores y “aguantamos más” primero tenemos que ordeñar las vacas, mientras los tíos (Tíos tíos y mi padre) se reparten las burras y las mujeres se encargan de darnos… almuerzo, limpiar la caza y animales más domésticos como aves y puercos.

He aquí que empieza lo divertido de esta vez que asistí con la familia, es entonces que nos dirigimos mis primos y yo con las vacas para iniciar y terminar rápido las tareas para salir de “finde” desde ese viernes. Mis primos y yo con los overoles cada uno se dispuso a ordeñar sus vacas, mientras puse mi música de rock (que a ellos también les gusta) la faena se hizo más liviana y rápida, uno de mis primos como ya había entrado en “calor” empezó a quitarse el overol, cual fue en este caso mi sorpresa que no tenía nada de ropa, solo la interior, le pregunté que donde estaba lo de más y nos contó que se la fue quitando conforme llegábamos al granero.
La pija se me puso en alerta cuando oí esta hazaña, siguiendo pues mi segundo primo dijo que era buena idea, el clima estaba excelente y que además no habría porque no traer ropa, solo estábamos nosotros y terminaríamos pronto así quizo quitarse la ropa de igual forma, solo quedaba yo así que no había opción ni objeción. Ya los tres con solo el overol y los boxers seguimos ordeñando las vacas. Media hora después, justo al momento terminamos de ordeñar las vacas y lavar el área de trabajo.

Uno de mis primos, se desabrochó el overol y lo dejó a la mitad dejando ver su hermoso y escultura cuerpo de niño de campo, su espalda como el triángulo invertido perfecto cada que se movía se veía su correspondiente músculo y los tres ya en más confianza nos quedamos pues así como quiso el primero. Ya las niñas llegaron por la leche de las vacas y nos llevaron almuerzo, cuando se fueron al cerrar la puerta de ese granero los dos se bajaron toda la ropa y se empezaron a jalar (lenguaje sucio->) la verga venosa que tenían cuando me voltee completamente ellos solo querían ordeñarse para dar más leche, pero lo curioso es que uno al otro se alentaban con:

Que rico se ve, no te imaginas las ganas que tenía de verte así…
Pero al verlos detenidamente se apenaron, solo me acerqué serio y de sorpresa ellos se pusieron rojos como tomates maduros (y bien maduros que estaban), se voltearon a ver mutuamente y con voz avergonzada me querían pedir que no dijera nada, pero en ese momento sin tal ni cual, le agarré la verga a uno (“saludando de mano”) y lo empecé a estrujar.

No pasó ni medio minuto cuando los pezones se le pararon y la piel se le enchinó, con lo cual el restante integrante reaccionó y se los empezó a mamar como niño con su madre. Como estaba alguien disponible, el primo que le jalaba la verga y le mamaban los pezones, decidió de igual manera jalarle la verga al primo que le mamaba los pezones.

Este chivo expiatorio no tardó mucho en venirse, pero acto previo me dijo que si le mamaba la verga, estaba tan caliente por ver su bronceado cuerpo bien firme y verga de igual manera que no dude y me hinqué para mamarlo; nunca lo había hecho (de hecho hasta antes de eso era totalmente hetero, las fotos las tomaba para vender en la ciudad…) y aunque se haya venido muy rápido a mi parecer, si me sorprendió la cantidad de leche que le mamé, me llenó la garganta en 2 segundos y el chico seguía y seguía. Para mi fábula le conté 21 disparos de esa leche que tenía tan caliente, jugosa pero a la vez espesa y blanca. Se me hacía un deleite que me tragué unas cuantas arremetidas pero me llené muy rápido y el resto se me desbordó por la boca, llenando todo mi pecho con esa leche.

Al pasar esto, mi primo mamador, se quedó como en un mundo aparte pero con esa cara y lujuria en la vista me empezó a lamer el torso por donde corría la leche de su hermano, y cuando estaba a la altura de los pezones, lo que hizo es que con su lengua los embarraba de este néctar y al estar listo seguía mamando ahora a mí, lo que me hizo gemir pero a la vez querer más; ésta vez fue más caliente porque no solo mamaba sino que en ocasiones mordía y succionaba el pezón hacia él como diciendo que me sacaría todo lo que le pudiera dar como si fuese una nodriza. Con el resto de lo que no tragué, como bajaba hasta mi verga, simplemente juntó su cuerpo también desnudo y nos enlechamos juntos.

Yo estaba terminando exhausto sin correrme todavía. Mi primo al que masturbaba y lo mamaban se tiró a la paja que había a un lado en el granero. Y ya descansado fue a con su hermano mamador y empezó a pasarle la verga por la espalda y el orto, solo se paseaba cual pintor secando la brocha o el pincel para no desperdiciar nada, temblando de ya acabar y quedarse sin reserva en la verga, me quitó a su hermano, lo recostó abierto de piernas y le empezó a mamar la verga, cosa que le agradó más pues de la leche de su hermano se llenó las manos y se tocaba todo el abdomen y pecho.

Los pezones eran algo de su fuerte pues los masajeaba con ese placer y lindura, para hacerlos que se pararan pero sin llegar a más, solo eso. Pues éstos hermanos continuaron con su amor mutuo y no perdía la oportunidad para tomar fotos en cada pose que me dejaran ver el mejor material del cuerpo, ambos igualados en forma, figura, potencia y bronceado (uno nace a las 11 y el otro a la 1) de gemelos que son (al parecer les gusta hacer las mismas cosas al mismo tiempo).

Ya terminando ambos, me agarraron tal cual ladrón, de forma salvaje, el más experto, me empezó a culear con su verga larga, bronceada y embarrada de lubricante natural de alguno de ellos, me arremetió como si fuese su puta personal, en cuanto me encontró el orto, empezó agarrarme más fuerte del dorso y él juntándose más a mí por detrás, no me dejaba escapar, empecé a sentir algo que jamás; yo solo quería ir para atrás y sentir hasta donde podría llegar tremendo pedazo, que por el calor de mi cuerpo empezó a creer más y endurecerse por el placer mutuo y la dificultad de moverse dentro.

Cuando mi macho chocó con pared, ya no le quedaba forma de hacerse para atrás, ahora en adelante tendría que avanzar hasta terminar lo que empezó. Nos quedamos quietos unos segundos, mientras veíamos que hacer, me tocaba los pezones y los mojaba son su saliva para dar una textura diferente, cosa que me encantaba porque me temblaba la verga cada más y para todos lados. Su hermano ya sin más que saborearse así mismo lo que tenía en el cuerpo, completó la tapadera del sándwich, se paró frente a mí, con su verga todavía dura (de muy alto rendimiento, pues del campo tendrían que ser), tomó mi mano izquierda y me la llevó a estrujar su verga, me dio la espalda y como a oscuras, quería que le diera una cochada, cosa que no me negué y ensamblé su cuerpo al nuestro, ya solo con la mano derecha lo untaba lo más que podía.

Para ser sinceros en cuanto le metí la verga temblé más, señal de que tendría que hacer algo rápido, pues sin pensar, lo jalé lo más que pude y en el trayecto lo fui barnizando con mi leche, solo le disparé diez veces mi propia reserva, pero eso no me impidió seguir metiendo y sacando la verga, ahora que estaba más resbaloso el asunto, no era tan difícil y cada que lo hacía, sentía un placer más grande con el masaje de los pezones, y una verga metida en el orto, los cuales nos desbordamos de la cantidad que nos metimos unos a los otros.

Aun y cuando ya no había para más de ninguna manera, nuestro vicio era tal, que seguíamos metiendo y sacando vergas, cuando nos aburrimos ya de eso, cada quien se resbaló del otro y juntos como un juramento nos despedimos de la escena en frente de los otros dos: con la mano izquierda estrujábamos la verga del otro y con la derecha acariciamos todo el cuerpo del otro.
Eso fue lo que sucedió al momento de ordeñar al ganado vacuno, pero había un problema, estábamos enlechados, sucios y apestosos, teníamos que remediar eso….

6 comentarios - Yendo con los primos

Tsukuru
muy bueno che!!!!
y gracias por la dedicación!
usuariohack_99 +1
@XxxBiChico No me pasó nada..... hago menos avance que un carcarol jalando a una ballena obesa por medio de un mar de arena usando botas de hierro.... es solo una de mis locas fantasías, si fuese como describo a mis personajes, no tendría que poner caricaturas como avatar.... son escenas que me gustaría vivir......o grabar en video y vender...... 😛 que bueno que les haya gustado
XxxBiChico
@usuariohack_99 ahh q bien no hay nadie q quiera cumplir esas fantasias espero q se hagan realidad 😉 si m encanto gracias ;*
elchangon
Me encantooooooo
usuariohack_99
Que bueno, eso me agrada y espero hacer una continuación que apenas empezaron las vacaciones....!
lalosexo
Wow!!!! Mouy bueno! Despues de leer esto necesito amigos para jugar un rato, jugamos?
jukno
😁 muy bueno