Perdiendo el control

Para los que me pedían relatos entre hermanos y hermanas, les traigo esta trilogía, donde una hermana va cayendo poco a poco ante la revelación de amor por parte de su hermano.



Me llamo Lesly, pero mi familia y amigos me dicen Les, tengo 22, mido 1.65 y según mis amigos y novios que he tenido tengo un cuerpo de infarto, modestia aparte pero definitivamente es así.

Mi hermano Pedro tiene 30 años, mide 1.80, es moreno y con unos ojos verdes hermosos y un cuerpo muy bien trabajado a base de puro ejercicio.

Nuestra historia comienza hace ya 2 años cuando yo tenía 20 y él 28, Pedro por ese entonces se encontraba fuera del país haciendo un posgrado y yo recién comenzado la universidad luego de tomarme un año sabático para decidir qué quería estudiar, finalmente me incline por teatro y después de prepararme arduamente quedé en una de las mejores universidades del país.

A fines de ese año mi hermano volvió a casa luego de terminar con éxito su posgrado y encontrar un trabajo en la ciudad en la que vivíamos. El día que llego hicieron una gran cena familiar para esperarlo ya que habían pasado 2 años desde que estaba fuera y sólo lo habíamos visto por skipe. Ese día me esmere por arreglarme y ayudar a mis padres a organizar la bienvenida después de todo yo y mi hermano siempre habíamos sido muy unidos a pesar de nuestra diferencia de edad, él siempre había sido muy protector conmigo y además siempre habíamos podido conversar de todo.

Siguiendo con lo de mi vestuario para esa ocasión tan especial me compré un vestido hermoso y que poco y nada dejaba a la imaginación, siempre he sido una chica que le gusta mostrar lo que tiene. Ese día me puse un vestido en color perla que me llegaba un poco más abajo del trasero y era ceñido al cuerpo y con un escote profundo que hacía que mis senos parecieran más grande de lo que en verdad eran, finalmente unos tacones altos que me estilizaban bastante. Cuando el reloj marcó las 20:00hrs todos estábamos abajo en el salón esperando que se abriera la puerta y apareciera mi hermano, en verdad no tuvimos que esperar mucho pues mi hermano llego justo a la hora que dijo que llegaría, al entrar todos dijimos al unisonó –Bienvenido- y corrimos a abrazarlo, mis padres fueron los primeros que con lagrimas en los ojos lo abrazaron y besaron, luego mis tías, mis primas y primos, unos amigos y finalmente cuando lo dejaron respirar yo me acerque tímidamente pues temía que él hubiese cambiado luego de tanto tiempo sin vernos. Me abrí paso entre tanto pariente y cuando llegue junto a él le dije –Hola hermanito- él voltio para mirarme y su mirada quedo posada en mis ojos y luego bajo para recorrer todo mi cuerpo y mi impresionante vestido, luego dijo – Les, ¡Oh Dios mío, estas hecha toda una mujer, hermanita estas guapísima!- luego me abrazo y alzo del suelo como si de una muñeca se tratara. – tú también estas guapísimo hemanito- le dije con una cara de asombro que me era imposible borrar.

-Bueno, bueno- dijo mamá- vamos a comer y nos ponemos al día con todo.

Pasamos a la mesa y quedamos sentados frente a frente, yo notaba que de tanto en tanto me miraba como si no me reconociera. La charla de la noche se hizo muy amena y todos conversábamos con todos, finalmente una prima propuso que todos los primos fuéramos a un pub o disco para seguir celebrando la llegada de mi hermano, todos aceptamos y salimos en patota de la casa, en tanto los más adultos quedaron entretenidos en una charla muy profunda sobre la economía y política del país.

Llegamos a la disco a eso de la 01:00 de la mañana y el ambiente estaba que ardía, fuimos al bar y yo de inmediato pedí un tequila para ir entrando en calor, mi hermano en tanto se mantenía cerca de mí y al verme pedir un tequila se acerco y me dijo- ¿No estás muy chica para tomar algo tan fuerte? Puede hacerte mal. Yo me largue a reír y le dije – hermanito, ya estoy grandecita para este tipo de cuidados, yo tomo lo que quiera, y además siempre salgo con mis amigas/os y mi novio y todos tomamos-. Él quedo sorprendido con mi respuesta y se alejo de mi sin decir nada, me sentí mal por cómo le había hablado y fui tras él, lo alcance cerca del vip – Pedro, Pedro (grite), él se dio vuelta- Disculpa le dije, no quería ser tan pesada, es que ya pasaron los tiempos en que me cuidabas y ahora ya perdí la costumbre, lo que menos quiero es pelearme contigo en el primer día que estas en casa.

– No te preocupes Les, no pasa nada, tú tienes razón, no debo meterme en tus asuntos, ya eres grande. – Bueno, para pasar este himpas ¿quieres bailar?

-Ok- dije- y nos dirigimos a la pista de baile. Comenzamos a bailar alocadamente mientras nos reíamos y comenzaba a sentir los primeros efectos del trago, de pronto la música cambió y comenzó un tema un poco más lento, yo instintivamente pegue mi cuerpo hacia el de mi hermano y comencé a moverme lentamente dándole la espalda, mientras él respiraba de manera dificultosa y agitada en mi nuca, sus manos sujetaban mi cintura y me abrazo acercándome aun más a él, luego me dijo al oído- Basta Les, ya no sigas moviéndote así, recuerda que soy tu hermano y además no soy de fierro- cuando dijo eso pude sentir su erecta verga en mi trasero. Me aparte de él bruscamente y me fui hacia la barra de la disco, en verdad estaba loca, cómo pude provocar de esa manera a mi hermano, qué era lo que me pasaba, me quise ir de allí y llame a mi novio para que fuera por mí, en cuanto llego le dije -sácame de aquí por favor-.

- como quieras princesa- respondió él.

Cuando Sergio agarro mi mano alguien me tomo del hombro por detrás- ¿dónde crees que vas Les? Tú llegaste con nosotros y te vas con nosotros.

- Y este, ¿quién es? Me pregunto Sergio con cara de quererle romper la cara.

- Eeehhhmmmm, Sergio él es Pedro... mi hermano, Pedro él es Sergio mi novio, pues resulta que me voy con él porque ya me quiero ir y Sergio me va a llevar a casa, tú puedes seguir divirtiéndote.

- Pero Les si querías irte porque no me lo dijiste…

- No quería molestarte y además hoy no había visto a Sergio y ya lo extrañaba, así es que ideal que me lleve él para así pasar un ratito de tiempo juntos.

- Si hermano, le dijo Sergio- yo la llevo a casa sana y salva y junto con sus palabras me abrazo y me dio un piquito.

- Ok- dijo Pedro- nos vemos en casa entonces…

- Nos vemos…

- Chau hermano- dijo Sergio- un gustazo, no te preocupes yo la cuido (y le guiño un ojo con picardía).

- Más te vale que si- dijo Pedro-.

Fuimos a casa y a medio camino le pedí a mi novio que detuviera el coche y le hice una mamada de aquellas profesionales que a él le volvían loco, luego nos la montamos a media carretera y a pelos. Mi novio es un tío muy guapo y que coge muy bien.

Llegamos a mi casa y lo despedí en la puerta con un tremendo beso, luego subí lo más despacio que pude a mi pieza, eran las 5 de la madrugada, me puse el pijama y me quede dormida casi de inmediato. No sentí llegar a mi hermano, ni menos entrar a mi pieza y acostarse a mi lado. Desperté a las 14:00 hrs y para mi sorpresa no estaba sola mi hermano estaba abrazado a mí y casi respirábamos el mismo aire.

- Pedro, Pedro- le susurre para que despierte.

- ¿Qué pasa? Pregunto abriendo sus hermosos ojos.

- ¿Qué pasa? Replique yo- es lo mismo que te pregunto- ¿Qué haces aquí?

- Mmmmm… oh, disculpa Les, me quede dormido aquí, es que anoche cuando llegue vine directo a tu habitación a ver si ya habías llegado y entonces me senté a tu lado a verte dormir mientras recordaba que cuando eras pequeña te ibas a mi cama cuando tenías miedo…

- Sonreí y le dije- que tierno, lo recuerdo también, tenía en ese entonces como 10 años…jajajaja….

- Si, eras una bebé hermosa, pero mira en lo que te has convertido ahora…

- ¿A qué te refieres? Dije con el seño fruncido.

- Jajajaja…bueno, ya sabes –dijo él- eres toda una mujer, ayer cuando te vi en mi recepción casi me quedo sin respirar, estabas hermosa, te has convertido en una joven estupenda… si hasta novio tienes… ¿dónde le conociste?

- Gracias por tanto piropo, pero tú también estas muy guapo, muy trabajado…jajajaja… se nota que tu estadía en el extranjero te hizo muy bien….eeehhhmmm…bueno, a Sergio lo conocí en la Facultad, estudia teatro y ya está en el penúltimo año. Es un chico muy bueno…

- Aaaahhhhh, me alegra que seas feliz… (lo dijo en un tono muy poco convincente)- bueno, será mejor que me vaya a mi cuarto a seguir durmiendo…

Antes que yo pudiese decir algo se puso de pie y se fue…Yo me quede pensando en todo lo que había pasado en las últimas horas.

Me levante, me metí al baño y me duche, luego fui a mi habitación y me vestí, baje a la cocina y mis papás no estaban, habían ido a almorzar fuera y no habían querido despertarnos. En realidad no tenía hambre así es que volví a subir a mi pieza y viendo que hacía bastante calor me puse uno de mis biquinis y baje a la piscina. Luego de bañarme me tumbe a tomar el sol, me puse de guata y desate mis tirantes del sostén para que no quedaran marcadas. Habían pasado varios minutos cuando de pronto sentí que alguien masajeaba mi espalda, levante la cabeza y volteé, era mi hermano.

- Disculpa, no quería despertarte, es que te estabas quemando y quise echarte más bloqueador…

- Gracias- dije- es que me quede dormida.

- Debo decir que te veías muy hermosa durmiendo, estuve un rato observándote… además ese biquini te queda muy bien…

- Yo lo mire sorprendida y le dije- creo que debes dejar de piropearme tanto, no estoy acostumbrada a tanto alago… pero bueno, cambiemos de tema, aprovechando que estamos solos porque no me conversas de tu vida en Barcelona…

- Ok- dijo Pedro sentándose a mi lado. Esa tarde conversamos por más de tres horas seguidas, luego comimos y seguimos charlando, mi hermano tenía mucho para contar y yo estaba muy interesada en escucharle, hablamos de sus estudios, de cómo era el país, de cuántos amigos nuevos había hecho, de las dos novias que tuvo en estos dos años, etc, etc…

De pronto mire el reloj y eran las 9 de la noche, así es que le dije a mi hermano que me tenía que ir a bañar porque tenía que salir con mi novio, él no puso muy buena cara pero no dijo nada así es que me retire para ir a arreglarme. Demore más o menos una hora en estar lista y cuando baje mi hermano estaba en el living viendo televisión, al verme sus ojos se abrieron enormes no pudiendo disimular su asombro… Yo había elegido un vestido negro que me llegaba bajo el trasero y con un cuello alto, sin escote, me había alisado el cabello y lo llevaba suelto y me calcé unos tacones altos, completaba mi atuendo una chaquetita corta pero que en esos momentos no llevaba puesta.

Mi hermano al verme me dijo: - Guau, ¿y tú siempre te vistes así para salir?...

-No- dije yo. Es que esta es una ocasión especial, parece que Sergio tiene algo importante que decirme y me pidió que me vistiera más bonita de lo normal…

- A bueno- dijo mi hermano- parece que lo de este chico va enserio, espero que realmente sea un buen tipo para ti… no quiero verte sufrir…

- Lo es, no debes preocuparte, bueno ya voy saliendo... Sergio está afuera esperándome, nos vemos…

-Bueno, cuídate, que te vaya bien (seguido de esas palabras se levanto del sillón, camino hacia mí y me dio un fuerte beso en la mejilla).

Mi novio me llevo a un buen restaurante, comimos muy rico charlando de múltiples cosas, luego cuando llegamos al postre Sergio saco del bolsillo de su chaqueta una cajita y me tomo de la mano:

- Yo hace días que vengo pensando en esto, y quería decírtelo en un lugar especial… y no sabía cómo…pero… ahora ya estoy aquí y quiero que sepas que estoy enamorado de ti, que quiero estar contigo siempre, que te necesito, que eres todo lo que quiero y por eso quiero pedirte que seas mi mujer… o sea, quiero que seas mi esposa… Les, ¿quieres casarte conmigo?...

- Yo no sabía qué hacer, ni que decir, jamás pensé que la cena era para pedirme matrimonio, o sea, estaba fuera de lugar para mí, no sabía que responder, yo no amaba a Sergio, él era un tipo increíble, follábamos rico y besaba muy bien… pero de ahí a casarnos… además ninguno había terminado todavía la carrera…

- ¿Me estás hablando enserio?

- Por supuesto que sí, ya te lo dije… yo te amo…

- Pues… yo no sé que responderte ahora, no puedo decirte nada en estos momentos, me tomas de sorpresa… te pido un tiempo… (me puse de pie y me fui bloqueada por mis pensamientos y sentimientos, mi novio no me dijo nada ni tampoco me siguió)

Llegue a mi casa y al llegar cerré la puerta y me senté en el piso, tome mi cabeza entre mis manos y recordé todo lo que había vivido esa noche, estaba confundida, me sentía rara, no podía descifrar mis sentimientos, no podía explicar, mi cabeza y mi corazón eran un mar de confusión. De pronto, alguien encendió la luz del comedor y yo pegue un pequeño brinco de susto, era mi hermano…

- ¿Qué te pasa? ¿Por qué estas así? ¿Te ha hecho algo ese desgraciado?... háblame por favor, me estas preocupando…

- No me pasa nada-, no me pasa nada- titubee levantándome mientras me sujetaba de la pared, mi hermano se acerco y me sujeto por la cintura ayudándome a incorporarme…

- Por favor Les, estas pálida, no me mientas (Tomó mi rostro entre sus manos y me obligo a mirarlo a los ojos)- no me mientas nena, yo sé que algo te ha ocurrido y no te voy a dejar tranquila hasta que me lo digas…

- Me pidió matrimonio- susurre-

- ¿QUÉ?- Dijo mi hermano en tono descolocado- ¿Y qué le has dicho?...dime…

- No he podido responderle le dije, me he ido de ahí y le he dejado sentado con el anillo en la mano… no lo sé, no he podido responderle…

- Mi hermano me abrazo y su tono de voz cambio- Debes pensarlo chiquita- me dijo con dulzura- no debes precipitarte, o a lo mejor todavía no es momento de dar un paso tan importante… y menos si no estás segura… ¿lo amas? –pregunto en tono expectante-

- ¿Por qué me haces esa pregunta?- replique- no lo sé, estoy confundida- lo mire a los ojos y sin basilar le dije- me gusta otro chico, pero no sé si yo a él también le gusto…

-Mi hermano no se esperaba esa respuesta y en tono aún más expectante pregunto… ¿y se puede saber quién es ese chico?

- Yo me di la vuelta para avanzar hacia la escalera y mientras caminaba hacia mi habitación le dije: ¿enserio no te imaginas quién puede ser?...

- Supongo que él se quedo allí parado con la respuesta resonando en su cabeza, mientras en mi crecía un deseo que sabía explotaría en algún momento… esa noche me dormí sobre mi cama completamente desnuda…

A la mañana siguiente me desperté bastante tarde, o más bien me despertaron, cuando me di vuelta hacia el lado de la puerta para seguir durmiendo abrí levemente los ojos y allí estaba Pedro de pie en la entrada de mi pieza mirándome con ojos de deseo, o más bien me comía con la mirada y tenía una evidente erección, de pronto me acorde que me había acostado desnuda y me senté rápidamente tapándome con las sabanas…

-¿Qué haces aquí, por qué no tocas antes de entrar, estás hace mucho rato ahí parado?, mi tono era de enojo y además me di cuenta que tenía un dolor de cabeza impresionante…

- Disculpa –dijo mi hermano despertando de su letardo- no quería despertarte pero mis papás quieren que bajes a almorzar…

-Está bien-dije- ya voy... iré a la ducha primero...

Pedro sin responder salió de mi cuarto, yo me levante y me dirigí al baño, luego volví a mi habitación a vestirme. Elegí un conjunto un poco más deportivo porque luego de almorzar pensaba ir a trotar para despejarme, tenía bastante en que pensar y no quería hacerlo en casa.

El almuerzo fue normal... o más bien relativamente normal ya que mi hermano no me quitaba la vista de encima, yo comí rápido y luego me disculpe para retirarme e irme a caminar. Ya llevaba un buen trecho caminando y sumida en mis pensamientos cuando de pronto sonó mi celular y al contestar la llamada pude identificar la voz de mi novio...

- ¿Cómo estás?-preguntó-.

-Bien- dije- con algo de dudas.

- Ok, no sé qué decir respecto a lo de anoche...

- Por favor...no digas nada... ya pasó...y anoche te dije...yo debo pensarlo... no sé tal vez debas darme un par de días... lo que me propones es un paso demasiado importante y yo... no me lo esperaba en lo más mínimo... así que por favor dame el tiempo que te pido...

- Les... no te preocupes- dijo él- yo entiendo... te dejaré pensarlo un par de días...un beso gigante... no olvides que te amo...-y colgó-.

- Un beso-dije y colgué-.

Seguí caminando por el parque y luego volví a casa, la verdad es que la caminata me había asentado bien, volví un poco más animada. Al llegar subí en silencio a mi pieza y me tire encima de mi cama allí me quede dormida.

Cuando desperté ya era de noche, baje a comer con mis padres y mi hermano, luego nos sentamos a ver una película.

- ¿Te sientes mejor? - me pregunto mi hermano en voz baja-

- Si... - conteste sin nada más que decir.

En realidad mi mente no estaba puesta en la trama de la película que veíamos, sino en mi situación sentimental; muy dentro de mi sabía que los sentimientos que tenía por mi hermano me llevarían a un camino sin retorno y que terminaría dañada, sin embargo, no podía hacer nada por evitar mis sentimientos hacia él. Cuando termino la película subí a mi habitación a estudiar, pero no podía concentrarme, finalmente decidí dormirme para ya no tener que pensar en nada. Fui a bañarme y de regreso a mi pieza me puse un piyama muy corto que ya hace tiempo no me colocaba y me senté a leer sobre mi cama pues hacía calor para acostarme... De pronto tuve la sensación de que alguien me miraba muy de cerca y me di la vuelta para ver de quién se trataba, era Pedro que nuevamente había entrado sin tocar a mi habitación.

- Pedro, qué fue lo que te dije hoy... que por favor tocaras antes de entrar... podría haber estado desnuda o algo parecido... -dije-

- Eso hubiese sido un sueño hecho realidad... -susurro-.

- ¿Qué?- dije-

- No... nada, disculpa, es que necesito hablar contigo- dijo algo tímido y sin dejar de mirarme el trasero.-

- Pedrooooo- grite- puedes dejar de mirarme el trasero de manera tan descarada, por favor le dije, ten algo de cordura... mejor me pondré una bata.

- Noooo, no Les, por favor -dijo- quédate así, disculpa, es que no puedo evitarlo, estas muy hermosa... eeehhhmmm... yo... quería hablar contigo respecto a lo que me dijiste... es que yo creo que tú no debes casarte con Sergio...

- Por favor- dije- creo que ese es un tema mío... y no creo que se buena idea que te involucres...

- Es que me vas a disculpar de nuevo... pero siento que es mi deber de hermano mayor darte este consejo y...

- "tú deber de hermano mayor"- dije- o sea, que es solo por eso... ¿seguro? - me puse de pie dándole la espalda-.

- Él se quedo sentado en la cama y dijo: Bueno Les, siento que es lo correcto de hacer, además... bueno... yo...

- ¿Yo qué? - dije- por favor Pedro, dime la verdad, ¿por qué estas diciéndome esto?

- Pedro se puso de pie tras de mí, me abrazo, me beso el cuello y dijo: -Bueno Les, yo a ti no te puedo engañar, pese a todo el tiempo que hemos estado separados me conoces muy bien... -movió sus manos lentamente por mi cintura y me giro hacia él... quedamos frente a frente y él nuevamente volvió a hablar- yo... no puedo evitar hacer esto... -y con un movimiento rápido acerco su rostro al mío y me besó. Fue un beso lento, suave y profundo; nunca nadie me había besado así, me sentía en el cielo, sentía que el mundo ya no existía y que solo éramos Pedro y yo.

De pronto mi maravilloso sueño se convirtió en pesadilla al volver a la realidad y darme cuenta que estaba besando a mi hermano... me separé de él empujándolo y él me miro como si no me conociera...

-¿Qué pasa? -preguntó-.

-¿Cómo me preguntas eso, es obvio, no crees?... eres mi hermano mayor, no podemos estar haciendo esto... no corresponde, está fuera de toda lógica...

-Les, sé muy bien que todo esto está fuera de toda lógica, no tienes ni que decírmelo... pero es que lo que siento por ti va más allá de cualquier raciocinio, desde que volví a casa y te vi supe que ya no te veía como mi "hermanita", sino como una mujer... y fue de esa mujer de la cual me fui enamorando durante estos días... Les... no puedo soportar la idea de perderte... desde el momento que supe que tenías novio mis celos han ido creciendo... yo...yo... estoy perdiendo la cabeza por ti...

-Yo estaba en estado de shock, no podía creer lo que escuchaba, mi cabeza daba mil vueltas y mi corazón parecía que iba a estallar...estaba demasiado consternada para responder, simplemente salí de la habitación y baje las escaleras camino a la calle, no podía quedarme allí... tenía que procesar la información. Mi hermano no me siguió y en las siguientes horas me fui a la casa de una compañera con la excusa de estudiar para que mis papás no me molestaran.

Cuando volví a casa cerca de las 20.00hrs. no había nadie, todos habían salido y aproveche de darme una ducha y comer algo, luego simplemente me fui a mi habitación a dormir. Desperté a eso de las dos de la madrugada para darme cuenta que mi hermano estaba sentado en mi escritorio viéndome dormir, pegue un brinco de la impresión y solté un grito que ahogue con mi mano.

-¿Qué haces aquí? ¿estás loco?...

-Si -dijo- estoy loco por ti... y no me voy a mover de esta habitación hasta que no respondas qué es lo que tú sientes por mi... yo necesito saber tus sentimientos hacia mi... ¿de veras me ves solo como tu hermano mayor? ¿o sientes lo mismo que yo?

Mi respuesta la sabrás en la segunda parte de esta historia...

...Continuara...

1 comentario - Perdiendo el control