Esa noche iba a ser la despedida, durante los días anteriores habíamos logrado combinar tiempos, espacios y compromisos de forma tal que finalmente concretamos un encuentro, el primero, en parte dedicado a conocernos, en parte a descubrirnos, a medir ritmos, sensaciones, cadencias.
Ese día supimos que nunca nos alcanzaría la vida, que nuestros mundos, nuestras vidas, tan diferentes y lejanos, se habían encontrado por designio del destino, que ese mismo destino nos trampeaba, se reía de nosotros, pobres ingenuos, que no podíamos ver más allá de nuestra piel al estar juntos... que engañábamos a nuestras mentes para concretar las ansias que tantas veces escondimos en letras.
De todas maneras, conscientes de eso, pactamos un segundo encuentro, una despedida, la que no bautizamos así, con ese nombre tan definitivo, como si fuera algo que pudiéramos manejar, como si no supiéramos que ya todo estaba escrito.
Tratando de ignorar eso, quise brindarte, brindarnos, un hermoso recuerdo.
Reservé una suite en un lindo hotel donde pasé la tarde relajándome y concentrándome sólo en esperarte.
Cerca de la hora pautada escuché tu llamado a la puerta, te abrí tan sólo vestida con una sonrisa y unos estiletos, tu mirada denotó sorpresa y satisfacción, tus brazos me rodearon en un lugar sólo nuestro.
Intentaste seguir besándome, te interrumpí susurrando...no hagas nada...dejate llevar...
Comencé por acariciar tus brazos, ahora más venosos que nunca, acaricié tu cuello pidéndote que no te movieras por unos minutos y cerraras tus ojos.
Desabroché tu camisa y recorrí con mis labios tu pecho, tu boca, casi sin tocarte. Podía oír los latidos de tu corazón que batía, podía oír la sangre correr por tus venas.
Me aparté y te pedí que sirvieras el champagne, desapareciendo tras la puerta del baño. Pasaron unos minutos en los que imagino te habrás sorprendido de mi demora, me preguntaste si estaba bien, si claro... si aquí te estoy esperando.
Entraste con las copas en la mano y abriste la puerta del baño con cara de perplejidad que cambió por sonrisa maliciosa al encontrarme dentro de la bañera, tapada de espuma hasta el cuello, el cabello atado con un lazo rojo e invitándote a hacerme compañía.
Te miré con lujuria mientras te desvestías, recorriendo tu cuerpo, preludiando los placeres que sabía podía darme, deteniéndome en tus ojos, y claro, encontrando la conexión esperada.
Encogí mis piernas para dejarte lugar tras de mi y te ubicaste a mi espalda abrazándome con tus piernas, con el lazo vendé mis ojos y apoyé los codos en los bordes de la bañera, entregándome de esta forma a que hicieras conmigo lo que quisieras.
Masajeaste mi espalda, mi cuello, con la suave espuma que nos cubría hasta que pasaste tus manos hacia delante y tomaste mis pechos, no pude contenerme y llevé mis manos hacia atrás para tomar tu sexo duro, erecto, que sabía delicioso.
Tus manos, las mías, la piel, la espuma, el calor... alargamos las caricias, me senté frente a vos para besarte y besarte...
Cuando nuestra piel comenzaba a arrugarse nos pusimos de pie y nos reímos al vernos cubiertos de espuma, fuimos hacia la cama y mientras intentaba secarte con una parte de la sábana caímos enredados entre susurros y gemidos, sin culpas, sin tiempo.
Todo lo demás, pueden imaginarlo, nosotros siempre lo recordaremos, transcurrió entre placer, delirio y el triste sabor de la despedida...
31 comentarios - Despedida
Delicioso relato Lady, me encantó !!!!
Gracias por compartir.
Angie te deja Besos y Lamiditas !!!
La mejor forma de agradecer la buena onda que se recibe es comentando, al menos al que te comenta. Yo comenté tu post, vos comentaste el mío?
Compartamos, comentemos, apoyemos, hagamos cada vez mejor esta maravillosa Comunidad !!!
...pero juntos al fin milady, para cerrar el pacto, para regodearse infinitas veces en el recuerdo... no es cierto acaso?
glamour, glamour eterno en vos y en tus letras
Gracias, bellas letras.
Me hago seguidor y te felicito!
Hermoso Lady, me encantó!!!
Me transporta hasta ese lugar, un placer leerla!!!
"Desabroché tu camisa y recorrí con mis labios tu pecho, tu boca, casi sin tocarte. Podía oír los latidos de tu corazón que batía, podía oír la sangre correr por tus venas."
Excelente amiga!
Volveré!
Besos
Mimilau 💕
LA VERDAD HE LEÍDO POCOS RELATOS PERO ESTE ME ATRAPO
EXCELENTE POST, GRACIAS POR COMPARTIR
Aunque história vivida desde el corazón nunca desvanece.
La mente se endurece y el corazón termina deshilachado, pero es así, una elección propia de la cuál no debemos arrepentirno.
En definitiva unos pelotudos románticos sin saber donde ni porque dejar nuestras caricias (ya ni hablo de amor...).
Gracias por compartirlos 🙂
Esos amores con caducidad anticipada... Intensos, arrasadores... Y que siempre dejan en el alma su marca indeleble... Roja!!! 😘
Que lindo lo que escribis!
Gracias por comparitir
Me encantó...