Memorias de un joven indecente: Alterna mentirosa

Ella era lo que se dice una chica moderna. Pelo corto, un pañuelo de bincha, un mechon teñido de algún color exótico que variaba con los meses (verde, azul, violeta, etc.) Le gustaban -por supuesto- las cosas de chicos como a toda chica "moderna". Y como toda chica moderna vociferaba su sexualidad en publico.

En facebook había una carpeta repleta de fotos de ella tranzando con diferentes flacos en sus repetidas salidas a boliches. Su foto de portada era ella tomando tequila de lo que se denomina "cascada" (alguien te tira tequila de arriba y vos tragas).

Como ya lo dije ella vociferaba su sexualidad en publico. Que lesbiana, que hetero... al final se decidió por ser bisexual.

Esa pseudo moda me tenía las pelotas como dos sandías. Me había aburrido de encontrar gente de esta por la vida. TODAS eran lesbianas o bisexuales. Aunque claro está las lesbianas siempre hacían excepciones con algún que otro hombre.

Ella de diesiseis casi diesisiete yo con mis veinte que parecen treinta. Rubiecita, petisona, media petacona. Tetas gigantes, culo pasable. Boca de aspiradora, deliñador excesivo, calzas chillonas abajo de una vermuda de jean y una campera de cuero corta con una remera de los sex pistols. Como no. Toda una señorita moderna.

Gustaba del anime y del punk. Aunque se hubiera visto 3 o 4 animes en toda su jodida vida era fanatica del anime. Y aunque escuchara un tema de los pistols, otro de los ramones y algunos de flema, era "fanatica" del punk.

Por cuestiones de la vida hablabamos a menudo de temas absurdos y estúpidos. Le heché los galgos fiel a mi estilo con esta clase de minas. "Querés ir mañana a Lanús?" "Dale..." "Tengo que comprar cosas para la facultad" le mandé. Claro... Era mi más famosa estrategia.

Despuès de encontrarnos siguió "eh... me olvidé la billetera.." Y etc... Termine por decirle que vayamos a mi casa a buscarla porque necesitaba el morral. Subió al colectivo bajo mis ordenes, viajamos medios abrazados hasta casa. Entramos y le comí la geta.

La boca de ella besaba raro: Abría la boca y la introducía dentro de mi boca para succionar mi lengua. Después abría su boca y no se como me obligaba a hacer lo mismo. Me calenté bastante hasta empalmarme.

La empujé a la cama y por primera vez una mina es razonable. Se sacó la ropa ella sola sin hacerme frotarme por ella e ir sacandosela poco a poco; la inevitable rutina al garchar con quien sea.

Le comí el cuello. Le amasé las tetas - más grandes de lo que parecían a imple vista- Pasé mi lengua sobre sus "patys" porque eso parecían sus pezones. Dos enormes patys. Le amasaba las tetas y le mordía el cuello. Le metía la mano entre las piernas y acariciaba por fuera esa concha blandita, estirada y bien depilada que tenía. - La verdad que las prefiero al natural-

Así que le estaba mandando dedo pasandole repulsivamente la lengua por el cuello mientras escuchaba su respiración agitada y sentía su mano incandome sus largas uñas la cabeza, restregandome el pelo.

Mas fuerte le socababa la concha que palpitaba y chorreaba entre mis dedos mas se agitaba su respiración y con más fuerza me agarraba la cara con sus manos. Me despeinaba, me restregaba los pelos, me incaba las uñas en el cuero cabelludo y la espalda; desesperada.

Yo gracias a ese hermoso gesto de ponerse en bolas sola no necesité mucho mas estimulo que resfregar la verga contra la entrada de su concha para exitarme ese poquito más que me faltaba para penetrarla hasta el fondo. Entro deslizandose perfectamente entre sus piernas hasta que mi cuerpo quedó totalmente incrustado en el suyo, anclado.

La cojí rapidisimo. Le mordía el cuello, le metía la lengua en la boca, en el oido, se la pasaba por la cara; ella me metía la lengua en la boca entre gemidos y paraba unos segundos a agarrarme la cara con fuerza con sus manos y apoyar su frente en mi frente y gritar levemente.

Acabé al cabo de media hora - inusual en mí tardar tan poco.- Me desvanecí sobre ella y seguí moviendo la cadera mientras sentía como salía ese liquido y quedaba priosionero de la profilaxis.

Por inercia seguí moviendome al mismo ritmo poco tiempo después de haberme derramado dentro y ella me incaba las uñas cada vez con más fuerza. "Ay mi amor" llegó a decir. La sentí estremecerse. Sentí como su concha se dilató y apretó mi miembro, sentí como le temblaban sus piernas abrazadas a mi cadera y como dejaba caer su cabeza hundiendola con fuerza en la almohada.

Fiel a mi estilo sucio tiré el forro a un costado de la cama y prendí un cigarrillo un tanto indiferente. Quedamos abrazados un tiempo y volvimos a los besos.

- Quiero que me la beses. Le dije.- ¿Te animas nenita? Desafié
- Preguntamelo de nuevo.
- ¿Me la chupas?
- Si....

Y metió esa boca de aspiradora entre mis piernas. Se la tragó hasta el fondo y la mamó decentemente. Aunque no lo hacía del todo mal tampoco lo hacía muy bien. Algo no hacía. ¡No le pasaba la lengua! Estas minas nunca dan buenos polvos meditaba yo.

Después de que sus chupadas me sirvieron para apenas empalmarme un poco la agarré de los tobillos y la di vuelta. Le comí la concha a lamidas mientras ella gritaba sin parar. Sentía como se movía su clitoris, como su uretra ante mis lenguetazos, sensible, le transmitia más desesperación. Una vez que estuvo desesperada por que la volviera a penetrar me masturbé un poco arrodillado adelante de su concha y una vez que la tuve bien dura escupí mi verga, escupí su concha y se la clavé hasta el fondo.

GRITABA. Me restregaba los pelos, gritaba más. Me incaba las uñas en la espalda, pasó a incarmelas en el culo empujandome con sus manos para indicarme el ritmo que le gustaba. Cuando estuvo a punto de acabarse otra vez, lo cual advertí por la manera en que se hundía otra vez en la cama empujando los brazos sobre mis hombros como intentando sostenerse de algo para alivianar ese vertigo se la saqué abruptamente y bajé a su concha. Le lamí la concha con furia, le metí la lengua dentro, le masajee el clitoris, le masaje la uretra con las manos al mismo tiempo, le metí los dedos mientras la lengua masajeaba la uretra, le llegué a meter la lengua en el orto. Quería que se sintiera la mas afortunada de las putas de culo frío que pasó por mi cama. Era una mision personal.

Lo logré. Quedó como desfallecida algunos minutos toda agitada y sin saber muy bien que le sucedía mientras expulsaba flujo y un liquido que parecía meo - como todas al tener un buen orgasmo-

Cuando estuvo rendida me acerqué por el costado de la cama y le pasé lapija por la boca. Abrió los ojos se sentó me dio un beso muy apasionado y se volvió a acostar para mamarmela decentemente otra vez. Me cansé de estar de pie junto a la cama y me senté. Le puse la mano en mi pija y metí mi mano en su concha. Le sarandeaba esa nuezita que tienen dentro de la uretra de un lado al otro con el dedo del medio mientras ella me masturbaba con mi pene apuntandole a esas tetas gordas y gigantescas.

Cuando estuve por acabar le grité "ay que rica nena, si mi amor" y ella con mucha fuerza me masturbó hasta que me derramé sobre sus tetas al tiempo que nos comiamos la boca.

Cuando terminamos dormimos después de que yo fumara unos cuantos cigarrillos. Después de despertar cojimos de nuevo de manera similar, esta vez me masturbé yo y se lo tiré en la boca para despuès hundir mi verga hasta su garganta. Combulcioné bastante cuando frotó su lengua larga sobre mi glande.

Después de fiaquear un rato le llevé del desayuno y fuimos hasta la parada del colectivo...

Que bisexual, que hetero que bisexual, que lesbiana, etc... y al final me comentó que jamas había tocado una mina, solo se había besado algunas en una disco... SICK CLUB para los entendidos en tanto a "alternas" y después reconoció que era hetero... y más allá de eso que estaba enamorada de mi.

Al poco tiempo dejé de hablarle, me aburrió su pose. Y poco después buscando mi reacción me dijo que me había "cagado"... lo cual me importó muy poco porque lo único que yo quería es estar encerrado aquí hacendo mis cosas y pegar un polvo de vez en cuando aunque sea meido malo como el suyo. Después agregó que tenía sentimientos por su ex a lo que yo le respondí "anda a joderlo a el, a mi dejame en paz" Y todo así hasta que además canceló su cita conmigo hoy. Eso fue lo unico que me irritó levemente.

1 comentario - Memorias de un joven indecente: Alterna mentirosa

el_sustituto +1
Muy buen relato che! minas que se creen pulenta porque comentan que se garchan a cualquiera y escuchan ramones... son de terror, tenes toda la razon viejo
El_mariachi_
Así es che, gracias por leer y abrazos nomas. 😃