Navidad 24/25: Año nuevo con mi cuñada y mas amigas morbosas

Una nueva nochevieja mis suegros y mi cuñada cenaban en mi casa. Mi cuñado volvía a cenar con su familia, por lo que Alba estaba feliz al saber que iba a tener buena fiesta con nosotros tras la cena. Alba venia deliciosa como ella bien sabe que me gusta a mi verla. Traía una camiseta blanca, sin mangas, con un lazo en un hombro, ajustada, marcando sus tetazas operadas y los pezones duros, dejando entrever que no llevaba sujetador y un vaquero oscuro. Mi novia, Rakety, llevaba una camiseta negra ajustada, marcando las tetazas, una falda vaquera larga, con una larga raja en el medio, mostrando que llevaba unas medias negras con lunares más oscuros.
Cuando tomamos las uvas y brindamos por el nuevo año, mi mano libre acaricio disimuladamente el culo de Alba, aprovechando la situación. Poco después de las campanadas, mi novia se fue a llevar a sus padres a su casa. Alba y yo nos despedimos de ellos en la puerta de la casa y, según la cerramos, apoye a Alba contra ella, nos empezamos a besar y acaricie sus tetazas. Mis pulgares pasaban por sus marcados y duros pezones, mientras le decía que llevaba toda la noche deseando probarla. Fui bajando, besando su cuello, hasta llegar a sus tetazas y mordérselas por encima de la camiseta, mientras seguía acariciándolas.
La cogí de la mano y volvimos al salón. Me senté en el sofá y Alba lo hizo de rodillas sobre mí. Volvimos a besarnos, apasionadamente, mientras no podía soltar sus tetazas y las apretaba bien fuerte. Cada poco, bajaba la cabeza para volver a comérselas. Una de las veces que las comía, Alba se subió la camiseta, quitándosela. Acaricie sus pezones y aprete sus tetazas, mientras la volvía a recordar lo bien operadas que las tenía. Metí mi cara entre ellas, besando y lamiendo el gran canalillo que se formaba al apretárselas, mientras Alba apretaba mi cabeza con sus manos. Cuando empecé a devorar sus tetazas, ella apretaba más aun mi cabeza.
Alba se bajó y se fue a la mesa, para volver con las copas de sidra, con las que habíamos brindado antes, llenas. Brindamos por un año lleno de visitas mutuas y cuando comenzamos a beber, Alba echo la sidra por sus tetazas. Bebi mi copa de un trago y baje mi cabeza para lamer las tetazas mojadas. Volví a agarrarlas y nos besamos nuevamente.
Alba se bajó, arrodillándose entre mis piernas ahora. Me desabrocho el pantalón y me quito, dejando mi polla al descubierto. Comenzó a lamerme la polla, mientras me masturbaba. Cuando empezó a masturbarme más fuerte, me comió los huevos. Empezó a hacerme un mamadón, delicioso, hasta que metió mi polla entre sus tetazas y me hizo una cubana maravillosa. Mi polla desaparecía entre sus tetazas y me miraba con cara de guarra y sonrisa pícara. Alba iba alternando las mamadas, las cubanas y las pajas, comiéndome los huevos.
Levante a Alba y la desabroche y quite el pantalón, quedándose con un minúsculo tanga de hilo, negro y unas medias transparentes hasta los muslos. Me eche hacia delante para meter mi mano por su tanga, comenzando a masturbarla. Baje mi cabeza lo necesario, para volver a comerla las tetazas, mientras, con la otra mano, acariciaba su culo y lo azotaba. Mordisqueaba sus duros pezones y los estiraba, mezclando sus gemiditos con grititos de dolor.
La coloque a gatas en la mesita y me arrodille detrás de ella. Azote su culo, mientras lo besaba y mordía. Aparte el tanga y la comí el coño, con mis manos acariciando su culo. Mi lengua se movía cada vez más rápido, mientras mis manos, subían por su cuerpo, hasta llegar a agarrar fuerte sus tetazas. Alba cada vez gemía más y me pedía que se lo comiera más veloz, por lo que mi lengua no descansaba ni un segundo. No pare hasta que Alba se corrió en mi boca.
Me levante y me coloque frente a su carita. La golpee esta con mi polla, sobre todo en sus gafas y labios. Alba me comió un poco la polla, hasta que agarré su cabeza y la empecé a follar la boca bien duro. Mi polla entraba a fondo y salía llena de sus babas, para volver velozmente a entrar a fondo. Alba no era capaz de tragar su saliva y la comenzó a salir por sus comisuras. Pare de follarla la boca, me arrodille y nos volvimos a besar, mientras agarraba fuerte sus tetazas.
Me coloqué tras ella, nuevamente, y me puse un condón. Volví a apartar el tanga y metí mi polla en su coño, tan húmedo que entraba bien fácil hasta el fondo. Mientras la follaba, azotaba su culo y la decía lo mucho que me gustaba que su novio se fuera con su familia a celebrar esa noche. Cada vez la follaba más fuerte y mis huevos acababan golpeando su culo. Cambié de agujero y la empecé a follar el culo, igual de duro que el coño. Alba cada vez gemía más fuerte y me pedía más y más, cosa que yo la daba encantado.
Me senté en el sofá y Alba lo hizo sobre mí, nuevamente de rodillas, metiéndose mi polla en su coño y moviéndose como una loca, mientras yo la devoraba las tetazas. Alba gemía fuerte y apretaba mi cabeza contra esas tetazas suyas, mientras se movía cada vez con más ganas. Cuando iba a correrme, Alba se colocó de rodillas, nuevamente, entre mis piernas, me quito el condón y volvió a hacerme una cubana con sus tetazas. Lamia mi glande y cuando me corrí, trago todo mi semen, hasta dejarme sequito y limpio.

Alba se sentó sobre mí, lateralmente y nos volvimos a besar, mientras acariciaba sus tetazas. Una de mis manos se metió por su tanga masturbándola y de vez en cuando bajaba la cabeza para comer sus tetazas. Al poco, Rakety volvió a casa y, al vernos en esta situación, se rio y nos dijo que éramos unos cabrones, por no esperarla para iniciar tan bien el año.
Según se nos acercaba, esta se fue quitando el abrigo y la camiseta, quedándose con un sujetador negro, con encaje, de aro, que juntaba maravillosamente sus tetazas. Rakety se puso de rodillas a mi lado y me empecé a besar con ella, mientras acariciaba también sus tetazas. Me besé con ambas un rato, acariciando las tetazas de ambas, hasta que saqué las tetazas de Rakety y comencé a comérselas. Alba coloco sus tetazas también en mi cara y me aplastaron la cabeza con sus cuatro tetazas. Fui girando la cabeza para comérselas a ambas. Alba volvió a coger la botella de sidra, rociando las tetazas de su hermana para que se las lamiera y comiera bien empapadas. Luego roció las suyas y se las volví a comer.
Se colocaron ambas a gatas a mis lados y comenzaron a comerme la polla. Mis manos empezaron a acariciar sus culos. Mi novia aún tenía la falda puesta, por lo que se la acabe desabrochando y bajando, dejándola con un tanga negro y las medias que tapaban su culo. Acabe metiendo mi mano por las medias y el tanga de Rakety y por el tanga de Alba y las masturbe, mientras me la seguían comiendo juntas.
Mi novia se levantó, se quitó la falda y se bajó las medias, pues no quería romperlas aún. se sentó sobre mí, dándome la espalda, se apartó el tanga y se metió mi polla en su coño. Comenzó a votar fuerte, mientras agarraba sus tetazas y me besaba con ella. Alba se puso de rodillas y también me besaba con ella, hasta que esta coloco sus tetazas en mi cara y se las devoré, una vez más, con grandes ganas. Alba cogió un condón y entonces mi novia se bajó de mí. Alba me puso el condón y se sentó sobre mí, metiéndose mi polla en su coño. Se puso a cabalgar como loca, mientras mi novia, se quitó las medias y se puso de pie, poniendo su coño en mi cara. Aparte su tanga y la comí el coño.
Mi novia y Alba se fueron sentando sobre mí, a turnos, metiéndose mi polla en el coño y el culo, comiéndolas las tetas, mientras follábamos. Me levante y las coloque de rodillas en el sofá, mirando la pared. Azotaba sus culos mientras las follaba culo y coño a turnos a ambas hermanitas. Cuando quería follarlas bien fuerte, me echaba sobre sus espaldas y agarraba sus tetazas.
Cuando me corrí, dentro del culo de mi novia, me volví a sentar entre ellas, que se colocaron de nuevo a gatas. Me quitaron el condón y me lamieron la polla, mientras yo volvía a masturbarlas. No paramos hasta que ellas se corrieron también.

Nos vestimos y nos fuimos a la discoteca donde habíamos quedado con varios compañeros del gimnasio. Entre estas amistades, estaban la infiel Noemi y Nerea, por lo que sabía que algo rico podía surgir. Noemi iba supermorbosa, con una camiseta negra, asimétrica, con una tira fina rodeando su cuello, la manga que, si tenía era larga, esta dejaba ver su ombligo pues era cortita y era ajustada, marcando sus deliciosos pechos operados. El tirante del sujetador, del lado donde no tenía manga, se veía que lo llevaba cruzado al otro hombro. También llevaba una minifalda cortita y ajustada, marcando culazo, negra, y unas medias transparentes. Nerea no iba mucho menos morbosa. Tenía un body negro, de manga larga, con un escotazo redondo, hasta la mitad de sus pechos, que dejaba observar el interior de estos, maravillosamente, junto a su rico canalillo, siendo la camiseta ajustadísima marcando sus redondos pechos operados. Además, llevaba un morboso pantalón negro, transparente, con lentejuelas, ajustado marcando culazo, que dejaba ver el body que llevaba debajo.
Nerea no paro de bailar conmigo, bien arrimada, restregándome su culazo y besándonos. Mis manos no pararon de disfrutar de sus pechos y su culazo. Noemi, a pesar de estar su cornudo marido allí, también aprovechaba cualquier descuido de este, para zorrear conmigo, aunque con más cuidado por el resto de los compañeros que no saben que es infiel. Mi cuñada no se separaba mucho de mí, estando algo tranquila, pues no sabíamos si alguien conocido podía estar por la discoteca.
Avanzada la noche, Rakety conoció a un hombre y acabo yéndose con él. Cuando la discoteca cerro, Miguel, marido de Noemi, que iba borracho, propuso ir a su chalet a seguir la fiesta. A la gran mayoría nos pareció bien y allí acabamos, además de Noemi y Miguel, Nerea, Alba, 5 compañeros más del gimnasio y yo.
En el chalet había una buena fiesta, con la gente bailando y bebiendo sin parar. Noemi y yo habíamos ido a la cocina a por hielo y vasos. Allí Noemi me cogió y me dio un largo beso. Me dijo que estaba cachondísima y que tenía muchas ganas de poder comerme la polla por primera vez en el año. Todo esto lo hizo con su mano acariciando mi paquete. Al volver al salón, soltamos las cosas en la mesa, preparamos unos chupitos y dijimos a todos de brindar. Mientras brindábamos acaricie el culazo de Nerea e inmediatamente comencé a bailar y besarme con ella, metiéndola bien mano.
Pasado un rato, fui a la cocina por una cerveza y cuando volvía para el salón, Noemi me paro, aun en el pasillo y, agarrándome de la mano, me dijo que la acompañara. Subimos a la planta de arriba, donde nos empezamos a besar, y me llevo hasta su habitación. Nos encerramos en el baño de la habitación y me coloco contra la puerta, besándonos más apasionadamente, con su mano en mi paquete y las mías en su culazo. La gire y la coloque a ella contra la puerta. Nos seguimos besando bien acalorados y mis manos ahora acariciaron sus tetazas. Empecé a besarla y morderla el cuello, mientras mis manos bajaron a su culo y a una de sus piernas, la cual la levante, para acariciar su muslazo. Comencé a morder sus tetas con la camiseta puesta. Le quité la camiseta y seguí mordiendo sus tetazas, con el sujetador de aro puesto, mientras las acariciaba y apretaba con las manos. Le quité el sujetador y devoré sus deliciosos pechos tan bien operados, mientras mis manos volvían a su culazo. Noemi, me había sacado la polla y me estaba masturbando.
Agarré su faldita y se la subí, despacio, hasta dejársela en su cintura. Acaricié su culazo tapado con las medias y vi que llevaba un tanga rojo de hilo. La gire y golpee su culazo con mi polla, además de restregársela notando el tacto de las medias.
Fui agachándome, besando su cuerpo, hasta llegar a su culazo. Lo besé y mordí, mientras una de mis manos lo acariciaba y la otra acariciaba su coño. Volví a girarla y mordí y besé su coño, mientras acariciaba sus muslazos. Rompí sus medias y comencé a lamer su tanguita. Aparte el tanga y bese su rico coño, antes de comenzar a comérselo, metiendo mi lengua dentro de él. Mis manos agarraban fuerte su culazo. Noemi subió una de sus piernas, apoyando su pie en mi hombro. Acaricie esa pierna, mientras mi otra mano subía hasta sus tetazas. Noemi acariciaba mi pelo y se la oía pedirme más con voz bajita.
Cuando Noemi se corrió, volví a subir, besando y acariciando su cuerpazo. Nos besamos y agarre fuerte sus tetazas, antes de que Noemi se arrodillara y comenzara a hacerme una mamada maravillosa. Noemi se tragaba entera mi polla y cuando me comía los huevos, me masturbaba a buena velocidad. Metió mi polla entre sus pechos, un par de veces, masturbándome con ellos.
La di un condón y cuando me lo puso, se levantó y nos volvimos a besar. La cogí en vilo, aparte su tanga y metí mi polla. Follamos bien rico, contra la puerta, mientras nos besábamos locamente y acariciaba su culazo. Mi cabeza, de vez en cuando, bajaba a comerla las maravillosas tetas. La baje y la coloque con las manos apoyadas en el lavabo, mirando al espejo. Volví a apartar su tanguita y la empecé a follar el culo. Nos mirábamos a través del espejo y la cara de cerda y gusto de Noemi, me ponía tan cachondo que la penetraba más fuerte cada vez. Sus tetas se movían maravillosamente y se veía bien rico en el espejo, por lo que, de vez en cuando, se las agarraba y apretaba fuerte. Volví a meter mi polla en su coño, follándola duro. Sus gemidos eran cada vez un poco más altos y tenía que taparla la boca, para intentar que no nos oyeran fuera. Noemi me aviso que iba a correrse de nuevo, por lo que la folle más fuerte aun, para intentar correrme a la vez. Noemi se corrió y yo lo hice unos pocos segundos después. Noemi se arrodillo, me quito el condón y me comió la polla, dejándola bien seca.

Tras unos besos más, nos fuimos a vestir. Yo cogí el sujetador de Noemi y la dije que no se lo iba a poner, pues me apetecía que volviera a la fiesta sin él. Al bajar al piso de abajo, yo fui para el salón y Noemi fue a la cocina, para no entrar juntos y levantar muchas sospechas. En el salón estaba Nerea y Alba bailando con 2 compañeros del gimnasio, que ya eran los únicos que quedaban, que estaban tonteando con ellas. Miguel estaba en el sofá sentado, bastante borracho. Me uní a los que bailaban. Nerea me agarro de la cintura y se acercó para preguntarme al oído, bajito, donde había estado. Solo le dije que podía suponerlo al ver que su amiga no estaba. Nerea rio y me dijo que cada día nos la jugábamos más. Estas siguieron bailando con los compañeros y cuando Noemi entro al salón, al ver a su marido tan borracho, se vino directamente a bailar conmigo.
Tras tomar varios chupitos y copas, Noemi les pregunto a nuestros compis, que cuando iban a dejar de tontear y pasar a la acción con Nerea y Alba. Cogí a mi cuñada y la puse a bailar frente a estos dos. Me coloqué tras ella y comencé a bailar, con sus tetazas agarradas. Les decía a los compañeros, que seguro que esas tetazas tan grandes, les encantaban. Uno se rio un poco y dijo que tan grandes jamás. Cogí la camiseta de Alba y se la quite, dejándola con las tetazas al descubierto. La seguí agarrando y moviéndoselas para todos lados, mientras ellos miraban alucinando. Les decía que las tocaran, que verían lo bien operadas que estaban y al final lo hicieron. Alba se reía y comenzó a besarse con uno de ellos. Nerea agarro al otro compañero y se besó con él. Noemi y yo seguimos bailando y, aprovechando que estaban entretenidos los dos compañeros, nos metimos bien mano. Alba y su ligue salieron del salón, camino de las habitaciones de la planta de arriba. Nerea y el otro, siguieron el mismo camino un par de minutos después.
Noemi me cogió y me llevo al sofá. Me sentó al lado de su marido y ella se sentó sobre mí, de lado, dándole la espalda a este. Giro la cabeza y le empezó a preguntar qué tal lo estaba pasando, mientras yo comenzaba a pasar mi mano por sus piernas. Ante el silencio de su marido, debido a la borrachera, esta le empezó a decir que ella sí que lo estaba pasando muy bien y que tenía pensado pasarlo mejor aún. Mi mano se metió por su falda y por su tanga y comencé a masturbarla. Noemi se inclinó hacia atrás, lo necesario para poder besar a su marido, que estaba impasible, sin mover un musculo. Con mi otra mano, baje la camiseta por el lado asimétrico y saque su deliciosa teta, acariciándola y pellizcando su pezón. Noemi se bajó de mí y me hizo levantarme para ponerse a gatas en el sofá. Quito el pantalón a su marido y comenzó a jugar con la polla de este, para ver si se la ponía dura. Yo subí la falda a Noemi, me tumbé en el sofá, colocando mi cara bajo sus piernas. Aparte su tanga y comencé a comerla el coño.
No paso mucho tiempo, cuando oímos la puerta de la calle cerrarse. Saque mi cabeza de entre las piernas de Noemi, para ver qué pasaba y Nerea apareció en el salón, riéndose. Nuestro compi que había subido con ella se había ido pues la polla no se le ponía dura por la borrachera. Me levante y me acerque a ella, mientras le decía que no se preocupara que ella iba a tener su ración de polla dura. Noemi se reía y decía que a su marido tampoco se le ponía dura por más que se la comía.
Cogí a Nerea de la cintura y nos volvimos a besar. Mis manos pasaron a su culazo y mi cara bajó a su escotazo besándolo. Subieron mis manos hasta sus pechos, apretándolos. Comencé a morder sus pechos por encima de la camiseta y, como no llevaba sujetador, notaba muy bien su rico y duro pezón. Gracias a que su body era elástico, pude estirar su escotazo redondo hasta dejar a la vista sus redonditos pechos operados. Besé sus pechos un poco y comencé a comérselos.
Noemi se nos acercó, diciendo que era imposible ponérsela dura a su marido, y me empecé a besar con ella, mientras acariciaba los pechos de Nerea. Como Noemi tenía uno de sus pechos fuera, agache la cabeza para comérselo. Esta se quitó la camiseta y la comí las dos tetas, sin dejar de acariciar las de Nerea. Esta se acabó arrodillando y me quito el pantalón, para hacerme una tremenda mamada con su enorme boca. Durante esta, devore las tetazas de Noemi y acaricie su culazo.
Decidimos dejar en el sofá a Miguel dormido y nos subimos a la habitación de Noemi, para estar más tranquilos por si aparecía Alba y el otro compañero del gimnasio, ya que este no sabe que Noemi es infiel. De camino a la habitación pudimos oír a Alba, pasándolo bien con nuestro compañero.
Las senté a ambas en el borde de la cama y me puse frente a ellas. Se inclinaron y comenzaron a comerme la polla y jugar con mis huevos a turnos. Con mi polla durísima empecé a follar la bocaza a ambas. Me senté entre las dos y nos besamos. Me tumbe, con las piernas cayendo al suelo. Noemi se subió la falda y se sentó de rodillas, poniendo su coño sobre mi boca. Aparte su tanga y se lo comí. Nerea se arrodillo entre mis piernas y volvió a hacerme un mamadón.
Me levante de la cama y Noemi se sentó con sus piernas abiertas. Coloque a Nerea a gatas con la cara entre las piernas de Noemi, para que la siguiera comiendo el coño. Yo me puse de rodillas en el suelo, tras el culazo de Nerea. Acaricie y bese su culazo, tapado aun por el pantalón. Se lo desabroche y quite, dejándola con el body y unas medias transparentes tapando su culazo. Rompí las medias y desabroché el body, subiéndoselo a la cintura. Llevaba un precioso tanga de hilo, rojo. Mordí sus deliciosos glúteos, mientras los azotaba con una mano y la masturbaba con la otra. Acabe apartando el tanga, para meter mi cara y comerla el coño. Mi lengua jugaba dentro de su coño, mientras mis manos acariciaban y azotaba su culazo. Una de mis manos subió hasta agarrar sus tetas, jugando con ellas. Mi otra mano acabo yendo a sus pechos también y fueron cambiando entre ellas y su culazo, mientras la comía el coño.
Pare un momento de comerla el coño, para ponerme de pie en la cama y volver a follarla la boca a Noemi, hasta provocarla una fuerte arcada. Entonces volví a ponerme detrás de Nerea. Me puse un condón y comencé a follarla el coño. Mis manos agarraban fuerte su cintura, para poder penetrarla bien duro, sonando mis huevos en su culo.
Alba apareció en la habitación, solo con las medias y el tanga. Nos dijo que nuestro compañero tras el primer polvo se había quedado dormido. Se puso a mi lado y nos besamos, mientras acariciaba sus tetazas y seguía follando a Noemi. Acabe bajando mi cara para comerla las tetazas. Baje a Nerea y coloque a Alba en su posición, comiéndola esta, ahora, el coño a Noemi. Cogí en vilo a Nerea y seguí follándola, mientras nos besábamos y acariciaba su culazo. Nerea se quitó el body y la comí las tetas, mientras ella no paraba de cabalgar. Cuando se corrió, la baje y me coloque detrás de Alba. Aparte su tanga y la empecé a follar a ella. Nerea se sentó al lado de Noemi y se empezaron a besar. Noemi, metió su mano por el tanga de Nerea y la masturbo, hasta que la ordeno coger un consolador que tenía en un cajón. Cuando lo cogió, la hizo ponerse a gatas con su culo al lado de Noemi, la cual empezó a masturbarla el culo con el consolador.
Hice cambiarse a Alba y a Noemi. Alba se sentó y Noemi, a gatas, la comía el coño, mientras yo la follaba. Nerea cogió el consolador y se masturbaba. La hice ponerse al alado de Noemi, a gatas, y yo la masturbaba con el consolador. Dejé de follar a Noemi y volví a colocarme tras Nerea. Metí el consolador en el culo y la volví a follar el coño. Noemi y Alba se tumbaron haciendo un 69. Cambié el consolador al coño de Nerea y la empecé a follar el culo. Me eche sobre su espalda y la folle más fuerte, mientras agarraba sus pechos y nos besábamos. Noemi estaba en la parte de arriba del 69, por lo que comencé a follarla el culo. Nerea se siguió masturbando con el consolador.
Me senté en el borde de la cama y Nerea se sentó sobre mí, rodeándome con sus piernas. Aparto su tanga y metió mi polla, comenzando a botar como loca. Nos besábamos y acariciaba sus pechos y piernas. Nerea agarro su body y se lo quito. Agarro mi cabeza y la llevo hasta sus pechos redonditos, los cuales comí con grandes ganas. Cuando Noemí y Alba se corrieron, se colocaron a mis lados de rodillas y apretaron también sus tetazas contra mi cara. Yo la movía para todos lados, disfrutando así de las tetas de todas.
Fueron sentándose todas sobre mí, turnándose, para meterse mi polla en sus coños y culos, mientras yo comía sus tetas. No pararon hasta que me corrí en el coño de Noemi. Entonces Alba y Nerea se colocaron a gatas a mis lados, y Nerea de rodillas en el suelo, entre mis piernas. Me quitaron el condón y me comieron la polla, limpiándomela, entre todas, mientras acariciaba los culos de Alba y Nerea.
Un rato después, bajamos al salón, donde nos vestimos y tomamos una última copa, antes de que Alba y yo nos fuéramos a casa, pues ya era de día. Al llegar a casa, en mi habitación, estaba Rakety durmiendo con el amigo que había hecho en la discoteca. Alba y yo fuimos a la otra habitación. Alba se quedó solo con el tanga y yo me desnude. Nos metimos en la cama donde nos acabamos durmiendo tras un rato de besos y acariciar y comer sus tetazas.

Casi al medido día, nos despertó una llamada al teléfono de Alba. Era su novio, que le hacia una videollamada, por lo que antes de que lo cogiera, salí de la cama, para que no me viera con ella y me coloque apoyado en el escritorio, frente a ella. Alba cogió la llamada y se puso a hablar con su novio. Alba le conto que lo había pasado muy bien en la fiesta a la que la llevamos, inventándose todo lo ocurrido, lógicamente. Su novio le dijo que la echaba de menos y esta se bajó la manta, mostrándole que estaba solo en tanga, mientras le decía, la mentirosa, que ella también le echaba de menos. Comenzaron a ponerse juguetones y Alba se empezó a tocar los pechos y decirle guarradas a su novio. Yo agarré mi polla y comencé a masturbarme, mientras la sonreía. Alba veía perfectamente lo que yo hacía y se ponía más cachonda. Metió su mano por su tanga y se empezó a masturbar, mientras le decía a su novio que le dijera guarradas.
Pasado un rato, Alba le dijo a su novio, que tenía que colgar ya, que había oído que ya nos habíamos levantado su hermana y yo y que estábamos preparando el desayuno. Este le dijo que, por favor, no le dejara con el calentón, que aún no se había corrido. Pero la mala le colgó, me miro y sonrió.
Me subí a la cama, a gatas, por la parte baja de esta. Fui gateando por la cama, subiendo por el cuerpo de Alba. comencé a besarla las piernas, subiendo por sus muslos y parando en su coño, tapado por el tanga. Lo mordisquee y acabe apartándolo, para mordisquear su coño. Lamí su clítoris, para acabar con mi lengua muy dentro de su coño, comiéndoselo. Pare de comérselo y seguí subiendo, besando su tripa, llegando a sus tetazas. Las bese por los lados, hasta comenzar a besar, lamer y morder sus gorditos pezones. Como Alba estaba sentada en la cama, con la espalda contra la pared, mi polla quedaba a la altura de su coño, por lo que movía mi cintura para restregarlo por él. Seguí subiendo, besando su cuello y orejas, antes de comenzar a besarme apasionadamente con Alba.
Deje de besarla y me coloque de pie, para restregar mi polla por su cara. Cuando se me puso, nuevamente durísima, me agache lo necesario para colocar mi polla entre sus tetazas. Alba las apretó y comenzó a hacerme una nueva cubana. Su lengua jugaba con mi glande y yo acariciaba su pelo. Saque mi polla de entre sus tetazas y golpee su carita con ella. La hice abrir la boca y la follé bien duro la bocaza. Agarre fuerte su cabeza, con mis dos manos, para apretársela bien fuerte al follarla la boca.
Me arrodille y nos volvimos a besar, con mis manos en sus tetazas. Volví a bajar besando su cuello, hasta llegar a sus tetazas y comérselas, mientras mi mano, se metía por su tanga y la masturbaba. Alba agarro mi polla y también me masturbo. Me puse un condón mientras la hice tumbarse, entre mis piernas. Me tumbe sobre ella, nos besamos y ella cogió mi polla, aparto su tanga y se metió mi polla en su coño. Comenzamos a follar, mientras nos besábamos y la comía y acariciaba las tetazas.
Me coloque de rodillas entre sus piernas. Le levanté una, colocándola un poco de lado, y seguí follándola duro. Subí también la otra y las coloqué contra mi pecho. No pare de follarla fuerte, mientras lamia sus dedos y veía sus tetazas moverse para todos lados. Me incline para poder volver a comerla las tetazas, sin parar de follarla. La tumbe de lado y me tumbe detrás de ella. Levante una de sus piernas para seguir follando su coño, mientras nos besábamos y acariciaba sus tetazas y el muslo de la pierna levantada. Cuando Alba se corrió, cogió mi polla y la cambio de agujero y comencé a follarla el culo, mientras no soltaba sus tetazas y nos besábamos sin parar.
Me tumbe y Alba se sentó sobre mí, con mi polla en su culo y se puso a botar como una loca. Sus tetazas se movían maravillosamente, mientras yo acariciaba su culo. Alba acabo inclinándose, para meter mi cara entre sus tetazas. Alba se bajo y se arrodillo entre mis piernas. Me quito el condón y me hizo un tremendo mamadón, intercalado con unas cubanas deliciosas.
Alba estaba haciéndome una cubana cuando iba a correrme. Preferí no avisarla y cuando salió mi primera lechada disparada, llené su preciosa cara y parte de sus pechos con mi semen mañanero. Esta rápido se la metió en la boca y comenzó a tragar lo que siguió saliendo. Solo volvió a sacarse mi polla de la boca, cuando la tuve bien seca.
Alba se tumbo a mi lado y nos dimos un buen beso, mientras acariciaba sus muslos. Cogí a Alba y nos fuimos al baño. Encendí la ducha y, mientras se calentaba el agua, me arrodillé, la quite el tanga y la comí el coño. Nos metimos dentro de la ducha y la limpie el semen de la cara y de sus tetazas con mis manos, haciendo que me lamiera luego los dedos. Me volví a arrodillas, para terminar de comerla el coño, bajo la ducha. Cuando Alba se corrió, nos besamos un rato bajo el agua, donde nos metimos bien mano.

Cuando salimos de la ducha, nos vestimos y vimos que mi novia dormía ya sola. Nos hicimos algo de comer y tras tomárnoslo y besarnos algo más, Alba, por desgracia, tuvo que irse a su casa, terminando una gran celebración de año nuevo.