¡Hola a todos!
Recién entro al foro y me alegra tener donde poder compartir algunas de las experiencias que viví en el pasado, para esta historia cambiare los nombres de todos los participantes.
Los nombres y edades de algunos fueron ligeramente cambiados por razones OBVIAS, especialmente la edad de Daniel, pronto lo entenderan leyendo.
Esta historia transcurrió hace unos 11 años, para ese entonces tenía 28, mi novia de ese entonces, 30 (siempre me han gustado las mujeres con diferencia de edad a mí, o mucho más jóvenes, o mucho más maduras).
En ese entonces, vivía en "xxxx", ella en Cali (por los lados de los "xxxxx"), por lo que, para visitarla, siempre eran unas 2 horas de viaje, pero uno tragado viaja eso y más.
Bien, mi en ese entonces pareja, llamémosla "Sara", era una mujer un poco más alta que yo, unos 1.75 aproximadamente, de contextura gruesita, sin mucho busto, cabello corto tinturado a cobrizo, su principal atractivo eran sus caderas muy anchas, nalgas de esas gigantes que rebotan muy bonito.
En esa edad aun no tenía conocimiento del mudo cuck y menos del stagging, pero ya había empezado a desarrollar un gusto particular, el de disfrutar que otros hombres disfrutaran con los ojos de mis mujeres, en este caso, de Sara, era imposible no mirarle el culo cuando salíamos a la calle, ella al principio era muy recatada y hasta tímida para su edad, pero después de empezar a salir con migo, le empecé a cambiar un poco el guardarropa, jeans más ajustados, shorts blancos transparentosos, le cumplí el gustico de perforarse los pezones, a cambio de que no usara bra cuando saliéramos a cine (usando blusitas de tiritas), le cambie muchos de sus panty shorts, por tanguitas e hilitos (ya que soy fanático de los triangulitos del diablo), todo eso, porque simplemente me prendía muchísimo ver como la miraban otros hombres en la calle, de todas las edades, desde los viejos, hasta los grupos de pelaitos que parchan en centros comerciales.
Todo eso, al principio sé que lo hizo más por darme gusto a mí, que por disfrutarlo, sin embargo, con el tiempo empezó a disfrutarlo tanto como yo, como por ejemplo, teníamos un "jueguito", en el que adrede dejaba que las tiritas de las tangas sobresalieran del jean un poco cuando sabíamos que alguien la estaba mirando mucho y cosas similares.
Aunque cabe aclarar, que no teníamos intenciones (aun) de invitar a otra persona a nuestros juegos, todo siempre era para terminar muy calientes, culiando en sabores o algún otro motel cercano.
Bien, luego de ese contexto inicial, paso a entrar un poco más en el relato importante...
Muchas veces durante nuestra relación, Sara me acompañaba a eventos y reuniones familiares, paseos de finca, etc, en varias de esas situaciones se había topado con uno de mis tantos primos, llamémosle "Daniel", que para ese entonces tenía 14 años, el cual era mi primo favorito, porque (incluso hasta hoy) me sentía super identificado y proyectado en el en esa edad, era casi una fotocopia mia, aunque un poco más bajito y delgado (yo diría unos 1.50-55) (hoy en dia es mucho más alto que yo, pero le faltaba pegar el ultimo estirón jaja).
Bien, Daniel, como buen puberto hormonado, no era indiferente de los encantos de Sara, más de una ocasión lo cache mirándola con esa hambre temerosa de un jovencito virgen e inexperto; era lo esperable, hasta que en una amanecida de finca en la vía potrerito, estábamos varios familiares riendo, tomando, comiendo asadito (típico plan valluno), durante toda la tarde, sara y yo estuvimos bastante tiempo en la piscina con varios familiares hasta que empezó a caer la noche, ya solo quedábamos algunos en la piscina, otros se habían ido a bailar al salón comunal de la finca, entre los que quedaban, estaba Daniel, con el cual nos habíamos reído toda la tarde hablando de todo y nada a la vez.
Debo añadir (para fines de imaginación) que Sara estaba vistiendo un bikini normal, ni muy mostron, pero tampoco de abuelita, porque había mucha familia y no queríamos ser groseros, sin embargo, al tener esas nalgas tan grandes, era imposible que no se metiera un poco el bañador a veces.
Viendo que ya casi era hora de salir de la piscina e ir a coitear a nuestro cuarto, aproveche para poner en marcha nuestro "jueguito", le pedí que fuera por una última cerveza a la nevera, pero susurrado le sugerí que le diera un poquito de caldo de ojo a mi primito al salir, a lo que ella cómplice y sumisa como era, sonrió maliciosamente y salió por la escalerilla de la piscina, lentamente en frente de Daniel.
al irse, le pregunte pícaramente a mi primito: - Uff que culazo que tiene mi novia, no te parece?
- Jaja, si pri, es muy bonita tu novia y me cae muy bien... (Muy rojo y apenado, típico de la edad y de la situación en si.
- Jum mk, imagínatela en 4 o cabalgando (entre risas le dije, para ver su reacción)
- Pri, en 4 me lo puedo imaginar, pero no sé qué es cabalgar jaja (de nuevo, muy rojo por la situación y medio tartamudeando)
- Mk eso es cuando te sentas o te acostas y la hembrita se sienta sobre ti y empieza a brincar, como cuando te subís a un caballo.
- No pues mk,, muy de buenas vos, yo tengo novia, pero no creo que quiera culiar todavía.
Momenticos después de eso venia Sara de regreso, a lo que le dije a Daniel:
- Bueno ya viene Sara, me la voy a llevar a culiar al cuarto pri, nos vemos más tarde o ya mañana.
Sali de la piscina, le recibí la cerveza a Sara y la tomé de la cintura entre risas de complicidad, me aseguré de darle una nalgada con agarrón frente a Daniel, que aún estaba en la piscina.
- Amor, despídete de dany, que ya nos vamos.
- Nos vemos... primito (mientras le picaba el ojo y le dedicaba una sonrisa pícara).
Posterior a eso nos fuimos a culiar al cuarto, estábamos re calientes de esa mini travesura.
El relato es algo largo, así que cortare por acá, procederé a narrar la segunda parte en un momento.
Bien, luego de ese día, volvimos a nuestra vida normal, nos veíamos dos o tres veces por semana, ya que nuestras vidas y trabajos impedían que viviéramos juntos aún.
Un par de meses después del evento de la finca (y un par de anécdotas más en la calle como las anteriormente detalladas), habíamos terminado de culiar y estábamos en la habitual charla post-coito, cuando recordé aquel incidente de la piscina y de que mi primo, Daniel, cumpliría años pronto… Lo que me encendió el bombillo y la polla de nuevo.
- ¿Amor, que te parecería invitar a Daniel al apartamento?
- ¿invitar a Daniel? ¿Jaja, para que o que?
- Pues, es que la conversación de la piscina estuvo sabrosa, pa que.
- Pues vos que sos un degenerado, obviamente él se emocionó, yo sé lo que me cargo.
Esta conversación se estaba dando mientras empecé a besarle el cuello y la oreja coquetamente, para empezar un segundo round, entusiasmado por la idea que tenía en mente.
- Lo que pasa, es que el cumple años la próxima semana, cumple 18 y pensé que podíamos darle un “regalo interesante”.
- ¿Regalo interesante? (Mientras sonreía y gemía levemente, porque ya estaba entrando en calor de nuevo también)
- Sí, pensé que podríamos invitarlo acá a tu apartamento, ¿y no se… que te parecería hacerle un show privado?
- ¿Show privado? Mk estás loco jaja
- Jaja de pronto si un poquito. (Mientras me posicionaba para penetrarla en misionero, ya que estaba duro al 100 de nuevo)
- Aja, un show privado, ¿cómo? ¿Un bailecito y ya? (cerrando los ojos y gimiendo sexymente mientras la penetraba)
- Pues podría ser… pero, pensaba en más que eso, mira, te lo voy a decir sin tanto tapujo. (le decía al oído mientras la penetraba y gemía suavemente para ella)
- Mk yo se con qué me vas a salir jaja
- Pues si ya sabes, me la pones más fácil amor, quiero que te lo cojas, que le enseñes a coger una hembra como tú, que su primera experiencia sea con mi hembra.
Luego de escuchar como le pedía que se tirara a mi primito de 18, al parecer le hizo tener un orgasmo muy brusco luego de terminar de escuchar mi proposición, quizá aún estaba sensible de los primeros orgasmos anteriores, o la suma de ambas cosas, el caso es que su cuerpo reacciono a la idea de comerse ese pollito de casi la mitad de su edad y tamaño.
Posterior a eso, platicamos ya un poco más calmados la idea, y decidimos armar casi una “película porno”, en términos de ambientación para él.
La idea era comprar una nueva lencería para recibirlo, así que fuimos durante esa semana siguiente a un pantera Roja que queda cerca de Palmetto plaza, miramos opciones y nos decantamos por un conjuntico de “Maid”, traía unas medias altas de malla negra amplia, con un resorte en encaje blanco, una tanga de las que me fascinan, pequeña y corta adelante y un triangulito negro atrás, una “falda” transparente con delantal frontal, que solo tapaba levemente el panty, dejando sus enormes piernas y nalgas lujuriosas casi al descubierto; por último, unas muñequeras de adorno, su gorrito de sirvienta clásico y un top transparente para los pechos, que como mencione, eran bastante planitos, pero que compensaba enormemente su culo.
Finalmente, todo ese conjunto fue acompañado con unos tacones altos que ya tenía, con los que le pedía salir constantemente con migo, ya que como bien saben, los tacones altos embellecen la sensualidad de las mujeres, lo que sumado a sus 1.75 de estatura, le daban casi 1.80 de altura, su culo se veía simplemente precioso vistiendo esa tanguita apenas tapada por la faldita y el delantal.
Bien, ahora tocaba contarle la idea a Daniel, cosa que fue bastante sencilla como podría esperarse.
Ya en mi casa, le llame y le invite a comer salchipapita, en medio de la conversación casual y convencional le toque el tema:
- Pri, cumplís año la semana que viene, no? ¿Qué día?
- Jaja si mk, cumplo 18 ya, el sábado. ¿Por?
- Ah bueno, menos mal, lo que pasa es que estuve hablando con sara de eso, te acordas de ella, obviamente, ¿no?
- Si, claro que me acuerdo, me hiciste pasar pena con ella el que día en la finca.
- Jaja si, la misma, bueno mk, lo que pasa es que ya sé que te voy a dar de regalo.
- ¿Que? Nooo mk no te vas a poner en esas con ella, que pena.
- Na, esas bobadas, mi regalo va a ser ella.
- … ella? ¿Como así? (me miro extrañado, pero con cierta vergüenza, quizá entendía a qué me refería, pero era incrédulo aun)
- Pues mk, así como suena, te la voy a prestar una tarde, para que culeen.
- Jaja este man tan bobo, como se te ocurre, me estas jodiendo, ¿verdad?
- No, es enserio, yo sé que más de una vez le has visto el culo a escondidas, y ese día en la finca lo comprobamos ella y yo.
- No, pero veni, ¿es enserio?
- Que si hombre, no le des más vueltas al asunto, el próximo sábado arrímate a mi casa, que vamos a ir juntos al apartamento de ella, obviamente van a haber algunas reglas, pero pues ella es mi hembra, y como mi hembra, va a hacer lo que yo le diga; además, vos no le sos indiferente, ella piensa que sos tiernito.
- Pero yo tengo novia mk, jaja (muy apenado, pero completamente metido en el cuento)
- Y? mk no va a ser ni tu primer, ni tu ultima mujer, además, le vas a sacar el cuerpo a sara?
Adelantando un poco más esa conversación, que inicio siendo algo incomoda al principio, rápidamente se volvió una charla hot, le mostré un par de fotos de sara vistiendo tanguitas y un uniforme de colegiala que solía usar conmigo.
Esa noche llamé a sara y le conté que todo había salido bien y que ese sábado estaríamos allí masomenos a las 12pm, que se preparara y estuviera lista, recordando el “libreto”.
Recién entro al foro y me alegra tener donde poder compartir algunas de las experiencias que viví en el pasado, para esta historia cambiare los nombres de todos los participantes.
Los nombres y edades de algunos fueron ligeramente cambiados por razones OBVIAS, especialmente la edad de Daniel, pronto lo entenderan leyendo.
Esta historia transcurrió hace unos 11 años, para ese entonces tenía 28, mi novia de ese entonces, 30 (siempre me han gustado las mujeres con diferencia de edad a mí, o mucho más jóvenes, o mucho más maduras).
En ese entonces, vivía en "xxxx", ella en Cali (por los lados de los "xxxxx"), por lo que, para visitarla, siempre eran unas 2 horas de viaje, pero uno tragado viaja eso y más.
Bien, mi en ese entonces pareja, llamémosla "Sara", era una mujer un poco más alta que yo, unos 1.75 aproximadamente, de contextura gruesita, sin mucho busto, cabello corto tinturado a cobrizo, su principal atractivo eran sus caderas muy anchas, nalgas de esas gigantes que rebotan muy bonito.
En esa edad aun no tenía conocimiento del mudo cuck y menos del stagging, pero ya había empezado a desarrollar un gusto particular, el de disfrutar que otros hombres disfrutaran con los ojos de mis mujeres, en este caso, de Sara, era imposible no mirarle el culo cuando salíamos a la calle, ella al principio era muy recatada y hasta tímida para su edad, pero después de empezar a salir con migo, le empecé a cambiar un poco el guardarropa, jeans más ajustados, shorts blancos transparentosos, le cumplí el gustico de perforarse los pezones, a cambio de que no usara bra cuando saliéramos a cine (usando blusitas de tiritas), le cambie muchos de sus panty shorts, por tanguitas e hilitos (ya que soy fanático de los triangulitos del diablo), todo eso, porque simplemente me prendía muchísimo ver como la miraban otros hombres en la calle, de todas las edades, desde los viejos, hasta los grupos de pelaitos que parchan en centros comerciales.
Todo eso, al principio sé que lo hizo más por darme gusto a mí, que por disfrutarlo, sin embargo, con el tiempo empezó a disfrutarlo tanto como yo, como por ejemplo, teníamos un "jueguito", en el que adrede dejaba que las tiritas de las tangas sobresalieran del jean un poco cuando sabíamos que alguien la estaba mirando mucho y cosas similares.
Aunque cabe aclarar, que no teníamos intenciones (aun) de invitar a otra persona a nuestros juegos, todo siempre era para terminar muy calientes, culiando en sabores o algún otro motel cercano.
Bien, luego de ese contexto inicial, paso a entrar un poco más en el relato importante...
Muchas veces durante nuestra relación, Sara me acompañaba a eventos y reuniones familiares, paseos de finca, etc, en varias de esas situaciones se había topado con uno de mis tantos primos, llamémosle "Daniel", que para ese entonces tenía 14 años, el cual era mi primo favorito, porque (incluso hasta hoy) me sentía super identificado y proyectado en el en esa edad, era casi una fotocopia mia, aunque un poco más bajito y delgado (yo diría unos 1.50-55) (hoy en dia es mucho más alto que yo, pero le faltaba pegar el ultimo estirón jaja).
Bien, Daniel, como buen puberto hormonado, no era indiferente de los encantos de Sara, más de una ocasión lo cache mirándola con esa hambre temerosa de un jovencito virgen e inexperto; era lo esperable, hasta que en una amanecida de finca en la vía potrerito, estábamos varios familiares riendo, tomando, comiendo asadito (típico plan valluno), durante toda la tarde, sara y yo estuvimos bastante tiempo en la piscina con varios familiares hasta que empezó a caer la noche, ya solo quedábamos algunos en la piscina, otros se habían ido a bailar al salón comunal de la finca, entre los que quedaban, estaba Daniel, con el cual nos habíamos reído toda la tarde hablando de todo y nada a la vez.
Debo añadir (para fines de imaginación) que Sara estaba vistiendo un bikini normal, ni muy mostron, pero tampoco de abuelita, porque había mucha familia y no queríamos ser groseros, sin embargo, al tener esas nalgas tan grandes, era imposible que no se metiera un poco el bañador a veces.
Viendo que ya casi era hora de salir de la piscina e ir a coitear a nuestro cuarto, aproveche para poner en marcha nuestro "jueguito", le pedí que fuera por una última cerveza a la nevera, pero susurrado le sugerí que le diera un poquito de caldo de ojo a mi primito al salir, a lo que ella cómplice y sumisa como era, sonrió maliciosamente y salió por la escalerilla de la piscina, lentamente en frente de Daniel.
al irse, le pregunte pícaramente a mi primito: - Uff que culazo que tiene mi novia, no te parece?
- Jaja, si pri, es muy bonita tu novia y me cae muy bien... (Muy rojo y apenado, típico de la edad y de la situación en si.
- Jum mk, imagínatela en 4 o cabalgando (entre risas le dije, para ver su reacción)
- Pri, en 4 me lo puedo imaginar, pero no sé qué es cabalgar jaja (de nuevo, muy rojo por la situación y medio tartamudeando)
- Mk eso es cuando te sentas o te acostas y la hembrita se sienta sobre ti y empieza a brincar, como cuando te subís a un caballo.
- No pues mk,, muy de buenas vos, yo tengo novia, pero no creo que quiera culiar todavía.
Momenticos después de eso venia Sara de regreso, a lo que le dije a Daniel:
- Bueno ya viene Sara, me la voy a llevar a culiar al cuarto pri, nos vemos más tarde o ya mañana.
Sali de la piscina, le recibí la cerveza a Sara y la tomé de la cintura entre risas de complicidad, me aseguré de darle una nalgada con agarrón frente a Daniel, que aún estaba en la piscina.
- Amor, despídete de dany, que ya nos vamos.
- Nos vemos... primito (mientras le picaba el ojo y le dedicaba una sonrisa pícara).
Posterior a eso nos fuimos a culiar al cuarto, estábamos re calientes de esa mini travesura.
El relato es algo largo, así que cortare por acá, procederé a narrar la segunda parte en un momento.
Bien, luego de ese día, volvimos a nuestra vida normal, nos veíamos dos o tres veces por semana, ya que nuestras vidas y trabajos impedían que viviéramos juntos aún.
Un par de meses después del evento de la finca (y un par de anécdotas más en la calle como las anteriormente detalladas), habíamos terminado de culiar y estábamos en la habitual charla post-coito, cuando recordé aquel incidente de la piscina y de que mi primo, Daniel, cumpliría años pronto… Lo que me encendió el bombillo y la polla de nuevo.
- ¿Amor, que te parecería invitar a Daniel al apartamento?
- ¿invitar a Daniel? ¿Jaja, para que o que?
- Pues, es que la conversación de la piscina estuvo sabrosa, pa que.
- Pues vos que sos un degenerado, obviamente él se emocionó, yo sé lo que me cargo.
Esta conversación se estaba dando mientras empecé a besarle el cuello y la oreja coquetamente, para empezar un segundo round, entusiasmado por la idea que tenía en mente.
- Lo que pasa, es que el cumple años la próxima semana, cumple 18 y pensé que podíamos darle un “regalo interesante”.
- ¿Regalo interesante? (Mientras sonreía y gemía levemente, porque ya estaba entrando en calor de nuevo también)
- Sí, pensé que podríamos invitarlo acá a tu apartamento, ¿y no se… que te parecería hacerle un show privado?
- ¿Show privado? Mk estás loco jaja
- Jaja de pronto si un poquito. (Mientras me posicionaba para penetrarla en misionero, ya que estaba duro al 100 de nuevo)
- Aja, un show privado, ¿cómo? ¿Un bailecito y ya? (cerrando los ojos y gimiendo sexymente mientras la penetraba)
- Pues podría ser… pero, pensaba en más que eso, mira, te lo voy a decir sin tanto tapujo. (le decía al oído mientras la penetraba y gemía suavemente para ella)
- Mk yo se con qué me vas a salir jaja
- Pues si ya sabes, me la pones más fácil amor, quiero que te lo cojas, que le enseñes a coger una hembra como tú, que su primera experiencia sea con mi hembra.
Luego de escuchar como le pedía que se tirara a mi primito de 18, al parecer le hizo tener un orgasmo muy brusco luego de terminar de escuchar mi proposición, quizá aún estaba sensible de los primeros orgasmos anteriores, o la suma de ambas cosas, el caso es que su cuerpo reacciono a la idea de comerse ese pollito de casi la mitad de su edad y tamaño.
Posterior a eso, platicamos ya un poco más calmados la idea, y decidimos armar casi una “película porno”, en términos de ambientación para él.
La idea era comprar una nueva lencería para recibirlo, así que fuimos durante esa semana siguiente a un pantera Roja que queda cerca de Palmetto plaza, miramos opciones y nos decantamos por un conjuntico de “Maid”, traía unas medias altas de malla negra amplia, con un resorte en encaje blanco, una tanga de las que me fascinan, pequeña y corta adelante y un triangulito negro atrás, una “falda” transparente con delantal frontal, que solo tapaba levemente el panty, dejando sus enormes piernas y nalgas lujuriosas casi al descubierto; por último, unas muñequeras de adorno, su gorrito de sirvienta clásico y un top transparente para los pechos, que como mencione, eran bastante planitos, pero que compensaba enormemente su culo.
Finalmente, todo ese conjunto fue acompañado con unos tacones altos que ya tenía, con los que le pedía salir constantemente con migo, ya que como bien saben, los tacones altos embellecen la sensualidad de las mujeres, lo que sumado a sus 1.75 de estatura, le daban casi 1.80 de altura, su culo se veía simplemente precioso vistiendo esa tanguita apenas tapada por la faldita y el delantal.
Bien, ahora tocaba contarle la idea a Daniel, cosa que fue bastante sencilla como podría esperarse.
Ya en mi casa, le llame y le invite a comer salchipapita, en medio de la conversación casual y convencional le toque el tema:
- Pri, cumplís año la semana que viene, no? ¿Qué día?
- Jaja si mk, cumplo 18 ya, el sábado. ¿Por?
- Ah bueno, menos mal, lo que pasa es que estuve hablando con sara de eso, te acordas de ella, obviamente, ¿no?
- Si, claro que me acuerdo, me hiciste pasar pena con ella el que día en la finca.
- Jaja si, la misma, bueno mk, lo que pasa es que ya sé que te voy a dar de regalo.
- ¿Que? Nooo mk no te vas a poner en esas con ella, que pena.
- Na, esas bobadas, mi regalo va a ser ella.
- … ella? ¿Como así? (me miro extrañado, pero con cierta vergüenza, quizá entendía a qué me refería, pero era incrédulo aun)
- Pues mk, así como suena, te la voy a prestar una tarde, para que culeen.
- Jaja este man tan bobo, como se te ocurre, me estas jodiendo, ¿verdad?
- No, es enserio, yo sé que más de una vez le has visto el culo a escondidas, y ese día en la finca lo comprobamos ella y yo.
- No, pero veni, ¿es enserio?
- Que si hombre, no le des más vueltas al asunto, el próximo sábado arrímate a mi casa, que vamos a ir juntos al apartamento de ella, obviamente van a haber algunas reglas, pero pues ella es mi hembra, y como mi hembra, va a hacer lo que yo le diga; además, vos no le sos indiferente, ella piensa que sos tiernito.
- Pero yo tengo novia mk, jaja (muy apenado, pero completamente metido en el cuento)
- Y? mk no va a ser ni tu primer, ni tu ultima mujer, además, le vas a sacar el cuerpo a sara?
Adelantando un poco más esa conversación, que inicio siendo algo incomoda al principio, rápidamente se volvió una charla hot, le mostré un par de fotos de sara vistiendo tanguitas y un uniforme de colegiala que solía usar conmigo.
Esa noche llamé a sara y le conté que todo había salido bien y que ese sábado estaríamos allí masomenos a las 12pm, que se preparara y estuviera lista, recordando el “libreto”.
1 comentario - Le preste mi novia a mi primito virgen PARTE 1
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