Cuerneando a mi marido 4

Cuerneando a mi marido 4

Pasó más tarde Miguel, por casa, me pidió mi numero de teléfono, me dijo que nos veíamos a dos cuadras, el tenía un auto viejo, íbamos en su auto, me fui a bañar, me puse la ropa que él me regalo y el vestido corto, que está un poco viejo, me dio tristeza tener que ponerme ese vestido, pero no tenía otro, solo pantalones viejos y ropa gastada. Subí a su auto y fuimos directo al hotel, me estuvo diciendo en el viaje que había hablado en el restaurante y que podía empezar a trabajar en dos meses si lo deseaba, me dio una alegría enorme, cuando entramos al cuarto del hotel empezamos a besarnos, me acariciaba por todo el cuerpo, me sacó el vestido y quedé solo en ropa interior, pocas veces había ido a un hotel, me maravillaba verme en el espejo que tenía en el techo, se acostó en la cama y con la ropa interior me acomodé sobre él nos besamos y acariciamos, corrí mi tanga a un lado, lo iba a montar pero, se quería poner un forro primero, solía cuidarse, se lo puso y ahora si la fui metiendo despacito en mi cosita, me encantó sentirlo adentro de mí, me encantaba su panza, era bastante panzón, me acomodé sobre él y empecé a mover mi cadera, el me agarraba fuerte de la cola, pero me dejaba mover a mi gusto, estuve un montón haciéndolo y cuando me sentí cerca de llegar le di mis pechos para que los chupe, Le fui pidiendo que los mordisqueara, nunca lo había hecho, pero me di cuenta que me encantaba que me doliera un poco. Acabé y caí sobre él besándolo y acariciándolo. Después me puso de perrito, lo sentí entrar desde atrás me agarraba fuerte de la cintura, me empezó a cachetear el culo y me di cuenta que me encantaba también, no suelo hacerlo con mi marido y descubría que era algo que me calentaba un montón.
-Peguemé Miguel… soy una nena mala…
Me cacheteaba duro, se veía que también lo calentaba,
-Sos una delicia pendeja… - su dedo gordo empezó a jugar por mi ogetito y me encantó, lo mojó bien y mientras me daba duro metió su dedo gordo en mi culito, otra vez volví a acabar, esta vez grite bien fuerte, era la primera vez que sentía que podía expresarme sin preocuparme por vecinos, parientes u otra gente que estuviera cerca, se salió un poco para descansar todavía no había llegado. Apoyé mi cabeza sobre su pecho, lo acariciaba y lo besaba.
-Que lindo me cogio Miguel…
-Todavía no terminamos preciosa…
-Me gustaría sentir su peso arriba mio…
Me acosté y vino a montarme, me calentaba un montón, todo en él me gustaba, otra vez mordía bastante duro mis pezones, me di cuenta por primera vez que me encantaba, llevó sus manos a mi culo, separando los glúteos metió uno y después dos dedos me cogía con ellos mientras me daba duro por delante
-Que cerradito tenes el culo…
-Mi marido dice que es sucio por atrás…
-Y vos..
No le contesté nada, estuvo un rato más y se salió de mi, me puso de costado y se ubico a mi espalda, me estuvo chupando un montón por atrás, después se acomodó, paso su brazó por debajo de mi, me pellizcaba los pezones y de a poco jugaba con su cosa en la puerta de mi culito.
-Agarralo y métetelo vos…
-Me va a doler…?
-Parece que te gusta que te duela…
Su mano paso de apretarme los pezones a apretarme el cuello, estaba loca de caliente, la fui metiendo de a poco en mi culo, solo la cabeza, era la primera vez que lo hacía por ahí, el se quedó quieto, giré la cabeza para besarlo, su mano otra vez fue a mis pezones, su pija empezó a ganar terreno, en un momento lo sentí chocar su pelvis contra mi culo.
-La tengo toda adentro…?
-Te gusta…
-Me encanta…
Empezó un bombeo que fue subiendo de intensidad,
-Lastima que tenga forro… me gustaría sentir como es que me llenen la cola…
Se salió de mi, se sacó el forro y volvió a penetrarme, me encantó sentirlo así, y era la primera vez que lo hacía asi.
-Me gustaría de perrita… y que me cachetee los glúteos Miguel…
Y así lo hicimos, estuvo un montón más, cuando acabó cayo con todo su peso sobre mi, quedamos acostados en la cama, sus manos apretando mis pezones, mi cara girada besándolo.
Él se acostó otra vez boca arriba y volví a apoyarme en su pecho, besándonos y acariciándonos.
-En serio nunca lo hiciste por atrás…
-Me moría de ganas…
-Te gustó…
-Me encantó Miguel…
Nos fuimos a bañar juntos, le enjaboné su pija que no se ponía dura del todo, la enjuague y se la chupe de rodillas delante de él. No se le puso dura del todo, pero igual en un momento me dio su corrida en la boca, esta vez no la escupí, primero se la mostré, después aunque me dio un poco de asco la tragué, volvió a besarme y a acariciarme apretándome contra él.
Cuando volvíamos en el auto iba acariciándome los muslos, llegaba hasta mi cosita, y volvía a bajar, paramos a dos cuadras de casa, nos estuvimos besando un montón, me acarició por todos lados, él se iba directo a su trabajo, me bajé del auto, me sentía relajada y feliz.
En casa me puse la ropa interior vieja y me acosté en la cama sólo en ropa interior, me quedé dormida. Mi marido llegó y me preguntó por la comida, le dije que me sentía mal, que estuve toda la tarde tirada en la cama. Me levanté y fui a comprar algo para cocinar, cuando volví estaba mirando fútbol, otra de sus pasiones, le preparé la comida, ceno con vino, al rato estaba roncando.

3 comentarios - Cuerneando a mi marido 4

parejacba16 +2
Muy bueno. Mi esposa me gorrea así también
Si-Nombre
Waaaaaaaaooooooooooo sin muchas palabras , creo que este marido esta desesperado por que le sigran creciendo esa cornamenta de manera monumental....
Ahora amigo mio por favor no nos dejes a medio camino siguiente capitulo y mil gracias por compartir