La Milf de mi trabajo

Hace un par de meses termine por fin mi carrera universitaria, megradué de la carrera informática y como suele ser en esta áreaencontrar trabajo es algo muy sencillo, rápidamente encontré miprimer trabajo en una empresa de venta de electrodomésticos, yotrabajaba en las oficinas administrativas del área de sistemas, eltrabajo era algo aburrido y tenia algunos compañeros, la mayoría deellos hombres con los que solía jugar y platicar. Las primerassemanas no hubo nada interesante, tampoco interactuaba mucho con lasotras áreas, simplemente me dedicaba a saludara a todos cuando losencontraba en los pasillos, un “buenos días” y “buenas tardes”era lo que se decía y se contestaba.


Un día mientras ibade salida a la tienda por uno de los pasillos del edificio, por logeneral a esa hora no había nadie fuera de sus oficinas, pero enlugar de encontrar con el pasillo vació, al otro lado de este vi auna mujer, era alta, pelo teñido de rubio, corto hasta los hombros,piel bronceada, parecía tener unos 40 años, venia vestida depantalón, saco y tacones, pero aun así se le podía notar unasgrandes caderas y un busto pronunciado, caminamos directamente uno alotro, nuestras vistas se cruzaron y cuando cruzamos nuestros caminosella con un tono amable y dulce solo dijo “hola”, yo le respondíde la misma forma, jamas la había visto en el edificio, pero se mehizo súper atractiva, cuando llegue al final del pasillo voltee aver si ella seguía ahí y para mi sorpresa ella también habíavolteado, solo vi como son su mano se despidió de mi y se metió asu oficina.


Los díasposteriores me la encontraba con mas frecuencia en los pasillos,siempre la saludaba y le sonreía y ella hacia lo mismo, a vecesvenia sola y otras acompañada de sus compañeros de oficina, hastaque un día me la encontré de nuevo, ella iba saliendo del bañocuando casi chocamos, mi vista quedo a la altura de su busto.


-Upsi , hola, oye sivas al baño vamos a tener que ir al del otro lado del edifico porque estos no tienen agua. - me dijo mientras mi vista se fijo en suescote, cuando termino reaccione inmediatamente.


-Claro, aun que nose donde quedan
-Vamos yo tambiéntengo que ir, te acompaño.


Comenzamos a caminary durante unos instantes en silencio, hasta que ella decidióromperlo.


-Tu eres nuevo aquí¿no?
-Si entre hace unmes mas o menos
-Que bien me llamoLisette
-Hugo – leconteste mientras le extendía la mano
-Pues mucho gustoHugo – me dijo mientras estrechaba mi mano
-¿Tu en que áreatrabajas? - le pregunte intentando continuar la conversación – esque siempre veo que vas vas a todas partes y entras y sales de lasoficinas.
-Soy parte derecursos humanos, a mi me mandan a mediar los conflictos entre laspersonas cuando es necesario, por eso siempre ando de aquí para aya.
-Wow, no sabia queteníamos eso aquí, debe de ser cansado.
-Un poco pero meayuda a mantenerme en forma – me dijo con un tono sarcástico.
-Si se nota – leconteste, ella solo me miro de reojo y me sonrrio.


Continuamos hablandode nuestros trabajos, le conté como había llegado ahí y que era loque hacia, los escasos 5 minutos que estuvimos platicando en lo quellegábamos al los baños fueron bastante agradables, ella parecíainteresada en lo que le contaba y yo estaba contento de por fin tenercon quien hablar. Al llegar al baño cada uno entro a lo suyo, alsalir del baño para mi sorpresa ella estaba ahí, recargada sobre lapared esperándome.
-¿Todo bien? - mepregunto de forma burlona
- Todo bien y tu¿que tal?
- Excelente, peroquise esperarte para que no pierdas de regreso – me dijo paradespués guiñarme un ojo. - La verdad también quería pedirte tunumero, por si algún día se ocupo ayuda con mi computadora.
- Claro y tu mepasas el tuyo por si me dan ganas de golpear a mis compañeros, jaja– le conteste
- Se ve que pegasduro
- Cuando la gente selo merece si


Ella me paso sunumero y yo el mio, de regreso a nuestra área seguimos hablando demuchas otras cosas ademas del trabajo, al llegar al pasillo donde nosseparábamos se detuvo frente a mi y me dijo:


- Bueno si ocupas iral baño de nuevo, tienes mi numero – me dijo bromeando
- Si quierescompañía para ir tienes el mio – le conteste


Se agacho un poco ynos despedimos de beso en el cachete, se dio media vuelta y se fue,ese día llevaba una falda entallada, con lo que se podía ver comosus caderas se balanceaban cuando camina y si gran trasero se marcabaa la perfección.


Esa noche recibí unmensaje de ella y aparir de ahí comenzamos a conversar mas seguido,a veces solo por mensaje y otras ocasiones nos quedábamos platicandocuando nos encontrábamos por los pasillos, en a penas dos semanashabíamos comenzado a hablar muy íntimamente, de su esposo y sutrabajo, las cosas que le gustaban y lo que pensaba.


- Es desesperante irpor la calle y no poder comprarte lo que se te antoja – le comencéa contar – aun no me pagan y me desespera mucho


- Me imagino, ¿ quees lo que se antoja? - me pregunto


- Un sushi que estapor el trabajo


- Que te parece simañana vamos a comer – La idea de ir a comer con ella me gustaba,pero no podía


- Como si aun no mepagan, si tuviera dinero iría con mucho gusto


- Yo invito esta vezy tu la próxima cuando te paguen. - Inmediatamente acepte - Vale,mañana te espero a la hora de la comida, nos vamos en mi auto.


Al día siguientejusto a la hora de la comida salí al estacionamiento, ahí estabaella esperándome, llevaba una blusa verde, sin bracier, y una faldade flores bastante holgada que le llegaba hasta los tobillos, sinembargo eso hacia que se notara aun mas su voluptuoso cuerpo. Encuanto me vio me saludo y cuando me acerque a ella me dio un besohaciendo que la mitad de sus labios rosaran con los míos. Eso meprendió un poco. Nos subimos al auto y nos dirigimos al sushi, encuento llegamos pedimos la comida, pero en lugar de sentar en unamesa ella pidió todo para llevar. Nuestra orden quedo en un par deminutos, nos regresamos al coche, ella comenzó a conducir, pero enlugar de regresar al trabajo como yo pensé que haríamos, tomo otraruta.


- ¿ A donde vamos?- le pregunte
- A un lugar mastranquilo para comer, la verdad quiero que estemos a solas


- Eso estaría bien– Le conteste tranquilamente, aunque por dentro estaba excitado, laforma en la que iba vestida, el beso de hace unos momentos y poderver como sus pezones se habían puesto duros me encantaba. - Asípodremos hablar tranquilamente


- Claro, hablar –me contesto mientras ponía su mano en mi pierna. - Solo que a ver situ novia no se enoja de que estemos solos.


- No creo, no tengonovia
- ¿Y eso?, penséque tendrías a una jovencita de tu edad a tu lado.
- Naa, la verdad lasprefiero mas grandes.


Ella seguíaconduciendo y en unos instantes nos encontrábamos fuera de lascalles, era un lugar bastante solitario, rodeado de pasto y arboles,ella estaciono su auto debajo de un árbol.


- Entonces te gustanmas grandes, ¿que tan grandes, como yo?.


Ella se me acercapoco a poco, me toma de el cabello y me planta un beso. Yo con una demis manos la toma de la pierna y poco a poco acerque mi mano hasta suentre pierna, cuando llegue a ese lugar ella tomo mi mano, la pasopor debajo de su falda y la volvió a colocar en su vagina por encimade su ropa interior. Comencé a masajear durante un rato hasta quesentí que su ropa estaba húmeda, me aparte de ella y ella seacomodo en su asiento, se subió completamente la falda y vi su ropainterior, en cachetero con encaje, color azul cielo, el cual seamoldaba perfectamente a sus gruesos muslos y su vagina, metí mimano en el interior de su ropa y comencé a masturbar la, ella solosoltaba pequeños gemidos, con una se sus manos comenzó a tocar unode sus pechos y con la otra comenzó a desabrocharme el pantalón, yole ayude un poco a bajarme los pantalones y mi verga salioinmediatamente, dura y palpitante, ella se lamió la mano y comenzóa masturbarme. Ahí estábamos los dos, masturbándonos mutuamente,cada uno en su lugar, pero disfrutando de la misma forma – Un pocomas rápido, mmm así – me decía mientras la tocaba, en un momentoella comenzó a subir la velocidad y yo hice lo mismo, su vaginaestaba húmeda y mi verga toda babosa por el presemen, la velocidadcon la nos tocábamos era increíblemente, nuestra respiraciónaumento, ambos arquemos nuestras espaldas y no corrimos juntos, sivagina presionaba mis dedos y parte de mi semen callo en el vidrio,pero otra parte en su mano, ella agarro y lamió todo el semen que lehabía caído.


- Listo para lo quesigue
- Me encantaríapero se me esta poniendo flácido
- Eso dejámelo a mi


Se agacho y comenzó a chupármela, al agacharse quedo a la vista la grandiosa figura desu culo, el cual comencé a tocar, no podía subir su falda pero sipodía poner mi mano entre sus nalgas lo que parecía gustarle. Ellamientras seguía chupándomela, la lamia, besaba y succionaba, conuna de sus manos comenzó a acariciar mis testículos einmediatamente mi verga se puso dura, incluso mas dura que antes,sentía como si me fuera a explotar y tenia que liberar la presión.Ella se aparto en cuento noto mi erección – Esta listo – seaparto de mi, se subio la falda, se quito la ropa interior y con unpoco de trabajo se subió en sima de mi, primero comenzó a rosarcon su vagina mi pene mientras me daba besos, sentí como su vaginase volvió a mojar de inmediato, se levanto un poco y con su manopuso mi pene en la entrada de su vagina, la toma de su enorme culo yla jale lo mas fuerte pude hacia mi, si vagina estaba apretada y pudesentir todas su paredes. Ella comenzó a subir y a bajar, cada vezcon mas rapidez, sus nalgas chocaban con mis piernas, siguiósubiendo el ritmo hasta que sus tetas comenzaron a rebotar, ellagemía de placer, metí mi mano debajo de su blusa y comencé a jugarcon su teta, tocaba sus pezones, los pellizcaba y los jalaba, esoparecía excitarla mas, porque cuando lo hacia daba sentones masduros. Pasamos un buen rato haciendo eso.


- Mmm! Ya vas aterminar – Me decía con la respiración entrecortada.
- No aun no
- Pensé que noaguantarías mucho
- Es que quieroseguir


En ese momento algose apodero de mi, con una de mis manos metí uno de mis dedos en suvagina junto con mi verga y con mi pulgar comencé a masajear suclítoris, con la otra mano me agarre del soporte del auto y comencéa mover mi cadera, lo que hizo que las penetraciones fueran masfuertes y rápidas, al poco tiempo nuestros movimientos sesincronizaron, ella se agarro de mi cuello y se dejo caer hacia atrás– Ahh! Ahh! Si así, sigue te moviendo, ya casi acabo Ahh! Ahh! -sus gritos de places me excitaban mas, comencé a bombear mas rápidocon lo que ella se volvió loca, estoy seguro de que sus gritos secuchaban a metros del auto, pero no me importo, seguí haciéndolohasta que la escuche gritar – YA! Ahora! - en ese momento sentícomo su vagina apretó mi pene y comencé a venirme dentro de suvagina, estaba toda agitada, me miro a los ojos, me dio un beso y serecostó en sima de mi aun con mi pene dentro de ella. Ahí nosquedamos un rato descansando, ella acariciaba mi pelo y yo toda suespalda.


Después de eso nosvivimos a vestir, comimos mientras hablábamos y regresamos altrabajo, esa fue la primera de muchas aventuras.


Cualquier comentario, critica o recomendacion es bien venida (literal jsjs).

10 comentarios - La Milf de mi trabajo

Marucojs37 +1
Excelente relato! Espero q cuentes q paso después y como consejo solo dale una repasada antes de publicarlo hay palabra q están pegadas con otras
Lest47
Muy bueno. Van ptos
AldinGomez
muy bueno aunque no mecionaste si se los mamaste los senos o no yo lo hubiera hecho a mi me encantantan las milf y las gordibeunas con unos buenos senos para mamar y lamerle los pezones tu nadamas se os estiraste yo se los hubiera lamido , estirado y mordidio con la boca
AldinGomez
y un consejo pon fotos ese es un ben complemento aunque no sea ella
AldinGomez
una buena milf es ava adams vaya que si me gustaria una historia como la tuya con ella y la de mi foto es toda una milfgordibuena
Jaguar360
Muy buen relato, espero nos cuentes que paso después, si la sigues viendo o cuantas veces la cogiste
Jaguar360
Muy buen relato, espero nos cuentes que paso después, si la sigues viendo o cuantas veces la cogiste