Inicios en trío HMH y cuckold

Como les conté en mi relato anterior, después de dos años de wife swap entre mi ex y yo con mi primo Carlos y su esposa Rebeca mi relación con Claudia se termino y quede soltero. Mas o menos un año y medio de la separación me llego un día un mensaje de Carlos, era una foto de Rebe en cuatro con la concha bien mojada y un mensaje que decía “mira lo que me voy a comer”. Al principio no quise asumir que era ella porque Carlos también tenia sus ligues por fuera y pensé que podría ser una de esas y el simplemente estaba mostrándome su ultima conquista, entonces le respondí “que bien se ve eso!, buen provecho!” a lo que el respondió “queres un poco?”, yo le pregunté que quien era y el me dijo “Es Rebe”, me sorprendí porque desde que me había separado de Claudia no habíamos tocado el tema y honestamente yo pensé que nuestras aventuras habían terminado ahí, pero parece que ellos tenían algo mas en mente. Lo curioso es que esta vez fue el quien tuvo la idea y ella se apunto.
“En serio? Me compartes a tu esposa?” – “Claro, de por si ya te la has comido y además, quiero verla con los dos a ver que tal”. No tuve que pensarlo mucho, realmente disfrute nuestras noches de locura y claramente ellos también, yo sabia que a Rebeca le gustaba que yo me la cogiera, en especial que me le comiera la concha, me lo dijo mi ex una vez que hablaron de eso porque según Rebeca solo cuando yo se lo hacia se corría rico y sin mucho esfuerzo, yo me guarde esa información y desde entonces en nuestros encuentros posteriores siempre la dejaba temblando y toda corrida antes de siquiera penetrarla, por eso y tal vez porque pensé que a Carlos le llamaba la atención ser cornudo, una vez mas, serví de conejillo de indias para los experimentos de mi primo y su esposa, una posición que la verdad me agradaba mucho.
“Bueno, yo me apunto, nada mas que no tengo a nadie para que se nos una” – “No importa, nosotros queremos así, trio hmh”. “Oh, entiendo, ok, si ustedes quieren así por mi no hay problema” Yo ya había tenido un trio antes de casarme pero fue con dos chicas y a pesar de haber tenido la opción cuando estábamos haciendo wife swap nunca hicimos un trio como tal o de darle los dos a una de las chicas, siempre era que ellas dos se hacían lo que querían entre si y nosotros nos cogíamos a la esposa del otro, ellas eran las que mandaban y la verdad tampoco vimos la necesidad, ya era de por si delicioso! Entonces, esta nueva posibilidad me causaba mucha curiosidad, vería una faceta de Rebeca que no había visto antes!
“Estas ocupado?” – “No, estoy en casa viendo tele” – “Podemos llegar?” Oh, me dije, esto es ya! - “Claro, trae unas cervezas para tomarnos acá que no tengo nada” – “Ok, llegamos en unos minutos” Sentí un poco de nervios para ser honesto pero estaba emocionado también, así que me fui y me di una ducha rápida y me prepare para su llegada. Como a los 30 min llegaron, les di la bienvenida, nos abrimos las cervezas y empezamos a conversar un rato, Carlos me dijo que estaban pensando que querían hacer algo diferente y que el sugirió que hiciéramos un trio conmigo y que a Rebe le gusto la idea, que él lo había estado pensando y que como me tenía confianza le dijo a Rebe que yo era la única persona con quien el estaría cómodo haciéndolo y que ella sentía lo mismo. Yo les dije que ya teníamos historia y que obviamente todo iba a quedar entre los tres así que todo en confianza. Rebe traía un vestido y se había maquillado un poco, se veía muy bien, el vestido tenia un escote bonito y le acentuaba el trasero, el cual, como les comente en el relato anterior, era bastante grande.
“Veni amor, enseñale a Leo lo que te compraste” le dijo Carlos a Rebe, ella se levanto de la silla, me miro a los ojos y se subió el vestido lentamente dejando al descubierto un exquisito traje de lencería de encaje negro, se veía deliciosa la puta de Rebe! Y yo solo pensé en mis adentros, estos dos han estado hablando de esto ya hace días, mira que venir así de preparados!, mis sospechas fueron aclaradas casi inmediatamente, Rebe seguía viéndome a los ojos y me dijo, “me lo compre pensando en este día”. Sentí como un cosquilleo en la base de los huevos cuando me lo dijo, y mi pene empezó a levantarse. Rebe se le acerco a Carlos, el se levanto de la silla y comenzó a besar a su esposa y a tocarla toda, ella le empezó a quitar la ropa mientras yo observaba la escena con mi cerveza en la mano, él había quedado en boxer y al igual que yo, ya estaba a mil. Rebe entonces volvió su atención hacia mi y me hizo lo mismo, Carlos me decía “agárrale el culo, mira que rico que lo tiene” y mis manos volaban agarrando ese culo tan rico que tiene Rebe, ella me besaba y gemía suavecito, yo le empecé a besar las tetas y ahí empezó a subir el volumen de sus gemidos, Carlos se le puso por detrás y le empezó a besar el cuello, Rebe bajo sus manos y me agarro el pene e hizo lo mismo con Carlos y nos empezó a pajear, yo estaba soltando liquido de mi pija así que ella no tuvo problema para pajearme, me miro y se sonrió y me dijo ”como que a alguien le gusta mucho esto, no?” Yo volví a sumergir mi cabeza en sus tetas mientras que Carlos le tocaba la panocha desde atrás, ella estaba super mojada, Carlos saco la mano de las bragas de su mujer y me la enseño, Rebe estaba hecha un chorro de jugos vaginales!
Así con su mano en nuestras pijas nos llevo a mi cuarto, al lado de la cama se puso de rodillas y procedió a mamarnos a los dos, dos veces el, dos veces yo y siguió ese ritmo mientras jugaba con nuestras bolas, Carlos le agarraba la cabeza violentamente y le metía la pija hasta casi el fondo, y yo con el permiso suyo hacia lo mismo, estaba toda llena de babas y jugos, una verdadera puta! Yo tuve que contenerme lo más que pude porque estaba muy excitado, poco me falto para llenarle la boca de leche. Rebe se levanto y se acostó en la cama, Carlos le volvió a poner la pija en la boca y yo aproveche la oportunidad para comerme esa concha, le quite las bragas y ella abrió las piernas porque ya sabia lo que se venía, esa panocha estaba regando jugos, las bragas estaban empapadas y tenia hasta el culo todo mojado, yo me volví loco al ver eso y procedí a explorar y limpiar con mi lengua todos esos jugos, Rebe se revolcaba de placer y le mamaba la verga mar duro a Carlos mientras el le decía que era una puta y que eso era lo que ella quería, tener a dos machos cogiéndosela y ella le respondía que si entre gemidos y gags
No me tomo mucho tiempo para hacerla venirse, Rebe tuvo que parar de mamar a Carlos porque el orgasmo había sido tan intenso que jadeaba y le temblaban las piernas, yo no la soltaba y le seguía mamando la concha decidido a tragarme todos sus jugos hasta que ella me pidió clemencia y pare para darle un momento a que tomara un poco de aire. Me levante de donde estaba y vi que Carlos le daba besos muy ricos a Rebe y le acariciaba el pelo como felicitando a su perra por lo que acababa de hacer, el le susurraba cosas al iodo y ella asentía, yo mientras le acariciaba las piernas y les daba besos. Fue entonces cuando Carlos me dijo “te la queres coger primero?” y yo sin chistar le dije que si estaba bien con el que con gusto lo haría, saque un condón de mi mesa de noche y me lo puse, mientras tanto el le volvió a poner la pija en la boca a ella. Me acerque de nuevo y ella abrió las piernas, mire esa conchita tan rica y le frote el clítoris con la cabeza de mi pene antes de meterlo, ella se estremecía y gemía, todavía estaba sensible del orgasmo anterior. Le hice lo mismo un par de veces y entonces ella me agarro la polla y se la puso en la entrada de la concha, como diciendo “dámela ya” y yo como buen caballero la complací, ella soltó un gemido cuando sintió mi embestida y Carlos se sonrió, yo empecé a darle subiendo poco a poco la intensidad, ella gemía y de cuando en cuando se sacaba la pija de la boca para pedirme que le diera duro y hacia unos gestos de placer que me ponían como loco, yo le agarraba las tetas mientras le daba y ella respondía con mas gemidos, ya en ese momento yo estaba super caliente y había perdido un poco las inhibiciones así que me tomaba la libertad de apretarle el culo y de pegarle en las tetas y le decía que si eso le gustaba, ella respondía que si entre jadeos. Saque la polla y le di una nalgada, la empuje hacia adelante y le dije “ve con tu marido que te coja también”, ella se dio la vuelta y se puso en cuatro, Carlos no se anduvo con preámbulos, la empalo de una y comenzó a darle por atrás mientras le daba nalgadas y le halaba el pelo, ella gritaba de placer y le respondía que ella era su puta y que sentía muy rico. El la levanto, le agarro los brazos y se los puso detrás y yo aproveche para chuparle las tetas, ella me halaba el pelo y me empujaba la cara hacia sus tetas como pidiendo me que se las chupara fuerte, yo entendí la señal y le empecé a dar mordiscos a los pezones y ella ponía los ojos en blanco del placer que sentía.
Carlos paro un momento para tomar aire pero yo estaba descansado así que me acosté en la cama y le dije que quería que me montara, ella se me monto y se metió la pija en su concha húmeda y empezó a hacerme una vaquera tremenda, Carlos volvió, se subió a la cama y le dio pija en la boca mientras ella me seguía montando, él ya estaba a punto de acabar y ella lo noto así que con mi pija adentro paro de moverse y procedió a sacarle la leche a su marido hasta que le quedo la boca llena y la puta se la trago toda, le escurrió la pija a Carlos como para no dejar ni una gota! Carlos ya cansado y satisfecho se bajo de la cama y fue a la cocina, volvió enseguida con una cerveza y se sentó a vernos coger, Rebe me miro y me dijo “me falta la tuya” y comenzó a moverse de nuevo pero esta vez parecía una perra en celo, me miraba y se sonreía como pensando que me iba a hacer venir, yo percibí esa energía y le dije “con que eso quieres?” y levante las piernas a modo que pudiera empujar mas fuerte, le agarre el culo y comencé a darle sin misericordia, ahí ya no se sonreía sino que empezó a gemir y a gritar mientras mi pija se hundía en su concha y mis huevos golpeaban su culo en cada embestida, Carlos veía la escena y me decía que le diera mas duro, que ella era una puta que merecía ser castigada y yo seguía dándole y dándole hasta que escuche un gemido profundo y la vi como se retorció, había acabado otra vez, pero no la deje bajarse ni tomar un descanso, yo también estaba a punto! Estaba ella en lo último de su orgasmo cuando yo solté un gemido que me salió desde el alma y me deje ir, acabe con mi pija hasta el fondo de ella y cuando pare de venirme ella se me acostó en el pecho mientras los dos tratábamos de recobrar el aliento. Que cogida tan deliciosa!
Rebe se bajó y cuando salió mi pija nada más vi el montón de leche en el condón, realmente había acabado un montón! Ella se fue al baño y yo me fui por una cerveza y me puse el boxer, me senté al lado de Carlos que había observado toda esa ultima escena en silencio y el me pregunto que como me había parecido, yo le dije que Rebe es un manjar de los dioses y que el era suertudo de tener una mujer tan rica y loca para el sexo. El me dijo que habían estado teniendo problemas de monotonía en su relación y que si estaba bien conmigo ellos querían tener la opción de romper la rutina de vez en cuando conmigo. Yo les dije que si, que mientras fuera una posibilidad que estaría gustoso de hacerlo. Rebe salió del baño ya vestida y le dio un beso a Carlos. Me volvió a ver y me dijo que eso estuvo muy rico, yo le dije que también creía lo mismo y que Carlos me había comentado de la propuesta que tenían. A los pocos minutos después Carlos se vistió y se fueron. Esa fue la primera de muchas veces que lo hicimos, a veces me llamaban a media noche para coger y yo les decía que si y llegaban, mi disponibilidad funcionó de maravilla ya que siempre eran ellos los que lo proponían. Ya después empecé en una relación y les dije que tenía que ponerle pausa a nuestros encuentros, mi pareja no es de mente abierta y no es tan dada a ese tipo de aventuras. Al menos se que si un día quiero portarme mal, ellos están ahí fijos a darme esa opción. Lastimosamente Carlos era muy abierto para muchas cosas pero nunca aceptó que yo le acabara en la boca a ella o que le diera por el culo, lo cual estaba bien, es su esposa y él puede poner reglas. Tampoco aceptó tomar fotos ni videos, así que el recuerdo solo vive en mi memoria.
Espero les agrade este relato, como dije antes estas son mis experiencias personales.

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