Acá, no hay fotos. No voy a hablar de tamaño de tetas, ni de culos, ni de conchas rosadas, o negras, o peludas; ni de fetiches. Simplemente voy a contar algo, y que la imaginación vuele.
Me dormí y tuve un sueño:
Me ví en una cama, en el mismo sueño me desperté, abrí los ojos y ví a una mujer muy sensual, que me miró a los ojos, se acercó a mi oído, y me susurró: "te estaba esperando". Después me besó el cuello y fue bajando con su lengua hasta abajo y comenzó a practicarme sexo oral, me decía "¿así te gusta pendejo?", Pero yo no podía hablar, las sensaciones me embargaban todo el cuerpo desde el tobillo hasta la cabeza. Despues ella, cada momento mas sensual y mas sublime, me dijo: ¿Te vas a quedar acostado toda la noche? En ese momento la miré a los ojos, me levanté, la agarré de los brazos y la arrojé a la cama, le agarré el rostro y le dije al oído:¡" Agarrate de la cama, mujer"!
Luego la bese, le agarré su lengua con mis labios, proseguí recorriendo con mi lengua todo su cuerpo, que estaba caliente y con la piel de erizada, le bese el pecho, la pelvis, la entrepierna, bien suave y con intensidad en alta a cada segundo. Mi pene seguía mojado, le chupé el clítoris, ella me agarró con las piernas, y gemíó bien rico, agarraba mi cabello con sus manos, cada momento más fuerte, luego introduje un dedo en su vagina, luego 2, su clítoris se hinchaba cada vez más, sus gemidos iban en aumento, y luego 3, su vagina estaba cada vez más mojada. Luego la agarré de los brazos, la di vuelta, sus rodillas, sus pies y sus manos estaban apoyados en la cama, su espalda estaba levantada, mientras le acaricié las piernas le dí unos mordisquitos en su cola, e introduje mi pene en su mojada vagina, y tuvimos sexo duro, le hablaba al oído y la penetré hasta que su vagina explotó, y el flujo comenzó a bajar por sus piernas. Cuando iba a llegar el clímax, me desperté.
Me dormí y tuve un sueño:
Me ví en una cama, en el mismo sueño me desperté, abrí los ojos y ví a una mujer muy sensual, que me miró a los ojos, se acercó a mi oído, y me susurró: "te estaba esperando". Después me besó el cuello y fue bajando con su lengua hasta abajo y comenzó a practicarme sexo oral, me decía "¿así te gusta pendejo?", Pero yo no podía hablar, las sensaciones me embargaban todo el cuerpo desde el tobillo hasta la cabeza. Despues ella, cada momento mas sensual y mas sublime, me dijo: ¿Te vas a quedar acostado toda la noche? En ese momento la miré a los ojos, me levanté, la agarré de los brazos y la arrojé a la cama, le agarré el rostro y le dije al oído:¡" Agarrate de la cama, mujer"!
Luego la bese, le agarré su lengua con mis labios, proseguí recorriendo con mi lengua todo su cuerpo, que estaba caliente y con la piel de erizada, le bese el pecho, la pelvis, la entrepierna, bien suave y con intensidad en alta a cada segundo. Mi pene seguía mojado, le chupé el clítoris, ella me agarró con las piernas, y gemíó bien rico, agarraba mi cabello con sus manos, cada momento más fuerte, luego introduje un dedo en su vagina, luego 2, su clítoris se hinchaba cada vez más, sus gemidos iban en aumento, y luego 3, su vagina estaba cada vez más mojada. Luego la agarré de los brazos, la di vuelta, sus rodillas, sus pies y sus manos estaban apoyados en la cama, su espalda estaba levantada, mientras le acaricié las piernas le dí unos mordisquitos en su cola, e introduje mi pene en su mojada vagina, y tuvimos sexo duro, le hablaba al oído y la penetré hasta que su vagina explotó, y el flujo comenzó a bajar por sus piernas. Cuando iba a llegar el clímax, me desperté.
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