8 -Miércoles-
Ese miércoles a la mañana, Santiago se levantó temprano como decostumbre y se fue a lo de Alejandra, su profesora particular dematemáticas, ese día hizo una excepción en el horario porque si noiban a perder muchas horas de clases. Cuando Santiago llega, lecomenta lo que a la tarde iba a suceder en su casa, nada más ni nadamenos tres mujeres con mucha experiencia van a estar en su casadeseosas de buen sexo. Lo cual un poco puso celosa a Alejandra ya queella era quien deseaba estar con tres mujeres a la vez o al menosdos. Pero dejó de lado sus malos sentimientos para poder ayudar a sualumno.
- En este caso Santi, te aconsejo que lo hagas lo mas calmadoposible, cuando ves muchas mujeres juntas te parece que tenes quesatisfacer a todas pero si sos suave y aplicas lo que te dijedeberías poder hacer un buen trabajo.
- Lo voy a tener en cuenta.
La clase siguió como de costumbre, Alejandra le explicó algunascuestiones hicieron los ejercicios correspondientes y Santiago saliópara su casa. En su cabeza ya había hasta planificado todo y como loiba a hacer. En su casa, come algo liviano porque los nervioscomenzaban a hacer mella en su cuerpo, una mezcla de nerviosismo yansiedad se estaban apoderando de él. Caminaba de la cocina alliving, subía las escaleras, baja, prendía la tele, la computadora,su teléfono pero el tiempo no pasaba más.
Del otro lado, las tres mujeres esa mañana se pusieron de acuerdopara ir las tres juntas en un solo auto. Dolores la mayor de lastres, de pelo corto, canas, tetas algo caídas pero naturales y unculo grande que la endiosaba, casada desde hacía 20 años, pasó abuscarlas una por una a las demás. Se subió al auto, prendió elaire acondicionado pero nada frenaba tanto calor. Primero pasó abuscar a Isabel, la mas joven del grupo, hacía muy poco que cumpliólos 50 años, separada dos veces en ambas ocasiones los maridos laencontraron con otro hombre, tenía buenas caderas, amante delgimnasio y jugar al tenis, piernas tonificadas y pechos medianos.Cuando Isabel se subió al auto, la pregunta no tardó en llegar, quéintriga me genera todo esto, será cierto lo de Mónica y Carmen? Erauna pregunta que atravesó todo el viaje y más cuando fueron abuscar a Concepción, la segunda más joven del grupo, que tambiénse había separado hacía poco tiempo atrás, en este caso ella erala cornuda. Concepción era más bien tímida, pero a la hora delsexo sabía lo que había poner, la mas rellenitas de todas, tetas,culo y piernas grandes, pero también la mas alta de todas, hacíaejercicios pero más le gustaba salir a caminar, de vez en cuando ibacon Mónica. Las tres se dirigían a la casa de Santiago sin sabercon lo que se iban a encontrar pero confiadas en lo que le habíandicho las amigas.
Cuando llegaron, Santiago trató de calmarse varias veces antes dellegar a la puerta y se miró al espejo cuatro o cinco veces para versi estaba bien peinado. Abrió la puerta, saludó una por una y lashizo entrar, les ofreció algo de beber y tanto Isabel comoConcepción le pidieron un vaso de whisky (necesitan juntar valor) yDolores solo una gaseosa, además de manejar ella iba solamente aver. Se sentaron en los sillones donde había gozado Carmenanteriormente, Isabel se sentó en un sillón individual, Dolores enla punta de un sillón de tres cuerpos, en el medio Santiago y en laotra punta Concepción. Para romper un poco el hielo, Isabel lepreguntó a Santiago cual de las tres le gustaba, respondiendo que lamas linda era Concepción a quien tenía al lado y que al escuchareso posó una mano sobre las piernas de Santiago. Este de curiosoquiso saber quien de ellas solamente iba a ver y Dolores levantó lamano pero sin quedarse atrás dijo que si le gustaba iba a probar,las otras dos mujeres se miraron y sonrieron. Isabel que era la másdescarada, y además el whisky ya empezaba a hacer su efectodeshinibidor, le preguntó a Santiago si las tres podían ver supene. Santiago aceptó, se paró, se bajó los pantalones y luego elcalzoncillo pero su pija no estaba dura aunque la cara de Concepciónlo decía todo, ya se la quería estar chupando y lamiendo. Despuésde eso Isabel le pide a Dolores que intercambien lugares, Isabel yaquería atacar pero estaba lejos, Dolores acepta y le cede el lugarde privilegio. Isabel abraza a Santiago y empieza a besarlo,Concepción del otro lado comienza a tocarle la pija y a masajearlelos huevos. Santiago pensaba que todo iba según lo planeado y en esemomento decidió que la primera en caer en su lengua sería Isabelmientras que Concepción se la estuviera chupando. Isabel con laansiedad que la precedía, empezó a desnudarse, Dolores miraba muyatenta a los movimientos de las dos mujeres. Concepción empieza amasturbarlo no sin antes humedecerse la mano para que la fricción nosea tanta y mientras Santiago le chupaba las tetas a Isabel,Concepción aprovechó y le empezó a chupar la pija a Santiago.
Dolores ya comenzaba a desear un poco más pero seguía mirando,Isabel ya estaba desnuda completamente y lo seguía desnudando aSantiago. Concepción se había sacado la remera y el corpiño y pusola pija de Santiago entre sus tetas enormes y seguía atenta lasituación de Santiago e Isabel. Pero también se daba vuelta ymiraba a Dolores y con la mirada la invitaba a que participara,Dolores se moría de ganas de chupar la pija de Santiago pero sefrenaba, era la única casada en esa casa. En el momento en queConcepción no paraba de chuparle la pija a Santiago, Isabel dice:“Chupame ya la concha”. Santiago se para, deja en el medio aIsabel que se abre de piernas y Concepción se sienta al lado deIsabel, se miran y sonríen, ambas estaban totalmente depiladas.
Como era costumbre ya, Santiago empieza lamiendo las piernas, despuésla ingle pero ahora jugaba un poco con la ansiedad de Isabel, leabrió las piernas a Concepción y jugaba con las dos, al punto queambas se reían de los nervios y de la excitación. El juego leempezó a gustar a Dolores que ya no tenía otra opción, comenzó adesnudarse. Santiago entrelazó las piernas de Isabel y Concepción,el roce de ambas le generaba mayor excitación, ambas nunca habíantenido relaciones sexuales con otras mujeres y ahora estaban ahítotalmente desnudas, gozando y pegadas una a otra, rozando loscuerpos. De tan cerca que estaban las tetas también se rozaban y nodejó más lugar a otras acciones, Concepción empezó a tocarle lastetas a Isabel y viceversa, todo ocurría mientras Santiago jugaba apasar la lengua por las piernas de las chicas. Después Isabel casisin pensarlo empezó a chuparle una de las tetas a Concepción, dealguna manera ya se habían olvidado de Santiago y estaban haciendosu propio juego. En ese mismo instante, comenzaron a besarse ySantiago desde abajo miraba atónito lo que pasaba, lo mismo sucedíacon Dolores, no lo podía creer y sacó su celular y empezó a grabartoda la situación. Santiago inteligentemente retrocedió un poco ydejó que siguieran libremente ambas comenzaron a abrazarse, atocarse, se seguían besando, era como que siempre existió unatensión sexual entre ambas que se estaba destapando. Santiago ya másatrás se quedó con Dolores, quien aprovechó la situación y empezóa besarlo con tanta fuerza que la lengua abarcaba toda la boca. Losentó y empezó a chuparle la pija de manera descontrolada, hacíatiempo que no lo hacía con su marido.
La imagen era, Isabel y Concepción descubriendo sus cuerpos desnudosy en el otro sillón sin poder creerlo Santiago que miraba todo yDolores que le chupaba la pija. Dolores que solo iba a ir a mirar, sesentó arriba de la pija de Santiago mirando a esta altura Isabel lechupaba la concha a Concepción. Dolores empezó a gemir pero noparecía perturbar en nada la conexión que había entre sus amigas.Dolores bajaba y subía lentamente, en un momento se frena y le hablaal oído al Santiago: “Vamos a sentarnos cerca de las chicas”.Ambos se pararon y Santiago se sentó en el único lugar disponible,arriba se sentó Dolores, al lado estaba Isabel en cuatro chupando laconcha de Concepción. Santiago estaba concentrado en no acabarquería seguir cogiendo toda la tarde pero al lado tenía la conchahermosa de Isabel toda depilada y arriba a Dolores que empezaba amanejar la situación. Pero, Dolores se frenó, miró la concha de suamiga, se inclinó un poco y empezó a chuparle la concha y el culo aIsabel. A esta ultima no le importó, todo lo contrario, pero pensabaque era Santiago y no Dolores, la sorpresa le gustó.
Santiago dejó de cogerla a Dolores, a ella no le importó en loabsoluto porque estaba concentrada chupándole la concha a Isabel.Santiago se sienta en el sillón individual y mientras miraba semasturbaba. Concepción al verlo, le hace señas para que vaya conella y le de su miembro en la boca. Luego de unos minutos, Isabel seda vuelta, se pone boca arriba para que Dolores pueda chupar mejor.Concepción se levanta, lo hace sentar a Santiago y se vuelve asentar arriba de él, pero ahora con la pija adentro de la concha queal mismo tiempo le tocaba las tetas a Isabel. Después de paso untiempo Isabel frena a Dolores, ambas se reincorporan y se sientan unaal lado de la otra, Concepción seguía cogiendo con Santiago perofrena, se para y le dice a Santiago “vinimos a que nos chupes laconcha”. Santiago la miraba, se para y la sienta en el sillónindividual, la recuesta y con las piernas abiertas comienza a hacersu arte. Apretaba y chupaba, Concepción se moría por dentro de laexcitación, temblaba. Las otras dos miraban, sin entender como enpoco tiempo Concepción gimiendo y gritando del placer. Santiagoapresuró un poco más los movimientos de su lengua hasta el puntojusto en donde Concepción le corre la cabeza y acaba. En esemomento, Isabel de alguna manera lo lleva a Santiago hacia su concha,lo arrastra y Santiago otra vez hizo lo suyo, en un movimiento hizoacabar también a Isabel. Las tres no lo podían creer y mientrasacababa Isabel, Dolores lo agarró se lo llevó a la concha y enmenos de cinco minutos también estaba acabando.
Isabel le dice a Santiago que a ella no la cogió, entonces Isabel sepuso en cuatro arriba del sillón y Santiago solo tuvo que poner sumiembro un poco adentro para que Isabel vuelva a acabar sin embargoen un movimiento brusco la metió hasta el fondo e Isabel gritó comonunca antes. Santiago ya no daba más, ya le dolían los huevos detanto aguantar, agarró a la primera que vio, Concepción, se hizouna paja arriba de sus tetas y acabó. Dolores que estaba observandola situación, se acercó y le chupó las tetas acabadas a su amiga.Isabel estaba exhausta tirada en el sillón tratando de recobrarfuerzas.
Los cuatro, se quedaron sentados hasta que pudieron recobrar fuerzas.De a una iban pasando al baño para limpiarse y cambiarse para actoseguido pedirle el numero de teléfono a Santiago quien se los diosin dudarlo, lo que había pasado y sentido esa tarde fue muyprometedora para él y para lo que podía seguir pasando. Las mujeresse despiden de Santiago y se suben al auto, ninguna decía nada, niuna mueca, solo se escuchaba el ruido del aire acondicionado nisiquiera la radio habían prendido. Era como que cada una recordabalo que había pasado, las imágenes de esa tarde invitaban a seguirde fiesta pero el cansancio y la adrenalina empezaron a hacer mellaen los cuerpos. Cuando llegaron a la casa de Concepción, la primeraen bajarse, se saludaron y ella se bajó del auto para ingresar a sucasa. Después de unos minutos, Isabel la mira a Dolores y le dice“Solamente venías a mirar no?” Las dos entran en un estado derisa permanente y Dolores no tuvo más que admitirlo, cuando seempezaron a besar Isabel y Concepción brotó algo desde adentro desu cuerpo que la hizo calentar a tal punto que la hizo participar sinpensarlo demasiado.
- Si, me gustó mucho. Me gustó también como me chupaste la conchapero es impresionante la lengua de Santiago, estas dos tenían razón.Creo que la semana que viene lo voy a traer a mi casa.
- Isabel, creo que nos vamos a tener que poner de acuerdo por que yoya me lo quería traer sentarme en el sillón del living de mi casa,desnudarme, abrir las piernas, sentar a mi marido enfrente y decirle “Aprendé, así se chupa la concha”.
Todo era risa entre ellas.
- A mi me gustó la concha de Concepción, vos sabes que desdesiempre le tuve ganas. Alguna que otra vez pasó algo pero no pasó amayores, nos dimos algunos besos y ya.
- No lo sabía.
Llegaron a la casa de Isabel, ella se bajó y entró a la casa.Dolores después de unos kilómetros también llegó a su casa. Lastres recordando esa tarde como inolvidable.
Ese miércoles a la mañana, Santiago se levantó temprano como decostumbre y se fue a lo de Alejandra, su profesora particular dematemáticas, ese día hizo una excepción en el horario porque si noiban a perder muchas horas de clases. Cuando Santiago llega, lecomenta lo que a la tarde iba a suceder en su casa, nada más ni nadamenos tres mujeres con mucha experiencia van a estar en su casadeseosas de buen sexo. Lo cual un poco puso celosa a Alejandra ya queella era quien deseaba estar con tres mujeres a la vez o al menosdos. Pero dejó de lado sus malos sentimientos para poder ayudar a sualumno.
- En este caso Santi, te aconsejo que lo hagas lo mas calmadoposible, cuando ves muchas mujeres juntas te parece que tenes quesatisfacer a todas pero si sos suave y aplicas lo que te dijedeberías poder hacer un buen trabajo.
- Lo voy a tener en cuenta.
La clase siguió como de costumbre, Alejandra le explicó algunascuestiones hicieron los ejercicios correspondientes y Santiago saliópara su casa. En su cabeza ya había hasta planificado todo y como loiba a hacer. En su casa, come algo liviano porque los nervioscomenzaban a hacer mella en su cuerpo, una mezcla de nerviosismo yansiedad se estaban apoderando de él. Caminaba de la cocina alliving, subía las escaleras, baja, prendía la tele, la computadora,su teléfono pero el tiempo no pasaba más.
Del otro lado, las tres mujeres esa mañana se pusieron de acuerdopara ir las tres juntas en un solo auto. Dolores la mayor de lastres, de pelo corto, canas, tetas algo caídas pero naturales y unculo grande que la endiosaba, casada desde hacía 20 años, pasó abuscarlas una por una a las demás. Se subió al auto, prendió elaire acondicionado pero nada frenaba tanto calor. Primero pasó abuscar a Isabel, la mas joven del grupo, hacía muy poco que cumpliólos 50 años, separada dos veces en ambas ocasiones los maridos laencontraron con otro hombre, tenía buenas caderas, amante delgimnasio y jugar al tenis, piernas tonificadas y pechos medianos.Cuando Isabel se subió al auto, la pregunta no tardó en llegar, quéintriga me genera todo esto, será cierto lo de Mónica y Carmen? Erauna pregunta que atravesó todo el viaje y más cuando fueron abuscar a Concepción, la segunda más joven del grupo, que tambiénse había separado hacía poco tiempo atrás, en este caso ella erala cornuda. Concepción era más bien tímida, pero a la hora delsexo sabía lo que había poner, la mas rellenitas de todas, tetas,culo y piernas grandes, pero también la mas alta de todas, hacíaejercicios pero más le gustaba salir a caminar, de vez en cuando ibacon Mónica. Las tres se dirigían a la casa de Santiago sin sabercon lo que se iban a encontrar pero confiadas en lo que le habíandicho las amigas.
Cuando llegaron, Santiago trató de calmarse varias veces antes dellegar a la puerta y se miró al espejo cuatro o cinco veces para versi estaba bien peinado. Abrió la puerta, saludó una por una y lashizo entrar, les ofreció algo de beber y tanto Isabel comoConcepción le pidieron un vaso de whisky (necesitan juntar valor) yDolores solo una gaseosa, además de manejar ella iba solamente aver. Se sentaron en los sillones donde había gozado Carmenanteriormente, Isabel se sentó en un sillón individual, Dolores enla punta de un sillón de tres cuerpos, en el medio Santiago y en laotra punta Concepción. Para romper un poco el hielo, Isabel lepreguntó a Santiago cual de las tres le gustaba, respondiendo que lamas linda era Concepción a quien tenía al lado y que al escuchareso posó una mano sobre las piernas de Santiago. Este de curiosoquiso saber quien de ellas solamente iba a ver y Dolores levantó lamano pero sin quedarse atrás dijo que si le gustaba iba a probar,las otras dos mujeres se miraron y sonrieron. Isabel que era la másdescarada, y además el whisky ya empezaba a hacer su efectodeshinibidor, le preguntó a Santiago si las tres podían ver supene. Santiago aceptó, se paró, se bajó los pantalones y luego elcalzoncillo pero su pija no estaba dura aunque la cara de Concepciónlo decía todo, ya se la quería estar chupando y lamiendo. Despuésde eso Isabel le pide a Dolores que intercambien lugares, Isabel yaquería atacar pero estaba lejos, Dolores acepta y le cede el lugarde privilegio. Isabel abraza a Santiago y empieza a besarlo,Concepción del otro lado comienza a tocarle la pija y a masajearlelos huevos. Santiago pensaba que todo iba según lo planeado y en esemomento decidió que la primera en caer en su lengua sería Isabelmientras que Concepción se la estuviera chupando. Isabel con laansiedad que la precedía, empezó a desnudarse, Dolores miraba muyatenta a los movimientos de las dos mujeres. Concepción empieza amasturbarlo no sin antes humedecerse la mano para que la fricción nosea tanta y mientras Santiago le chupaba las tetas a Isabel,Concepción aprovechó y le empezó a chupar la pija a Santiago.
Dolores ya comenzaba a desear un poco más pero seguía mirando,Isabel ya estaba desnuda completamente y lo seguía desnudando aSantiago. Concepción se había sacado la remera y el corpiño y pusola pija de Santiago entre sus tetas enormes y seguía atenta lasituación de Santiago e Isabel. Pero también se daba vuelta ymiraba a Dolores y con la mirada la invitaba a que participara,Dolores se moría de ganas de chupar la pija de Santiago pero sefrenaba, era la única casada en esa casa. En el momento en queConcepción no paraba de chuparle la pija a Santiago, Isabel dice:“Chupame ya la concha”. Santiago se para, deja en el medio aIsabel que se abre de piernas y Concepción se sienta al lado deIsabel, se miran y sonríen, ambas estaban totalmente depiladas.
Como era costumbre ya, Santiago empieza lamiendo las piernas, despuésla ingle pero ahora jugaba un poco con la ansiedad de Isabel, leabrió las piernas a Concepción y jugaba con las dos, al punto queambas se reían de los nervios y de la excitación. El juego leempezó a gustar a Dolores que ya no tenía otra opción, comenzó adesnudarse. Santiago entrelazó las piernas de Isabel y Concepción,el roce de ambas le generaba mayor excitación, ambas nunca habíantenido relaciones sexuales con otras mujeres y ahora estaban ahítotalmente desnudas, gozando y pegadas una a otra, rozando loscuerpos. De tan cerca que estaban las tetas también se rozaban y nodejó más lugar a otras acciones, Concepción empezó a tocarle lastetas a Isabel y viceversa, todo ocurría mientras Santiago jugaba apasar la lengua por las piernas de las chicas. Después Isabel casisin pensarlo empezó a chuparle una de las tetas a Concepción, dealguna manera ya se habían olvidado de Santiago y estaban haciendosu propio juego. En ese mismo instante, comenzaron a besarse ySantiago desde abajo miraba atónito lo que pasaba, lo mismo sucedíacon Dolores, no lo podía creer y sacó su celular y empezó a grabartoda la situación. Santiago inteligentemente retrocedió un poco ydejó que siguieran libremente ambas comenzaron a abrazarse, atocarse, se seguían besando, era como que siempre existió unatensión sexual entre ambas que se estaba destapando. Santiago ya másatrás se quedó con Dolores, quien aprovechó la situación y empezóa besarlo con tanta fuerza que la lengua abarcaba toda la boca. Losentó y empezó a chuparle la pija de manera descontrolada, hacíatiempo que no lo hacía con su marido.
La imagen era, Isabel y Concepción descubriendo sus cuerpos desnudosy en el otro sillón sin poder creerlo Santiago que miraba todo yDolores que le chupaba la pija. Dolores que solo iba a ir a mirar, sesentó arriba de la pija de Santiago mirando a esta altura Isabel lechupaba la concha a Concepción. Dolores empezó a gemir pero noparecía perturbar en nada la conexión que había entre sus amigas.Dolores bajaba y subía lentamente, en un momento se frena y le hablaal oído al Santiago: “Vamos a sentarnos cerca de las chicas”.Ambos se pararon y Santiago se sentó en el único lugar disponible,arriba se sentó Dolores, al lado estaba Isabel en cuatro chupando laconcha de Concepción. Santiago estaba concentrado en no acabarquería seguir cogiendo toda la tarde pero al lado tenía la conchahermosa de Isabel toda depilada y arriba a Dolores que empezaba amanejar la situación. Pero, Dolores se frenó, miró la concha de suamiga, se inclinó un poco y empezó a chuparle la concha y el culo aIsabel. A esta ultima no le importó, todo lo contrario, pero pensabaque era Santiago y no Dolores, la sorpresa le gustó.
Santiago dejó de cogerla a Dolores, a ella no le importó en loabsoluto porque estaba concentrada chupándole la concha a Isabel.Santiago se sienta en el sillón individual y mientras miraba semasturbaba. Concepción al verlo, le hace señas para que vaya conella y le de su miembro en la boca. Luego de unos minutos, Isabel seda vuelta, se pone boca arriba para que Dolores pueda chupar mejor.Concepción se levanta, lo hace sentar a Santiago y se vuelve asentar arriba de él, pero ahora con la pija adentro de la concha queal mismo tiempo le tocaba las tetas a Isabel. Después de paso untiempo Isabel frena a Dolores, ambas se reincorporan y se sientan unaal lado de la otra, Concepción seguía cogiendo con Santiago perofrena, se para y le dice a Santiago “vinimos a que nos chupes laconcha”. Santiago la miraba, se para y la sienta en el sillónindividual, la recuesta y con las piernas abiertas comienza a hacersu arte. Apretaba y chupaba, Concepción se moría por dentro de laexcitación, temblaba. Las otras dos miraban, sin entender como enpoco tiempo Concepción gimiendo y gritando del placer. Santiagoapresuró un poco más los movimientos de su lengua hasta el puntojusto en donde Concepción le corre la cabeza y acaba. En esemomento, Isabel de alguna manera lo lleva a Santiago hacia su concha,lo arrastra y Santiago otra vez hizo lo suyo, en un movimiento hizoacabar también a Isabel. Las tres no lo podían creer y mientrasacababa Isabel, Dolores lo agarró se lo llevó a la concha y enmenos de cinco minutos también estaba acabando.
Isabel le dice a Santiago que a ella no la cogió, entonces Isabel sepuso en cuatro arriba del sillón y Santiago solo tuvo que poner sumiembro un poco adentro para que Isabel vuelva a acabar sin embargoen un movimiento brusco la metió hasta el fondo e Isabel gritó comonunca antes. Santiago ya no daba más, ya le dolían los huevos detanto aguantar, agarró a la primera que vio, Concepción, se hizouna paja arriba de sus tetas y acabó. Dolores que estaba observandola situación, se acercó y le chupó las tetas acabadas a su amiga.Isabel estaba exhausta tirada en el sillón tratando de recobrarfuerzas.
Los cuatro, se quedaron sentados hasta que pudieron recobrar fuerzas.De a una iban pasando al baño para limpiarse y cambiarse para actoseguido pedirle el numero de teléfono a Santiago quien se los diosin dudarlo, lo que había pasado y sentido esa tarde fue muyprometedora para él y para lo que podía seguir pasando. Las mujeresse despiden de Santiago y se suben al auto, ninguna decía nada, niuna mueca, solo se escuchaba el ruido del aire acondicionado nisiquiera la radio habían prendido. Era como que cada una recordabalo que había pasado, las imágenes de esa tarde invitaban a seguirde fiesta pero el cansancio y la adrenalina empezaron a hacer mellaen los cuerpos. Cuando llegaron a la casa de Concepción, la primeraen bajarse, se saludaron y ella se bajó del auto para ingresar a sucasa. Después de unos minutos, Isabel la mira a Dolores y le dice“Solamente venías a mirar no?” Las dos entran en un estado derisa permanente y Dolores no tuvo más que admitirlo, cuando seempezaron a besar Isabel y Concepción brotó algo desde adentro desu cuerpo que la hizo calentar a tal punto que la hizo participar sinpensarlo demasiado.
- Si, me gustó mucho. Me gustó también como me chupaste la conchapero es impresionante la lengua de Santiago, estas dos tenían razón.Creo que la semana que viene lo voy a traer a mi casa.
- Isabel, creo que nos vamos a tener que poner de acuerdo por que yoya me lo quería traer sentarme en el sillón del living de mi casa,desnudarme, abrir las piernas, sentar a mi marido enfrente y decirle “Aprendé, así se chupa la concha”.
Todo era risa entre ellas.
- A mi me gustó la concha de Concepción, vos sabes que desdesiempre le tuve ganas. Alguna que otra vez pasó algo pero no pasó amayores, nos dimos algunos besos y ya.
- No lo sabía.
Llegaron a la casa de Isabel, ella se bajó y entró a la casa.Dolores después de unos kilómetros también llegó a su casa. Lastres recordando esa tarde como inolvidable.
1 comentario - El gigoló de la tía 6