Mallas, tutus y disfraces para ser infieles

21 de febrero de 2020

Querido diario, si unes, amigas bien calientes, con lo que te desinhibe un disfraz, los días de carnavales son muy divertidos y calientes.

Hoy libraba y no trabajaba en el bar, así que, me disfracé de karateca y salí con unos amigos de fiesta. Desde que en año nuevo Elena había sido infiel conmigo, esta se ponía nerviosa y cachonda cada vez que estábamos cerca y su marido presente. Cada vez que podía, la rozaba y esta se ponía roja. Elena llevaba un disfraz del muñeco de bomberman. Camiseta rosa con mangas largas y blancas muy ajustada marcando sus pechitos y el sujetador de aro, pasamontañas con la cara al descubierto rosa, tutu rosa, y unas mallas blancas ajustadas.
Mi novia Raquel había salido a cenar con unas amigas y tras la cena se vino con nosotros. Me trajo una sorpresita pues vino con Ana, su buena amiga infiel. Ambas iban disfrazadas de payasas con vestidos de colorines, con faldas hasta las rodillas y medias de rayas blancas y rojas horizontales. Ana además lleva una peluca verde de media melena, la cara pintada de blanco y los labios rojos fuerte haciendo más visibles lo gordos que son y lo grande que es su boca. La presentamos a nuestros amigos y en cuanto pude cogí a Elena y la empecé a comentar al oído, lo bien que lo pasaba con Ana, poniéndola más cachonda aún.
La noche pasaba y Elena se ponía más caliente, gracias al alcohol y a mis tonteos con Ana. Hasta que, en un momento determinado, hablo con mi novia. Esta tras reírse cogió a su marido y se lo llevo a bailar, momento en el que me hizo un gesto con la cabeza para que la siguiera y disimuladamente se fue hacia los baños. Yo salí tras ella al poco para que no sospechara nadie.
Nada más encerrarnos en uno de los lavabos esta se me tiro encima y empezó a besarme. Metió su mano por mi pantalón y calzoncillo acariciando mi polla. Se arrodillo, me lo bajo todo y comenzó a comerme la polla como si llevara años sin probar una. Me encantaba el ritmo con el que lo estaba haciendo. Mi polla no tardo nada en ponerse durísima. La di un condón. esta me lo coloco y me la mamo un poco más con el puesto. Cuando se levantó, la gire y apoyo sus manos contra la puerta. La bajé las mallas y el tanga blanco y metí mi polla por su coño. Comenzamos a follar y nos besamos. Mis manos acariciaban sus tetitas. Bajé una, con la que comencé a acariciar su clítoris.
No paramos de follar en dicha posición hasta que ella se corrió. Entonces se volvió a agachar y, tras quitarme el condón, volvió a mamármela hasta que explote en su boca. Esta se tragó todo mi semen dejándome relajadísimo.

La noche continuo y acabamos yéndonos a otra disco. Allí me encontré con otra gratísima sorpresa, pues estaban las profesoras de la guardé de mi hija. Entre ellas, Silvia C, con la que ya he tenido sexo unas cuantas veces. Iba disfrazada de Luigi femenino, con una camiseta verde de manga larga, ajustada marcando sus pechitos, un tutu azul y unas medias también azules. Cada poco tiempo Silvia se nos acercaba y tonteábamos un poco, sin sobrepasarnos pues no quería que sospecharan las demás.
Raquel se me acerco y me enseño varios mensajes que le había enviado nuestro amigo Constan. Este le preguntaba que donde andábamos, que su mujer se había ido a casa y el necesitaba darle fiesta a su polla. La disco estaba cerca de cerrar, por lo que le dijimos que fuera para nuestra casa. Ana se apuntó a la fiesta y cuando se lo propuse a Silvia también se nos apuntó, tras poner una excusa al resto. Por desgracia Elena no pudo venirse pues su marido no estaba lo suficiente borracho como para darle esquinazo.
Al bajar del taxi en nuestra casa, allí estaba constan esperándonos en la puerta. Nos empezamos a reír, pues su disfraz simplemente consistía en una peluca rubia, cuando él es calvo. Le presentamos a Ana y Silvia y subimos.
En el salón yo me besaba con Silvia acariciando su rico culo y Constan lo hacía con Ana, mientras Raquel preparaba unos chupitos. Tras tomarlos Raquel se unió a Ana y Constan. Constan no tardo en llevárselas a nuestra habitación pues les dijo que quería jugar con los juguetes de mi novia.
Silvia y yo nos sentamos en el sofá. Esta se colocó de rodillas sobre mí, mirándome y mientras nos besábamos pude cogerla bien del culo. Le quite la camiseta dejándola con un sujetador azul de triangulo. Baje mi cabeza y la mordisquee las tetitas con el puesto, hasta que ella se lo desabrocho y quito y se las comí.
Silvia se colocó a gatas en el sofá y me desnude. Este agarro mi polla y comenzó a masturbarme, mientras me lamia y comia los huevos. Cuando la tuve dura también me comió la polla como ella bien sabe hacerme. Mi mano subió su tutu y rompió sus medias, para comenzar a masturbarla, tras apartar su tanga azul.
Silvia me puso un condón y se sentó de nuevo sobre mí. Metió mi polla en su coño y comenzamos a follar. Nos besábamos apasionadamente y mis manos acariciaban sus muslazos y pechitos. Me levante, cogiéndola en vilo y la lleve hasta la mesa, donde la senté. Allí pude coger un hielo y ponérmelo en la boca. Seguimos follando y comencé a pasar el hielo por su cuello. Sus pezones no tardaron en ponerse bien duros. Baje la cabeza y pase el hielo por ellos, antes de soltarlo para poder mordérselos.
Subí sus piernas a mis hombros y comencé a follarla por el culo. Aproveche tener sus pies arriba para acariciar muy fuerte sus muslazos, mientras la besaba las plantas de los pies cubiertas por las medias azules.
Me senté en el borde de la mesa y Silvia se sentó sobre mí, rodeándome con sus piernas y agarrándome del cuello. volvió a meterse mi polla por su húmedo coño y follamos mientras nos besábamos y acariciaba su culo y muslos. Cogí una botella de vodka y la di de beber. Cuando este cerro la boca para tragar seguí con la botella inclinada para que cayera por sus pechitos, los cuales comencé a comer.
Ana entro en el salón, solo con las medias puestas, que la llegaban hasta medio muslo. Se nos acercó y comenzamos a besarnos los 3, mientras la acariciaba sus ricas tetas redondas. También hice a Ana beber vodka y acabé rociando sus tetas igualmente. Me las acerco y pude comérselas.
Bajamos de la mesa y nos fuimos los 3 al sofá. Me tumbaron y Silvia se volvió a sentar sobre mi poniéndonos a follar. Ana había cogido la botella de vodka y tras echarme por el pecho comenzó a lamérmelo. Fue subiendo hasta que nos empezamos a besar. Ana se sentó sobre mi cara y se hecho vodka por el coño que acababa cayendo en mi boca. Cuando paro de rociarlo, le agarré del culo y comencé a comerla el coño. Mientras Silvia se movía en círculos con mi polla en su coño y culo.
Silvia soltó un fuerte gemido cuando se corrió y se bajó de mí, saliendo del salón. Entonces Ana se sentó sobre mí y comenzamos a follar. Se echo para delante y pudimos besarnos mientras la agarraba sus buenas tetas. En esta posición la follé el culo y el coño hasta que estuve a punto de correrme. Entonces se colocó en posición de 69. Me quito el condón y comenzó a comerme la polla mientras yo la devoraba su mojado coño. Cuando me corrí, esta no paro de seguir comiéndomela hasta que la hice correrse en mi boca.

Nos sentamos en el sofá, ella sobre mí, de lado. Nos besábamos y la acariciaba los muslos y las tetas, que de vez en cuando la comia. Una de mis manos se introdujo en su coño y comencé a masturbarla con mi dedo corazón. Sus pezones se endurecieron rápido y los mordisquee.
Ana se coloco a gatas en el sofá y comenzó a comerme la polla, mientras yo continuaba masturbándola. Cuando la tuve dura, Ana se colocó de rodillas entre mis piernas y agarro mi polla. Golpeo sus pechos con ella, antes de meterla entre ellas. Las apretó fuerte y me hizo una cubana. Además, me lamia el glande.
Le di un condón y esta lo coloco sobre mi glande. Fue colocándomelo con su boca mientras me hacia una mamada rica. Con el puesto del todo, se sentó sobre mi dándome la espalda y metiéndose mi polla en su culo. Le agarre las tetas y esta comenzó a saltar, follándoselo así. La eche hacia atrás para poder besarnos, mientras la hacia el anal.
Raquel entro en el salón y me dijo que mirara quien había llegado. Al mirar vi a mi novia desnuda y al lado a Elena, que había conseguido deshacerse de su marido. Se bajo Ana de mi y fuimos los 2 a por ella. Mi novia se volvió a ir a la habitación y comenzamos Ana y yo a besarnos con Elena.
Me coloque por su espalda y mientras seguíamos besándonos los 3, la quite la camiseta y el sujetador blanco. Cogí el vodka y lo eché por sus carnosos pechitos, que comenzamos a comerla Ana y yo. Me arrodille y la quite la malla blanca y el tutu, dejándola solo con un tanguita blanco y unas medias transparentes hasta las rodillas. Aparte a un lado su tanga y la comencé a comer el coño. Elena y Ana se besaban y comían las tetas la una a la otra.
Me levante y coloque a Elena apoyada en la mesa. La abrí bien de piernas y comenzamos a follar. Con una mano acariciaba sus tetitas y con la otra el culo y las tetas de Ana que se besaba con ella. Coloque a Ana en el medio y se inclino hasta que pudo comenzar a comerla el coño a Elena, mientras yo desde atrás la follaba el coño. Mis manos estiradas, agarraban las tetas a Ana.
Noté a Elena más cachonda que otras veces y decidí intentar ver si por fin me dejaba desvirgarla el culo. Comencé a follar el culo a Ana y me incliné sobre su espalda. Le dije bajito al oído que forzara mas los gemidos para poner mas caliente a Elena. Cuando comenzó a gemir mas alto, la dije a Elena que mirara la cara de gozar de esta. Elena sonreía y Ana le decía que era lo mas cachondo del mundo, que un buen anal hace olvidar todo lo malo. Aparte a Ana y volví a meter mi polla en el coño de Elena. Mientras follábamos la pregunte si esa noche la apetecía por fin probarlo y, tras un pequeño silencio, me dijo que por favor lo hiciera con mucho cuidado.
Mande a Ana a la habitación por lubricante y esta volvió con él y con un consolador. La baje de la mesa y la coloque mirándola con las manos apoyadas en ella. Le quité el tanga y comencé a dilatar su ano con 2 dedos míos con saliva. Me eché lubricante y poco a poco fui dilatándoselo más. Mientras lo hacía, Ana mantenía mi erección masturbándome. Cuando tuvo el culo más o menos bien abierto, comencé a meterla despacito mi polla. Elena grito varias veces de dolor, pero como en ningún momento me pidió parar yo seguí y poco a poco se la acabé metiendo entera. Con ella bien dentro la moví despacito en círculos. Elena acabo llorando un poco por el dolor. Ana se subió a la mesa y la pidió a Elena que la comiera el coño. Esta lo hizo y solo paraba cuando gritaba por algo de dolor.
Nos fuimos todos al sofá y me senté de lado con las piernas estiradas. Elena se sentó sobre mí y volvimos a follar con mi polla en su coño. Ana se coloco de rodillas en el suelo, al lado de Elena. La comenzó a pasar el consolador por los labios, hasta que esta lo comenzó a mamar. Con el bien mojado, lo bajo por su cuerpo hasta llegar a su culo. Lo fue metiendo poco a poco por él, hasta hacer que Elena tuviera una doble penetración culo y coño. Elena y yo nos besábamos.
Ana dejo el consolador dentro del culo de Elena y vino a mi lado. Nos empezamos a besar y esta coloco sus ricas tetas en mi boca para comérselas. Me empujo para tumbarme y se colocó encima de mí. Puso su coño en mi boca y comencé a comérselo. Mis manos estiradas agarraban sus tetas.
Elena se saco el consolador del culo y comenzó a metérselo a Ana. Cuando lo tuvo bien metido, ambas cambiaron sus puestos. Follaba el coño de Ana, haciéndola una doble penetración y la comia el coño a Elena. Cuando esta se corrió, se bajó de mí, saco el consolador del culo de Ana y se sentó al lado nuestra, masturbándose mientras nos miraba.
Ana se tumbó sobre mí y mientras follábamos la comí las tetas y acaricié su culo. Cuando me iba a correr, Ana volvió a poner su coño en mi boca y Elena, me quito el condón y comenzó a mamármela. Cuando me corrí, Elena me dejo la polla bien seca y volvió a masturbarse con el consolador. seguí comiendo el coño a Ana y cuando esta se corrió, se tumbo encima de mi y nos besamos un poco, hasta que esta dijo que debía irse o su marido sospecharía.

Elena y yo nos quedamos en el sofá tumbados acariciándonos y charlando sobre qué tal estaba tras ser desvirgado su culo. Le dolía un poco, pero decía estar muy contenta por haber dado este nuevo paso. Acariciaba su culo con dulzura y mordía sus pechitos. La tumbe boca abajo y me coloque de rodillas en el suelo. Seguimos besándonos y mi mano recorría su cuerpo de arriba abajo. Cogí el consolador y lo pasé por sus glúteos en círculo, hasta que comencé a jugar en su ano. Poco a poco se fue dilatando y metiéndose en él. Comencé a follarla el culo con él, mientras nos besábamos más acaloradamente y esta gemia de vez en cuando.
Me levante para que Elena agarrara mi polla y me la comiera, habiendo dejado el consolador dentro de su culo. Cuando la tuve dura, me puso un condón. Me coloque de rodillas en el sofá detrás de Elena. Le saqué el consolador y metí mi polla por su culo, poco a poco, mientras me tumbaba sobre ella. Comencé a follarla el culo, mientras la besaba el cuello y ella gemia de gusto y dolor.
Raquel, Constan y Silvia aparecieron en el salón. Le dije a Constan que probara el culo de Elena que estaba recién desvirgado. Nos levantamos del sofá y este se sentó en él. Elena se sentó sobre él y este metió su polla en su culo. Mientras se lo follaba, Raquel se coloco al lado de ellos y se besaban los 3.
Silvia me cogió a mí y nos fuimos a la mesa. Se coloco mirándola y la subí una rodilla a la mesa. metí mi polla por su culo y se lo follé, cambiando de vez en cuando a su coño. Una de mis manos acariciaba sus pechitos. La senté en la mesa, me agaché y la comí el coño mojadísimo, mientras acariciaba sus muslos. Volví a levantarme, la abrí bien de piernas y la follé el coño, con embestidas fuertes.
La pedí a Raquel que se acercara a nosotros con el consolador y se puso a follar a Silvia. Yo me fui para el sofá y le dije a Constan de hacerle a Elena su primera doble penetración con 2 pollas de verdad. Constan se la metió por el coño y yo me coloqué tras ella, y se la metí por el culo. Mientras la hacíamos la doble, nos besábamos con ella y la acariciaba los muslos y pechitos. Nos cambiamos y me senté yo para ahora follarla el coño, mientras Constan la follaba el culo.
Raquel estaba sentada en la mesa y Silvia la comia el coño. Constan se volvió con ella, levanto a Silvia y la follo el culo, mientras esta seguía comiéndoselo a Raquel. Me levante cogiendo en vilo a Elena y la lleve a la mesa sentándola al lado de esta. Constan y yo volvimos a cambiarnos y ahora follaba el culo y coño de Silvia. Cuando Raquel se corrió, se bajo de la mesa, cogió una botella de ron y comenzó a darnos chupitos mientras seguíamos follando.
Estaba follando el culo a Silvia cuando me corrí dentro de él. Silvia se agacho, me quito el condón y me la comió dejándomela bien limpia.

Me fui al baño a mear y al volver solo estaban Constan y Elena. Esta se la estaba comiendo a el que ya se había corrido. Yo me preparaba una copa y cuando Elena termino se me acerco y nos pusimos a hablar, mientras Constan se volvió a ir a la habitación donde debían de estar Raquel y Silvia.
Nos sentamos en el sofá y nos tomamos la copa tranquilamente, charlando y besándonos. Elena me dijo que debía irse, que si la acompañaba, vivía cerca, a menos de 5 minutos andando, así que nos volvimos a poner los disfraces y la acompañe a su casa. En el portal, me estaba despidiendo de ella, cuando me cogió de la mano y me pidió que pasara. Me metió en el ascensor y subimos a la ultima planta, donde ella no vivía. Nos fuimos besando mientras subíamos. Al salir del ascensor me metió en la zona de la escalera y cerró la puerta.
Nos besamos mas acaloradamente y Elena comenzó a acariciar mi paquete. Me saco la polla y me empezó a masturbar. Se arrodillo y comenzó a lamerme el glande y jugar con mis bolas en su mano, mientras me decía que llevaba tiempo poniéndose cachonda pensando en esta situación. Comenzó a comérmela y fue jugando y comiendo mis huevos también, durante un buen rato.
Me pidió un condón y me lo puso. Me sentó en la escalera, se quito las mallas y el tanga y se sentó sobre mí, rodeándome con los pies. Comenzamos a follar, nos besamos y acariciaba sus pechitos. Cuando se la metí por el culo pego un pequeño grito y tuve que taparla rápido la boca con mi mano, para inmediatamente volver a besarla y meterla la lengua dentro y tenerla ocupada.
No volví a sacarla de su culo hasta que me corrí dentro. Entonces se sentó en el escalón de abajo, me quito el condón y me lamio el glande dejándomelo bien limpio.
Nos vestimos, nos besamos y metimos mano hasta que bajo un poco el calentón y bajamos por las escaleras. En su planta, nos dimos un buen beso de despedida. Ella entro dentro del rellano y termine de bajar las escaleras para salir de su barrio y volver a mi casa. Al llegar a mi casa fui a mi habitación y estaban Raquel, Silvia y Constan dormidos, por lo que me fui a la otra habitación a dormir.

Dormía plácidamente cuando una maravillosa sensación me despertó. Al abrir los ojos, vi a Silvia pasando su pie por mi polla. El suave tacto de la media azul me estaba poniendo muy cachondo y encima solo llevaba eso puesto. Me senté y la pedí que ella lo hiciera a mi lado. Comenzamos a besarnos, acaricie sus pechitos y ella seguía jugando con su pie en mi polla.
Se coloco a gatas y comenzó a hacerme una mamada. Mi mano acaricio su culo, para segundos después comenzar a masturbarla, metiendo mi mano, por dentro del roto de las medias e introducir mi dedo corazón bien dentro de su coño. Me tumbé y cogí a Silvia colocándola sobre mí, para comerla el coño en un rico 69. Silvia volvió a sentarse y comenzó a masturbarme con sus pies, mientras nos besábamos.
La cogí y nos fuimos al baño. Encendí la ducha y mientras se calentaba el agua, me arrodillé entre sus piernas y la comí el coño. La empecé a acariciar el culo y las piernas, mientras la iba bajando las medias y el tanga, hasta quitárselos. Me levanté, me puse un condón y nos metimos bajo la ducha.
La cogí en vilo, la coloqué contra la pared y comenzamos a follar. Nos besábamos y la acariciaba bien sus muslazos. La baje, la coloque mirando la pared y la comencé a follar el culo. Una de mis manos le daba azotes en el culo y con la otra pellizcaba sus pezones. Se volvió a girar y, ahora mirándome de frente, la levante una pierna y volví a meter mi polla en su empapadísimo coño. Follábamos con duras embestidas mientras nos besábamos y apretaba su muslo.
Me aviso que se iba a correr, por lo que me arrodillé y volví a comerla el coño, mientras acariciaba su culo con una mano y con la otra pellizcaba su clítoris. Cuando se corrió me levante y ella se agacho. Me quito el condón y comenzó a comerme la polla. No la avise que me corría, por lo que se encontró mi abundante semen mañanero dentro de su boca y algo se la salió por las comisuras al no poder tragarlo todo.
Tras un rato de besos y caricias bajo el agua, salimos de la ducha. Nos secamos y vestimos y fuimos a la cocina, donde Raquel estaba preparando la comida, pues ya eran mas de las 13. Tras tomarnos una cervecita juntos, Silvia llamo a un taxi y se fue.

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