Un rapidito en la facultad.

Lo conocí en un chat hot y me dijo que era profe en una facultad. Me calentaba todos los días, con fotos, videos, con las chanchadas que me decía. Un día me mandó un mensaje: “Esta tarde te espero en el aula 207, edificio del medio”. No lo conocía en persona, pero la calentura pudo más y decidí ir. Me vestí bien de putita: pollerita, top, tacos altos. Por las dudas en la cartera metí forros, gel y unos caramelitos de menta. Llamé un taxi y en el trayecto el conductor me quiso levantar. Un augurio excelente!!!



Cuando llegué me perdí en el edificio y le mandé un mensaje, realmente no podía preguntar por él porque lo conocía como “Profehot45”, mientras caminaba por los pasillos ví que venía hacia mí casi corriendo. “Caliente como burro en primavera”, diría mi abuela! 
“Hola”, me dijo, “es por acá” y fuimos caminando hasta el aula, se le veía la pija grande y dura apretándole el pantalón. “Mi abuela tenía razón con lo del burro” pensé, relamiéndome por dentro.
Llegamos al aula, pequeña y oscura, entramos y cerró la puerta con llave. No alcancé a decir nada que me agarró la cara y me empezó a besar mientras me iba llevando hasta una mesa. Me dió vuelta, me puso la cara contra la mesa, se agachó y corriéndome la tanga empezó a comerme bien la conchita. Esa lengua!!! Era una cosa de otro mundo, me lamía, me chupaba, me escupía y me penetraba con ella. Cuando estuve bien mojada, se paró, en un segundo se puso un forro y me empezó a coger la concha, me la metió tan fuerte que se me escapó un gritito y él me tapó la con una mano y me empezó a decir: “Callate putita, no hagas ruido que si viene alguien te cojemos entre los dos” “Ahh eso queres putita, pija? Tomá!, tomá pija!!!”



No te puedo explicar lo que me estaba haciendo gozar!! En un momento me la sacó dejando sólo la cabeza adentro y se quedó quieto, yo dí vuelta la cabeza y le pregunté : Qué pasa? Y me dijo, “Que quiero que me ruegues por pija putita” La querés adentro? Bien bien adentro? 
Yo, que no sólo quería, más bien NECESITABA pija le dije “Sí, profe, por favor seguí, seguí” – “Bueno” me dijo, “pero te la voy a meter por el orto” y me volvió a dar vuelta, me escupió el culito y de a poco me la empezó a meter. Yo estaba tan tan caliente, que si bien debo confesar que me dolía y ardía un poquito lo ayudaba relajando el ortito y abriéndome los cachetes con las manos. De a poco fue entrando, ufff una locura. El temor de que alguien escuche o golpee la puerta, la calentura, el tipo desconocido de internet con los pantalones bajos, todo esto me llevó a tal estado de excitación que llegué al orgasmo cuando me metió toda la cabeza de la pija en el orto.



Él se puso más loco y no se pudo contener y me la metió toda y me empezó a coger rápido y fuerte, muy fuerte. Yo empecé a gemir más alto y él me volvió a tapar la boca con las manos. No sé muy bien por qué lo hacía, porque él gemía como un animal. Yo sentía el culo en llamas pero gozaba como nunca!!! En un momento saca la pija y en un movimiento super coordinado, con una mano se saca el forro y con la otro me dá vuelta y me acerca la cabeza a la pija, “Tomátela toda bb” me dijo y me mandó ese pijon caliente hasta el fondo de la garganta y al momento me llenó la boca de leche. Yo no tuve más remedio que tragármela toda para no asfixiarme y también por miedo a que me manchara el top que no me había ni levantado.






Cuando terminó, se subió el boxer y el pantalón y me dijo, “sos divina putita, ahora arréglate rápido que en 10 minutos empieza mi clase y los alumnos ya están llegando”. Lo hice, salí del aula, me comí un caramelito de menta y, mientras caminaba por los pasillos, saqué el celular y lo bloqueé. Por suerte el taxista me había dado su número, quizás en el viaje de regreso a casa alguna que otra cosita más me podría dar…..