Almacenera #3

Pasaron unos dias, hasta que llegó un martes, uno de los dias que podía mandarle mensaje. La conversación se dio muy amena, más tranquila de lo que queria llegar a tener, pero el eje de la conversación siempre giro alrededor de coger.
Hablamos sobre vernos, mi invitación fue al telo directamente, a lo que me dijo que si, pero si era a la mañana temprano y solo fines de semana. El tiempo que manejaba para que hablemos parecía estar cronómetrado tambien, el tiempo que dedicaba organizando un rato para coger conmigo, era una idea que me fascinaba.
Llego el día y nos encontramos en la puerta del telo temprano a la mañana, vestía un jean elastizado que marcaba su manzanita, marcada y durita. Nos saludamos con un beso, entramos y pedimos un turno de 3 horas. No me pude resistir tocarle el culo y decirle que me encantaba como se le marcaba todo mientras íbamos camino a la habitacion, ella respondía agarrándome la mano y diciendo acá no, espera un poco con su voz nerviosa.
Llegamos a la habitación y agarrados de la mano me lleva a la cama, permanecimos hablando durante 20 minutos recostados uno al lado del otro, acariciandonos y besandonos por ratos, me contaba que hace 3 años no cagaba al marido, me decía que yo me tenia que sentir mal porqué ella se iba a quedar con culpa. Cosa que me daba gracia, pero al mismo tiempo me calentaba por lo decidida que estaba.
Empece con los besos en el cuello, donde note que empezaba a disfrutar y deshinibirse más, las caricias sobre su cuerpo fueron sacando toda prenda que la adornaba. La tengo desnuda enfrente mío, unas tetas chicas con los pezones bien paraditos, su teta me entraba en una mano. Empiezo a besar sus tetas y voy bajando despacio, solamente con la lengua, la agarro de las piernas sosteniendolas para arriba dejando a la vista su concha toda chiquita, toda perfecta, ni un pelo, un olor riquisimo y un poco mojadita. Bajo a jugar con su clitoris, y sigo con mi lengua moviéndola por toda su concha, la siento cada vez más dilatada, esa hermosa conchita se abría más, le meto dos dedos y veo que puedo meter 4, empiezo a masturbarla mientras sigo chupandosela toda, en este tiempo sus suspiros, la manera en que se retorcía y gemía hacia que mi pija babee sola, ella se mantenía muy mojada al punto de lanzarme un chorro caliente mientras se la estaba chupando, alcanzó a decir que se disculpaba, no me importo, me encantó que me llene de sus jugos, me encantaba chuparsela. Termina de tirarme el chorro y de pedir su disculpa, al ver que seguía me agarra del pelo diciendo " ayy que lindo eso nene! nunca me lo hacen". Seguí durante unos diez minutos, ya la había dejado empapada. Me pongo encima y apoyo mi pija en su concha, entro como si nada, lo caliente, húmeda que sentía su concha era lo mejor para cojerla. La agarro de la cintura y empiezo a moverme rápido desde el primer momento, que rico se sentía estar adentro de ella. Cada vez que gemia aceleraba el ritmo, y me encargaba de hacerla sentir mi pija en toda su concha, cuando tengo ganas de acabar le pido que ponga en 4 y la coji hasta acabarle toda la espalda. Vamos a limpiarnos al baño, y es cuando le digo si mejor nos bañamos. A lo qué sin dudar se mete, la tuve de espalda enjabonandole hasta la cola. Se da vuelta y nos besamos bajo la ducha, apaga el agua y dice "que buena decisión fuiste pendejo".
Nos besamos un rato más, y baja a chuparme la verga, todavía la tenía gomosa así que la va agarrando con una mano, me come los huevos y va subiendo a besarme la pija mientras me mira a la cara y dice "ya se va poniendo como quiero". era verdad, ya la tenía bastante dura que hasta se marcaba la vena. No quise que me la chupe más, me la quería seguir cogiendo, apoyo las manos contra la pared y haciéndome paso, abriendo los cachetes de su culo, seguimos cogiendo. El escuchar como chocaba con su cola maciza, hace que la quiera cachetear. Le doy una, larga un grito diciendo ay no me marques, maldito! La voz de putita sumisa que manejaba no tenía comparación a cómo se mostraba por mensaje. Nos fuimos a la cama, y le pedí que suba arriba mío de espalda, mi posición favorita para poder contemplar su ojete y ver cómo se come toda mi pija. Agarrarla del culo mientras se mueve arriba mío, llevándole mi pija toda adentro. Cuando se cansa, se pone en 4 y decidido a cojerle el culo, apoyo mi pija sobre su culito y me lo empieza a menear y dice déjame a mi quédate quieto. Se acercó a frotar mi pija, y acercándola al culo empezó a comérsela, se la llevó toda en 3 sentones, menea su cola durante un rato con mi pija dentro. Suena el teléfono, de recepción llamaban avisando que terminaba el turno, ella hablando. Que mejor momento para que llamen, la agarro de la cintura dispuesto a llenarle el culo de leche, le doy dos cachetadas más y pide mas, dale pendejo reventame el culo, no aguante más le metí toda la verga y la llene de leche. Terminamos, se fue a cambiar al baño mientras me cambiaba en la cama. Salimos del telo y quedamos en vernos semanalmente, pero me remarcó que sean lugares distintos cada vez. Entonces así fue que empezó mi aventura con la almacenera, que una vez me hizo llevarla a una iglesia...
Gracias por leer.

5 comentarios - Almacenera #3

NaneroEv2 +1
Excelente compadre, mostra algo de la señora che! Resguardando su identidad, obvio
gust7387 +1
Muy buen relato y mira lo que era la almacenera
Chiquidelsur +1
👍
Chiquidelsur +1
Gran relato...subí alguna foto si se puede ....amo las minas como tú almacenera...