Relatos Eróticos Dominacion Mujeres
Relatos Eroticos
Nos reunimos en un punto acordado, por orden mía tú no tiene ropa interior, lo único que llevas puesto son unas pantimedias, un vestido y una abrigo encima.
Durante el camino solo ahí silencio, escuchas solo el sonido de nuestros pasos mientras caminas detrás de mi.
El llegar al motel entramos en la habitación, cierro la puerta y me acerco hacia ti, de mi bolsillo saco un listón rojo brillante, sientes su suave rose en tu rostro mientas con el cubro tus ojos.
Siente la presión de la tela mientras la anudo en tu nuca, después escuchas mis pasos alejarse, pasan unos minutos y no sabes lo qué pasa, solo especulas lo que sucede.
Retiro tu abrigo y lo pongo a un lado de la cama, después sientes mis dedos rosando levemente tus pezones, primero solo los froto, después comienzo a presionarlo, comienza sentir un calor que comienza en la punta de tu pecho y comienza a esparcirse.
Después con más fuerza comienzo a jalar tus pezones hacia adelante, la fuerza te hace dar un paso hacia adelante, después escuchas mi voz en tono fuerte haciendo eco en la acotación te ordeno quedarte quieta, mi fuerte voz rompe el silencio a lo cual rápidamente te enderezas y regresas un paso atrás donde te encontrabas.
Después de eso mis manos se apoderan de ti pechos, los toco los aprieto y los siento a mi antojo, aunque protegidos por la tela de tu vestido puedo sentir perfectamente su anatomía.
Me tomo mi tiempo para deleitarme con esa sensación, tu solo te concentras en las secciones que inundan tu mente.
Sin soltar tus pecho acercó mi boca a tu cuello, y sientes mi respiración en el, el calor de mi cuerpo cerca del tuyo.
Sin aviso te tomo de tu brazo y te dirijo a la cama, sientes la orilla y por instinto te cientas, después sientes mis manos en tus hombros e inmediatamente te empujo para recostarte, y después en un solo movimiento te juro para dejarte boca abajo.
Luego tomo tus dos manos y las estiro sobre tu cabeza, sientes de nuevo la tela de el listón rojo en tus muñecas, doy varios giros al rededor de ellas y entrecruzados, al final un fuerte nudo termina de robarte la libertad en tus manos.
Después me dedico a recorrer tus piernas, desde los pies comienzo a subir lentamente, memorizo la suavidad de tu piel mientras tú sientes mis manos explorando tu cuerpo.
Llego a donde está el vestido y meto mis manos por debajo de el, y automáticamente mis manos se apoderan de tu trasero, se sienten firmes con una exquisita forma.
Así que me dedico a subir tu vestido para dejar expuesto tu trabajo eso y tu espalda a mi vista.
Después me deleito con la vista, pero ahora es tiempo de divertirnos, colocó mi palma en tu trasero para después levantarla en el aire.
Rápidamente un fuerte azote hace eco en la habitación, seguido por otro justo en la otra nalga.
Uno sucede a otro con un ritmo paulatino, mientras leves gemidos comienzan a escapar de tus labios.
Un tono rosado comienza a aparecer en tu piel en respuesta de los azotes, lo cual incrementa la sensibilidad de toda él área.
Después sin decir nada, sientes mi peso aplastando tu cuerpo, estando así boca abajo inmediatamente meto mi mano derecha por debajo de tu vientre hasta encontrar tu zona más íntima
Siento la suavidad de tu vagina depilada y después tus labios, los cuales puedo sentir como intentan ocultar su humedad.
Mi mano izquierda no pierde el tiempo y de igual manera se introduce debajo de tu cuerpo para nuevamente apoderarse de tu pecho.
Sientes como mis manos se apoderan de tu cuerpo y por reflejo intentas acercar tus manos hacia mi, pero en ese momento te das cuanta de que tus manos no solo están atadas entre sí, sino que también están atadas a la cabecera de la cama.
Mi mano derecha ya sé encuentra jugando con tu vagina, mis dedos frotan en círculos tus labios mientras mi dedo medio ya se encuentra entrando levemente, y mi pulgar presiona tu clitoris aún escondido pero ya bastante emocionado.
Los jadeos que emites son cada ves más fuertes y siento como tu cuerpo súper de espasmos que no puedes controlar por más que intentas disimularlos.
Después de varios minutos me informas que vas ha tener un poderoso orgasmo, a lo cual yo respondo diciéndote que NO.
Tu comienzas a intentar soltarte de mis manos porque sabes que no podrás evitar terminar!!!
Intentas desesperadamente pensar en otras cosas y de evitar explotar en extasis
Acercó mi boca a tu oído, para darte permiso de terminar.
En ese momento te sueltas y solo te concentras en las sensaciones de tu cuerpo, esa mezcla de calor y electricidad que da placer a todo tu cuerpo.
Tienes un poderoso orgasmo seguido de otro y otro!!!
Después de varios minutos logras recuperarte y comienzas a recuperar el aliento.
Yo admiro tu cuerpo cubierto por una capa de sudor
Liberó tus manos de su atadura, para después retirar el listón de tus ojos
Y lo primero n lo que tú vista se enfoca es en mi pene erecto apuntando hacia ti
Te ordeno que te recuestes boca arriba y abras tus piernas, y con tus manos abras tus labios vaginales para poder ver lo más profundo de tu ser.
Tal ves por un poco de pena dudas por un momento, a lo que rápidamente me acercó a ti y de una bofetada sacudo cualquier duda que pueda quedarte.
Después de eso rápidamente haces lo que te ordene, con tu delicados dedos abres tu vagina para mi, exponiendo tu himen intacto.
Lentamente me acercó a ti, quedando a unos centímetros de ti.
Te ordeno tomar mi pene con tus manos y una ves que los sujetas puedes sentir su calor y como mi sangre palpita por el.
Después te ordeno que coloques la punta justo en la entrada de tu vagina.
Quiero que tú misma seas la que guíe a mi verga y la ponga en posición de penetrarte
Después comienzo firmemente a descender sobre ti, lo cual hace que comience a introducirse dentro de ti, la humedad de tu vagina facilita le recepción de mi falo, el cual no retrocede a su ver que expande todo al entrar
De pronto se topan con un bloqueo, tu himen detiene la intromisión de mi pene, así que este comienza a hacer presión sobre él forzándolo a ceder
Puedes sentir como se abre paso, rompiendo tu virginidad
El dolor se hace presente pero es rápidamente superado por una nueva sensación de placer que inunda tu cuerpo
No se compara a cuando te masturbas, es mucho más intenso y excitante, sientes mi peso sobre tu cuerpo, sientes mi verga expandiendo tu vagina, sientes una mezcla de excitación, placer, dolor y alegría, que nublan tu mente
Después comienzo a moverme, y sientes el rose mientas comienza a salir y entrar, estamos así varios minutos hasta que tuviste tu primer orgasmo siendo penetrada
Después de eso te ordeno ponerte en cuatro lo cual haces rápidamente a pesar de ya estar algo cansada
En esa posición me coloco detrás de ti, tomándote de la cintura y jalándote hacia mi, hasta que de nuevo mi pene de u de dentro de ti.
Esta ves tú vagina está mucho más receptiva debido a que ya se acostumbro
Puedo sentir el interior de tu vagina y cómo mi verga la conquista
Después de estar así por un buen rato mis embestidas se hacen más fuertes y puedes sentir como mi verga comienza a hincharse aún más
Me preparo para eyacular dentro de tu preciosa vagina, hasta hace poco Virgen
Te sujeto con fuerza de las caderas mientras hundo mi pene lo más profundo en tu interior a la ves que comienzo a disparar potentes chorros de mi semen dentro de ti
El calor se inunda dentro de ti te quema pero es una calor placentero, puedes sentir como chorros de mi semen son disparados con fuerza golpeando tu interior
Tú aceptas recibir descarga tras descarga de mi semen
Después de unos momentos me desplomó a un lado de ti, al momento que sientes como una gran ola de semen escurre de tu vagina.
Pero aún no hemos terminado, te ordeno que limpies bien mi verga de el semen restante que quedó en ella
Lo cual haces acostándote a un lado de mi y limpiando mi verga con tu lengua mientras aún sientes el calor emanar de tu vagina
Durante el camino solo ahí silencio, escuchas solo el sonido de nuestros pasos mientras caminas detrás de mi.
El llegar al motel entramos en la habitación, cierro la puerta y me acerco hacia ti, de mi bolsillo saco un listón rojo brillante, sientes su suave rose en tu rostro mientas con el cubro tus ojos.
Siente la presión de la tela mientras la anudo en tu nuca, después escuchas mis pasos alejarse, pasan unos minutos y no sabes lo qué pasa, solo especulas lo que sucede.
Retiro tu abrigo y lo pongo a un lado de la cama, después sientes mis dedos rosando levemente tus pezones, primero solo los froto, después comienzo a presionarlo, comienza sentir un calor que comienza en la punta de tu pecho y comienza a esparcirse.
Después con más fuerza comienzo a jalar tus pezones hacia adelante, la fuerza te hace dar un paso hacia adelante, después escuchas mi voz en tono fuerte haciendo eco en la acotación te ordeno quedarte quieta, mi fuerte voz rompe el silencio a lo cual rápidamente te enderezas y regresas un paso atrás donde te encontrabas.
Después de eso mis manos se apoderan de ti pechos, los toco los aprieto y los siento a mi antojo, aunque protegidos por la tela de tu vestido puedo sentir perfectamente su anatomía.
Me tomo mi tiempo para deleitarme con esa sensación, tu solo te concentras en las secciones que inundan tu mente.
Sin soltar tus pecho acercó mi boca a tu cuello, y sientes mi respiración en el, el calor de mi cuerpo cerca del tuyo.
Sin aviso te tomo de tu brazo y te dirijo a la cama, sientes la orilla y por instinto te cientas, después sientes mis manos en tus hombros e inmediatamente te empujo para recostarte, y después en un solo movimiento te juro para dejarte boca abajo.
Luego tomo tus dos manos y las estiro sobre tu cabeza, sientes de nuevo la tela de el listón rojo en tus muñecas, doy varios giros al rededor de ellas y entrecruzados, al final un fuerte nudo termina de robarte la libertad en tus manos.
Después me dedico a recorrer tus piernas, desde los pies comienzo a subir lentamente, memorizo la suavidad de tu piel mientras tú sientes mis manos explorando tu cuerpo.
Llego a donde está el vestido y meto mis manos por debajo de el, y automáticamente mis manos se apoderan de tu trasero, se sienten firmes con una exquisita forma.
Así que me dedico a subir tu vestido para dejar expuesto tu trabajo eso y tu espalda a mi vista.
Después me deleito con la vista, pero ahora es tiempo de divertirnos, colocó mi palma en tu trasero para después levantarla en el aire.
Rápidamente un fuerte azote hace eco en la habitación, seguido por otro justo en la otra nalga.
Uno sucede a otro con un ritmo paulatino, mientras leves gemidos comienzan a escapar de tus labios.
Un tono rosado comienza a aparecer en tu piel en respuesta de los azotes, lo cual incrementa la sensibilidad de toda él área.
Después sin decir nada, sientes mi peso aplastando tu cuerpo, estando así boca abajo inmediatamente meto mi mano derecha por debajo de tu vientre hasta encontrar tu zona más íntima
Siento la suavidad de tu vagina depilada y después tus labios, los cuales puedo sentir como intentan ocultar su humedad.
Mi mano izquierda no pierde el tiempo y de igual manera se introduce debajo de tu cuerpo para nuevamente apoderarse de tu pecho.
Sientes como mis manos se apoderan de tu cuerpo y por reflejo intentas acercar tus manos hacia mi, pero en ese momento te das cuanta de que tus manos no solo están atadas entre sí, sino que también están atadas a la cabecera de la cama.
Mi mano derecha ya sé encuentra jugando con tu vagina, mis dedos frotan en círculos tus labios mientras mi dedo medio ya se encuentra entrando levemente, y mi pulgar presiona tu clitoris aún escondido pero ya bastante emocionado.
Los jadeos que emites son cada ves más fuertes y siento como tu cuerpo súper de espasmos que no puedes controlar por más que intentas disimularlos.
Después de varios minutos me informas que vas ha tener un poderoso orgasmo, a lo cual yo respondo diciéndote que NO.
Tu comienzas a intentar soltarte de mis manos porque sabes que no podrás evitar terminar!!!
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Después de varios minutos logras recuperarte y comienzas a recuperar el aliento.
Yo admiro tu cuerpo cubierto por una capa de sudor
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Y lo primero n lo que tú vista se enfoca es en mi pene erecto apuntando hacia ti
Te ordeno que te recuestes boca arriba y abras tus piernas, y con tus manos abras tus labios vaginales para poder ver lo más profundo de tu ser.
Tal ves por un poco de pena dudas por un momento, a lo que rápidamente me acercó a ti y de una bofetada sacudo cualquier duda que pueda quedarte.
Después de eso rápidamente haces lo que te ordene, con tu delicados dedos abres tu vagina para mi, exponiendo tu himen intacto.
Lentamente me acercó a ti, quedando a unos centímetros de ti.
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Después te ordeno que coloques la punta justo en la entrada de tu vagina.
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Después comienzo firmemente a descender sobre ti, lo cual hace que comience a introducirse dentro de ti, la humedad de tu vagina facilita le recepción de mi falo, el cual no retrocede a su ver que expande todo al entrar
De pronto se topan con un bloqueo, tu himen detiene la intromisión de mi pene, así que este comienza a hacer presión sobre él forzándolo a ceder
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No se compara a cuando te masturbas, es mucho más intenso y excitante, sientes mi peso sobre tu cuerpo, sientes mi verga expandiendo tu vagina, sientes una mezcla de excitación, placer, dolor y alegría, que nublan tu mente
Después comienzo a moverme, y sientes el rose mientas comienza a salir y entrar, estamos así varios minutos hasta que tuviste tu primer orgasmo siendo penetrada
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En esa posición me coloco detrás de ti, tomándote de la cintura y jalándote hacia mi, hasta que de nuevo mi pene de u de dentro de ti.
Esta ves tú vagina está mucho más receptiva debido a que ya se acostumbro
Puedo sentir el interior de tu vagina y cómo mi verga la conquista
Después de estar así por un buen rato mis embestidas se hacen más fuertes y puedes sentir como mi verga comienza a hincharse aún más
Me preparo para eyacular dentro de tu preciosa vagina, hasta hace poco Virgen
Te sujeto con fuerza de las caderas mientras hundo mi pene lo más profundo en tu interior a la ves que comienzo a disparar potentes chorros de mi semen dentro de ti
El calor se inunda dentro de ti te quema pero es una calor placentero, puedes sentir como chorros de mi semen son disparados con fuerza golpeando tu interior
Tú aceptas recibir descarga tras descarga de mi semen
Después de unos momentos me desplomó a un lado de ti, al momento que sientes como una gran ola de semen escurre de tu vagina.
Pero aún no hemos terminado, te ordeno que limpies bien mi verga de el semen restante que quedó en ella
Lo cual haces acostándote a un lado de mi y limpiando mi verga con tu lengua mientras aún sientes el calor emanar de tu vagina
Te Gusto el relato
Sueñas con eso Sigeme hay mas
asi te espero
3 comentarios - Cita con un desconocido