Claudia vengativa... Cap 57 a 60

Claudia es una perra vengativa 57

Y Claudia esperaba la noche, seguía caliente y me notaba caliente a mi también. Después de cenar se fue el novio de la nena. Claudia me dijo que la esperara en la cama, que enseguida me alcanzaba, otra vez acostó ella a la nena, cuando vino yo estaba acostado en la cama, desnudo pero muy nervioso.
-Que le pasa a mi cornudo que esta tan nervioso… si me han cogido tanto… -me ató a la cama y empezó a bailar sensualmente, desnudándose lentamente, después me puso un forro y me montó, mi pija estaba bien dura. Se acercó a mi oído. – cuénteme que le pasa… le gusto como me dio el pepino el verdulero…
-mmm… -solo me mordía para no hablar, pero mi pija estaba al palo. Claudia estaba caliente también.
-Que pasa que te calienta tanto… contame… vamos… -y se quedo clavada sobre mí.-
-Una vez mi hermana salía con un muchacho… un albañil… que tenía un tatuaje muy parecido al de el verdulero… después de un tiempo que corté con una novia que tenía me entere que se la había cogido… mientras salía conmigo…
-aaaa… que lindo lo que me contas… que dura tenes la pija… volas de calentura… y te gustaba ver como este se cogía a tu esposa… además le chupaste la pija… noooo…? Que mirabas…
-Me llamaba la atención su brazo… ese tatuaje es muy parecido… y la forma física de él…
-Y que linda pija tiene… bien gruesa… como me gustan… y viste que bien me coge… que caliente estás… lo voy a tener que invitar más seguido… va a ser el único que venga me parece…
-Estás loca… y si te llena… aaaa…. -Y mi pija empezó a escupir leche.
-Que caliente te pusiste… hacía mucho que no estabas así… quédate tranquilo que no pasa nada… -me dio unos besos muy dulces, me desato y los dos dormimos, ella me abrazó bien fuerte y se pegó a mi pecho.
La semana siguió su curso normalmente, le pregunté a Lucía que hacía el viernes y me confirmo que se iba donde su novio. Claudia no me había dicho nada sobre nuestro fin de semana. Me llamaba la atención pero no quise preguntar nada. Temía que me pudiera responder. El hermano de Claudia se llevó a la nena a su casa, si se animaba se iba a quedar a dormir, me llamaba la atención que Claudia, no planeara nada.
Antés de la cena me dijo que me pusiera su tanga roja y un delantal, sin nada más de ropa y que fuera a cocinar, se acercó a verme con una copa de vino en la mano.
-Que linda esta la cocinerita… espero que cocines bien… por ahí te doy un premio… -claudia se fue de la cocina y al rato me pareció que sonaba su celular con un mensaje, no hice caso y seguí cocinando, lo próximo que vi fue a Claudia en la puerta de la cocina, con Mario, el verdulero agarrándola de la cintura, apoyándola desde atrás.
-Mira la cocinera que contrate para nosotros… -le dijo- tiene lindo culo no…?
-si esta linda…
-Y te gustó como te chupo la pija el otro día… para que me cogieras…
-si la chupa bien… tiene experiencia…
-vení… acércate… -me hizo arrodillar delante de ella, le apretó el bulto a Mario y libero su pija del encierro que estaba bien dura. La acercó a mi boca.- hacele un buen trabajo… -giro la cabeza y se comieron las bocas mientras yo lo chupaba y el le mandaba mano en las tetas y por la concha.
-Que jugosa estás…
-Estoy caliente… vamos al cuarto…
Se fueron los dos para la cama y ella lo montó, lo estuvo cogiendo un montón, tenía un vestido corto puesto sin ropa interior, puso sus pechos sobre el vestido y así lo montó, creo que ella tuvo un par de orgasmos. Después se salió de él que no había llegado y le pregunto si no quería cenar.
El vino desnudo a la cocina, su pija tenía una cabeza realmente gruesa, en varias oportunidades mientras los servía me tocó el culo, se hacía el gracioso, pero me lo apretaba y jugaba con sus dedos por el borde de mi ogt corriendo la tanga.
-Realmente tiene lindo culo tu marido…
-Si es mi sirvienta hoy… nuestra cocinera… -claudia se fue hacia el corrió la silla y lo montó de frente, el le comía los pechos, sentado donde estaban. Claudia se movía sobre él
-Que linda pija tenés… que bien me llena… y esta durísima… es hermosa tu pija… la siento especial… me llena muy bien… casi justa… me vas a dar la lechita adentro otra vez… pero más tarde… no todavía…
-Querés que te descargue adentro…
-Si… quiero… bien adentro… a ver si me haces una tripita… que lindo te queda este tatuaje… a mi marido le encanta… dice que te hace muy varonil… -y le acarició el brazo donde tenía el tatuaje.-
Ella volvió a llegar y pararon para comer. El sonreía, tomaba vino, estaba encantado con toda la situación. En un momento le pregunto por las nenas y Claudia le contó.
-La más grande ya no es tan nena… esta buena… la vi un par de veces…
-Sale a la mamá… pero es chiquita todavía…
-Tiene novio… y coge… tan chiquita no es…
-Tenés razón… sus buenos polvos se debe echar… con lo fuerte que esta…
-tiene a quien salir…
En ese momento se fueron apretándose, mordiéndose directo a la cama, ahora el la montó y ella cruzo sus piernas detrás de el atrayéndolo bien a fondo.
-Me la vas a dar toda… bien adentro… -decía con su voz de puta.- me vas a dar el jugo de ese pepino hermoso que tenés… eh… eee… me lo das… -dijo llegando una vez más, el la empezó a bombear más duro y acoplo su orgasmo al de ella, los dos gozaban como perros salvajes. Se mordían, cada vez estaban más calientes. Este encuentro era el más fuerte que habían tenido, Claudia era la primera vez que hablaba así de Lucía. Cuando se calmaron se acostaron uno a cada lado en la cama. Claudia me dijo que me fuera que querían estar solos, que iban a dormir juntos, que los despertara al día siguiente con el desayuno, me fui a dormir al sillón del living.

Claudia es una perra vengativa 58

Antes de acostarme en el sofá, me saque la tanga de Claudia, me puse un bóxer y cerré la puerta del departamento desde adentro, dejando la llave puesta por si llegaba a venir Lucía por algún motivo, no pudiera abrir. Me sentía más revuelto que nunca pero volaba de caliente.
De a ratos dormí y de a ratos, me parecía escuchar gemidos en el cuarto. Cerca de las once me desperté, fui a preparar el desayuno para los dos, me volví a poner la tanga de Claudia y con el desayuno listo golpee la puerta. Después de un rato de esperar Claudia me dijo que pasara, estaba en cuatro sobre la cama y Mario la bombeaba en esa posición, sus brazos pasaban debajo de sus pechos y la agarraba fuerte de los hombros.
-Te voy a dejar el último restito de leche que me dejaste hija de puta… me exprimiste la verga…
-Si me encanta como me coges… dame lo que te quede… me vas a hacer desbordar de leche… pareces un pendejo…
-tengo 30 nada más puta… no soy tan viejo. –decía mientras la agarraba ahora de la cintura y le daba bien duro.
-Que linda pija tenés y no perdes la dureza… aprovecha ahora… los viejitos como mi marido no pueden garchar tanto… se les pone blandita… -y me miro con cara de puta.- que lindo te queda el bulto en mi tanga… ahora si la tenes bien dura… lástima que guardada en mi tanguita… maricona… -el siguió bombeando hasta que se dejó caer sobre ella al acabar y los dos cayeron en la cama. Se movió un poco más y después se acostaron uno al lado del otro, se sentaron para desayunar, Claudia lo beso en la boca y me dijo después que les puse la bande en su regazo.
-Limpiale la pija… que esta toda sucia de mis jugos… sentí el sabor dale… maricona… -con bastante asco le limpie la pija, arrodillado al lado de la cama. El tipo me acariciaba el culo-
-tiene lindo culo tu marido… no me gustan los hombres pero es un culo para darle…
-Se lo harías vos…
-Quizás otro día… hoy estoy cansado… -y se comieron las bocas, Claudia me dijo que podía parar, se fueron después de desayunara a bañarse junto y después acompañe a Mario hasta abajo. Le agradecí como Claudia me había indicado.
Cuando subí Claudia me indicó acostarme junto a ella en la cama, se puso a horcajadas sobre mi y me dio su concha a chupar.
-Si move la lengua… aaaa…. Que hermosa noche… gracias amor… -y empezó a jugar apretando mi pija sobre la tanga.- Vas a acabar como un pajerito… todo adentro de mi tanga… después te vas a ir a bañar y la vas a dejar bien limpita… hoy con paja te alcanza… pero primero límpiame bien… -y dejo de apretarme.- que lástima que no me cojas… que bien me coge el verdulero… y tiene razón Lucia tiene 19… ya es toda una hembra… -y empezó a tener de nuevo un orgasmo y apuro el mío, que quedó dentro de su tanga, goteando por el calado de su ropa interior.- Cuanta leche que das… te encanta que me coja Mario… nunca das tanta… lo seguire invitando entonces… -se salió de mi y me dijo que fueramos a bañarnos. Que ella quería que le limpiara el cuerpo y viera si tenía muchas marcas. La estuve enjabonando y acariciando un montón de tiempo. Ella me besaba tiernamente en la boca. Después que se baño, fuimos a buscar a Nerea y el resto de fin de semana transcurrió en familia.
En la semana no paso nada, ella no vió a nadie y cogio con su secretario en su oficina con forro puesto porque no quería correr riesgos me dijo. Me hizo averiguar que hacía Lucía el fin de semana, parecía que empezaban a turnarse, esta vez le tocaba en casa. Se lo comente a Claudia y no me comentó nada.
El sábado a la noche se arreglo espectacular pollera corta. Esos aros que tanto me calientan se levanto la pollera mientras la miraba pintarse en el baño para que viera la tanga que tenía.
- Te quedas cuidando a Nerea… voy a ir a cenar con Mario… y después veremos para que da… a Lucía le dije que tengo guardia en el hospital… avísame cuando este en el cuarto con el novio… para que no me vea salir así vestida…
Cuando salió me hizo acompañarla hasta la puerta del ascensor y se quedo un largo rato besándome y haciendo que le acariciara el culo. Mientras me hablaba al oído.
-otra vez me voy a comer la pija de Mario… que lástima que no puedas estar… voy a volver cerca del mediodía… espero no volver muy caliente… por el novio de la nena digo… -y me metió ahora la lengua hasta la garganta casi.
Me encargue de los chicos, preparé la cena, le conte unos cuentos a Nerea hasta que se durmió y me fui a dormir al cuarto. Me quedé seco. Por suerte no pensaba en nada. Me desperté cerca de las once y Claudia no había vuelto. Volvió cerca del mediodía, paso directo al cuarto y nadie la vió por suerte, se tiró en la cama y me dijo que le fuera a chupar la concha, no tenía tanga. Empecé a chuparla con delicadeza. Estaba llena de leche. La chupaba suave recorriendo su concha. Ella gemía bastante, estaba muy caliente.
-Que lindo me cogió otra vez… le regalé mi tanga… es un trofeo para él… que lindo me coge… la semana que viene quiero que la mandes a la nena a comprar verduras… quiero dejarla a su alcance… -paré de chupar-
-estás loca…
-simplemente la dejo a su alcance… si la seduce es tema de ellos…
-Pero…
-chupa que para eso tenes la lengua… a no ser que quieras que vuelen tus cosas de la casa… todas al paliere… -seguí chupando ante su cara de satisfación. Después de un largo rato me dijo que saliera, que quería dormir un poco. Estaba muy cansada, mucho trabajo en el hospital, que les dijera a los chicos. Que la disculparan. Me dio unos buenos besos y me dijo que saliera, que se despertaba para cenar seguramente..


Claudia es una perra vengativa 59

Y así fue pasando el tiempo, Claudia solo lo veía a Mario, el verdulero, estaba encantada de coger con él, muchas noches de sábado que no estaba Lucía se quedaba a dormir con Claudia, después de casi dos meses un viernes Claudia me dijo que se había ido a hacer un análisis de sangre porque no se había indispuesto, el lunes había que buscar el resultado. Quería que fuéramos juntos a buscarlo. El fin de semana lo pasamos en casa, el sábado a la noche después de cenar, me ató a la cama desnudo, me montó sin ponerme forro.
-Me parece que vas a poder cogerme sin forro… estoy casi segura… aaaa… como me calienta esto… aaaayyy por favor… y que dura esta tu pija… me cogió demasiado el negrito ese… no te parece… se creen porque tienen una pija gruesa… bien dura y la mueven bien pueden hacer lo que quieren… no cielo…?
-No se que decir…
-No digas nada… tu dejar hacer ya habló… y en unos meses creo que mi pancita también…
-Si llego a estar llena… el martes lo vamos a invitar a Juan… el carnicero… quiero que piense que puede ser de él…
-Que hija de puta…
-No… hija no… me volviste vos una puta… me dejaste emputecer… ahora tenés lo que te mereces… -estuvimos un largo rato y no quiso que yo llegara ella llego en dos oportunidades.
El lunes a la mañana fuimos juntos, tomo el análisis sin abrirlo y fuimos a un café, me tomó de la mano y me beso metiéndome la lengua muy adentro en mi boca.
-Que momento amor… lo abrís vos… -Lo fui abriendo despacio y decía positivo. Mi cara mezcla de sensaciones lo dijo todo. Claudia me dejó plata y salió, se tenía que ir al hospital. Me dijo cuando salía que mañana íbamos a comprar carne, y me guiñó el ojo, estábamos en el bar de siempre lo saludo al mozo con una sonrisa y se fue revoleando ese ogt hermoso.
Al día siguiente se puso su calza y fuimos a comprar hacía un montón que Juan no la había cogido así que estaba más que encantado de hacer su entrega en domicilio. La recogió como siempre. Claudia le dijo mientras cogían.
-Estoy en período muy fértil… cogí con mi marido… pero por ahí vos preferís cuidarte… querés un forro…. –la empezó a taladrar con violencia mientras se comían las bocas. Que hija de puta pensé y me acorde de su corrección. Que puta y me causo gracia mis estúpidos pensamientos.
Cuando el se fue me hizo chuparle la concha un montón. Y después que la montara así.
-no te pongas forro… sentí la crema de Juan… que me da un montón… -yo le metí la pija y su concha estaba llena, caliente, cremosa, mi pija estaba redura
-cógeme así bien llenita… total no hay riesgo… ya estoy llenita… te gusta sentirla llena de otro… se siente rico…?
-Si me encanta que estés caliente… arde tu concha… y esta deliciosa…
-Para un poco y saboreara con la boquita… así te acordas el gusto de la leche de Juan… dale mamoncita… -le chupe la concha un largo rato, justo escuchamos la puerta del departamento, era Lucía que entraba con el novio, la puerta del cuarto estaba cerrada. Claudia me hizo montarla de nuevo.
-mira que lindo si te dejara llenarme ahora… y después me lo pudiera coger al pendejo… y que el también me de su leche… deci que es el novio de la nena… como será la pija de él… tengo que vérsela algún día… no te parece… -yo solo callaba y la bombeaba tratando de aguantar. No me dejo llegar, me dijo que no quería que acabara todavía, que saliera y la fuera a buscar a la nena.
Cuando volví de buscar a Nerea Claudia estaba cocinando para todos, estaba en la cocina, solo la calza sin ropa interior. Carlos hacía excursiones a la cocina a buscar cualquier cosa. Le miraba el culo sin disimulo. Su pija abultaba en su pantalón. Claudia seguí cocinando como si no pasara nada. Le pidió si le ponía tener la silla, que necesitaba buscar algo en el mueble del costado de la cocina, le dejo su culo en la cara, los colores de Carlos eran cada vez más rojos, en un momento Claudia se agacho un poco y golpeo con su culo la cara de él.
-Uy discúlpame… te lastime…? –el seguía muy colorado. Su pija abultando en su pantalón. Cuando bajo de la silla Claudia el salió para el baño. Supongo que se habrá pajeado porque salió más tranquilo. Claudia fue al baño después que el había dejado colgada a la vista su ropa interior. Me la mostró, estaba llena de leche. El pendejo se había pajeado con su ropa interior. Claudia se acariciaba suavemente su conchita. Mientras olía su ropa interior.
Después del almuerzo fuimos al cuarto, ahora si me hizo poner un forro y me montó quería que durara mucho y me hizo cogerla un largo rato. Después se dejo caer sobre la cama y que yo la montara. Me hablaba al oído.
-Cuando quieras llegar podes… que lindo… estoy llenita… y mira quien me llenó… el que menos esperaba… ese vago… atorrante… con esa pija gruesa… y bien dura… que me trata como a su hembra… que me hizo su hembra… descarga la leche en el forrito… dale pajero… movete que quiero descansar… -sus humillaciones me hicieron explotar un montón, ni bien empecé a acabar. Me decía.- si llena todo un forrito maricon… que otro llena a tu mujer… le hace una linda tripa… pajero… cornudo… -le mordí la boca, ella me devolvió la mordida.- ahora no podes mostrar los dientes… siempre tarde la maricona eh…?
Me salí de encima de ella y fui a ver que necesitaba Nerea que me llamaba. Deje la puerta del cuarto entreabierta, y al rato paso carlos, Claudia estaba desnuda sobre la cama. Entró a preguntarle algo a Claudia-
-Uy perdón… pensé que podía pasar… -ella tardo en taparse con las sabanas-
-Que necesitas… acércate veni… -el se acercó a la cabecera de la cama. Claudia tenía una mano bajo las sabanas y se pajeaba, no podía controlar su calentura.- Y lucía…
-se quedo dormida... –ninguno de los dos hablaba ni hacía nada. El se sentó en la cama. Yo no quise entrar al cuarto.
-No me masajearias un poco la espalda… que me duele mucho… -dijo girándose en la cama.- el no dijo nada y empezó a masajearla. Recorría la espalda de Claudia desnuda y cuando llegaba a su cola, trataba de ni rozarla, estaba asustado.- un poquito más abajo… -el le acariciaba ahora el comienzo de sus glúteos.- por ahí me duele más… masajeame un poco si… dale… -ella como al descuido apoyo su mano sobre el bulto de él y la dejo ahí el seguía masajeando sentado al costado de la cama, la posición era bastante incomoda para él. Claudia no saco su mano de arriba de su bulto y el no hizo nada. Simplemente seguía masajeándola. –gracias … -gracias le dijo ella, poniendo fin a la situación y me pareció que le apretó su bulto al sacar su mano. El salió de la habitación y volvió a pasara al baño. Claudia fue al baño después de el. Otra vez sus interiores tenían una descarga, me hizo chuparle la concha de rodillas delante de ella y volvió a tener un profundo orgasmo. Nerea dormía y nosotros dos fuimos a dormir la siesta.


Claudia es una perra vengativa 60

Claudia estaba más que feliz con su embarazo. Se sentía plena, tenía su grupo de amantes, su secretario. Para colmo la habían llamado de un laboratorio, querían que hablara en la presentación de un medicamento nuevo. Yo la acompañaba, porque había después un reunión, con brindis y demás. Mientras nos vestíamos, Claudia deliciosa con un vestido ajustado zapatos altos de taco. Una diosa total. Me decía en el baño mientras se pintaba.
-Hay un gerente del laboratorio que esta caliente conmigo… fue el que me propuso para hablar… yo le agradecí muchísimo… el quiere que salgamos después del evento… a tomar algo… a bailar… yo le dije que iba con mi marido… sabes que me contesto…?
-No ni se me ocurre…
-Te acordás del doctor blanco… el que me garchaba… el le dijo que vos eras un marido que disfrutaba siendo complaciente… en esos términos fíjate que elegante… la esposa del gerente está de viaje y quiere que lo acompañemos a su casa… a tomar algo… nada más… quiere aprovechar… te gusta el plan cielo…
-Pero… no se… y Nerea…?
-Se queda con Lucía y viene Carlos… el noviecito… podemos salir tranquilos… te gusta papi… -se levanto un poco el vestido y me mostro una tanga blanca que estrenaba, se giro y me mostro el caladito… mira que lindo calado…
Fuimos en el auto de Claudia yo manejaba. La reunión fue normal, Claudia hizo una charla bastante técnica de la que no entendí nada. Sobre el final de su charla se acercó a felicitarla el que después me enteré, era el gerente. La tomó de la cintura, con mucha naturalidad y le dijo algo al oído muy cerca de ella. Debía de tener unos cincuenta y pico, muy bien llevados. Ella le dijo también algo al oído y vino hacia mi. Nos quedamos un rato más y me dijo que nos fuéramos. Pensé que habíamos suspendido pero me dijo que el gerente le había dado la dirección y en media hora estaría en el lugar. Fuimos hasta su casa y nos quedamos esperando en la puerta que llegara. Nos hizo entrar el coche y el entró también el suyo. Pasamos a una sala inmensa con un montón de espejos, unos muebles de primera calidad, el fue a buscar champán y vino con nosotros.
-La felicito doctora… muy interesante su charla… pero la verdad que no podía despegar la vista de sus piernas… son realmente hermosas…
-Gracias señor Giménez… le agradezco el cumplido… que casa tan hermosa tiene ud…
Destapo el champagne y sirvió tres copas. Tomó el control remoto y puso una música suave. Me miro a mí.
-No le molesta si bailo con su esposa… supongo que estará acostumbrado… es muy atractiva realmente…
No esperaron mi respuesta y ya estaban moviéndose muy poco muy cerca uno del otro, el era un hombre de manos grandes, con un bigote espeso, la atrajo a Claudia hacia él y ella apoyo su cabeza en su hombro. Se movieron un rato así, y el empezó con su mano a acariciar el comienzo de sus glúteos. Claudia levanto su cara y se besaron, la otra mano de él empezó a masajear sus pechos. La mano de Claudia fue a apretar su bulto. Estuvieron un largo rato trenzados y besándose.
-No le molesta mirar… -me preguntó. Claudia tomó la palabra.
-No le hables… ignóralo… si querés saber algo pregúntame a mi… no tiene permiso para hablarte… te tiene que respetar… por desear tanto a su mujer… mira… vení querido… desnudame lentamente para el sr… demostrale lo que te gusta… movete… -me acerque y le empecé a sacar el vestido a Claudia, su corpiño era sumamanete calado, se notaban sus pezones duros y el se los empezó a chupar a través del corpiño. Metió su mano derecha dentro de la tanga y empezó a masajearle la pepa. Claudia tiro su cabeza hacia atrás su cara estaba colorada.
-Que manos hábiles tenes… -ella libero su pija y se puso de rodillas delante de él chupándosela con detenimiento. Se arrodillo y quedaba su hermoso culazo apuntando hacia mi. El la acerco hacia un sillón que había le corrió la tanga a un lado y la cogio así en cuatro como estaba. Ella giraba su cabeza y se comía la boca con él.
-Que linda… estás bien mojada… se nota que sos una perra caliente…
-Cuando hay un machito cerca… siempre me pongo caliente…. Si me saben calentar… -el se sentó luego en el sillón y la acomodó sobre él. Ella se mordía el labio inferior y saco sus pechos sobre el sujetador.
Estuvieron un largo rato así, Claudia me pareció que llegó en un par de oportunidades. Después el le dijo que fueran hacia el cuarto. A mi me dijo que quería coger a solas con él, que esperara en el comedor hasta que me llamara. Estuvieron un largo rato, bastante largo, ella me llamó después de la habitación, acostados uno al lado del otro totalmente desnudos.
-Chupame… el señor se esmero bastante… vení… acércate… sentí… -y ahí estaba yo de rodillas chupando la concha de mi señora.- chupa bien… -decía mientras empujaba mi cabeza.- sentís toda la lechita que me dio… es espesa no…?
Ella se fue a limpiársela a él mientras yo la seguía chupando.
-Dra. Me gustaría que trabajara conmigo… tenerla en nuestro laboratorio sería un honor…
-Sabe que pasa… estoy embarazada… y no creo que pueda asumir nuevos compromisos… -jugaban a no tutearse como si volvieran al trato lejano. Recién garchados hijos de puta pensé.
-En realidad te agradezco, pero tengo mi consultorio armado… trabajo bien… además podes conseguir a cualquier pendeja…
-A mi no me gusta cualquier hembra… y me gustan las de cuarenta y pico… cuando vuelva mi mujer se me complica… entonces si trabajaras conmigo… no necesitarías dejar tu consultorio…
-Pero a la mañana tengo hospital…
-Y reducí los días… vení aunque sea tres veces por semana… te puedo pagar lo que me pidas…
Si me decís que si, el auto que está abajo es tuyo… ahora mismo…
-Ayyy… no se siento como si me estuviera prostituyendo…
-No porfavor no lo tomes así… llévalo el auto igual… es un obsequio… aunque no quieras trabajar… -ella se la volvió a chupar y se la puso bien dura lo montó de nuevo.
-Lo voy a pensar… que linda pija tenes… pero mira que yo garcho con quien quiero…
-sos libre… pero no en el trabajo… en el trabajo serías solo mi secretaría… exclusiva… ni mirar a otro hombre…
-Pero a mi me calienta calentarlos…
-Pero en el trabajo ni siquiera quiero que los mires… sos mi secretaría… si te animas… ponele una cifra… -pararon de hablar el la volcó sobre la cama y empezó a taladrarla bien duro.
-Que rica concha tenes… solo tenés que hacer lo que más te gusta… perra hermosa… coger… y estar ahí… conmigo… no trabajo… para eso tengo un par de secretarias… ser mi hembra privada… decime que si puta preciosa…
-aaaa…. Llegó de nuevo… que rico… cógeme…
Claudia me indico salir de nuevo y que la esperara en el coche, bajo a la media hora, y se subió al auto de el. Era un auto importado. Me dijo que nos veíamos en casa. Que todavía no le había contestado.

0 comentarios - Claudia vengativa... Cap 57 a 60