Amanda, mi tia y otras mujeres de mi familia II

Ya había pasado casi un mes desde mi faena con Amanda, la extrañaba en cantidades, por razones de estudio no pude volver a verla y además me daba pena hacerlo. Como siempre frecuentaba a mi tía Nohra, un día llegó Amanda, ¡hola y ese milagro! Ingrato no has vuelto, es que he estado muy ocupado con exámenes. Mi tía Nohra se fue a la cocina. Pues cuando te desocupes vuelves me dijo y me sobó el muslo. Mi tía Nohra regresó con tintos.- Comenzamos a hablar, al rato Nohra hizo mención a que estaba un poco aburrida y quería irse unos días a otra ciudad cercana, Amanda le dijo, es que usted ya sabe que es lo que necesita, las dos se miraron y se rieron- Pues si, pero como usted no deja nada le dijo Nohra, Amanda rió y le dijo, todo se puede compartir, las dos rieron. No se por qué, pero noté algo de complicidad en esa conversación.

Amanda se comprometió a cuidar la casa de tía Nohra el fin de semana que pasaría por fuera. Usted que va a hacer me dijo Amanda, nada estudiar le dije. A bueno para que me acompañe a cuidar esta casa, por que a mi sola me da miedo, nos miramos a los ojos con malicia, bueno le dije. Nohra, miró a Amanda y le dijo: bueno que disfruten la estadía. Había algo de ironía en su frase, Amanda la miró y se sonrió. Las dos subieron al segundo piso, hablaron un rato, escuché risas algo nerviosas, al rato bajaron, nos despedimos y quedamos de vernos con Amanda el sábado al medio día.

El sábado Amanda me abrió la puerta y huyyyy casi se me para allí mismo, tenía puesto un vestido azul con una falda a mitad del muslo y con unas tiritas que dejaban ver sus hombros y parte de su escote. Tenía debajo medias veladas negras y zapatos negros de tacón alto. Que elegancia le dije.- Gracias, es que hoy nos vamos de fiesta, ¿Dónde? Le pregunté, rió aquí mismo, vamos a bailar, pero sin música. Yo tenía una sudadera y camiseta. Al rato nos sentamos ella lo hizo al frente mío en un sofá grande cruzó las piernas y me dejó ver sus medias, al voltearse un poco descubrí que eran medias de liguero, creo que al instante se me paró.

Bueno ¿cómo te ha ido después de la clase anterior? – Río- Bien le dije. Si, ¿me has pensado? Si mucho le dije. Bueno parece que te gustó. Ahora estamos aquí solitos estos dos días podemos hacer un curso completo si quieres. Le sonreí un poco nervioso. Venga me dijo, me pasé a su sofá, tengo algo que le va a gustar, se levantó la falda y me mostró sus medias hasta donde le llegaba el liguero, tengo puesta una ropa como la que usted estaba viendo el otro día en la revista de modas de cubrían hasta la mitad de las nalgas. Volteó y me mostró su cuca apenas tapada por los calzones de encaje. ¿Le gusta? Ahora le toca a usted. Me jaló de la mano y estando de pie me quitó la camiseta, luego la sudadera y los zapatos, dejándome solo en pantaloncillos, me acarició el pene, me abrazó y me besó mientras me tocaba las nalgas y la espalda, yo hacía lo mismo. No quería desnudarla, quería contemplar ese precioso conjunto. Estuvimos así un rato sobándonos hasta que ella me bajó los pantaloncillos, al tiempo se safó los bra y me puso las tetas en la boca, me gusta mucho que me las chupes, se las chupé un rato mientras le tocaba el culo y la cuca, ella no soltaba mi verga, enseguida se sentó en el sofá, me puso al frente suyo y comenzó a sobar el pene sobre sus tetas, era delicioso. Pasaba la punta de mi pene por sus pezones, de pronto cogió la verga y la puso frente a su cara me la pajeaba y la miraba, pensé que se la quería meter en la boca pues la abría y la cerraba, me miró y creo que no se atrevió.

Se recostó en el sofá y me dijo quíteme los calzones, se los quité dejándole el liguero y las medias, ella se tocó suavemente la cuca, la tenía empapada, se veía hermosa así. Voy a enseñarle otra posición para coger me dijo. Se dio media vuelta y se colocó en cuatro sobre el sofá, venga hágase atrás me dijo, me coloqué detrás de ella y se la metí, suavemente, se sent&iacut

e;a riquísimo viendo ese culote marcado por las tiras del liguero. Ayyy como extrañé ese palo, diossss, démelo asiii, comenzamos a movernos, le agarré las caderas y empecé a metérsela cada vez más fuerte. Ufff, huyyyy mi amor como te mueves de rico, asiii, volteó la cabeza y me dijo: ¿te gusta esta posición? Si le dije, se agachó un poco y levantó más el culo, sentí que le entraba más, seguí dándole fuerte, huy como se te ha puesto ese pene, dame, dame, esa cosota rica. Venga cambiemos me dijo, se safó de mi verga dio la vuelta y se acostó me puse sobre ella me subió las piernas a la espalda y se la clave, ayyy diosss, que rica, asiii entra toda, hasta el fondo, Le di un rato asiii mientras le cogía las tetas. De pronto me apretó y me dijo dale, dale que me vengo, dale, le hice duro, dame, ayyy, ayyy, aaaaaahhhhhhhhgggg, yaaaaaaa, uufffff , ah, aahh, ya, ya, ya, me la sacaste ufff, me detuve, ella se relajó y me miró, con la cara desorbitada, ufff me la sacaste mi amor, que rico, cuanto haciiia, diossss, ufff, se la saqué pensando que necesitaba descansar, aghhhh no la saques, pero ya estaba afuera, le acaricié los senos, huy no pensé, espera, se acomodó en el sofá, huy mi amor hacía no se cuanto que no tenía un orgasmo, que rico papito, me besó en la boca, venga, le voy a dar un regalito, me jaló hacia ella y de pronto cogió mi verga con su boca, primero la punta, la chupó, le pasó la lengua y luego se la empezó a meter y chupar mientras me acariciaba los huevos. ¿Le gusta? Sssi, seguía chupando, asiii ¿quiere que se la chupe asiii? Ummm, sentía que ya estallaba de placer, veía su rostro maduro pegado sobre mi verga, esa boca entrando y saliendo, más abajo, sus tetas, el perfil de los pelos de su cuca y su liguero negro. Estaba a punto de venirme. Ella se lo sacó y me dijo: venga quiere cogerme más, quiero que me la clave. Me sentó y se colocó encima abrazada a mi cuello, comenzó a subir y bajar, me besaba la boca y el cuello, sus tetas se pegaban a mi pecho, yo le cogía ese culote y sentía su liguero debajo de m aproveché para chuparle las tetas. Me apoyé en su culo y comencé a darle duro, ohhh que bueno, asiii mi amor, dámela, dame ese pene, dame esa vergota dura, asiii, huyyyy diossss, cógeme toda asiii, De pronto sentí que me venía, yaaa le dije, pensé que se la iba a sacar, pero antes empujó más fuerte, dame, dame, dame, daaaammmme, esa lechota, ufff agh, agh, agh, yaaaaaaa, sentí que me salían chorros ella se pegó a mi me chupaba el pecho y apretaba su cuca contra mi verga, ufff me llenaste amor, esta calientísima, nos quedamos un rato así, ella me beso, estaba como borracho. Ayyy diosss que polvote que me echaste, me llenaste la cuca, se salio y vi como le chorreaba la leche por sus piernas, se sentó en el sofá, la limpié y me dijo. No papito no saben lo que se pierden esas mujeres con usted, con semejante cosa tan rica, con esa forma de moverse y con esa lechota que le sale, mejor dicho, la que lo agarre no lo va a soltar.

Esa noche lo volvimos a hacer, esta vez comencé yo el juego al acostarnos, decidimos hacerlo desnudos, cuando la vi sobre la cama, me le acerqué y le dije que me gustaba mucho su cuca, ella abrió las piernas y me dijo, ¿Si? Pues es toda suya, me incliné sobre ella y comencé a darle lengüita sobre su pepa y sus labios, terminé chupándosela, ayyy carajoo, ay dios, que me haces mi amor, huyyyy dame esa lengüita, ufff que rica. Le di así un rato, me dijo que la tenía apunto de venirse que lo hacía muy bien. Has oído hablar del 69 me dijo, yo le dije que algo, se puso encima mío y comenzó a chuparme la verga al tiempo que colocaba su cuca sobre mi boca, nos comimos mutuamente un rato, luego la puse de nuevo en cuatro y se la clavé, luego lo hicimos de espaldas, pero acostados yo sobre ella, cuando ya estaba bien caliente se la volví a chupar y se vino nuevamente, huy amor esto si nunca me había pasado, nunca me la habían sacado chupándomela, que rico. Esta vez se la chupé recostada boca abajo mientras le tocaba sus nalgas, se la metí así mismo y cuando me iba a venir se la saqué ella dio la vuelta.- dámela en las tetas, asiii, asiii, essso papitooo, se las mojé todas ella se sobaba el semen, tomó un poco en su dedo y se lo chupó, luego me dice venga lo limpio para que no le manche las cobijas a su tía Nohra. Y comenzó a chupár

mela hasta que se me ablandó, así nos quedamos dormidos hasta el otro día.

El domingo fuimos a su casa, hablamos con su hija Mariela, yo fui a la U y en la noche nos encontramos nuevamente, tenía una visita de una vecina que se demoró en irse, casi a las once yo ya tenía sueño, nos fuimos a acostar, sequito el vestido, tenía los calzones azules de encaje de la primera vez que lo hicimos y un brassier negro. Se paseó un rato por el cuarto mostrándome todas sus ricuras. Cuando vio que me quedé en pantaloncillos se acercó y me dijo: Te quiero hacer maldades con mi boquita. Me quitó los pantaloncillos y comenzó chupármela y darme lengüita en la punta del pene. Me miró y me dijo: yo también te la quiero sacar así, se me puso a mil mientras seguía chupándomela. – Pero primero quiero una metidita como la de anoche. Se subió y me puso las tetas sobre la boca, las besé por encima de su brassier, luego subió e hizo lo mismo con su cuca, se separó los calzones y me dejó la raja frente a la boca.- Dame esa lengüita me dijo. Se la chupé un rato, sentí como se le mojó, esta vez le metí un dedo mientras se la chupaba, huyyyy mi amorcito lindoooo que lengua tan rica, comete mi tortita, aassííí papi, asiii,- Dame que yo también te la voy a chupa detuvo fuerte contra ella. Yaaaaaaa llegué, me la sacaste otra vez, que rico, diooosss. Que cosa más rica. Nos quedamos así un rato. Huy amor me calientas muchísimo, que cosa más divina, ufff que hombrecito tan rico, venga, Me hizo acostar y se abalanzó sobre mi verga, me la comenzó a chupar de una manera ansiosa y súper excitada, se hizo de lado de tal forma que podía ver su raja mojada y palpitante, se la comencé a tocar mientras me la chupaba y me pajeaba. Me miró y me dijo, quiero esa lechita aquí, se sacó la lengua y la movió, me lamió los testículos y el pene de arriba abajo, sentí que me venía y le dije, pegó sus labios a la punta de mi pene y me comenzó a pajear con más ritmo, sacaba su lengüita y me lamía la punta, ufff, yaaa me vengooo, mi leche comenzó a salir y a chocar contra sus labios entreabiertos, un chorro le pegó entre la mejilla y la oreja y alcanzó a mojarle el pelo, el semen brotaba de mi pene y se derramaba por la comisura de sus labios, jalaba mi pene hacia atrás, luego comenzó a lamerlo de arriba a bajo, se lo metió en la boca y chupo un poco fuerte, lo soltó y pude verle su cara llena de mi lechita alrededor de su boca y sus mejillas, corriéndole hacia el mentón, que rica mi amor, que polvito tan ricoo, así te la quería sacar, seguía besando y lamiendo mi verga.

Subió y se recostó a mi lado, tomó sus calzones y limpió el semen que tenía al lado de mi pene, verla así me excitó mucho, me subí encima de ella y se la metí nuevamente. Ella no lo podía creer, huyyyy que pasa papito, me quieres dar más, ¿huyyyy te quedó lechita? Que hombrezote tan rico, empecé a metérsela duro, le subí el brassier y le chupé las tetas, le veía esa boca llena de mi leche y eso me excitaba más. Huyyyy papito rico que me haces, ah. Se la metí así un rato, luego le di la vuelta y la puse en cuatro le metí la verga hasta el fondo, ella se agachó, paró el culito y lo comenzó a empujar hacia atrás, se veía riquísima. Luego me acosté de lado sin sacársela y comencé a darle mientras le agarraba las tetas y le besaba el cuello, la voltee un poco y le chupé las tetas, ella me tocaba el pene y los huevos. Comenzamos a hacerlo despacio, ella me miró y me dijo: ¿huy si tu tía Nohra supiera lo que estamos haciendo? Si, ¿por qué? Pregunté mientras se la metía suavemente. Ufff, creo que esto es lo que le falta a ella ¿aahh? hace mucho tiempo que no se hecha un polvo. Ella me ha contado. Ufggg, esa conversación me puso caliente se la metí más duro, pero despacio. Uuuaaaaaafff que pene. Le chupé de nuevo las tetas, ¿y usted que le ha dicho? Pregunté. Ella me miró y se rió maliciosamente, se dio cuenta que me gustaba hablar de mi tía. Yo le digo cada rato que lo mejor para ese aburrimiento a esta edad es el sexo& aghhhh…. ufff, ufff, pero ella no se atreve. ¿Por qué? Pregunté- le da miedo meterse con cualquier hombre que no conozca bien. ¿Siiii?- le dije mientras se la hundía nuevamente. Huyyyy esa po

llota está cada vez más dura. ¿Te gusta que hablemos de tu tía no?… ja, ja, ufff, uffyyy, si respondí, siiii, aghhhh ¿te excita? Si le respondí y se la metí más fuerte. Aggghhyyyy, eso veo, aghhhh, diosss, que vergotaaa, uufffff, nosotras hemos hablado de ti. ¡SSII!! Me sorprendí y me detuve, siiii sigue, dame& aghhhh, yo le he dicho que te tengo muchas ganas… aghhhh, que tú eres el muchacho que ella necesita. Aygggghh, ella me ha dicho que lástima que seas su sobrino, que estás muy bueno& agh con cierto pudor, está bien conservada todavía, y con tanto tiempo sin coger debe estar calientísima ja, ja, ja, se la comencé a mover sentía que estaba a punto y lo hice despacio. Aghhhh, dame esa cosotaaa, uufffff. Le limpié parte del semen de su mentón con mi dedo y se lo metí en la boca, se lo chupó, ummm que rico, me gusta tu lechita, hice nuevamente lo del dedo, ummm, ummm, aghhhh, esta es tu primer lechita de verdad papito… uuuummm, ¿te imaginas tu tía como estaría de feliz con esta lechota?… ah. Ummm, me cogio suavemente la cara me miró y me preguntó- ¿serías capaz de comerte a tu tía? ahhhhh, dime. Dime, aghhhh, Siiii respondí, — ¿Siiii? Uufffff, ¿de verdad? Aahh, si repetí, mañana le cuento.. ¡!!Nooo! le dije, tranquilo no le voy a contar esto que hablamos, aghhhh, solo, aghh, que estuvimos juntos estos dos días ¿siiii?, bueno dije— dame, dame, aghhhh, ayyy diossss, se la clavé duro, sentí que me venía me levanté un poco, ella se cogió las tetas y cerró los ojos, me la saque y subí rápido hasta dejarla cerca de su cara, antes de llegar me salio el primer chorro, le pego en el cuello, al sentirlo, levantó la cara y abrió la boca, el otro chorro le entró justo en la boca, se la metió y me la chupó, sentí que me venía dentro de su boca, uuuuuuummmm, creo que se la tragó, sacó la verga y me miró, huyyyy otro pedido de leche que bueno, ja, ja, ja, ja. Está muy bien asiii, que rico papito lindo… Ummm, me besó el pene y el estómago, me abrazó y me jaló hacia ella nos quedamos acostados abrazados un rato y en silencio. Al rato nos paramos para ir al baño. Bueno – me dijo mientras nos acostábamos, vamos a ver como se porta tu tía Nohra, de pronto hasta se anima mañana mismo, ja, ja, ja. Me quedé dormido pensando en la tía Nohra. Por lo menos se iba a merecer unas buenas pajas si no pasaba nada.

Autor: Yold

1 comentario - Amanda, mi tia y otras mujeres de mi familia II

caritoydavid
Excelente relato, esperamos el proximo con ansias.