Despues de la sorpresa II

A los que leyeron el primer post: todo lo que conté es absolutamente cierto, que mi mujer es muy perra, lo sé mejor que nadie (y falta mucho por contar), y es mas perra cuando está conmigo. Lo que no te mata te fortalece, y lo que algunos ven como infidelidad, es en realidad algo hecho de a dos que son complices, no es para cualquiera. Aclarado el punto sigo. Viviamos en un edificio donde vivían más parejas jovenes, y realmente había un muy buen ambiente. Nosotros pasabamos esos fines de semana lluviosos del invierno de Bs As encerrados y cogiendo a lo loco. Al cabo de unos meses, empezamos a trabar mas amistad con una pareja tambien de nuestra edad. Los viernes y sabados, nos juntábamos a ver peliculas y cenar en alguno de los departamentos. Un buen día alquilamos una porno y a partír de ese momento se convirtío en costumbre. Había atracciones cruzadas, a mi me gustaba mucho la flaquita y al marido lo perdía el culo de mi mujer. El ambiente se iba calentando de a poco, una noche dormimos los cuatro en la misma cama pero cada cual cogiendo con su cada cual, ya no había vuelta atras. La vez siguiente simulando un enojo mi vecina lo hechó al marido y le dijo que si tan caliente estaba con mi mujer, que se fueran a cojer al otro departamento. Ni bien se cerró la puerta, se me vino encima y se sentó en mi pija, me cabalgó muy despacito, era tan menudita que parecía que la iba a partir en dos mientras se movia yo le amasaba las tetas, largo rato estuvimos así hasta que le acabé como una bestia, chorreando leche se me hecho encima del pecho, estuvimos un rato así hasta que se puso a mi lado haciendo cucharita. Al poco tiempo ya estaba repuesto y con ganas de hacerle la cola, cosa que ella no quería ni en joda, decía que mi pija es muy ancha. A cambio me regaló un delicioso polvo así como estábamos, yo abrazandola con mi brazo derecho y con la mano izquierda pajeandola, en resumen un hermoso polvo, nos quedamos dormidos así como estabamos y cuando volvieron el marido y mi esposa descansamos un poco todos. Ya en la intimidad mi mujer me dijo que lo había cabalgado un rato y que el amigo del vecino solo se puso al palo cuando se dío el gusto de hacerle la cola. Esta situación se dió un par de veces mas, en una de ellas cuando salgo del dormitorio para ir al baño, la encuentro a mi mujer cabalgandole la pija a mi vecino que estaba en el piso, ese culo y la cara que puso ella eran una invitación para un doble penetración, me le puse atrás y se estremeció cuando sintió la punta de mi verga en el orto, entré como un tren expreso y le dí hasta que no pude mas de la calentura y le llené el culo de leche, me levanté y me fuí a la cama y quedaron los dos como los había encontrado. Hubo una noche en que no se pudo hacer nada porque ellos tenían visitas de familiares que se quedaron hasta casi las 6.30hs de la mañana. La flaca trabajaba temprano y no quería hacer nada (sospecho que no quería que su jefe se diera cunta que la habian cojido antes que el), lo único que le pude sacar fué una mamada sin acabar porque se le hacía tarde. Cuando se fué y mi mujer se quedó con nosotros dos, nos llevó de nuevo a la cama porque quería repetir la jodita. Fueron cerca de siete horas en que le dimos por todos lados, como no es muy fanatica de que le acaben en la boca fué todo concha y culo. Un partido que terminó con victoria mia por 5 polvos a 4, en uno de los orgasmos mi mujer sintío como un calambre, estaba desatada. De los nueve polvos cinco en el culo, que recíen al final aparecía dilatado y no paraba de solta leche. Esa noche no dormimos, nos derrumbamos, me dolia todo, creo que estuvimos como una semana sin sexo hasta que nos recuperamos. Despues de eso, nos mudamos del gran Bs As al centro y poco a poco dejamos de vernos aunque el cada tanto venía y repetíamos el sanguchito pero no como esa vez. Yo había puesto los ojos en una vecina de la oficina y mi mujer se habia encontrado con el compañero de oficina, ese que cuando le sacó la poronga del culo, le mancho la pollera con vaselina. Ella decía que el era de tiro corto pero que esa poronga valía la pena. Mi vecina, Lau era una bestia infernal con unas piernas larguisimas que terminaban en una hermosa cola (no llegaba a ser como la de mi mujer) unos pechos impresionantes y unos ojos que te miraban y te tiraban al piso. Fue vernos y flecharnos (lleva mas de veinte años) A mi mujer no le gustó ni un carajo al principio, aunque despues se conocieron y se llevan bastante bien, aunque jamas estuvieron juntas en la cama, pero se desató una competencia amigable para ver cual de las dos me parecía mas puta. A mi mujer le quedó el titulo de "mi putita", y a Lau el de "mi puta", simplemente porque ella era un año mas grande que mi mujer. Eso lo cuento en otros momentos, porque es muy largo de contar. Algunos creen que la pareja abierta, el swinger y demas son inventos recientes. Yo lo he disfrutado y lo disfruto durante años

Pd: Si el relato le resulta un poco vago en los detalles, si no hago nombres, es porque no quiero que nadie se vea aludido y no sé si visita esta página. El mundo del sexo real es todavía mas intenso y mas fuerte que una película porno. Ves mujeres por la calle que parecen terribles trolas y en la cama no son ni la sombra. Y una simple ama de casa, esa que ves tan sencilla en la calle te puede vaciar y convertir en su juguete sexual.

4 comentarios - Despues de la sorpresa II

Jumatan
Bueno el relato.
Se puede mejorar la redacción y puntuación.
Gracias
elfacalarga +1
excelente relato y con moraleja! jaja, coincido, mi mujer es mucho mas puta que las pelotudas con las que la corneo, les hago de todo, pero no hay como mi mujer, en verdad para dejarla satisfecha cuesta bastante
kramalo
muy bueno..!! me perdi varias veces, debido a la puntuación. Fijate, porque a veces no se entiende. pero está muy bueno...sigo leyendo...