Una noche me encontraba solo en mi casa, muy caliente, con ganas de comerme una verga. Tenía 22 años, ya había tenido varios encuentros con mi primo y otros hombres, pero quería probar algo nuevo, mas excitante, mas morboso, como hacer un pete en la calle o en un auto.
Era un viernes, cuando a eso de las 1:30-2 de la madrugada, me pongo una tanga que tenía guardada, un jean y una remera oscura, y me dispongo a salir a caminar por el barrio, cuando llegaba a una esquina, me quedaba parado esperando que pase algún auto y me quiera levantar como a una prostituta, por lo que cada vez que pasaba uno, me ponía de espalda y me tocaba la cola..
Al cabo de una hora cuando no estaba pasando nada, me decido volver y a una cuadra de mi casa lo vuelvo a intentar al pasar un auto, que de a poco disminuye la velocidad, pero sigue de largo. Sigo mi camino, y vuelve a pasar el mismo auto, pero ahora si para, baja la ventanilla un señor mayor de unos 58-60 años, que me pregunta que estaba buscando.. hacer un pete le digo, y me hace subir.
Me subo, arranca y le pregunto hacia donde vamos, me dijo que buscaba alguna calle oscura donde pueda estacionar. Mientras tanto íbamos hablando y le iba tocando la pierna y el bulto por sobre el pantalón. Cuando encuentra un lugar, estaciona y se baja el pantalón, me toma de la cabeza y empiezo hacer lo mio, besarle la verga, pasarle la lengua por todo el tronco, y de a poco ir comiendomela toda mientras se le iba poniendo mas dura.. no era muy grande, pero la situación, más que era un maduro, lo estaba disfrutando mucho.
Cuando me estaba cansando y poniendo incomodo con la posición, me arrodillo sobre mi asiento, dejando la cola levantada, me desabrocho el jean y lo bajo un poco, dejando ver que llevaba una tanga puesta. El hombre se pone loco y me empieza a tratar como putita y dar chirlos, lo cual me pone mas puta todavía, le chupo unos dedos y empieza a jugar con mi cola.
Al cabo de un rato me pide que nos vayamos al asiento de atrás, casi desnudos, le sigo chupando la verga para que siga dura y me pide que me ponga en 4, me empieza a comer la cola y le pido que me pegue, dejandome la cola bien roja. Se acomoda en la parte del medio y me subo encima, y lo empiezo a montar, mientras me seguía pegando y apretando la cola. Cuando estaba por terminar, el quería acabar adentro, pero yo la quería en la boca, asi que en una pequeña discusion, me salgo y nos acomodamos rápido para que me la tire en la boca y en la cara.
Nos acomodamos, y me dijo que me acercaria a donde me había levantado, pero me terminó dejando más lejos de lo que pensaba, asi que volví a mi casa caminando, pero la noche no termina ahí...
Salí a chupar una verga y volví con el culo roto.
Era un viernes, cuando a eso de las 1:30-2 de la madrugada, me pongo una tanga que tenía guardada, un jean y una remera oscura, y me dispongo a salir a caminar por el barrio, cuando llegaba a una esquina, me quedaba parado esperando que pase algún auto y me quiera levantar como a una prostituta, por lo que cada vez que pasaba uno, me ponía de espalda y me tocaba la cola..
Al cabo de una hora cuando no estaba pasando nada, me decido volver y a una cuadra de mi casa lo vuelvo a intentar al pasar un auto, que de a poco disminuye la velocidad, pero sigue de largo. Sigo mi camino, y vuelve a pasar el mismo auto, pero ahora si para, baja la ventanilla un señor mayor de unos 58-60 años, que me pregunta que estaba buscando.. hacer un pete le digo, y me hace subir.
Me subo, arranca y le pregunto hacia donde vamos, me dijo que buscaba alguna calle oscura donde pueda estacionar. Mientras tanto íbamos hablando y le iba tocando la pierna y el bulto por sobre el pantalón. Cuando encuentra un lugar, estaciona y se baja el pantalón, me toma de la cabeza y empiezo hacer lo mio, besarle la verga, pasarle la lengua por todo el tronco, y de a poco ir comiendomela toda mientras se le iba poniendo mas dura.. no era muy grande, pero la situación, más que era un maduro, lo estaba disfrutando mucho.
Cuando me estaba cansando y poniendo incomodo con la posición, me arrodillo sobre mi asiento, dejando la cola levantada, me desabrocho el jean y lo bajo un poco, dejando ver que llevaba una tanga puesta. El hombre se pone loco y me empieza a tratar como putita y dar chirlos, lo cual me pone mas puta todavía, le chupo unos dedos y empieza a jugar con mi cola.
Al cabo de un rato me pide que nos vayamos al asiento de atrás, casi desnudos, le sigo chupando la verga para que siga dura y me pide que me ponga en 4, me empieza a comer la cola y le pido que me pegue, dejandome la cola bien roja. Se acomoda en la parte del medio y me subo encima, y lo empiezo a montar, mientras me seguía pegando y apretando la cola. Cuando estaba por terminar, el quería acabar adentro, pero yo la quería en la boca, asi que en una pequeña discusion, me salgo y nos acomodamos rápido para que me la tire en la boca y en la cara.
Nos acomodamos, y me dijo que me acercaria a donde me había levantado, pero me terminó dejando más lejos de lo que pensaba, asi que volví a mi casa caminando, pero la noche no termina ahí...
Salí a chupar una verga y volví con el culo roto.
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