Hace como diez años cumplía mis 18 años, para festejar hice una juntada/fiesta en mí casa. Invite a variedad de amigos y amigas para poder festejar. Entre esas personas estaba Eliana, una amiga con la cual teníamos onda, nunca había pasado nada pero hace tiempo veníamos con un coqueteo. Ella era una morocha, metalera, pelo largo y negro, un cuerpo normal pero unas tetas descomunales, de las mejores que me cruce.
Cuando todos los invitados estaban en al mesa (aproximadamente éramos 7 personas) nos pusimos a comer, a tomar, a charlar y disfrutar de la noche. Yo me senté al lado de Eliana y cada tanto rozamos nuestras manos o hacíamos chistes con tal de tener un contacto físico, se sentía esa chispa de dos personas que se gustan pero no saben cómo llevarlo adelante.
En un momento nos quedamos sin bebida, entonces había que salir a comprar, cuatro personas se organizaron para ir a comprar. Íbamos a quedar tres personas en la casa, Eliana, un amigo y yo, claramente le dije a mi amigo
-Anda a acompañarlos que vos sabés dónde queda el kiosco, toma, lleva mí llave.
Quería que se vayan todos a toda costa jaja. Así como esa puerta se cerró y todos estaban afuera me di vuelta, tomé a Eliana del brazo para que se levante y le comí la boca, realmente no aguantaba un minuto más sin besarla. No la solté del brazo y la lleve a mí pieza, sabía que teníamos poco tiempo.
Una vez en mí cuarto volví a intentar besarla y me esquivo, la quise agarrar y era extraño porque parecía querer y al mismo tiempo resistirse. Entonces le dije
-Vos vas a ser mía y ahora me la vas a chupar
Yo le tenía muchas ganas a ella y en realidad dije eso para ver una respuesta, si me decía que no lo dejaba ahí y si me decía que si avanzaba, pero lo que me dijo fue mejor de lo que esperaba la
-¿Si? Obligarme
Esto lo dijo con una actitud retadora que llevo mí calentura a niveles máximos. Entonces la tomé del cuello y la tiré contra una pared, la besé nuevamente y en correspondió, y sin soltarla la puse de rodillas, saque mí verga y sin perder un momento ella la tomo entre sus manos y la rodeo con su lengua, no dejaba de lamerla hasta que la metió en su boca, que cálida que era su boca. Se la llevaba hasta el fondo y tenía arcadas de tanto que la trataba. En un momento la tomo del pelo y empiezo a cogerle la boca, era la primera vez que hacía eso. En un momento se la saco de la boca para que respire y me dice
-Pegame, dame una cachetada
No les voy a mentir, le di una cachetada, pero fue lo más tímido que pegue alguna vez jaja, ella me mira no muy convencida y me dice
-Pegame fuerte
Eso debió encender algo en mí porque dijo eso y le di una cachetada que sonó en todo el cuarto, ella tiró el rostro y cuando volvió a mostrarme su cara tenía una sonrisa completa dibujada en su rostro. De ahí volví a cogerle la boca, cada tanto volvía a sacarla y pegarle cachetadas, hasta que me saca la lengua , abre su boca y pide
-Escupime
Nunca lo había hecho, pero con esta chica ya no tenía miedo, recuerdo que le escupí en la boca y en la cara, le di un cachetazo, metí mí verga hasta el fondo de su boca y le dije
-Sos un trola, hija de puta, mira como chupas verga, te voy voy a llenar la cara de leche
Decirle eso le gustó, pero no conforme me responde
-¿En la cara? No, yo no voy a desaprovechar ni una gota de leche
En ese punto no aguante mas, volví a meterla en su boca con una violencia que hasta antes de esto pensé que no tenía y termine explotando dentro de su boca, sentí que acabé muchísimo y digo sentí porque no llegue a ver esa leche, ella sin perder el tiempo se trago cada gota que le largué.
Yo hubiera seguido, pero no terminamos de bajar la calentura que siento que golpean la puerta principal, eran mis amigos que habían vuelto, solo que no sabían abrir la puerta. Fui a abrir y la noche paso de lo más tranquila, no pude volver a tener un segundo a solas con ella, pero el recuerdo de ese regalo todavía lo guardo en mí memoria.
Si leíste hasta acá significa que te gustó, espero tus puntos y comentarios diciendo lo que te pareció mí experiencia, gracias.
Cuando todos los invitados estaban en al mesa (aproximadamente éramos 7 personas) nos pusimos a comer, a tomar, a charlar y disfrutar de la noche. Yo me senté al lado de Eliana y cada tanto rozamos nuestras manos o hacíamos chistes con tal de tener un contacto físico, se sentía esa chispa de dos personas que se gustan pero no saben cómo llevarlo adelante.
En un momento nos quedamos sin bebida, entonces había que salir a comprar, cuatro personas se organizaron para ir a comprar. Íbamos a quedar tres personas en la casa, Eliana, un amigo y yo, claramente le dije a mi amigo
-Anda a acompañarlos que vos sabés dónde queda el kiosco, toma, lleva mí llave.
Quería que se vayan todos a toda costa jaja. Así como esa puerta se cerró y todos estaban afuera me di vuelta, tomé a Eliana del brazo para que se levante y le comí la boca, realmente no aguantaba un minuto más sin besarla. No la solté del brazo y la lleve a mí pieza, sabía que teníamos poco tiempo.
Una vez en mí cuarto volví a intentar besarla y me esquivo, la quise agarrar y era extraño porque parecía querer y al mismo tiempo resistirse. Entonces le dije
-Vos vas a ser mía y ahora me la vas a chupar
Yo le tenía muchas ganas a ella y en realidad dije eso para ver una respuesta, si me decía que no lo dejaba ahí y si me decía que si avanzaba, pero lo que me dijo fue mejor de lo que esperaba la
-¿Si? Obligarme
Esto lo dijo con una actitud retadora que llevo mí calentura a niveles máximos. Entonces la tomé del cuello y la tiré contra una pared, la besé nuevamente y en correspondió, y sin soltarla la puse de rodillas, saque mí verga y sin perder un momento ella la tomo entre sus manos y la rodeo con su lengua, no dejaba de lamerla hasta que la metió en su boca, que cálida que era su boca. Se la llevaba hasta el fondo y tenía arcadas de tanto que la trataba. En un momento la tomo del pelo y empiezo a cogerle la boca, era la primera vez que hacía eso. En un momento se la saco de la boca para que respire y me dice
-Pegame, dame una cachetada
No les voy a mentir, le di una cachetada, pero fue lo más tímido que pegue alguna vez jaja, ella me mira no muy convencida y me dice
-Pegame fuerte
Eso debió encender algo en mí porque dijo eso y le di una cachetada que sonó en todo el cuarto, ella tiró el rostro y cuando volvió a mostrarme su cara tenía una sonrisa completa dibujada en su rostro. De ahí volví a cogerle la boca, cada tanto volvía a sacarla y pegarle cachetadas, hasta que me saca la lengua , abre su boca y pide
-Escupime
Nunca lo había hecho, pero con esta chica ya no tenía miedo, recuerdo que le escupí en la boca y en la cara, le di un cachetazo, metí mí verga hasta el fondo de su boca y le dije
-Sos un trola, hija de puta, mira como chupas verga, te voy voy a llenar la cara de leche
Decirle eso le gustó, pero no conforme me responde
-¿En la cara? No, yo no voy a desaprovechar ni una gota de leche
En ese punto no aguante mas, volví a meterla en su boca con una violencia que hasta antes de esto pensé que no tenía y termine explotando dentro de su boca, sentí que acabé muchísimo y digo sentí porque no llegue a ver esa leche, ella sin perder el tiempo se trago cada gota que le largué.
Yo hubiera seguido, pero no terminamos de bajar la calentura que siento que golpean la puerta principal, eran mis amigos que habían vuelto, solo que no sabían abrir la puerta. Fui a abrir y la noche paso de lo más tranquila, no pude volver a tener un segundo a solas con ella, pero el recuerdo de ese regalo todavía lo guardo en mí memoria.
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1 comentarios - Mí regalo de cumpleaños