Hola a todos, como están? Soy Ceci. Se que pasó bastante tiempo desde el relato anterior, pero por distintos motivos (falta de tiempo, ganas de escribir, trabajo de ambos y algunas cosas que no vienen al caso) estuvimos ausentes. Seguimos juntos, obviamente seguimos con el estilo de vida Hotwife-Cuckold, y vamos a ir retomando con los relatos con la cronología como se dio todo. Quiero decir que vamos a tratar de no saltear nada relevante más allá de donde estemos hoy en día con nuestra sexualidad.
Bueno pasada la entrevista empezamos una nueva etapa motivada por mis inquietudes personales. Nos juntamos a comer con Eze a los dos o tres días y, como les había adelantado en la nota, le comenté que quería que empezara una búsqueda activa de un hombre moreno y le dí ciertas características precisas: 1,80 a 1,90, dotado (no zarpado, algo así como 20 cms - 23 cm como máximo), delgado (si es musculoso, cuerpo trabajado mejor), 25 a 40 años (no más sin excepción), entre las más importantes. Le pedí que hiciera la búsqueda y fuera viendo alternativas en una página en especial y que una vez qué abriera algunos chats y contactos me dijera así hablaba con ellos.
Pasaron varios días porque en Argentina no es como en Estados unidos, no hay muchos morenos, negros de color, así que tengo que reconocer que Eze hizo un trabajo más que importante, revisando muchos perfiles y hablando con un montón de gente. Agregando que en esas paginas está lleno de pajeros que fabulan y cuando le pedís una foto se borran o no son lo que decían ser o no se animan a un encuentro. Bueno resumiendo para no aburrir, consiguió 8 perfiles, con experiencias bastantes creíbles de otras hotwifes o parejas, y empezamos a chatear. En los chat saqué de escena al cornudito y me contacté a solas con ellos, mostré una foto mía normal y en 3 casos avancé un poco más mostrando mi fuerte que son las lolas, porque realmente me interesaban. Dos colombianos solo que 1 solo de ellos viviendo acá en Bs As y el otro en San Andrés, Colombia, y un Venezolano viviendo acá. Los tres re buena onda, ya con fotos de sus miembros (como le pedí a Eze para no perder tiempo), pero sin apuro y con la experiencia que se notaba al hablar que daba indicios que eran gente acostumbrada a estar con parejas.
Me gustó mucho y me re calentó la previa. El cornudito viniendo a mostrar los perfiles y yo haciéndolo opinar de sus penes fue algo muy excitante. Les comparto un dialogo que recuerdo a diario ja:
-Este me gusta Eze, que opinás?
-Que si te gusta está bien Ceci jaja, es grandote y además cuando hablamos me pareció alguien lógico.
-La pija que te parece?
-Que se yo Ceci, no sé, eso es personal tuyo, si a vos te gusta…
-No, quiero que me digas que opinás vos -le dije sonriendo desafiante- A ver, vamos de a poco…la cabeza como la ves?
-No sé a que te referís?
-A que me voy a referir?, a ver probemos de nuevo, descríbeme la pija como si no hubiera visto la foto, te escucho.
-Bueno. La tiene grande, de 20 cms x 5,50, 6 dice el, a mi no me parece que tenga 6 de ancho porque la cabeza se la veo más chica en relación al resto. La tiene un poco doblada, depilada y prolija.
-Jajajaja excelente, viste que podés?, tenés que soltarte nomás, jajajaja me tenté cornudito.
Me dio mucha gracias que de la nada me hizo una super descripción y juro que por unos minutos estuve tentada y me excitó verlo así: detallista, comprometido para darme el gusto de la descripción que le pedía.
En cierto punto verlo expuesto, humillado me gustaba. Finalmente, este no quedó porque no me convenció que era algo canchero, pero les conté la anécdota porque hasta el dia de hoy me la acuerdo y me caliento.
En definitiva, hasta ahora avanzamos con el Venezolano que fue el que más disponibilidad tuvo siempre. Coordiné con Diego (32 años) que aceptó que Eze estuviera presente y ciertas cosas que charlé previamente que quería de encuentro con el en algún momento. Llegó el día:
-Eze, el sábado me encuentro con Diego, el Venezolano. La idea es tomar algo y si dá nos venimos para acá que me siento más cómoda, ok?
-Bueno Ceci dale, vos querés que te acompañe?
-Nono, vamos acá cerca a tomar algo y veo que onda. Nos encontramos alas 21 y cualquier cosa después venimos para acá. Quiero hablar con vos de otro tema, relacionado claro.
-Si Ceci decime.
-Viste que yo hace rato que tengo esta fantasía de estar con alguien Moreno?
-Si Ceci, ya sé, de hecho hace más de 1 mes y medio que venimos buscando a alguien.
-Bueno, en ese mes y medio no estuve con nadie, no tuve nada, más allá de un encuentro con vos y de las veces que me hacés sexo oral.
-Si Ceci.
-Bueno, yo quiero aprovechar este encuentro con alguien como Diego que tiene experiencia, que parece educado y coherente, que avancemos un poco más hacia lo que me gusta…
-A que te referís Ceci?
-Sabés Eze que quiero que participes un poco más, como sumiso, que te animes y te dejes llevar. Quiero que le hagas sexo oral a mi amante…
-Es que Ceci, hablamos ya…
-Si y nunca me dijiste que No determinante, quiero lograr esto, fantaseo mucho con esta idea, me toco muchas veces pensando esto, es algo que harias por mi y quiero que lo hagamos.
-Es que vos sabés que soy heterosexual, no me atraen los hombres
-Lo tengo clarísimo, pero te atraigo yo, sos mi cornudo y cada vez más sumiso, y quiero verte haciéndolo. Lo que hagas es para mi, para complacerme, cuántas veces me dijiste que querias ser mi sumiso? Complacerme?, bueno esta es una forma, esto es SER sumiso. Hacer algo para complacerle sin que sea algo que quizás te guste, lo que te gusta es complacerme.
-Si eso lo sé y lo tengo claro…
-No vas a ser menos hombre, pero si vas a ser más sumiso y más mío.
-Que se yo Ceci, no sé, no sé si estoy preparado para ir tanto más allá.
-Hagamos algo: empecemos despacio, tomemos contacto de distintas formas y después hacés “algo” y me dejás a mi con el. Pero hagamos algo. En el medio si no podés, me decís la palabra LIMITE y listo frenamos y chau. Que te parece?
-Bueno dale Ceci, quiero que estes satisfecha y verte caliente.
-Me vas a ver caliente como nunca. Te pido que la palabra LIMITE sea precisamente eso, algo de ultima si ves que es imposible que avances, si no podés es valido y lo acepto, pero esforzate.
-Bien Ceci, entiendo que es algo de ultima.
Mi objetivo era estar con alguien de color, pero fundamentalmente que en ese encuentro Eze fuera más allá y tomara el rol de cornudo total.
Llegó el sábado me preparé en casa lo más provocativa posible pero sin dar a “puta desesperada”. Remera bien escotada, pollera de cuero, sandalias y un conjunto de encaje rosa que sugiere todo y me queda bárbaro. Ni bien llegué, me gustó mi "partenaire". Media alrededor del 1,85 como había dicho, delgado y bastante marcado, pelo corto, remera ajustada y jeans. No era el típico negro de raza, tipo africano, pero si un moreno clásico de Centroamérica. Nos saludamos con un beso y me impregnó el olor de su fuerte perfume varonil. Pedimos unas pizzas y unas cervezas y la pasamos bárbaro. En ningún momento me apuró o me mencionó nada al respecto que me hiciera sentir presionada o incomoda.
A medida que pasaba la noche y las cervezas la charla fue hacia lo que nos había llevado hasta ahí. Me contó que había estado con varias parejas, que en la mayoría estaba la fantasía del trio y ahí entraba a jugar el y que además había conocido algunas hotwife que tuvieron sexo con su marido mirando o participando.
Me dejó claro que el era menos promiscuo de lo que quizás imaginaba y que si había onda podíamos seguir viéndonos más allá de esa cena o de un encuentro.
Le conté que mi objetivo era que Eze participara, que no sabia si se iba a dar el primer encuentro, pero que si reincidíamos había muchas posibilidades de que pudiera llevarlo hacia donde yo quería y fantaseaba. En ningún momento me limitó porque entendía el juego y además le gustaba su rol de “Bull Alfa”.
Pagó la cena y nos fuimos para el dpto. Toqué el timbre: “Ya estamos mi amor” En el ascensor empezamos a besarnos con dulzura y la temperatura subió rápidamente. Me puso una mano en mi escote y me agarró las lolas con suavidad llegando a rozarme un pezón. La calentura se quintuplicó y en un par de minutos me sentía mojada y caliente como pocas veces. Seguido a esto llegamos al piso y nos bajamos del ascensor y tocamos timbre mientras nos besábamos con muchas ganas.
-Hola mi amor –preferí llamarlo así para evitar que se cohibiera y dejar la humillación para la acción- Te presento a Diego.
Se saludaron con la mano y al entrar lo miré con una sonrisa dulce y a su vez erotizada por tanto clima sexual que anhelé. Estaba algo nerviosa, pero muy caliente, como pocas veces recordaba. Nos sentamos, Eze fue a buscar unas cervezas pero al llegar ya nos estábamos besando y de la mano lo llevé a Diego a la habitación.
-Vení Eze, vamos a la pieza.
Eze caminó atrás nuestro y se sentó en “su” silla. Empezamos a besarnos con mucha pasión, la calentura era fuerte de ambos. Le pedí a Diego que se soltara, que estaba todo bien, porque lo notaba algo cauto, cosa que me gustaba porque mostraba respeto. Rápidamente me sacó la remera y yo la suya, apretábamos con ganas y enseguida pusé mi mano en su pija y empecé a frotarla por encima del pantalón. Bajé su cierre, metí mi mano y me encontré con la gran pija que habíamos seleccionado. Le bajé el pantalón junto al bóxer y ví su erección:
-Ayyyy Eze, que bien que elegimos mi amor, mirá que hermosa que es - le dije mirándolo con una leve sonrisa y mis mejillas rojas de calentura-
Eze mi miró sin decir nada atento y algo nervioso, sabia que iba a ser un encuentro distinto.
Consideré que era el momento justo para ir hacia donde tanto deseaba, agarré la pija de Diego y después de masturbarlo suavemente unas pocas veces, me reincorporé para besarlo intensamente.
-Vení cornudito, acércate y arrodíllate acá - le ordené, ahora si con su rol bien claro, e indicándole el piso frente a Diego- Vamos a agasajar a nuestro invitado - proseguí sonriendo, sin sacar la mirada de su rostro y arrodillándome junto a el.
Eze no decía nada, solamente trataba de seguirme con la mirada atentamente y esbozar alguna sonrisa incomoda y forzada. Ahora si tomé un rol totalmente activo y Dominante y, después de agarrar la pija escupí en su cabeza y después de desparramar bien y lubricarla ordené:
-Ahora vamos a pararla y a mantenerla bien firme para que me coja y disfrute como nunca –agarré su mano derecha y poniéndola sobre la pija le indiqué que los masturbara.
Eze empezó a hacerlo torpemente, era lógico nunca lo había hecho más que con la suya. El bull además tenia circuncisión y mi cuckold tiene toda su piel, lo cual dificultaba más la tarea. Volví a escupir para lubricar bien:
-Dale, ahora pajealo mas rapido que está toda mojadita, de principio afin y hacelo con ganas cornudito dale-
Siguió haciéndolo torpemente pero para mi sorpresa Diego empezó a gemir suave y progresivamente lo que derivó en más erección y un clima que tenia de todo: excitación de Diego, humillación máxima de Eze y calentura tremenda mía.
-Bueno cornudito llegó el momento de ir más allá.
-Ceci… -atinó a decirme-
-Shhhh no digas nada, solamente cópiame –dije al tiempo que metí la pija en mi boca y chupé 3 o 4 veces- Así solo algunas veces y estará lista para cogerme.
Eze se acercó resginado y mirándome la introdujo en su boca muy poco. Como detalle tengo que decir que tiene boca chica y la pija en cuestión era ancha así que le agregaba algo de morbo a la situación.
-Un poco más adentro dale –le indiqué acariciando su cabeza suavemente-
La introdujo algo más y en 3 chupadas la sacó de su boca. Sin decir nada rápidamente la agarré, repetí la secuencia y se la volví a poner adelante.
-Dale cornudito, un rato más que me ponés loca
Volvió a introducirla, siempre necesitando mi “caricia” para ir un poco más allá.
-Una más quiero ahora si – le dije mientras tenia la pija en su boca-
Acató y con mi mano como guía se la chupó 4 cortas y breves veces para sacarla de su boca y dejarme observar un hilo de semen que no se cortaba y la unía a sus labios y me sacaba una sonrisa. Corté ese hilo y le indiqué que vaya a su silla.
-No aguanto más Diego, cógeme.
-Tampoco yo Cecilia –dijo con su tono centroamericano-
Se puso un forro y me senté arriba de el y lo cabalgué durante pocos minutos, sobraron para tener dos orgasmos intensos que me sacaron gritos desesperados y de descarga que en un punto llegaron a avergonzarme (pensando en los vecinos claro). Le pedí que me cogiera un rato el arriba y sentí todo el poder de lo que tenía, nunca había sentido una pija tan ancha y larga a la vez, agradezco haber estado tan mojada porque así y todo sentí un porcentaje de incomodidad (vaya uno a saber si era cierto temor o algo psicológico porque en cuestión de minutos volví a acabar 2 veces y seguido a mi Diego con un tímido gemido terminó dejándome sentir su pecho transpirado y caliente contra mis tetas y mi rostro durante unos segundos sin atinar a moverse.
Se retiró de mi concha inundada de flujos y mientras se dirigía al baño lo frené:
-Diego, esperá, esto es tarea de mi cornudito –moviendo mi dedo índice le indiqué- sacale el forro y tiralo en la basura.
-Como Ceci?
-Como te lo sacaste vos siempre Eze pero ahora a el. Arrodíllate, sácaselo, Atalo y tíralo a la basura.
Me acomodé contra mi almohada y disfruté del momento. Mi cornudito con su mano derecha, baja el forro lleno de una enorme cantidad de leche (dato no menor) y lo ataba para dirigirse a tirarlo al cesto de la cocina.
-De paso ahora si tráete las cervezas Eze –le dije sonriendo-
Eze trajo 3 cervezas y para esa altura Diego ya estaba vestido y hablaba de cualquier cosa menos del "tema". Demostraba que era ubicado y solo seguía los pasos de la pareja o mejor dicho de mi que le mostraba hasta donde o de que forma avanzar.
CONTINUARÁ
Bueno pasada la entrevista empezamos una nueva etapa motivada por mis inquietudes personales. Nos juntamos a comer con Eze a los dos o tres días y, como les había adelantado en la nota, le comenté que quería que empezara una búsqueda activa de un hombre moreno y le dí ciertas características precisas: 1,80 a 1,90, dotado (no zarpado, algo así como 20 cms - 23 cm como máximo), delgado (si es musculoso, cuerpo trabajado mejor), 25 a 40 años (no más sin excepción), entre las más importantes. Le pedí que hiciera la búsqueda y fuera viendo alternativas en una página en especial y que una vez qué abriera algunos chats y contactos me dijera así hablaba con ellos.
Pasaron varios días porque en Argentina no es como en Estados unidos, no hay muchos morenos, negros de color, así que tengo que reconocer que Eze hizo un trabajo más que importante, revisando muchos perfiles y hablando con un montón de gente. Agregando que en esas paginas está lleno de pajeros que fabulan y cuando le pedís una foto se borran o no son lo que decían ser o no se animan a un encuentro. Bueno resumiendo para no aburrir, consiguió 8 perfiles, con experiencias bastantes creíbles de otras hotwifes o parejas, y empezamos a chatear. En los chat saqué de escena al cornudito y me contacté a solas con ellos, mostré una foto mía normal y en 3 casos avancé un poco más mostrando mi fuerte que son las lolas, porque realmente me interesaban. Dos colombianos solo que 1 solo de ellos viviendo acá en Bs As y el otro en San Andrés, Colombia, y un Venezolano viviendo acá. Los tres re buena onda, ya con fotos de sus miembros (como le pedí a Eze para no perder tiempo), pero sin apuro y con la experiencia que se notaba al hablar que daba indicios que eran gente acostumbrada a estar con parejas.
Me gustó mucho y me re calentó la previa. El cornudito viniendo a mostrar los perfiles y yo haciéndolo opinar de sus penes fue algo muy excitante. Les comparto un dialogo que recuerdo a diario ja:
-Este me gusta Eze, que opinás?
-Que si te gusta está bien Ceci jaja, es grandote y además cuando hablamos me pareció alguien lógico.
-La pija que te parece?
-Que se yo Ceci, no sé, eso es personal tuyo, si a vos te gusta…
-No, quiero que me digas que opinás vos -le dije sonriendo desafiante- A ver, vamos de a poco…la cabeza como la ves?
-No sé a que te referís?
-A que me voy a referir?, a ver probemos de nuevo, descríbeme la pija como si no hubiera visto la foto, te escucho.
-Bueno. La tiene grande, de 20 cms x 5,50, 6 dice el, a mi no me parece que tenga 6 de ancho porque la cabeza se la veo más chica en relación al resto. La tiene un poco doblada, depilada y prolija.
-Jajajaja excelente, viste que podés?, tenés que soltarte nomás, jajajaja me tenté cornudito.
Me dio mucha gracias que de la nada me hizo una super descripción y juro que por unos minutos estuve tentada y me excitó verlo así: detallista, comprometido para darme el gusto de la descripción que le pedía.
En cierto punto verlo expuesto, humillado me gustaba. Finalmente, este no quedó porque no me convenció que era algo canchero, pero les conté la anécdota porque hasta el dia de hoy me la acuerdo y me caliento.
En definitiva, hasta ahora avanzamos con el Venezolano que fue el que más disponibilidad tuvo siempre. Coordiné con Diego (32 años) que aceptó que Eze estuviera presente y ciertas cosas que charlé previamente que quería de encuentro con el en algún momento. Llegó el día:
-Eze, el sábado me encuentro con Diego, el Venezolano. La idea es tomar algo y si dá nos venimos para acá que me siento más cómoda, ok?
-Bueno Ceci dale, vos querés que te acompañe?
-Nono, vamos acá cerca a tomar algo y veo que onda. Nos encontramos alas 21 y cualquier cosa después venimos para acá. Quiero hablar con vos de otro tema, relacionado claro.
-Si Ceci decime.
-Viste que yo hace rato que tengo esta fantasía de estar con alguien Moreno?
-Si Ceci, ya sé, de hecho hace más de 1 mes y medio que venimos buscando a alguien.
-Bueno, en ese mes y medio no estuve con nadie, no tuve nada, más allá de un encuentro con vos y de las veces que me hacés sexo oral.
-Si Ceci.
-Bueno, yo quiero aprovechar este encuentro con alguien como Diego que tiene experiencia, que parece educado y coherente, que avancemos un poco más hacia lo que me gusta…
-A que te referís Ceci?
-Sabés Eze que quiero que participes un poco más, como sumiso, que te animes y te dejes llevar. Quiero que le hagas sexo oral a mi amante…
-Es que Ceci, hablamos ya…
-Si y nunca me dijiste que No determinante, quiero lograr esto, fantaseo mucho con esta idea, me toco muchas veces pensando esto, es algo que harias por mi y quiero que lo hagamos.
-Es que vos sabés que soy heterosexual, no me atraen los hombres
-Lo tengo clarísimo, pero te atraigo yo, sos mi cornudo y cada vez más sumiso, y quiero verte haciéndolo. Lo que hagas es para mi, para complacerme, cuántas veces me dijiste que querias ser mi sumiso? Complacerme?, bueno esta es una forma, esto es SER sumiso. Hacer algo para complacerle sin que sea algo que quizás te guste, lo que te gusta es complacerme.
-Si eso lo sé y lo tengo claro…
-No vas a ser menos hombre, pero si vas a ser más sumiso y más mío.
-Que se yo Ceci, no sé, no sé si estoy preparado para ir tanto más allá.
-Hagamos algo: empecemos despacio, tomemos contacto de distintas formas y después hacés “algo” y me dejás a mi con el. Pero hagamos algo. En el medio si no podés, me decís la palabra LIMITE y listo frenamos y chau. Que te parece?
-Bueno dale Ceci, quiero que estes satisfecha y verte caliente.
-Me vas a ver caliente como nunca. Te pido que la palabra LIMITE sea precisamente eso, algo de ultima si ves que es imposible que avances, si no podés es valido y lo acepto, pero esforzate.
-Bien Ceci, entiendo que es algo de ultima.
Mi objetivo era estar con alguien de color, pero fundamentalmente que en ese encuentro Eze fuera más allá y tomara el rol de cornudo total.
Llegó el sábado me preparé en casa lo más provocativa posible pero sin dar a “puta desesperada”. Remera bien escotada, pollera de cuero, sandalias y un conjunto de encaje rosa que sugiere todo y me queda bárbaro. Ni bien llegué, me gustó mi "partenaire". Media alrededor del 1,85 como había dicho, delgado y bastante marcado, pelo corto, remera ajustada y jeans. No era el típico negro de raza, tipo africano, pero si un moreno clásico de Centroamérica. Nos saludamos con un beso y me impregnó el olor de su fuerte perfume varonil. Pedimos unas pizzas y unas cervezas y la pasamos bárbaro. En ningún momento me apuró o me mencionó nada al respecto que me hiciera sentir presionada o incomoda.
A medida que pasaba la noche y las cervezas la charla fue hacia lo que nos había llevado hasta ahí. Me contó que había estado con varias parejas, que en la mayoría estaba la fantasía del trio y ahí entraba a jugar el y que además había conocido algunas hotwife que tuvieron sexo con su marido mirando o participando.
Me dejó claro que el era menos promiscuo de lo que quizás imaginaba y que si había onda podíamos seguir viéndonos más allá de esa cena o de un encuentro.
Le conté que mi objetivo era que Eze participara, que no sabia si se iba a dar el primer encuentro, pero que si reincidíamos había muchas posibilidades de que pudiera llevarlo hacia donde yo quería y fantaseaba. En ningún momento me limitó porque entendía el juego y además le gustaba su rol de “Bull Alfa”.
Pagó la cena y nos fuimos para el dpto. Toqué el timbre: “Ya estamos mi amor” En el ascensor empezamos a besarnos con dulzura y la temperatura subió rápidamente. Me puso una mano en mi escote y me agarró las lolas con suavidad llegando a rozarme un pezón. La calentura se quintuplicó y en un par de minutos me sentía mojada y caliente como pocas veces. Seguido a esto llegamos al piso y nos bajamos del ascensor y tocamos timbre mientras nos besábamos con muchas ganas.
-Hola mi amor –preferí llamarlo así para evitar que se cohibiera y dejar la humillación para la acción- Te presento a Diego.
Se saludaron con la mano y al entrar lo miré con una sonrisa dulce y a su vez erotizada por tanto clima sexual que anhelé. Estaba algo nerviosa, pero muy caliente, como pocas veces recordaba. Nos sentamos, Eze fue a buscar unas cervezas pero al llegar ya nos estábamos besando y de la mano lo llevé a Diego a la habitación.
-Vení Eze, vamos a la pieza.
Eze caminó atrás nuestro y se sentó en “su” silla. Empezamos a besarnos con mucha pasión, la calentura era fuerte de ambos. Le pedí a Diego que se soltara, que estaba todo bien, porque lo notaba algo cauto, cosa que me gustaba porque mostraba respeto. Rápidamente me sacó la remera y yo la suya, apretábamos con ganas y enseguida pusé mi mano en su pija y empecé a frotarla por encima del pantalón. Bajé su cierre, metí mi mano y me encontré con la gran pija que habíamos seleccionado. Le bajé el pantalón junto al bóxer y ví su erección:
-Ayyyy Eze, que bien que elegimos mi amor, mirá que hermosa que es - le dije mirándolo con una leve sonrisa y mis mejillas rojas de calentura-
Eze mi miró sin decir nada atento y algo nervioso, sabia que iba a ser un encuentro distinto.
Consideré que era el momento justo para ir hacia donde tanto deseaba, agarré la pija de Diego y después de masturbarlo suavemente unas pocas veces, me reincorporé para besarlo intensamente.
-Vení cornudito, acércate y arrodíllate acá - le ordené, ahora si con su rol bien claro, e indicándole el piso frente a Diego- Vamos a agasajar a nuestro invitado - proseguí sonriendo, sin sacar la mirada de su rostro y arrodillándome junto a el.
Eze no decía nada, solamente trataba de seguirme con la mirada atentamente y esbozar alguna sonrisa incomoda y forzada. Ahora si tomé un rol totalmente activo y Dominante y, después de agarrar la pija escupí en su cabeza y después de desparramar bien y lubricarla ordené:
-Ahora vamos a pararla y a mantenerla bien firme para que me coja y disfrute como nunca –agarré su mano derecha y poniéndola sobre la pija le indiqué que los masturbara.
Eze empezó a hacerlo torpemente, era lógico nunca lo había hecho más que con la suya. El bull además tenia circuncisión y mi cuckold tiene toda su piel, lo cual dificultaba más la tarea. Volví a escupir para lubricar bien:
-Dale, ahora pajealo mas rapido que está toda mojadita, de principio afin y hacelo con ganas cornudito dale-
Siguió haciéndolo torpemente pero para mi sorpresa Diego empezó a gemir suave y progresivamente lo que derivó en más erección y un clima que tenia de todo: excitación de Diego, humillación máxima de Eze y calentura tremenda mía.
-Bueno cornudito llegó el momento de ir más allá.
-Ceci… -atinó a decirme-
-Shhhh no digas nada, solamente cópiame –dije al tiempo que metí la pija en mi boca y chupé 3 o 4 veces- Así solo algunas veces y estará lista para cogerme.
Eze se acercó resginado y mirándome la introdujo en su boca muy poco. Como detalle tengo que decir que tiene boca chica y la pija en cuestión era ancha así que le agregaba algo de morbo a la situación.
-Un poco más adentro dale –le indiqué acariciando su cabeza suavemente-
La introdujo algo más y en 3 chupadas la sacó de su boca. Sin decir nada rápidamente la agarré, repetí la secuencia y se la volví a poner adelante.
-Dale cornudito, un rato más que me ponés loca
Volvió a introducirla, siempre necesitando mi “caricia” para ir un poco más allá.
-Una más quiero ahora si – le dije mientras tenia la pija en su boca-
Acató y con mi mano como guía se la chupó 4 cortas y breves veces para sacarla de su boca y dejarme observar un hilo de semen que no se cortaba y la unía a sus labios y me sacaba una sonrisa. Corté ese hilo y le indiqué que vaya a su silla.
-No aguanto más Diego, cógeme.
-Tampoco yo Cecilia –dijo con su tono centroamericano-
Se puso un forro y me senté arriba de el y lo cabalgué durante pocos minutos, sobraron para tener dos orgasmos intensos que me sacaron gritos desesperados y de descarga que en un punto llegaron a avergonzarme (pensando en los vecinos claro). Le pedí que me cogiera un rato el arriba y sentí todo el poder de lo que tenía, nunca había sentido una pija tan ancha y larga a la vez, agradezco haber estado tan mojada porque así y todo sentí un porcentaje de incomodidad (vaya uno a saber si era cierto temor o algo psicológico porque en cuestión de minutos volví a acabar 2 veces y seguido a mi Diego con un tímido gemido terminó dejándome sentir su pecho transpirado y caliente contra mis tetas y mi rostro durante unos segundos sin atinar a moverse.
Se retiró de mi concha inundada de flujos y mientras se dirigía al baño lo frené:
-Diego, esperá, esto es tarea de mi cornudito –moviendo mi dedo índice le indiqué- sacale el forro y tiralo en la basura.
-Como Ceci?
-Como te lo sacaste vos siempre Eze pero ahora a el. Arrodíllate, sácaselo, Atalo y tíralo a la basura.
Me acomodé contra mi almohada y disfruté del momento. Mi cornudito con su mano derecha, baja el forro lleno de una enorme cantidad de leche (dato no menor) y lo ataba para dirigirse a tirarlo al cesto de la cocina.
-De paso ahora si tráete las cervezas Eze –le dije sonriendo-
Eze trajo 3 cervezas y para esa altura Diego ya estaba vestido y hablaba de cualquier cosa menos del "tema". Demostraba que era ubicado y solo seguía los pasos de la pareja o mejor dicho de mi que le mostraba hasta donde o de que forma avanzar.
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