Le entregue el culito al guardia del parque

Faltaba un mes para terminal el año y el verano se había puesto muy fuerte, todas las tardes al volver a casa de cursar era obligatorio pasar por el parque ya que cortaba camino y siempre lo veía a él, sentado en la puerta de su guardia todas las tardes, nunca me había fijado en ese tipo pero comencé a saludarlo cada vez que pasaba por ahí, era un joven casi sin experiencia pero con el tiempo ya íbamos tomando confianza y el calor hacía subir un poco mis hormonas, no fue cuando lo vi de lejos, pobre muerto de calor, con su camisa a medio abrir, dejando notar su pecho color canela, velludo y canoso, ajuste un poco más mi short para dejar marcada bien mi cola antes de acercarme. Hola, traje algo para frío para que tomé, paso siempre y veo que nunca tiene algo fresco para tomar. Le dije mientras sacaba de mi bolso un refresco. En un momento de la charla me pregunto si tenía novia? Le respondí que No, que todavía no había tenido la suerte. Guarda: vos sabías que también existen parejas hombre con hombre o entre mujeres? Me dijo, le respondí que No tenía nada malo con eso. Veni, me dice y me hace entrar a dentro de su guardia, se fijo para sus lados a ver que no viniera nadie y bajo su cierre del pantalón. Guarda: mete la mano y decime que sentís. Empecé a tocarsela, a sostenerla con fuerza y cada vez se le iba poniendo dura y gorda, metió su dedo en mi boca. Guarda: veo que te esta gustando, me dijo. Guarda: tengo a unas cuadras mi casita venís igual nadie va a notar que me fui unos minutos ahí podemos hablar más cómodos. Cerró el cierre de su pantalón cerró la guardia y nos fuimos juntos. Al entrar el aire estaba más caliente que afuera, sólo colocó el ventilador apuntando a su cama, él ya se estaba preparando para cojer, mientras me decía ponete cómodo yo ya fui directo a bajar si cierre del pantalón y lo mire sorprendido, no se esperaba que fuera todo demasiado rápido pero le gustó de todas formas. Guarda: te iba a ofrecer algo para tomar pero veo que querés tomar la mema, ja! Me metí su verga en la boca y se la comencé a mamar, mientras él se deabrocha su cinturón, baje su pantalón, llevaba un slip que también se lo baje hasta las rodillas, tener esos huevos y esa verga encerrados ahí con el calor que hacía le daba un gustito especial, empecé a lamerle como si fuera un helado, desde el medio de sus huevos hasta la punta de su verga. Guarda: métete los huevos a la boca, dale comete mis pelotas. Y así lo hice, me metí esos huevos peludos, luego seguí mamando y me la metió hasta la garganta. Guarda: mirame, mirame mientras te la comes toda que me calienta, me calienta como lloran esos ojitos mientras te la comes toda. Me tenía sujetado con fuerza no podía respirar por tener toda esa verga adentro. Guarda: déjame ver tu culito, no dejo de fichar ese culo cada vez que pasar por aca. El calor adentro me estaba matando asi que procedi a desvestirme, me pego un chirlo, ese culo parece más de mujer me dijo, me abrazo con fuerza y me metió un beso, hasta el fondo senti su lengua, mientras sus manos apretujaban mis nalgas. Me puse en 4 en su cama mientras su manos me sujetaron y arrastrandome hacía él, sentí su lengua dentro de mi cola. Guarda: que sabroso y lampiño culo tenes, te lo voy a abrir bien con la lengua así gozas como toda una putita. Comenzo a desvestirse mientras yo ya estaba en cuatro, gordito de pecho y barriga velluda y de verga gorda, me sentia feliz de poder estar con un maduro. Empezó a puertearme, sentía la cabeza de su verga entrar poco a poco. Guarda: te la meto? La querés toda? ...siii siii gritaba con desesperación, ya quería que entrará toda por mi culito. Y así fue, de una toda esa verga fue deslizándose dentro mío sin problemas, comenzó a embestirme con fuerza, una y otra y otra vez me entraba con fuerza pero no era dolor, no me estaba haciendo doler el culito, lo estaba disfrutando. Cambiamos de posición ahora quería que este encima de él, sente mi culito en su verga y comencé a saltar, iban 10 minutos que estábamos cojiendo y estábamos empapados de sudor, me abrazo y me quería comer la boca para después deslizar sus manos hasta mis nalgas para separar las y ser él, el que comience a penetrarme, su pecho velludo se sentía húmedo, mi rostro entre sudor saliva de tantos besos desaforados que me daba, mientras sus barba me hacía cosquillas cuando rosaban mis mejillas. Me hizo poner de costado para volver a meter su verga, ya habían pasado 15 minutos, las sábanas de su cama totalmente mojadas, el ventilador no estaba cumpliendo su función, 40 grados en la calle más otros 40 de nuestros cuerpos en pleno acto sexual, él seguia penetrandome con fuerza mientras sujetaba mi Cabello. Guarda: que rico putita, que rico aprieta este culito. Me giro rápido con violencia y abrió grande mis piernas para volver a penetrarme, yo no paraba de gemir mientra me sujetaba el cuello con una mano y con la otra apretaba mis cara para decirme. Guarda: así de putitas como vos me gustan putitas y obedientes. Soltó mi cuello para sujetar mis piernas y penetrar bien duro. Guarda: ya voy, ahí viene. Saco la verga de mi culo para dejarme completamente bañado en leche, mi cara, mi boca y mi pecho todo bañado de leche, tirado queda en su cama del cansancio, casi media hora de sexo, preocupado quedé por la hora, no vas a tener problemas, le dije. Guarda: después del culito que me acabo de cojer, que hermoso putito y con culito de mujer que tenes. Trate de asearme como pude. Guarda: cada vez que tenga libre podes pasar y te aseguro que la vamos a pasar de rico otra vez como hoy. Llevo su dedo a mi boca y luego de eso, un beso que me hizo desearlo otra vez.
Bueno hasta acá el relato de hoy, espero les hay gustado, yo lo disfrute escribiendo y casi acabo mientras lo hacía besos y buen dia

1 comentario - Le entregue el culito al guardia del parque

chor09 +1
Hermoso relato.