Mis amadas hijas III

Muchas gracias a todos los que han estado visitando mis posts. Finalmente la continuación de este relato erótico e incestuoso que me trabajado por años. No se olviden de calificar y suscribirse a este su blog preferido, pueden visitar la parte anterior aquí:
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DISCLAIMER: Para los que tengan la fantasía de rolear esta historia puede ser adaptada para ello. Pueden mandar solicitud a mi Telegram: @AndresFl0r3s
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CAPÍTUO IV

Selene estaba parada a la entrada de la regadera completamente desnuda y sonriendo a su padre. Se le fue acercando lentamente a su padre a medida que Marcus retrocedía un poco, sin palabras la veía y su pene se ponía aún más duro.

-Buenos días papá. Veo que amaneciste mejor...- Tomó su pene y lo empezó a masturbar mientras ella pasaba su mano por todo su cuerpo hasta sus caderas, ella lo veía y veía su pene, podía sentir la mano de Marcus cerca de su culo. -No tengas miedo papá...- Tomó su mano y la colocó en su culo. -Puedes confiar en mí.- Lo besó en el cuello mientras él soltó un gemido algo sonoro. La mano derecha de Selene se movía con firmeza pero a su vez de manera suave para poder excitarlo lo suficiente. Entonces lentamente lo fue besando por su pecho hasta su abdomen y llegó a sus caderas y a la base de su pene. Marcus la detuvo antes de que hiciera algo, la tomó de la mandíbula aunque ella seguía empujando su cuerpo hacia su pene directo a su boca, con una mirada definitiva que decía que ella estaba dispuesta a chuparle el miembro a como diera lugar. Esa mirada, la había visto en su madre, Kendra solía tener la misma expresión cuando ella le mamaba la verga por desesperación, no podía negar que era hija de su madre la muy zorra.

Lentamente la dejó acercarse mientras él acariciaba sus manos que estaban en su cintura. Ella, sin desviar mucho la mirada se puso de rodillas, frente a su pene y empezó a respirar en él. El olor era embriagante para ella, lentamente abrió la boca y dejó salir su aliento hasta besarle la punta, Marcus no pudo contenerse y gimió fuertemente, lo que hizo que Selene soltara una carcajada.

-¿Te gusta papá? Yo sé que sí. Después de todo, mamá lo solía hacer contigo no...- Poco a poco fue besando la punta y el resto de la verga hasta llegar a la base donde chupó sus testículos con suavidad pero a su vez usando sus dientes ligeramente. Subió poco a poco con su lengua hasta finalmente meter todo el miembro en su boca. Movimientos suaves y sensuales con su mandíbula, veía a su padre fijamente mientras usaba su mano derecha para masturbarlo cuando tomaba respiros de aire.

Durante los próximos cinco minutos Selene llevó al borde del éxtasis a su padre usando su boca y su mano sin meterse toda la verga al fondo de su garganta, escupía y chupaba, una y otra vez, ninguno de los dos se dio cuenta de que la puerta de la ducha se abrió y una voz aún más suave interrumpió.

-¿Puedo unirme?- Hanna estaba desnuda y antes de que Marcus dijera algo ella se fue directo a su boca a besarlo. -¿Qué pasa papi? ¿Por qué tiemblas?- Marcus no pronunció palabra y puso su mano izquierda en la espalda de su hija la menor. Selene prosiguió a su trabajo mientras Hannah besaba su cuelo y mordía ligeramente su oreja. Era tal el éxtasis que Marcus detuvo a Selene y dijo.

-Espera... Mmmmmm... Creo que ya voy a terminar...- Empezó a masturbarse mientras Selene se tocaba la vagina y gemía un poco. Lentamente el líquido preseminal salió y Selene no pudo contenerse y devoró lo más que pudo el pene de su padre, lo que hizo que Marcus soltara un gemido aún más fuerte al sentir la garganta de su hija y el calor de ella, eyaculando chorros espesos que casi ahogan a la heredera de los Prime. Por minuto y medio se corrió en la boca de su hija y Hannah se arrodilló para besar a su hermana y que le compartiera del semen de su padre. La escena aún era excitante después de tal acto, pero Marcus no dijo nada y salió inmediatamente, con sus hijas riendo un poco y terminando de ducharse.

CAPÍTULO V

Poco después de ducharse Marcus llamó a la mesa a sus hijas, había preparado el desayuno y quería platicar un poco con ellas. Selene y Hannah llegaron, ambas usando blusas algo holgadas pero Selene llevaba jeans y Hannah una falda. Cada una fue a saludar a su padre de un beso en la mejilla pero Hannah lo besó cerca de la boca. Al sentarse en la mesa redonda con comida la pequeña familia empezó a comer sin pronunciar palabra ni nada.

Al terminar sus alimentos, Marcus, con seriedad y una voz firme, empezó la conversación.

-Chicas, quiero platicar de algo con ustedes.- Las niñas ya iban terminando de comer pero se pusieron a escuchar atentamente a su padre. -Lo que... Lo que ha p-pasado en los últimos meses, ha sido difícil para mí como lo sabrán. Quiero dejar en claro que no quiero ningún conflicto con su madre, pero no puedo pasar por alto lo que ella hizo. Yo... No quiero que se distancien de ella. Yo soy al que traicionó, no a ustedes.-

-Papá, esa señora es una zorra. Ella también nos hizo daño.- Hannah habló.

-Hannah no te refieras así a tu madre. Ella no les hizo daño, fue a mí únicamente, y no deben cargar con eso, jamás. ¿Entienden?-

-Pero papá, mamá nos hizo daño a lo largo del tiempo. Siempre nos forzó a hacer cosas que no queríamos.- Ante esto Marcus no dijo nada, hasta que.

-Entiendo cariño, pero tú eres nuestra heredera. Comprende que tu educación así lo requirió.- Ante tal respuesta Selene no dijo más. -Ahora bien... Lo que... Lo que ha pasado aquí, nadie debe saberlo. ¡NADIE! ¡¿Entiendes lo que les digo?! Si alguien se entera, pueden suceder cosas malas para nuestra familia y nuestra compañía.

-Papá, lo que hemos hecho Selene y yo ha sido por ti y solamente por ti. ¿Qué tiene de malo eso?-

-Que no es correcto hija. No está bien visto por la gente. Somos una familia rica, con poder y muchas personas buscarán la forma de hacernos caer. La prensa lo sabe de alguna u otra forma.-

-A la mierda la prensa. Tú eres nuestro papá... Hannah, y yo te hemos visto como has sufrido por la ruptura con mamá y queremos ayudarte papá. Te ayudaremos en todo.- Selene puso su mano en la mano de su padre. Marcus sintió su calor.

-Se los agradezco mis niñas. Pero... Las situaciones como esta no deben de hacerlas ustedes.-

-¿Qué? ¿No te gustó cuando mi hermana usó su boca contigo?-

-No... Digo sí, me gustó y gracias por ello. Pero ustedes no deberían hacer este tipo de cosas. O por lo menos no conmigo.-

-Papá... Creo que no entendiste. Te ayudaremos, quieras o no. Somos nosotras nada más y puedes confiarnos cualquier cosa, te vamos a aliviar cuando quieras.- Selene puso su mano en su pierna cerca de su entrepierna y Hannah se sentó en su pierna derecha acariciando su pecho. Marcus solamente se veía confundido y algo incómodo, pero pensó las cosas un momento y dijo.

-Está bien. Como no quieren obedecer, entonces van a aprender. Pero no me dejen todo el placer para mí, también deberían tener un poco. ¿Quieren saber cómo?- Las chicas se emocionaron. Salieron al patio trasero y en una de las hamacas Marcus se sentó y le pidió a Hannah que se sentara entre sus piernas. -¿Confías en mí cariño?-

-¡Claro que sí papá!- Hanna se sentó entre sus piernas y Selene estaba sentada frente a Hannah. Marcus acarició el cuerpo de su hija menor por un rato, tocando sus tetas pequeñas y suaves, levantó su falda y le pidió que chupara sus dos dedos. Hannah obedeció y Marcus acarició lentamente su vagina depilada, lentamente la fue abriendo hasta introducir la punta de sus dedos.

-Todo está en la suavidad y delicadeza para este tipo de cosas. No debe ni muy rápido ni muy lento. Movimientos circulares y firmes, entrando y saliendo y así lograrán llegar al éxtasis.- Hannah se perdió cuando su padre dijo "delicadeza", empezó a gemir y moverse lentamente. Marcus besaba su cuello y Selene imitaba los movimientos encima de sus jeans. El ver a su padre dedear a su hermana la calentaba mucho y no podía evitar gemir también.

Durante los próximos cinco minutos Marcus metía y sacaba sus dedos, los chupaba él y de nuevo los metía. Hannah se sentía bien al tener a su padre con ella haciendo eso, la hacía sentir mujer pero no completamente. No pasó más tiempo para que ella terminara con los dedos de su papá dentro de ella.

-Esa es mi niña.- Marcus le dio un beso enorme en la mejilla pero Hannah se volteó y lo besó apasionadamente. -Okay, tranquila. Haremos esto seguido. Tengo que ir a la oficina por hoy pero no tardaré, regresaré para la cena.- Las chicas se decepcionaron al ver que su padre no está con ellas en esta linda mañana de Sábado. Marcus preparó sus cosas y se despidió de cada una de ellas con un beso en la comisura de sus labios.

Una vez en la oficina, su secretaria le informó que su abogada estaba dentro...

CONTINUARÁ...

1 comentario - Mis amadas hijas III

noesfacil67
Para cuando la parte IV bro??!!! abrazos enorme!!!